Revista Fitopatologia Colombiana

Transcription

Revista Fitopatologia Colombiana
1
POLÍTICA EDITORIAL FITOPATOLOGÍA COLOMBIANA
La revista FITOPATOLOGÍA COLOMBIANA es una publicación de la Asociación Colombiana de Fitopatología y Ciencias Afines
“ASCOLFI” con circulación semestral a nivel Nacional e Internacional. Está dirigida a todos los profesionales interesados en el estudio de las
enfermedades de las plantas, su control y manejo (Ingenieros agrónomos, investigadores, fitopatólogos, profesores, técnicos, extensionistas,
etc) . También, se incluye a otros profesionales de ciencias afines, tales como biólogos, microbiólogos, botánicos, fitomejoradores, etc, y a
entidades representativas del sector agropecuario, centros educativos y a los centros de investigación nacionales e internacionales.
Está orientada hacia la publicación de artículos originales de carácter científico y técnico de interés fitopatológico. Incluye también notas
científicas de alta calidad, revisiones bibliográficas de naturaleza crítica, cartas al editor sobre información publicada, opiniones e ideas,
recomendaciones y resúmenes de congresos.
Los trabajos deben ser inéditos. Aquellos presentados en congresos, simposios, conferencias o reuniones científicas pueden ser aceptados
para su publicación.
Las tesis de pregrado y postgrado, lo mismo que resultados de trabajos divulgados en forma preliminar de manera sucinta, en informes o
avances técnicos también pueden ser objeto de publicación.
Todas las opiniones, editoriales y artículos publicados en Fitopatología Colombiana son responsabilidad del autor o autores y no
reflejan necesariamente los puntos de vista de ASCOLFI o la de las instituciones a las cuales están afiliados quienes los escriben, en
otras palabras el autor es el único responsable por los conceptos, ideas u opiniones emitidas en el trabajo.
El Comité Editorial se reserva el derecho directo de aceptar o no las cartas, los artículos, notas y revisiones o de hacerlo indirectamente
mediante su cuerpo de asesores científicos. Los trabajos deben ser remitidos en original y dos copias, además del disquete o disco compacto
con el archivo en un procesador de texto (preferiblemente Word) al editor de la revista, Apartado Aéreo 5004 de Cali y deberán ceñirse a las
Normas para la elaboración de artículos instituidas por la Asociación.
En el caso de correcciones y modificaciones el editor devolverá al autor el trabajo acompañado de las sugerencias y comentarios
realizados por el grupo de asesores científicos. El artículo corregido deberá enviarse nuevamente en un plazo máximo de 30 días. Una fe de
erratas podrá eventualmente ser incluida en el siguiente número, para efectuar las rectificaciones necesarias.
Los trabajos no aceptados para la publicación serán devueltos a los autores a los siguientes 30 días contados a partir de la fecha de
recepción.
Cargos por página impresa
Teniendo en cuenta los altos costos que implica las publicaciones se ha considerado conveniente solicitar a los autores una contribución
razonable para llevar a feliz término el propósito de divulgar los resultados de la investigación fitopatológica en Colombia... Se ha estimado
para socios activos que el valor por página impresa será el equivalente en pesos de: U.S $25, 30, 35 según contenga solamente texto, texto
con ilustraciones en blanco y negro o texto con ilustraciones de color, respectivamente. El valor de los cargos estará sujeto a ajustes y no se
definirá hasta cuando el autor reciba para su revisión la prueba de impresión y su pago deberá hacerse efectivo después de la impresión del
artículo en la revista. La tarifa tendrá un descuento de U.S. $ 5 por página para aquellos autores que remitan el escrito según las normas de
publicación de ASCOLFI y satisfactoriamente preparado para proceso electrónico del texto. Para no socios la contribución será de U.S $ 40,
45 y 50 según se trate solamente de texto, texto con ilustraciones en blanco y negro o texto con ilustraciones de color, respectivamente.
Para anticipar la estimación de costos se debe tener en cuenta que por cada tres páginas tamaño carta escritas a doble espacio, a razón de
12 caracteres por pulgada (12cpi), se obtienen tres páginas impresas en FITOPATOLOGIA COLOMBIANA.
Los autores deberán enviar con su artículo una carta personal o de la institución, compañía o benefactor del proyecto para el cual trabajan
responsabilizándose por el pago de la publicación. La factura correspondiente se enviará a cada autor, institución, compañía o benefactor del
caso antes de publicarse el artículo. Una vez hecho efectivo el pago el autor recibirá dos ejemplares de cortesía.
Separatas
No se suministrarán copias gratuitas. Se podrán preparar separatas al costo a petición de los autores, según un formato que debe diligenciarse
al momento de regresar las prueba de impresión.
Autorización para reproducción de artículos. La autorización para la reproducción, total o parcial, de los artículos publicados en la revista
Fitopatología Colombiana, se debe solicitar por escrito al editor.
2
FITOPATOLOGÍA COLOMBIANA
ISSN 0120-0143
VOLUMEN 35
NÚMERO 1
JUNIO 2011
JUNTA DIRECTIVA ASCOLFI 2009-2011
Principales
Suplentes
Presidencia
Rodrigo O. Campo A.
Vicepresidencia
Benjamín Pineda L.
Celsa García
Secretaría
Gustavo Adolfo Prado
Nancy Arciniegas
Tesorería
Juan Carlos Ángel S.
Cristian Noreña
Vocales
Bertha Lucia Castro
Gabriel Andrés Torres L.
.
Revisoría Fiscal
José Albeiro Arias
CONTENIDO
Cristian Olaya
Representantes Internacionales
Francisco J. Morales
Fernando Correa V.
Gabriel Cadena
Revista
“FITOPATOLOGÍA COLOMBIANA”
ÓRGANO DE DIFUSIÓN DE LA ASOCIACIÓN
COLOMBIANA DE FITOPATOLOGÍA Y CIENCIAS
AFINES- ASCOLFI
ISSN 01120-0143
Licencia de Min. Gobierno No 001808, Cali, Apartado Aéreo
5004, Nit. : 891 –301.725-6
Sociedad sin ánimo de lucro, Personería Jurídica 1097 de abril
1º de 1977
Editor
Benjamín Pineda L, Ing. Agr. M Sc.
[email protected]
Política Editorial ........................................................................... i
Efecto del mildeo aerolado (Ramularia areola Atkinson)
en el rendimiento de dos genotipos de algodón en el
departamento de Córdoba
Nelson E. Villarreal y Rodrigo O. Campo………………………
1
Eficacia del tratamiento de semillas de fríjol (Phaseolus
vulgaris L.), sobre la erradicación de microorganismos
Claudia Nohemy Montoya Estrada y Jairo Castaño Zapata ……
7
Evaluación del potencial antagónico de bacterias aisladas
de la rizósfera de papa criolla (Solanum phureja) sobre
Phytophthora infestans (Mont.) de Bary.
David Granada, Gina F. Pasaje H., Eliana M. Zuluaga R.,
Felipe A. Gómez V., Carlos Peláez J. y E. Antoni Rueda L .…… 11
COMITÉ EDITORIAL
Benjamín Pineda López Ing .Agr. – M Sc Fitopatología
Elizabeth Álvarez C.
Ing. Agr. – Ph D Fitopatología
Francisco J. Morales G. Ing. Agr. – Ph D Virología
Jorge I. Victoria K.
Ing. Agr. – Ph D Bacteriología
Rodrigo O. Campo A.
Ing. Agr. – Ph D Fitopatología
Representante de publicidad
Gabriel Robayo V., Ing Agr, M.Art
Contacto Revista: Oficina Ascolfi, Km 1 Via al Penal Granja
Corpoica C.I. Palmira, cel +57- 3164303079
Palmira - Valle del Cauca – Colombia
Apartado Aéreo 5004- Cali- Valle del Cauca -Colombia
Correos electrónicos: [email protected]
Página web:
[email protected]
http://www.ascolficolombia.org/
Suscripciones y Canje: [email protected]
[email protected]
Diseño y Diagramación: Benjamín Pineda L
Impresión: COMPUIMAGEN, Tel 2716528
Fecha de impresión: Junio de 2011
Tiraje 300 ejemplares
Evaluación de la respuesta fitoalexínica en papa
(Solanum tuberosum) y determinación preliminar de
“priming” en tomate (Solanum lycopersicum)
David Granada, Jennifer Salguero, Walter Murillo,
Carlos Peláez y E. Antoni Rueda…………………….………….. 15
Manejo integrado de la bacteriosis causada por
Xanthomonas axonopodis Starr & Garcés en el cultivo
de gulupa (Passiflora edulis Sims.)
Eugenio Guerrero-López, Luz Mery Velandia
y Lilliana Hoyos-Carvajal…………………………………….…. 21
Manejo integrado del mildeo velloso (Peronospora
sparsa Berkeley) de la rosa
Nathali López-Cardona y Jairo Castaño Zapata…………….…... 27
Fitopatología Colombiana, normas para la
elaboración de artículos…………....…………..……………… 33
Publicación Indexada por COLCIENCIAS en la
Categoría “C” del Índice Nacional de Publicaciones
Seriadas Científicas y Tecnológicas de Colombia
(Publindex). Referenciada internacionalmente por el
Índice Latinoamericano de Publicaciones Científicas y
Tecnológicas (Latindex).
2010 Fitopatología Colombiana /Volumen 34 No 2
Editorial
Las plantas para defenderse de sus enemigos no pueden correr como nosotros o los animales, están
ancladas en el suelo con su sistema de raíces. No les queda otra alternativa que enfrentar al
enemigo de pie y “firmes” porque tiene que vivir. Para hacerlo su sistema defensivo es diferente al de
los miembros del reino animal, pero es efectivo y trasciende. Indudablemente, para que el sistema
funcione debe incluir un subsistema de alertas tempranas que activen todos los mecanismo
responsables de la defensa, según la posible magnitud del ataque. En este orden de ideas, entendiendo
los mecanismos del sistema defensivo es posible aplicarlos oportunamente para que la planta
reacciones y neutralice la acción de los organismos patogénicos de manera que el efecto de estos sobre
la salud de las plantas sea menor y por ende se obtengan mayores rendimientos, siempre y cuando en
los sistemas productivos se utilicen de manera integral las buenas prácticas agrícolas.
Quiero, en esta nota, destacar dos artículos, relacionados con el sistema defensivo de las plantas,
que aporta información útil para comprender y aplicar los principios de la resistencia inducida. En
uno de ellos se hace referencia al efecto de inductores en la producción del estado Fisiológico llamado
“Priming” (¿aún sin una palabra equivalente en español?) según el cual las plantas “se preparan”,
de acuerdo a los autores, “para un posterior ataque por patógenos, insectos o en respuesta a estreses
abióticos, sin todavía desencadenar las respuestas de defensa celular y mostrando dicha activación de
manera más fuerte y rápida que las no inducidas, solo hasta la llegada del estrés”. En el otro, se
evalúa el efecto de inductores de resistencia para el manejo integrado de la bacteriosis en el cultivo de
la Gulupa, un frutal promisorio para los pequeños, medianos y grandes fruticultores colombianos
Recomiendo a nuestros lectores la lectura de los artículos mencionados, si descuidar también los
demás documentos del fascículo que contienen información relacionada con algodón, frijol,
ornamentales y el potencial antagónico de baterías de la rizósfera de papa.
Benjamín Pineda López
Editor Revista Fitopatología Colombiana
2010 Fitopatología Colombiana /Volumen 34 No2
EFECTO DEL MILDEO AEROLADO (Ramularia areola Atkinson) EN EL RENDIMIENTO DE
DOS GENOTIPOS DE ALGODÓN EN EL DEPARTAMENTO DE CORDOBA*
Nelson E. Villarreal1 y Rodrigo O. Campo2
1
Instituto Colombiano Agropecuario, Laboratorio de Diagnóstico Fitosanitario CISA-Cereté
2
Universidad de Córdoba, Departamento de Ingeniería Agronómica y Desarrollo Rural
Correos electrónicos de contacto : nelson.villarreal @ica.gov.co ; [email protected]
*Artículo científico, recibido para publicación el 09/02/2011; aceptado el 14/04/2011
RESUMEN
SUMMARY
En el Departamento de Córdoba, Colombia, se evaluó el efecto del
mildeo aerolado, causado Ramularia areola Atkinson, en la producción de fibra del algodonero, para lo cual se establecieron dos experimentos en la temporada 2004-2005, en el municipio de Cereté. El
primero fue sembrado en septiembre 2004 (época temprana) y el segundo a finales de octubre 2004 (época tardía) en un diseño de bloques
completos al azar en un arreglo de parcelas divididas, con cuatro repeticiones. Durante el estudio se utilizaron las variedades Delta Opal y
Delta Pine 90 con y sin aplicación de fungicida. Se realizó el estudio
temporal de la severidad de la enfermedad y se estimaron las pérdidas
económicas de la producción. Las curvas de progreso de la enfermedad, en los dos experimentos, se ajustaron al modelo Gompertz con
una tasa aparente de infección baja entre 0,029 y 0,032 unidades por
día. La enfermedad afectó significativamente los rendimientos cuando
se sembró en la época tardía, reduciéndolos en 18,46% en la variedad
Delta Opal y en 10,56% en Delta Pine 90. El uso de fungicidas incrementó los rendimientos de la fibra en las dos épocas de siembra dando
una tasa marginal de retorno (TMR) en la época temprana de 14,50%
en Delta Pine 90 y 16,65% en Delta Opal. En la época tardía la TMR
fue 50,59% para Delta Pine 90 y 133,17% para Delta Opal. Se concluye que el mildeo areolado afecta la producción de la fibra, especialmente cuando se siembra tardíamente, siendo importante establecer
un plan de manejo de la enfermedad.
Aerolate mildew (Ramularia areola Atkinson) disease effect in the
yield of two cotton genotypes at Cordoba Department
Palabras claves: Gossypium hirsutum, enfermedades del algodonero,
epidemiología, pérdidas
INTRODUCCIÓN
El cultivo del algodón en Colombia, ha sido
incluido dentro de las políticas de gobierno
en razón a la demanda de mano de obra que
genera todo el ciclo vegetativo del cultivo
(Cano, 2004). En el departamento de Córdoba
el algodón se siembra principalmente en el
Valle de Sinú, en suelos aluviales generando
130 jornales por hectárea/año y aportando al
Producto Interno Bruto (PIB) departamental,
aproximadamente 76 mil millones de pesos
anuales según el Comité Regional de la Cadena Productora Algodón Textil (CRC PAT,
2003).
En los últimos cinco años ha preocupado
a los agricultores, las incidencias tempranas
de Ramularia areola Atkinson, a tal punto
que algunos realizan hasta tres aplicaciones
de fungicidas que representan un costo adicional equivalente a 150 Kg de algodón
The influence of aerolate mildew disease on cotton yield was evaluated in two experiments on 2004-2005 crop seasons at Cerete, (Cordoba department of Colombia). The first trial was planting on September (normal planting date) and the second one on October (late planting date). The experiments were conducted using a random complete
block in split plot design with four repetitions. In the treatments were:
used the varieties Delta Opal and Delta Pine 90 with and without
fungicides. The seed cotton yield was evaluate on the two central rows
by each treatment and makes it an economic analysis. The disease
progress curves were transformed and adjust to Gompertz`s model,
using statistical program SAS, with apparent infection rate the 0.029
by days with fungicides and 0.032 without fungicides. The aerolate
midew showed significant differences in the yield when was planting
out of time on October causing yield loss the 18,46% in Delta Opal
and 10,56% in Delta Pine 90, respectively. The fungicides use increment the seed cotton yield in the two planting date; where the marginal
return rate TMR in the early date was 14,50% in Delta Pine 90 and
16,65% in Delta Opal. In the late planting date the TMR was 50.59%
in Delta Pine 90 and 133,17% in Delta Opal. As a conclusion the
aerolate mildew disease affect the seed cotton yield, specialty which it
planting in late date
Key words: Gossypium hirsutum, cotton diseases, epidemiology, yield
loss
semilla por hectárea (estimado con base a tres
aplicaciones a $ 93.152 cada una a precios de
2005). Las aplicaciones de fungicidas en
Córdoba no obedecen a trabajos realizados en
la región; sino con base en recomendaciones
que hacen las casas comerciales de semillas
tomadas de investigaciones hechas en otros
países como el Brasil.
El hongo R. areola pertenece al orden
Moniliales, familia Moniliaceae y presenta
como Teliomorfo: Mycosphaerella areola (J.
Ehrlich y F. A. Wolf) (Alexopoulos, 1996).
La enfermedad es conocida como Ramularia,
Mildeo areolado, Tizón escarchado. En condiciones de campo Ramularia areola, se
manifiesta en tres fases distintas durante su
ciclo. En la fase asexual o conidial el hongo
se desarrolla sobre tejido vivo; la fase espermogonial ocurre en las hojas que caen al
suelo y la fase sexual, las ascosporas, se
desarrolla sobre los restos del cultivo tales
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
como las hojas secas. Esta capacidad reproductiva, convierte a R. areola en un patógeno
capaz de generar epidemias devastadoras en
variedades susceptibles (Lamamoto, 2003).
La enfermedad es favorecida por temperaturas entre 12 a 32 C, siendo la optima entre
22-26 C; humedad relativa mayor del 80%
(Bell, 1981). El hongo se disemina a través
del viento, el agua de lluvia o de riego, por
personas y maquinarias que transitan por el
área afectada según la Federación de Algodoneros (FEDERALGODON, 1980).
Los síntomas típicos de la enfermedad se
caracterizan por presentar crecimiento blanquecino o amarillento del hongo sobre el
envés de las hojas, los cuales producen una
escarcha con apariencia harinosa. Las manchas son angulares y delimitadas por las
venas de las hojas. Observadas desde arriba
las lesiones presentan coloración verde brillante a verde amarillento y generalmente se
1
observa una capa blanquecina típica en el
envés de las hojas afectadas. En las brácteas
que recubren las cápsulas se pueden observar
lesiones similares (Blank, 1953; Araujo,
2000).
En el Brasil, el Mildeo Aerolado o mancha Ramularia es considerada de importancia
económica al manifestarse en la fase vegetativa de la planta en las nuevas variedades
cultivadas (EMBRAPA, 2000). La enfermedad ha ocasionado defoliaciones precoces en
los tercios inferiores y medios de la planta y
como consecuencia se presenta una apertura
prematura de cápsulas, y reducciones de la
productividad hasta del 35%(Araujo, 2000).
El manejo de la enfermedad en Brasil se
realiza con aplicaciones de fungicidas del
grupo de los bencimidazoles, triazoles y
estrobilurinas y se inician los controles cuando la enfermedad alcanza a afectar un 25%
del área foliar en el tercio inferior de las
plantas (Andrade et al., 1999; Cassetari y
Machado, 2005; Prade et al., 2000).
En Argentina el Instituto Nacional de
Tecnología Agropecuaria (INTA, 2004)
recomienda tratamientos químicos foliares
mediante el uso de fungicidas sistémicos,
siempre que la enfermedad ataque antes de la
apertura de capsulas y con cápsulas verdes
todavía en desarrollo iniciando las aspersiones al follaje tan pronto se observen los
síntomas en el cultivo. La segunda aspersión,
si fuera necesario, se recomienda efectuarla
dos semanas después de la primera. En cambio en la India el “National centre for integrated pest management”(NCIPM, por sus siglas
en Inglés) recomienda un manejo integrado
con la remoción y quema de residuos de
cosecha; rotar el cultivo con cereales, utilizar
variedades resistentes en las zonas endémicas
y aplicaciones foliares con fungicidas a base
de sulfuro, benomil o carbendazim (NCIPM,
2004). En Colombia, la Federación Nacional
de Algodoneros (1980) recomienda el tratamiento de semillas, fertilización adecuada y
eliminación de residuos.
En Córdoba no se han realizado estudios
epidemiológicos que orienten al agricultor
para el manejo de la enfermedad, lo que se
hace más evidente con el ingreso de nuevos
genotipos de algodón. Debido a lo anterior, se
planteó evaluar los niveles de daño ocasionados por R. areola en el cultivo del algodonero
en el Valle del Sinú Medio a partir de la
etapa de prefloración, y relacionar la incidencia y severidad del dad del Mildeo aerolado
con la producción y la rentabilidad.
MATERIALES Y MÉTODOS
El trabajo se realizó en condiciones de campo
en predios del ICA-CISA ubicado en el retiro
de los Indios, Cereté a 8º 56’ 25’’ de Latitud
Norte 75º 49’ 07’’ de Longitud Oeste, a 14
msnm, con 28°C de temperatura promedio;
una precipitación anual promedio de 1.200
mm y el 80% de humedad relativa.
2
Se establecieron dos experimentos, uno
en época temprana (de finales de Agosto a
finales de Septiembre) y el otro en época
tardía (de finales de Septiembre a finales de
Octubre) de la temporada algodonera de los
años 2004-2005. Cada experimento se estableció en un diseño de bloques completos al
azar con arreglo en parcelas divididas, con
cuatro repeticiones. En las parcelas principales se establecieron las variedades Delta Opal
(DO) y Delta Pine 90 (90) y en las subparcelas los tratamientos con fungicidas (T) y sin
fungicidas (NT).
Las subparcelas constaron de cuatro surcos de cinco metros de largo, las cuales se
sembraron en forma manual con una densidad
de 55 mil plantas/hectárea para la época
temprana y de 99 mil plantas /hectárea para la
época tardía. Las labores agronómicas fueron
las mismas que utiliza el agricultor en Córdoba.
El efecto de la R. areola en cada variedad
se determinó con el método de parcela experimental comparando parcelas protegidas con
fungicidas y parcelas no protegidas (Campbell y Madden, 1990). Las parcelas protegidas con fungicida fueron asperjadas cada tres
semanas con Carbendazim en una dosis de
400cm3 de producto comercial/ hectárea
(200g de ia/ha) a partir de los 40 días después de la germinación (ddg); para un total de
cinco aplicaciones en la primera época y
cuatro en la segunda época.
En los dos surcos centrales de cada subparcela se marcaron cinco plantas a las cuales
semanalmente se les cuantificó la severidad
de la enfermedad con base a porcentaje del
área foliar afectada en cada planta, empleando la escala de Horrsfall y Barrat (Osada y
Mora, 1997).
Con los datos de severidad se construyeron curvas de progreso de la enfermedad, se
estimó la tasa aparente de infección (r), la
máxima severidad (Y max) y el área bajo la
curva de la enfermedad (ABCPE). Las curvas
de progreso se ajustaron a los modelos Exponencial, Monomolecular, Logístico y Gompertz, usándose el programa estadístico SAS.
La selección de modelo que explicara en
mejor forma la epidemia, se hizo con base al
que presentó mayor coeficiente de determinación (R2), la menor desviación estándar de la
tasa aparente de infección (r), el menor cuadrado medio del error y el menor residuo del
error estándar (Cambell y Madden, 1990).
El efecto de la enfermedad en la producción se estimó por hectárea con base al peso
de las motas obtenidas en los dos surcos
centrales de cada parcela. Se realizó análisis
de varianza por experimento, por época de
siembra y un análisis combinado entre épocas
de siembra, al área bajo la curva de progreso
de la enfermedad ABCPE y a la producción.
Además, se hizo la comparación de medias
empleando la prueba de Duncan (P=0,05) a
través del programa estadístico SAS.
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
En cada experimento se realizó un análisis económico determinando la rentabilidad
de cada tratamiento mediante el método del
presupuesto parcial y dominancia marginal
(CIMMYT, 1988). Los costos de producción
y rentabilidad de los tratamientos fueron
ajustados a precios de 2005.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
El Mildeo aerolado se presentó epidémicamente en los dos experimentos. Los síntomas
iniciales fueron manchas foliares, azuladas de
0,5 mm de diámetro en el envés de las hojas.
La enfermedad progresó de las hojas bajeras
del tercio inferior hacia arriba y de las hojas
internas hacia las externas. El periodo transcurrido desde la aparición de manchas azules
hasta formar los primeros conidióforos (crecimiento blanquecino algodonoso) en el
envés de las hojas, osciló entre 25 y 28 días.
Análisis de la Epidemia
Época temprana. La aplicación de fungicidas influyó en el desarrollo de la epidemia
(Figura 1a). En las variedades Delta Opal y
Delta Pine 90 no tratadas con fungicidas, la
enfermedad se inició 60 días después de
germinación (ddg), en los comienzos de la
producción de flores y cápsulas, comenzando
la fase epidémica en la época de mayor producción de cápsulas (70 ddg); mientras que
en las variedades protegidas los primeros
síntomas se observaron en etapa de máxima
producción de cápsulas, 70 ddg, y la epidemia se inició en la etapa de producción de
cápsulas maduras en los tercios inferiores, a
los 92 ddg.
La máxima severidad de la enfermedad se
alcanzó una severidad del 50% a los 137 ddg
(etapa de apertura de primeras cápsulas) en
las variedades no protegidas y del 34% en
Delta Opal y 25% en Delta Pine 90, protegidas.
El área de progreso de la enfermedad bajo
la curva (ABCPE) fue mayor para Delta Opal
cuando no se protegió con respecto al Delta
Opal tratado; igualmente fue mayor en Delta
Pine 90 no protegido con respecto a la tratada
con fungicida.
El análisis de varianza para la variable
ABCPE mostró diferencias altamente significativas entre las variedades (P=0,01), siendo
la variedad Delta Pine 90 la menos afectada.
Esta variable también presentó alta significancia al comparar el efecto del fungicida, sin
tener en cuenta la variedad, en el desarrollo
de la enfermedad, son más sanas las plantas
tratadas con fungicidas con un ABCPE de
557 unidades; mientras que las no tratadas
presentan un ABCPE de 1613 unidades.
La tasas aparentes de infección ajustadas
al modelo de Gompertz (rG) fueron bajas
tanto en las variedades tratadas con fungicidas como en las no tratadas; siendo para
Delta Opal tratada 0,027, Delta Opal no
tratada 0,032; Delta Pine tratada 0,023 y
Delta Pine no tratada 0,029. Esto indica que
el desarrollo de Ramularia en las dos variedades presentó una baja velocidad en el progreso de la enfermedad.
Época tardía. La aplicación del fungicida
influyó en el desarrollo de la epidemia (Figura 1b). En las variedades Delta Opal y Delta
Pine 90 no tratadas con fungicidas los primeros síntomas de la enfermedad se observaron
a los 54 ddg (Etapa de floración y cápsulas
pequeñas en el tercio inferior) iniciándose la
fase epidémica a los 70 ddg (mayor producción de cápsulas); mientras que, cuando las
variedades fueron protegidas los primeros
síntomas se presentaron a los 54 ddg (etapa
de máxima producción de cápsulas) y la
epidemia se inició a los 88 ddg (etapa de
producción con cápsulas maduras en el tercio
inferior).
La máxima severidad de la enfermedad se
alcanzó a los 100 ddg (etapa de apertura de
primeras cápsulas) en las variedades no protegidas con el fungicida con una severidad
del 41,1% en Delta Opal y 42,1% en Delta
Pine 90. En las variedades tratadas con el
fungicida la máxima severidad se alcanzó a
los 126 ddg con severidad de 21,2% en Delta
Opal y 29,3% en Delta Pine 90.
El área bajo la curva de progreso de la enfermedad, ABCPE, fue significativamente
mayor en las variedades no protegidas con un
promedio de 1500 unidades; mientras que,
cuando se protegió con fungicida la variedad
Delta Opal redujo el área foliar afectada en
49% y la Delta Pine en 57%.
El análisis de varianza para la variable
ABCPE mostró diferencias altamente significativas entre las variedades (P=0,01), siendo
la variedad Delta Pine 90 la menos afectada.
Esta variable también presentó alta significancia al comparar el efecto del fungicida, sin
tener en cuenta la variedad, en el desarrollo
de la enfermedad, siendo menos afectadas las
plantas tratadas con fungicida con un ABCPE
de 816 unidades mientras que las no tratadas
presentaron un ABCPE de 1.521 unidades.
El análisis de varianza de la variable
ABCPE mostró diferencias altamente significativas entre variedades y entre tratamientos.
La prueba de Duncan al 5% de significancia
mostró que hubo diferencias entre los tratamientos y entre las variedades, siendo la más
tolerante a R. areola la Delta Opal.
Las tasas aparentes de infección ajustadas
al modelo de Gompertz (rG) fueron bajas
tanto en las variedades tratadas con fungicida
como las no tratadas. Las tasas de Delta Opal
y Delta Pine tratadas fueron de 0,021 y 0,022,
respectivamente, mientras que para las mismas variedades no tratadas fueron del 0,024.
Esto indica que la epidemia en las dos variedades tuvo una baja velocidad y desarrollo.
Análisis de la época de siembra
La curva de progreso de la epidemia en la
época temprana (Septiembre 17) muestra que
la enfermedad se inició a partir de los 60 días
después de germinado (ddg), mientras que,
en la época de siembra tardía (Octubre 28)
inició a partir de los 47 ddg . Esta diferencia de 17 días es importante para explicar
pérdidas en la producción ya que trabajos
realizados en Brasil han demostrado que la
enfermedad es limitante si se presenta antes
del desarrollo de las cápsulas de algodón
(Araujo, 2000).
La severidad de la enfermedad en la época temprana, en todos los tratamientos a los
80 ddg (producción de cápsulas) no superó el
10%; caso contrario, en la época tardía
donde se observó que las variedades no
tratadas con fungicida presentaron severidades de 12 y 18% en Delta Opal y Delta Pine
90 , respectivamente, siendo considerada esta
la fase crítica en la cual se define la producción.
El desarrollo de la epidemia tuvo relación
con el déficit hídrico, manifestándose en la
época temprana a los 70 ddg, momento en la
cual finalizaron las lluvias. En la época tardía, la sequía se inició a los 20 ddg, por lo cual
el Mildeo areolado se manifestó más temprano, 44 ddg (Figura 1). Estos resultados concuerdan con los trabajos de Lamamoto (2003)
quien encontró que la enfermedad es favorecida por bajas precipitaciones y alta humedad
relativas.
En relación a la resistencia de las variedades y al efecto de carbendazim sobre R.
areola se concluye en que en ambas épocas
de siembra hubo mayor porcentaje de severidad en las variedades no tratadas y que la
a
b
Figura 1. Curvas de desarrollo del Mildeo aerolado en algodón en las variedades Delta Opal y DP 90
tratadas con carbendazim y sin tratar. a. Época de siembra temprana (Septiembre de 2004) b. Época de
siembra tardía (Octubre de 2004).
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
3
variedad Delta Pine 90 fue la más afectada
presentando respuesta positiva al tratamiento
con el fungicida.
Producción
Época Temprana. El análisis de varianza no
mostró diferencia significativa entre los
tratamientos ni entre variedades. Sin embargo, al compararse las variedades no tratadas
(NT) con las tratadas con el fungicida (T), en
éstas últimas se notó un incremento en el
rendimiento de algodón semilla, siendo para
la variedad Delta Opal de 173 kg/ha y en la
variedad Delta Pine 90 de 168 kg/ha. La más
productiva fue la Delta Opal con 2.803 Kg de
algodón semilla/ha, superando a la Delta Pine
90 en 26,14%.
Época tardía. El análisis de varianza mostró
diferencia significativa entre los tratamientos;
indicando que la enfermedad afectó significativamente los rendimientos de algodón semilla. La prueba de Duncan (P≤ 0,05) indicó
que hubo diferencias significativas entre
variedades tanto en las tratadas con el
fungicida como en las no tratadas. La
enfermedad afectó significativamente, los
rendimientos
causando pérdidas de 548
Kg de algodón semilla/ha (18,46%) en Delta
Opal y de 250 Kg de algodón semilla /ha
(10,56%) en Delta Pine 90.
Análisis Combinado
Los rendimientos de algodón semilla no
fueron afectados por la época de siembra,
pero si por la presencia del Mildeo aerolado ,
permitiendo los mayores rendimientos en las
dos variedades evaluadas cuando se trataron
con fungicida. La severidad de la enfermedad
medida como ABCPE presentó diferencia
altamente significativa entre variedades,
tratamientos, época de siembra y entre las
interacciones variedad x tratamiento y tratamiento x época de siembra. La prueba de
Duncan (P≤ 0,05) mostró diferencia altamente significativa
entre variedades siendo
Delta Opal la de mayor área afectada con
1.185 unidades, superando a Delta Pine 90 en
116 unidades.
Análisis Económico
En la época normal de siembra los tratamientos con el fungicida fueron los de mayor
eficiencia presentando una tasa marginal de
retorno TMR en la variedad Delta Opal de
16,65% y en Delta Pine 90 de 14,50% (Tabla
1). En la época tardía, el comportamiento de
las variedades protegidas con el fungicida
permitió altas TMR siendo para Delta Opal
de 133,17% y para la Delta Pine 90 de
50,59% (Tabla 2), lo cual indica que cuando
se siembra el algodón tardíamente la enfermedad afecta econó micamente la producción
teniéndose que establecer medidas de manejo
preventivas.
4
Tabla 1. Análisis marginal en el manejo de Ramularia areola Atkinson para la época de siembra temprana.
Tratamiento
TCV ($/ha)
CM($/ha)
TCVSTTCVAT
BN ($/ha)
TRM (%)
BNM($/ha)
(BNM/CM)
BNST-BNAT
x100
Delta Pine 90 sin aplicación de
945.970,03
267.275,91
carbendazin
Delta Pine 90 con aplicación de
1.181.372,66
235.402,63 301.409,27 34.133,36
14,49999518
carbendazin
Delta Opal sin aplicación de
130.592,97
124.549,31 875.659,97 574.250,7
461,062932
carbendazin
Delta Opal con aplicación de
1.542.932,27
237.010,3 915.129,67 39.469,7
16,.65315811
carbendazin
TCV: TotCostos Variables, CM: Costo Marginal, BN: Beneficio Neto, BNM: Beneficio Neto Marginal,
TRM: Tasa de Retorno Marginal
Tabla 2. Análisis marginal en el manejo de Ramularia areola Atkinson para la época de siembra tardía
CM($/Ha)
TRM (%)
BNM($/Ha)
Tratamiento
TCV($/Ha)
TCVSTBN ($/Ha)
(BNM/CM) x
BNST-BNAT
TCVAT
100
Delta Pine 90 sin aplicación de
948.990,69
135.007,25
carbendazin
Delta Pine 90 con aplicación de
1.214.598,18 265.607,93
269.399,32 134.392,07
50,5979132
carbendazin
Delta Opal sin aplicación de
1.230.980,42 16.381,81
338.009,51 68.610,19
418,819349
carbendazin
Delta Opal con aplicación de
1607139,06 376.338,8
839.174,68 501.165,17
133,168616
carbendazin
TCV: Total Costos Variables, CM: Costo Marginal, BN: Beneficio Neto, BNM: Beneficio Neto Marginal,
TRM: Tasa de Retorno Marginal
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
CONCLUSIONES
En ambas épocas de siembra analizadas
las variedades que no fueron tratados con
fungicida presentaron mayor severidad de la
Mildeo areolado, mostrando diferencias
estadísticas significativas con respecto a las
variedades tratadas.
El modelo de Gompertz resultó ser el más
apropiado para describir el progreso y desarrollo del mildeo areolado (Ramularia areola
Atkinson), en los distintos tratamientos y
épocas estudiadas
Los rendimientos en términos de algodón
semilla por hectárea no presentaron diferencias estadísticas significativas en la época
temprana. En la tardía la variedad Delta Pine
90 no tratada, estadísticamente y económicamente, mostró que requiere de un manejo del
mildeo areolado pues fue la más afectada
(reducción del rendimiento en 10,56%)
El análisis combinado, mostró que la
variedad Delta Opal presentó los mayores
rendimientos (P≤ =,001) de algodón semilla,
no requiriendo control contra el mildeo areolado en ninguna de las épocas estudiadas y
superando a la variedad Delta Pine 90 en
592,4 Kg.
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
Alexopoulos, C. J., Mins, C.W y Blackwell,
M. 1996. Introductory Mycology. John
Willey & Sons, Inc. 4ª ed. New York.
869 p.
Andrade, P. M. C, Cassetari, D y Machado,
A.Q. 1999. Controle químico de doenças
em algodão no Mato Grosso. Fitopatologia Brasileira, Brasília, v. 24, p. 262,
(Abstract).
Araujo, A. E. 2000. Doenças da cultura do
algodoeiro no cerrado. En: Congresso internacional do algodão; Seminário estadual do algodão, 5., Cuiabá. Palestras.
2000. p.189-195.
Bell, A. A. 1981. Aerolate Mildew. In:
Watkins, G.M. Compendium of Cotton
Diseases. Fortaleza, Vol 2, No 3. p 89
Blank, L. M. 1953. The Leaf Spots of Cotton
Plants, En: Plant Diseases, Yearbook of
Agriculture, United States Department of
Agriculture. 317 p
Cano, C. 2004. Memorias 2002-2003. Manejo Social del Campo. Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural. Imprenta Nacional de Colombia. p 126-128
Cambell, C. L. y Madden, L.V. 1990. Introduction to plant disease epidemiology.
New York: John Wiley & Sons. pp 129202
Cassetari, N. y Machado A. 2005 Doenças do
algodoeiro: diagnose e controle. Várzea
Grande MT. Universidade de Várzea
Grande e Universidade Federal de Mato
Grosso.
CIMMYT. 1988. La Formulación de recomendaciones desde datos agronómicos:
Manual metodológico de evaluación
económica. Ed. CIMMYT. México DF.
79p
CRCPAT. 2003. Diagnóstico de competitividad de la Cadena Productiva del Algodón
Textil en el Valle del Sinú en Córdoba y
la Microrregión de Sabanas de Sucre. Cereté. Pág 13-20
EMBRAPA, 2000. Cultura do Algodão no
Cerrado. http://www. sistemasdecnptia.
producao. embrapa.br/ Fontes HTML/
Algodao/ Algo dao/ Cerrado/ doencas.htm. [Accedido: 10- 24-2004]
FEDERALGODON.1980. Bases Técnicas
para el Cultivo del Algodón en Colombia.
Ed. Guadalupe Ltda. Bogotá, p.552
Lamamoto, M.2003. Doenças Foliares do
Algodoeiro. Funep, Jaboticabal SP, pp.
12-17
INTA, 2004. Principales enfermedades del
algodón. http:// www.monografias.com
/traba
jos14/algodon/algodon2.shtml221k. [Accedido: 10-24-2004]
Martínez, B. y Martínez, R. 1997. Diseño de
Experimentos. Análisis de datos estándar
y no estándar. Talleres Gráficos de Editora Guadalupe. Santafé de Bogotá. 479 p.
NCIPM. 2004, Cotton Grey Mildew (Ramularia areola), Lal Bahadur Shastri Building. Pusa Campus New Delhi. p 23
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
Osada,V. y Mora. A.1997. Programa para
desarrollar escalas de Severidad por el
Método Horsfall-Barrat. Colegio de Post
graduados. Instituto de Fitosanidad. Montecillo México
Prade, A. Foranrolli, D. y Lizz, D.2000.
Controle químico da mancha de ramulária em algodão. Fitopatologia Brasileira,
Brasília, v.25, p.413.
Quiñonez, V. Torres, J. y Suárez, M. 1994.
Comportamiento de cultivares de Algodón en Sabaneta Estado de Barinas En:
FONAIAP Divulga No 46, juliodiciembre.
5
ASOCIACIÓN COLOMBIANA DE FITOPATOLOGIA
Y CIENCIAS AFINES, ASCOLFI
XXX Congreso Colombiano y XVI Latinoamericano de Fitopatología
Bogotá (Colombia), Hotel Crowne Plaza Tequendama del 16 al 19 de agosto de 2011.
Actividad conjunta con la
ALF, Asociación Latinoamericana de Fitopatología
Informes
Sede Congreso
http://concolfi.com/
[email protected]
Sede ASCOLFI
www.ascolficolombia.org
[email protected]
Cel. +57- 316-4303079
22
EFICACIA DEL TRATAMIENTO DE SEMILLAS DE FRÍJOL (Phaseolus vulgaris L.)
SOBRE LA ERRADICACIÓN DE MICROORGANISMOS*
Claudia Nohemy Montoya Estrada y Jairo Castaño Zapata
Facultad de Ciencias Agropecuarias, Universidad de Caldas
Correos electrónicos de contacto: [email protected]; [email protected]
*Artículo Científico, recibido para publicación el 13/02/2011; aceptado el 14/04/2011
RESUMEN
SUMMARY
La semilla es el principal medio de dispersión de patógenos a grandes
distancias. Mucha de la semilla de frijol utilizada por los agricultores
de escasos recursos económicos es de mala calidad y transporta
fitopatógenos que inciden sobre su germinación. Por esta razón se hace
necesario implementar tácticas efectivas para producir semilla de
buena calidad. Esta investigación tuvo como objetivo principal erradicar los microorganismos presentes en semillas de frijol mediante
productos con diferente mecanismo de acción, como Benomil, Captan,
Carboxin+Captan y Burkholderia cepacia. Se utilizó agar-agua al 2%.
Se sembraron cinco semillas por caja Petri, con cinco replicas, para un
total de 25 semillas por tratamiento, en un diseño de bloques completamente al azar. Por cada producto se emplearon cuatro dosis. Las
semillas se incubaron entre 20 y 25⁰C, durante 14 días. Después de
siete días, Benomil en dosis de 100, 200 y 400 ppm, permitió una
germinación superior al 90% y se mantuvo estable después los 14 días.
Después de Benomil, la mezcla de Carboxin+Captan en las mismas
dosis, fue el mejor tratamiento, obteniéndose una germinación entre
80 y 92%. La germinación en los testigos osciló entre el 48 y 68%.
Benomil en dosis de 200 ppm, erradicó totalmente los hongos presentes en las semillas aún después de 14 días, contrastando con el testigo
que a los siete días tenía una incidencia del 100%. Se identificaron
cinco géneros de hongos: Fusarium, Penicillium, Rhizopus, Rhizoctonia y Alternaria y, dos de bacterias: Xanthomonas y Bacillus.
Fusarium, fue el microorganismo más frecuente. El fungicida Benomil, es una alternativa eficaz para la erradicación de microorganismos presentes en semillas de fríjol.
Efficacy of seed treatment of bean (Phaseolus vulgaris L.) on the
eradication of microorganisms
Palabras clave: leguminosas, hongos, bacterias, fungicidas, eliminación
Key words: legumes, fungi, bacteria, fungicides, elimination
INTRODUCCIÓN
En Colombia predomina el uso de variedades
criollas de fríjol (Phaseolus vulgaris L.), tales
como el Cargamanto, del cual se han identificado muchos tipos: C. blanco, C. común, C.
ombligo amarillo, C. rojo, C. gigante, entre
otros. El fríjol Cargamanto es cultivado en
condiciones de clima frío y clima frío moderado en la subregión del Oriente antioqueño.
Estas variedades son de hábito voluble o de
enredadera (hábito IV) (Arias et al., 2007).
Una característica desfavorable de los
fríjoles tipo Cargamanto es su susceptibilidad a enfermedades (Arias et al., 2007). La
Antracnosis, causada por el hongo Glomerella lindemuthiana Shear [anamorfo, Colletotrichum lindemuthianum (Sacc. & Magnus)
Lams.-Scrib], es probablemente la enfermedad más importante de P. vulgaris y puede
The seed is the main dissemination mean of pathogens to long distances. Most of the bean seed used by farmers of scarce economic
resources is of low quality and transport plant pathogens that affect its
germination. For this reason it is necessary to implement effective
practices to produce good quality of seed. This research had as main
objective to eradicate those microorganisms presented in seeds of bean
through products with different mechanism of action, such as Benomil,
Captan, Carboxin+Captan and Burkholderia cepacia. It was used agarwater at 2%, plating five seeds per Petri dish, with five replications
and 25 seeds per treatment, in a completely randomized block design.
For each product were used four doses. The seeds were incubated
between 20 and 25ºC, during 14 days. After 7 days, Benomil at 100,
200 and 400 ppm, allowed germination higher than 90% and kept up
stable after 14 days. After Benomil, the mixture of Carboxin+Captan
at the same doses was the best treatment, with germination between 80
and 92%. The germination in the controls ranged between 48 and 68%.
Benomil at 200 ppm, totally eradicated the fungi presented in the seeds
even after 14 days, contrarily with the control, in which after 7 days
reached an incidence of 100’% of fungi. It was identified five genera
of fungi: Fusarium, Penicillium, Rhizopus, Rhizoctonia and Alternaria
and, two of bacteria: Xanthomonas and Bacillus. Fusarium, was the
most frequent microorganism. Fungicides, such as Benomil, offer an
effective alternative to eradicate microorganisms in seeds of bean.
llegar a causar pérdidas en rendimiento hasta
del 95%. Su severidad induce a muchos
agricultores a la utilización de varios fungicidas, lo cual representa altos costos en la
producción, además de la contaminación
ambiental (Santana y Mahuku, 2002).
Los hongos causan el mayor número de
enfermedades en plantas y ocurren con mayor
frecuencia en semillas que los virus, las
bacterias, o nematodos (Castaño-Zapata y
Zepeda, 1987). Por lo tanto, las semillas de
fríjol pueden ser un medio ideal para el transporte de inóculo de patógenos de origen
fungoso, viral, bacterial o viral e inclusive de
nematodos. Por ejemplo, Richardson (1979),
reporta 32 hongos, 12 virus, siete bacterias y
un nematodo, que se transmiten a través de la
semilla.
Las semillas que portan hongos patogénicos son importantes para la agricultura debido
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
a que: pierden viabilidad, lo que resulta en
una disminución significante de la germinación; pueden portar inóculo, el cual bajo
condiciones apropiadas puede iniciar una
epidemia; pueden introducir patógenos exóticos, no obstante que son tratadas con agroquímicos; pueden portar patógenos viables
resultando en cualquiera de las situaciones
anteriores; y el ataque de la semilla por diversos microorganismos antes de la cosecha
puede causar una reducción en la calidad y
rendimiento del grano (Baker, 1972). La
semilla se convierte de esta manera en el
principal medio de dispersión de patógenos a
grandes distancias, incluyendo países y continentes.
Algunos hongos causantes de Antracnosis, como la del fríjol, se dispersan principalmente por semilla, por lo que el uso de
semilla de calidad, puede conducir a la au7
sencia de esta enfermedad, aun cuando la
variedad sea susceptible (Villalobos y
Hernández, s. f.).
En una semilla de mala calidad, se pueden transportar hongos habitantes del suelo,
que una vez introducidos al campo, son muy
difíciles de manejar, como por ejemplo,
Fusarium oxysporum Schlechtend.:Fr, Sclerotium rolfsii Sacc, Sclerotinia sclerotiorum
(Lib.) de Bary, Macrophomina phaseolina
(Tassi) Goidanich y Rhizoctonia solani Kühn.
La sobrevivencia de los patógenos que
atacan al frijol y se transmiten por semilla
como Phaeoisariopsis griseola (Sacc.) Ferrais, Glomerella lindemuthiana Shear, Thanatephorus cucumeris (A. B. Frank) Donk
(anamarfo, Rhizoctonia solani Kühn),
Xanthomonas campestris pv. phaseoli Pammel, y Pseudomonas syringae pv.. phaseolicola Van Hall, pueden permanecer en el
suelo o residuos de cosecha hasta tres años
(Jara, 2006; Godoy, 2007). Se sabe que para
Thanatephorus cucumeris (A. B. Frank)
Donk, la semilla es un medio muy efectivo de
sobrevivencia (hasta dos años) y fuente de
inóculo para la parte aérea (Schwartz y
Gálvez, 1980).
Groenewold et al. (2003), encontraron
que patógenos como: Rhizoctonia solani
Kühn, Sclerotium rolfsii Sacc, Fusarium Link
ex Grey., Colletotrichum lindemuthianum
(Sacc. & Magnus) Briosi & Cavara, Uromyces appendiculatus (Pers:Pers) Unger,
Xanthomonas axonopodis pv. phaseoli Smith,
Pseudomonas syringae pv. phaseolicola Van
Hall y el virus del Mosaico común del frijol,
BCMV, (Stewart & Reddick) Pierce, constituyen un problema de gran impacto en la
producción de semilla de fríjol de calidad.
Enfermedades bacteriales, como el Tizón
de halo (Pseudomonas syringae pv. phaseolicola Van Hall), la Mancha parda (Pseudomonas syringae pv. syringae Van Hall), el Tizón
común (Xanthomonas campestris pv. phaseoli Smith), y la Marchitez (Curtobacterium
flaccumfaciens subsp. flaccumfaciens (Hedges) Dowson, afectan al cultivo de frijol y
áreas de producción. Debido a que estas
bacterias se transmiten por semilla, la presencia de plantas enfermas en los campos de
semillas afecta la elegibilidad de certificación
de la cosecha, según la definición de las
normas de certificación y los reglamentos.
Los ataques de enfermedades bacteriales
reducen el rendimiento y la calidad de la
cosecha (Franc, 1998).
El tratamiento de semillas probablemente
es la medida más antigua, económica y más
segura en el manejo de patógenos transmitidos por semillas, especialmente hongos. El
tratamiento químico es el más difundido y
consiste en la aplicación de fungicidas, insecticidas, antibióticos y/o nematícidas a las
semillas. Para que el tratamiento químico sea
eficiente, se debe seleccionar un producto
capaz de erradicar los patógenos presentes en
las semillas, el cual no debe ser tóxico a las
8
plantas, a humanos y al ambiente, debe presentar alta estabilidad, adherencia y protección, no ser corrosivo ni de alto costo,
además de ser compatible con otros productos
(Lucca, 2009).
Existe un gran número de productos en el
mercado aptos para ser usados en el tratamiento de semillas, presentando características diferentes. Los productos llamados protectantes son aquellos que actúan superficialmente, y tienen poca capacidad de penetrar en la semilla, restringiendo su acción a
los patógenos localizados en el tegumento o
debajo de éste, aún sin penetrar en los tejidos
embrionarios. Como ejemplo clásico de este
grupo están los fungicidas Thiram y Captan.
Los productos sistémicos son aquellos que
son absorbidos por la semilla junto con el
agua y translocados en la planta, confiriendo
cierta protección en los estados iniciales de
desarrollo de las plántulas, tales como Benomil, Carboxin, Tiofanato metilico, etc. (Diccionario de Especialidades Agroquímicas,
2010; Lucca, 2009).
Este estudio tuvo como objetivo principal
evaluar la eficacia de tres fungicidas y una
bacteria sobre la germinación y erradicación
de microorganismos presentes en semillas de
fríjol variedad Cargamanto blanco.
MATERIALES Y MÉTODOS
La investigación se llevó a cabo en el laboratorio de Fitopatología, del Departamento de
Fitotecnia, Facultad de Ciencias Agropecuarias, Universidad de Caldas (Manizales,
Colombia). Se analizaron semillas de frijol
variedad Cargamanto blanco, procedentes de
un supermercado Tipo B. Se utilizaron cuatro
productos: Benomil (Zellus®), Captan (Orthocide® 50%), Carboxin+Captan (Vitavax®
300) y Burkholderia cepacia Burkholder
(Botrycid®).
Para el tratamiento de la semilla se utilizó
la metodología descrita por Castaño-Zapata
(1998). Las semillas se trataron en grupos de
25 con Benomil, Captan, Carboxin+ Captan a
concentraciones de 0, 50, 100, 200 y 400 ppm
y B. cepacia en dosis de 0, 1, 1,5, 2 y 2,5 de
mL i.a./ 100 mL de agua. El tratamiento se
hizo en bolsas de plástico, mediante agitación constante y durante un minuto. Luego
se extendieron las semillas sobre papel y con
la ayuda de unas pinzas, se sembraron cinco
semillas por caja Petri conteniendo agar agua
al 2%. Cada concentración tuvo cinco replicas (25 cajas por fungicida), para un total de
125 semillas por producto. Se incubaron a 2025°C en una incubadora WTB Binder durante 14 días.
Se realizaron observaciones a los cuatro,
siete y 14 días evaluando la germinación y
número de semillas con presencia de hongos,
bacterias, o ambos.
La identificación de hongos se realizó
con base a la descripción taxonómica de
Streets (s.f) Barnett y Hunter (1987) y Casta2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
ño-Zapata y Salazar (1998). Los montajes se
hicieron en azul de lactofenol (azul de algodón 0,05 g, ácido láctico 20 g, cristales de
fenol 20 g, glicerina 40 g, agua destilada 20
mL) y posteriormente con la ayuda de un
microscopio compuesto marca Boeco se
realizó la identificación. La identificación de
bacterias se realizó siguiendo algunas pautas
del esquema de Schaad (1988), complementado con pruebas morfológicas, fisiológicas y
bioquímicas.
Los porcentajes de germinación de semillas e incidencia de hongos y de bacterias, de
acuerdo al tratamiento, fueron sometidos a
análisis de varianza, complementado con la
prueba de comparación de Duncan al 5%.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Germinación de semillas.
El análisis de varianza indicó diferencias
significantes entre tratamientos a los 4, 7 y
14 días (p= 0,0002 y p= 0,0116 y p= 0,0813,
respectivamente).
A los 4 días de evaluación, Benomil en
las dosis de 100, 200 y 400 ppm, permitió
una germinación superior al 80%. Después de
7 días, la germinación con estas dosis, fue
superior al 90% y se mantuvo estable después
de 14 días (Tabla 1). Esto confirma los resultados de Castaño-Zapata y Zepeda (1987),
quienes demostraron que Benomil en dosis
de 1.000 ppm, permitió la germinación de
semilla de fríjol significativamente, llegando
hasta el 98%. Después de Benomil y en los
mismos periodos de tiempo, la mezcla de
Carboxin+Captan en las dosis de 100, 200 y
400 ppm, fue el mejor tratamiento, con el
cual se obtuvo una germinación que varió
entre 80 y 92%, la cual fue incrementando a
través del tiempo. La germinación en los
testigos osciló entre el 48 y 68%, lo que
demuestra el efecto benéfico del tratamiento
de semilla de fríjol con estos productos (Tabla 1).
Incidencia de hongos
Hubo diferencias altamente significativas a
los 4, 7 y 14 días después del tratamiento (p=
0,0098, p= <0,001, p= <0,001, respectivamente). Benomil en dosis de 200 ppm, fue el
único que erradicó totalmente los hongos
presentes en las semillas al cabo de los 14
días, contrastando con el testigo que al cabo
de los siete días ya tenía una incidencia del
100% de hongos (Tabla 2), lo que demuestra
la gran eficacia de este producto para la
erradicación de hongos en semillas. CastañoZapata y Zepeda (1987), demostraron previamente este efecto en semillas de fríjol, el
cual es atribuido a la actividad sistémica de
Benomil y a su amplio espectro de acción.
Esto destaca la gran importancia que tiene el
tratamiento de semillas destinadas para siem-
Tabla 1. Germinación (%) de semillas de frijol
Cargamanto blanco de acuerdo con el tratamiento
Incidencia (%) de
Tratamiento
hongos
(ppm o mL)
4 DDT 7 DDT 14 DDT
Benomil 50
0c
0f
40 cd
Benomil 100
0c
4 ef
16 de
Benomil 200
0c
0f
0e
Benomil 400
0c
4 ef
8e
Captan 50
8 abc
32 cdef 48 bc
Captan 100
4 bc
36 cde 48 bc
Captan 200
0c
32 cdef 40 cd
Captan 400
0c
20 def 40 cd
Carboxin+Captan 50
4 bc
52 cd
88 a
Carboxin+Captan 100
4 bc
60 bc
88 a
Carboxin+Captan 200
12 abc 88 ab
96 a
Carboxin+Captan 400
0c
52 cd
100 a
Burkholderia cepacia 1,0
28 a
44 cd
100 a
Burkholderia cepacia 1,5
8 abc
36 cde 100 a
Burkholderia cepacia 2,0
24 ab
40 cd
Burkholderia cepacia 2,5
8 abc
28 cdef 76 ab
92 a
28 a
100 a 100 a
DDT = Días después del tratamiento. *Letras
iguales denotan que no existen diferencias significativas al 5% de probabilidad
Testigo absoluto
Identificación de microorganismos. Se
identificaron cinco géneros de hongos: Fusarium Link ex Grey, Penicillium Link, Alternaria (Fries) Keissler, Rhizoctonia Kühn y
Rhizopus (Ehrenberg: Fries) Vuillemin y dos
de bacterias Xanthomonas Smith y Bacillus
Cohn. Schanathorst (1954) identifico varias
especies de Bacillus en semillas de frijol,
entre ellos B. subtilis (Ehrenberg) Cohn, B.
cereus Frankland & Frankland y B. megaterium Cohn y estos fueron el grupo de microorganismos más frecuentes encontrados en
semillas. Ninguna de las bacterias fue patogénica para P. vulgaris. var. Black Valentine. La evidencia indica que no hay bacterias
presentes en tejidos embrionarios, pero son
comunes bajo la testa de las semillas de frijol.
Lo anterior confirma que la colonia de Bacillus Cohn encontrada en la semilla de frijol
pudo estar presente como un controlador
biológico o como un contaminante más no
como una bacteria patogénica.
El producto que tuvo la menor incidencia
de microorganismos fue Benomil, con el cual
a dosis bajas (50 y 100 ppm) tuvo presencia
Bacillus
Xanthomonas
Rhizopus
Rhizoctonia
Alternaria
Penicillium
Producto
Fusarium
Tabla 2. Incidencia (%) de hongos en semillas de frijol Cargamanto blanco de acuerdo con el tratamiento.
Tratamiento
(ppm o mL)
bras con producto de acción sistémica.
El tratamientos con Carboxin+Captan no
reflejó los resultados esperados, aunque se
obtuvo germinaciones entre 76 y 92% a los
14 días después del tratamiento, con una
incidencia de hongos que osciló entre 88 y
100%. Resultados similares obtuvo Mora
(1996) quien al tratar semilla de fríjol con
Carboxin + Captan obtuvo una incidencia
alta de hongos (57%) a los 18 días de evaluación en comparación con el testigo (37%), y
una germinación del 86%.
Benomil
50
20
20
100
8
8
200
4
400
4
Captan
50
20
16
100
4
4
8
200
20
400
32
20
Carboxin+Captan
50
88
100
60
8
20
200
76
16
400
24
20
24
20
Burkholderia cepacia
1,0
68
4
28
1,5
84
12
4
2,0
40
20
32
2,5
60
4
4
Testigo
0
80
20
DDT = Días después del tratamiento *Letras iguales denotan que no existen diferencias significativas al 5%
de probabilidad.
de Fusarium sp. (20%), Rhizopus sp. (20%) y
Alternaria sp. (8%), pero, a dosis altas (200 y
400 ppm), no crecieron hongos, sólo
Xanthomonas sp. y Bacillus sp. con 4%.
Por el contrario, los productos que tuvieron la mayor incidencia de hongos y en las
cuatro dosis empleadas fueron Carboxin+Captan y B. cepacia, en un rango de
24 y 88% (Tabla 3).
población de plantas, o bien causar problemas
patológicos en los cultivos una vez establecidos. Por esto se requiere emplear prácticas
que eliminen el inóculo presente en la semilla. Los fungicidas, en particular sistémicos,
como Benomil, ofrecen una alternativa eficaz para la erradicación de hongos, si no se
dispone de semilla certificada.
Tabla 3. Incidencia (%) de géneros de hongos y bacterias presentes en semillas de frijol Cargamanto
blanco.
Tratamiento
Germinación (%) de semillas
4 DDT
7 DDT
14 DDT
Producto
(ppm o mL)
Benomil
50
72 abc*
80 abcd
88 abc
100
88 ab
92 ab
92 ab
200
92 a
96 a
96 a
400
84 abc
96 a
96 a
Captan
50
44 cde
84 abc
92 ab
100
64 abc
88 abc
96 a
200
60 abc
92 ab
92 ab
400
52 abcde
92 ab
92 ab
Carboxin+Captan
50
72 abc
72 abcd
76 abc
100
76 abc
88 abc
88 abc
200
76 abc
88 abc
88 abc
400
80 abc
92 ab
92 ab
Burkholderia cepacia
1,0
20 de
68 bcd
76 abc
1,5
60 abc
92 ab
92 ab
2,0
56 abcd
80 abcd
80 abc
2,5
16 e
64 cd
64 c
Testigo
48 bcde
56 d
68 bc
DDT = Días después del tratamiento *Letras iguales denotan que no existen diferencias significativas al
5% de probabilidad.
De acuerdo a estos resultados, el tratamiento que produjo el mayor porcentaje de
semillas sanas fue Benomil con 96% en las
dosis de 200 y 400 ppm. Por el contrario, B.
cepacia, en las dosis de 1,0 y 1,5 mL, tuvieron una incidencia de microorganismos del
100%, igual al testigo (Figura 1).
Los resultados demostraron que las semillas de fríjol pueden ser un medio ideal para
el transporte de microorganismos, en particular de hongos, que afectan la germinación y
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
CONCLUSIONES
El tratamiento más eficaz para erradicar
hongos presentes en la semilla de frijol
variedad Cargamanto blanco fue Benomil
a una dosis de 200 ppm, incrementando
significativamente la germinación.
El hongo más frecuente en las semillas
fue Fusarium sp.
9
Figura 1. Porcentaje de semillas sanas según el tratamiento.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Arias, J. H, Martínez, R. T y Carmona, J. M.
2007. Manual: Buenas prácticas agrícolas, en la producción de fríjol voluble.
Gobernación de Antioquia, MANA,
CORPOICA, Centro de Investigación “La
Selva”. FAO. 168p.
Baker, K. F. 1972. Seed pathology. In: Seed
Biology: Germination, Control, Metabolism, and Pathology. Academic Press,
New York. Pp. 317-346.
Barnett, I. L y Hunter, B.B. 1987. Illustrated
genera of imperfect fungi. Fourth edition.
Macmillan Publishing Company. New
York. 198p.
Castaño-Zapata, J. y Zepeda, J. 1987. Microorganismos asociados con granos almacenados de arroz, maíz, fríjol, soya y chile, y efectividad del tratamiento químico
de la semilla. CEIBA 28(1):59-65.
Castaño-Zapata, J. 1998. Prácticas de Laboratorio de Fitopatología. Práctica N° 20:
10
Detección de microorganismos en semillas y tratamiento químico de semillas.
Segunda edición. Universidad de Caldas.
Facultad de Ciencias Agropecuarias. Departamento de Fitotecnia. Escuela Agrícola Panamericana. Departamento de Protección Vegetal. Pp. 79-80.
Castaño-Zapata, J y Salazar, H. 1998. Illustrated guide for identification of plant
pathogens. Universidad de Caldas. Manizales, Colombia. Pp. 74-98.
Diccionario de Especialidades Agroquímicas.2010. PLM Edición 20. Colombia.
1118p.
Franc, G. D. 1998. Bacterial diseases of
beans. College of Agriculture. University
of Wyoming Laramie, USA. 7p.
Godoy, G. 2007. Sobrevivencia de Thanatephorus cucumeris en semilla de frijol y en
el suelo. Centro de Investigaciones Agrícolas del Suroeste (CIAS). San Juan de la
Maguana. República Dominicana. 42p.
Groenewold, L. B., Mayec, P. N. y Padilla, J.
S. 2003. Hongos asociados a la semilla de
frijol (Phaseolus vulgaris) en Aguascalientes, México. Revista Mexicana de Fi-
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
topatología, diciembre, año/vol. 21,
número 003. Sociedad Mexicana de Fitopatología, A.C. Ciudad de Obregón,
México. Pp. 375-378.
Jara, C. 2006. Programa de fitopatología del
Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT). Cali, Colombia. 42p.
Lucca, F. O. 2009. Tercer curso de especialización en ciencia y tecnología de semillas
por tutoría a distancia. Modulo 5 - patología de semillas. Universidad Federal de
Pelotas (ufpel) Brasil. Asociación Nacional de Productores de Semillas (anaprose). Montevideo, Uruguay. 45p.
Mora, J. 1996. Combate biológico de Rhizoctonia solani mediante el empleo de Rhizobium leguminosarum biovar phaseoli
en el campo. Agronomía Mesoamericana
7(2): 23-30.
Richardson, M. J. 1979. An annotated list of
seed-borne diseases. 3rd Edition. Commonwealth Mycological Institute, Kew
Surrey, England - International Seed
Testing Association, Zurich, Switzerland.
320p.
Santana, G. E. y Mahuku, G. 2002. Diversidad de razas de Colletotrichum lindemuthianum en Antioquía y evaluación de
germoplasma de frijol crema-rojo por resistencia a antracnosis. Agronomía Mesoamericana 13(2): 95-103.
Schaad, N. W. 1988. Laboratory guide for
identification of plant pathogenic bacteria. Second edition. The American Phytopathological Society. 157p.
Schanathorst, W. C. 1954. Bacteria and fungi
in seed and plants of certified bean varieties. Phytopathology 44:588-592.
Schwartz, H. F. y Gálvez, G. 1980. Problemas de producción del frijol: enfermedades, insectos, limitaciones edáficas y
climáticas de Phaseolus vulgaris. Centro
Internacional de Agricultura Tropical.
Cali, Colombia. Pp. 103-110.
Streets. R. B. (s. f.). The diagnosis of plant
diseases. A field and Laboratory Manual
Emphasizing the Most Practical Methods
for Rapid Identification. The University
of Arizona Press. Pp 13-14.
Villalobos, R.A. y Hernández, J. C. (s.f).
Protocolo para la producción local de semilla de frijol. 42p.
EVALUACIÓN DEL POTENCIAL ANTAGÓNICO DE BACTERIAS AISLADAS DE LA
RIZÓSFERA DE PAPA CRIOLLA (Solanum phureja) SOBRE Phytophthora infestans
(Mont.) de Bary*
David Granada1., Gina F. Pasaje H1., Eliana M. Zuluaga R1., Felipe A. Gómez V1., Carlos Peláez J2. y E. Antoni Rueda L.1
1
Unidad Fitosanidad y Control Biológico Corporación para Investigaciones Biológicas (CIB), 2 Grupo GIEM Universidad de Antioquia
Correo electrónico de contacto: [email protected]
*Artículo científico, recibido para publicación el 21-04-2011; aceptado el 18/05/2011
RESUMEN
SUMMARY
El oomiceto Phytophthora infestans (Mont.) de Bary es el causante
del tizón tardío en cultivos de papa (Solanum spp.). Su control químico genera altos costos con poca efectividad y alta residualidad. El
objetivo de este estudio fue evaluar la capacidad antagónica de diez
aislamientos bacterianos, obtenidos de suelos cultivados con Solanum
phureja como controladores potenciales de Phytophthora infestans.
Para demostrar su capacidad de restricción del crecimiento del patógeno. se emplearon pruebas de antagonismo in vitro por enfrentamiento directo y evaluaciones de la actividad extractos, obtenidos a
partir de fermentaciones del antagonista. Cinco de los aislamientos
evaluados mostraron actividad antagónica; de los cuales, tres exhibieron actividad antimicrobiana en sus extractos. Al evaluar la actividad
inhibitoria a concentraciones del 1; 0,8; 0,6; 0,4; 0,2 y 0,05 %, se
observó la inhibición total de P. infestans con los extractos de los
aislamientos 4-ant-04 y 7-ant-04 a concentraciones de 0,4 y 0,2 %,
respectivamente. Este resultado se correlacionó directamente con los
ensayos de antagonismo donde 4-ant-04 y 7-ant-04 presentaron los
máximos valores de inhibición (79 y 69 %, respectivamente). Los
resultados revelan la importancia de la producción de compuestos
activos con la capacidad antagónica y sugieren que algunos de los
aislamientos bacterianos empleados en este estudio, al igual que sus
extractos crudos, tienen un enorme potencial en el control de P. infestans.
Evaluation of the antagonistic potential of the bacteria isolated
from rhizosphere of native potato (Solanum phureja) on Phytophthora infestans (Mont.) de Bary.
Palabras clave: tizón tardío, antagonismo, extracto crudo, aislamientos bacterianos
INTRODUCCIÓN
En Colombia el cultivo de papa constituye
una de las actividades agrícolas de mayor
importancia a nivel económico y social, por
su aporte a la seguridad alimentaria del país y
por el nivel de empleo rural que genera (Canter, 1999; Rivera et al., 2010).
El sistema productivo de la papa presenta
ataques de plagas y enfermedades que obligan a los agricultores a realizar labores de
prevención, manejo y control, acordes con la
disponibilidad de recursos técnicos y financieros (Bernal y Hernán, 2001).
La enfermedad que ocasiona más pérdidas económicas en cultivos de papa es el
tizón tardío, causada por el Oomycete (Phytophthora infestans) (Zoteyeba y Patrikeeva,
2010; Boonekamp et al., 2008; Cruz, 2002;
Lozoya et al., 2006a; Fry y Goodwin 1997..
En Colombia, es especialmente importante, debido a la ubicación de los cultivos en
Phytophthora infestans (Mont.) de Bary is the causal agent of the late
blight disease on potato crops (Solanum spp.). Its chemical control
generates high costs, low efficiency and high residual effect on the
environment. The objective of this work was to evaluate the antagonistic capacity of ten bacterial isolates, obtained from soil cultivated with
Solanum phureja, against Phytophthora infestans. In vitro antagonistic
determinations by direct confrontation were used and crude extracts,
obtained by fermentation processes of the isolates, were assessed
through bioassay. Five of the isolates showed antagonistic activity.
The extracts of three of them exhibited biological activity. Moreover,
the inhibitory activity of the extracts at different concentrations (1, 0.8,
0.6, 0.4, 0.2 y 0.05 %) showed a 100 % inhibition for the isolates 4ant-04 and 7-ant-04 at concentrations of 0.4 y 0.2 %, respectively.
Since a maximum inhibition for de antagonism test was observed for
4-ant-04 and 7-ant-04 (79 y 69 %, respectively), there was a direct
correlation between this result and the crude extracts bioassay. Active
compounds production has been found vital for the antagonist capacity. The results suggest that some bacterial isolates employed in this
study, as well as their bacterial crude extracts, have great potential to
control P. infestans.
Keywords: late blight, antagonism, bacterial crude extracts
regiones con condiciones climáticas favorables para el desarrollo del patógeno (zonas
altas y frías de la región andina) y a la siembra de materiales altamente susceptibles,
condiciones que contribuyen a que el patógeno tenga un ciclo muy corto y de mayor
agresividad (Vega, 2004). Por otra parte, sus
características reproductivas generan cepas
con alta variabilidad genética, las cuales
pueden ser más agresivas y resistentes a los
fungicidas empleados para su manejo (Daayf
et al., 2003; Jaramillo, 2004; Lozoya et al.,
2006b).
Para controlar la enfermedad en los cultivos de papa, los agricultores colombianos
realizan aplicaciones de fungicidas protectantes y/o sistémicos de manera intensiva, lo
cual representa un costo que oscila entre el 10
y el 30 % del valor total de la producción de
los cultivos de papa (Jaramillo, 2004). donde
los más empleados son el Metalaxil y Manzate. El uso excesivo de estos pesticidas genera
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
problemas ambientales, sobre la salud humana y otros seres vivos, a lo que se le suma la
aparición de genotipos del patógeno resistentes a los fungicidas (Maldonado et al., 2002;
Solange, 2007).
El control biológico mediante el uso de
microorganismos antagonistas es una de las
alternativas que más atención ha recibido en
los últimos años (Rivera et al., 2010; Valdir,
2006; Daayf et al., 2003). La existencia de
microorganismos asociados de forma natural
a las plantas, los hace ideales para seleccionar
entre estos a aquellos que tienen la capacidad
de inhibir patógenos. Así, el control biológico
mediante el uso de microorganismos antagonistas, surge como respuesta a la búsqueda de
nuevas formas de control de patógenos en la
producción agrícola, en las que prima la
calidad de las cosechas y el respeto a los
recursos naturales y humanos (Ezziyyani,
2006).
11
La presente investigación se enfocó en
evaluar la capacidad antagónica de diez
aislamientos bacterianos obtenidos de suelos
cultivados con Solanum phureja y en la
determinación de la actividad antimicrobiana
de sus productos metabólicos sobre P. infestans, bajo condiciones de laboratorio, como
fundamento para la generación de alternativas de control del Tizón tardío, basadas en el
desarrollo de productos eficaces y de bajo
impacto ambiental para su uso en el sistema
productivo de la papa.
MATERIALES Y MÉTODOS
Material biológico
de P. infestans. Cada aislamiento contó con
cinco réplicas.
El efecto antagónico de las bacterias se determinó mediante mediciones del radio de
crecimiento del fitopatógeno en comparación
con un control no tratado en un intervalo de
tres días.
El antagonismo se expresó como el porcentaje de inhibición, calculado a partir del área
bajo la curva (ABC) de la cinética de crecimiento de P. infestans enfrentado a los aislamientos con respecto al ABC de su control no
enfrentado. El ABC se determinó mediante el
conteo de número de píxeles en el programa
de fotografía GIMP, a partir de los gráficos
de la cinética de crecimiento
tractos bacterianos, de los cinco aislamientos
que presentaban mayor inhibición se seleccionaron tres, a los cuales se les realizó diluciones sucesivas (1:9) de los extractos iníciales para obtener 6 concentraciones diferentes
de los mismos (8000, 6000, 4000, 2000 y
500 ppm) posteriormente se sirvieron en
cajas de petri. Luego se sembró un disco del
fitopatógeno del cultivo base en cada caja y
se incubaron durante ± 20 días a 18 ºC en
oscuridad.
Se realizaron mediciones del diámetro de
crecimiento del fitopatógeno (mm) en comparación con un tratamiento control donde no se
aplicó ningún extracto bacteriano.
Análisis Estadístico
Se emplearon diez aislamientos bacterianos
correspondientes a bacilos Gram negativos,
codificados como 4-ant-04, 4-ant-08, 4-ant10, 6-ant-04, 7-ant-03, 7-ant-04, 7-ant-05, 7ant-08, 7-ant-09, 7-ant-10, con capacidad
antagónica, suministrados por el grupo de
investigación en Microbiología Agrícola del
Instituto de Biotecnología (IBUN), adscrito a
la Universidad Nacional de Colombia, sede
Bogotá. La cepa del fitopatógeno, Phytophthora infestans, fue proporcionada por el
laboratorio de Micología y Fitopatología de la
Universidad de los Andes..
Determinación de las condiciones de crecimiento y cultivo de P. infestans (Mont.)
de Bary, y los aislamientos bacterianos
El crecimiento del patógeno y de los aislamientos bacterianos se evaluó en los medios
de cultivo Papa Dextrosa agar (PDA)
Merck®, agar Sabouraud, Merck® y agar
Centeno (agar 16 g.L-1 + harina de centeno al
2 % (p/v)). Este crecimiento se evaluó a 18 y
30 ºC, bajo condiciones de luz o oscuridad
(Slininger, 2007). Para las pruebas de antagonismo se evaluaron los medios Sabouraud,
Merck® más Centeno y Luria Bertani (LB)
BD®; ambos suplementados con harina de
centeno al 2% (p/v).
Determinación de antagonismo in vitro
Para evaluar la actividad antagónica de los
aislamientos bacterianos se realizaron ensayos de enfrentamiento en cajas de Petri,
utilizando como medio de cultivo agarSabouraud más Centeno al 2 %. A partir de
una una caja cultivada con Phytophthora
infestans en agar Centeno e incubada en
oscuridad a 18 °C durante 20 días, se tomó un
disco de 6 mm y se ubicó en la periferia de
varias cajas de Petri. Después de trece días de
incubación a 18 °C, se inocularon los aislamientos bacterianos, previamente incubados
en agar LB durante 48 horas a 25 °C. La
inoculación de la bacteria se realizó a partir
de una colonia aislada, sembrando mediante
una línea recta en el lado opuesto a la siembra
Evaluación del efecto inhibitorio de los
extractos bacterianos
Basados en los ensayos de antagonismo, se
seleccionaron los aislamientos que presentaron mayor efecto inhibitorio. Las bacterias
seleccionadas se multiplicaron en medio
líquido, inoculando un mL de suspensión en
250 mL de medio Tripticasa de Soya (TSB),
Merck®. Después de inoculación el medio se
fermentó en un agitador orbital a 30 °C, 150
rpm, durante seis días.
Posterior a la incubación, los caldos fermentados se filtraron para extraer su biomasa
y los sobrenadantes se congelaron a -20 °C y
luego se liofilizaron. El sólido obtenido se
extrajo empleando tres porciones de 30 mL
de metanol.
El solvente se eliminó por evaporación
bajo presión reducida, obteniéndose de este
modo el extracto crudo para cada aislamiento.
Los extractos obtenidos se diluyeron en
agua destilada estéril, llevándose a concentraciones de 10, 8, 6, 4, 2 y 0,5 %, y se trataron
con radiación UV durante 30 minutos.
Para evaluar la actividad antimicrobiana,
se realizó una dilución 1:10 de los extractos
(1 mL de extracto en 9 mL de medio) en agar
Sabouraud con centeno a 45 °C, para una
concentración final de 1; 0,8; 0,6; 0,4; 0,2 y
0,05 %. Luego de una rápida agitación en un
Vortex, se sirvieron en cajas de Petri de 5,3
cm de diámetro. Una vez solidificado el agar,
se sembró un disco del fitopatógeno en el
centro de cada caja y se incubaron durante 20
días a 18 ºC en oscuridad. Cada tratamiento
contó con cinco réplicas.
La inhibición de los extractos se calculó
a partir del ABC de la cinética de crecimiento
de P. infestans en presencia del extracto, con
respecto al ABC de un control sin tratamiento. La evaluación de las diferentes concentraciones se llevó a cabo únicamente con los
aislamientos que presentaron la mayor inhibición a una concentración de 1% de extracto.
Evaluación de la concentración de los
extractos bacterianos
En la evaluación antimicrobiana de los ex-
12
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
Todos los experimentos se realizaron bajo un
diseño completamente al azar, se establecieron dos ensayos independientes en el tiempo,
que fueron evaluados mediante un análisis de
varianza (Anova). Para cada ensayo se realizó
un Anova con un nivel de significancia del
0,05 mediante el paquete estadístico SAS®,
complementariamente se realizó una prueba
de comparación de medias de Tukey.
RESULTADOS
Determinación de las condiciones de crecimiento y cultivo de P. infestans (Mont.)
de Bary, y de los aislamientos bacterianos
El medio de cultivo agar centeno, entre los
tres medios evaluados, fue el que permitió el
mejor desarrollo de P. infestans, mientras que
las mejores condiciones de crecimiento se
dieron a 18 ºC en oscuridad. Para los ensayos
de antagonismo, el medio con mejor desempeño fue Sabouraud suplementado con Centeno, ya que favoreció el crecimiento, tanto
de P. infestans como de los aislamientos
bacterianos
Determinación de antagonismo in vitro
Se encontró que cinco de los aislamientos
bacterianos utilizados, 7-ant-04, 4-ant-04, 4ant-08, 4-ant-10 y 7-ant-10, mostraron efecto
antagónico frente P. infestans, con un porcentaje de inhibición superior al 45 % en el
ensayo No 1 y al 49 % en el ensayo No 2,
destacándose los aislamientos 7-ant-04, 4ant-04, 4-ant-08 y 4-ant-10, con inhibiciones
de 49,3; 57,4 y 45,3 % respectivamente (ensayo No 1) , y 65,6; 69,8; 58 y 49 % respectivamente (ensayo No 2).
El aislamiento 4-ant-04 presentó la mejor
actividad durante los dos ensayos (Figura 1).
Adicionalmente, se observo variabilidad en la
actividad en los aislamientos 7-ant-05 y 7ant-10 (Figura 2).
El análisis de varianza mostró diferencias
estadísticas altamente significativas entre los
aislamientos con una p <0,0090 para el ensayo No 1 y p<0,0001 para el ensayo No 2.
Evaluación de los extractos bacterianos
De manera concordante con los ensayos No 1
y No 2, independientes en el tiempo, de los
extractos obtenidos a partir de los cinco
aislamientos con actividad antagónica, los
provenientes de las bacterias 7-ant-04, 4-ant04 y 4-ant-10 presentaron actividad frente a
P. infestans, mientras que los de las bacterias
4-ant-08 y 7-ant-10 no mostraron inhibición.
Adicionalmente, se evidenció efecto significativo de la concentración sobre la actividad
inhibitoria (p <0,0001) (Figura 3).
Se destacan los extractos de los aislamientos 7-ant-04 y 4-ant-04, los cuales mostraron inhibición del 100 % a partir de las
concentraciones de 0,2 y 0,4 %, respectivamente (Figura 3).
a
b
c
Figura 1. Ensayo antagónico. a. Control. b. Aislamiento 4-Ant-04 contra P. infestans, c. Aislamiento 7Ant-04 contra P. infestans. Nótese la diferencia entre las zonas de inhibición del crecimiento por efecto de
los aislamientos antagónicos
DISCUSIÓN
Cinco de los diez aislamientos bacterianos
evaluados tuvieron efecto antagónico sobre P.
infestans. La capacidad de inhibición fue
notoria, ya que los aislamientos presentaron
inhibiciones por encima del 45,3 % y con un
máximo de 69,8 %. Este resultado es muy
promisorio, según el criterio definido por
Benítez et al (2004), quién sugiere una inhibición mínima 40 % para ser considerada
significativa. Los resultados del antagonismo,
obtenidos por enfrentamientos duales, muestra que los aislamientos 7-ant-04 y 4-ant-04
fueron los mejores inhibidores del crecimiento de P. infestans, con valores de inhibición
del 65,6 % y 69,8 %, en el ensayo No 2, y de
57,4 % y 49,3 %, en el ensayo No 1. Las
diferencias en los porcentajes de inhibición
entre los aislamientos bacterianos pueden
estar directamente relacionadas con diferencias taxonómicas y genotípicas entre estos
microorganismos, lo cual se refleja en la
expresión diferencial de su potencial antagónico.
Por otra parte, se encontró que los extractos de los aislamientos bacterianos 7-ant-04 y
4-ant-04 tuvieron alta capacidad de inhibición sobre P. infestans a concentraciones
relativamente bajas (0,2 y 0,4 %, respectivamente); resultados que están en concordancia
con reportes de investigaciones que emplean
extractos de bacterias como Bacillus subtilis
o extractos de plantas como Solidago canadensis, con actividad promisoria sobre P.
infestans (Worasatit et al., 1994).
La actividad mostrada por los extractos,
especialmente los provenientes de los aislamientos 7-ant-04, 4-ant-04 y 4–ant-10, sugiere que el control ejercido sobre el fitopatógeno se debe principalmente a un mecanismo de
antibiosis.
La producción de compuestos con actividad antimicrobiana, por parte del antagonista,
se puede soportar con la presencia de halos de
inhibición, el hecho de que el medio tenga la
cantidad de nutrientes suficientes para descar-
Figura 2. Ensayos de antagonismo (repetidos en el tiempo) de los aislamientos bacterianos sobre Phytophthora infestans. Letras diferentes indican diferencias significativas entre los tratamientos a un nivel
de significancia del 0,05
Figura 3. Porcentaje de inhibición de los extractos de los aislamientos bacterianos sobre Phytophthora
infestans
tar la competencia como un posible modo de
acción y las evidencias que reportan diferentes autores sobre el potencial de las bacterias
como prolíficos productores de compuestos
antimicrobianos (Landa et al, 1997; Mizubuti
et al., 2007).
A pesar de que las pruebas de antagonismo in vitro no representan necesariamente el
grado de expresión de un biocontrolador en
condiciones naturales, sí reflejan la capacidad
y variabilidad genética del antagonista, y la
del fitopatógeno para resistirlo, lo que indica
el potencial que tienen estos aislamientos
para ser evaluados a nivel de campo (De
Costa et al, 2008).
Adicionalmente, se resalta una importante
correlación entre los resultados obtenidos
para los enfrentamientos duales y la inhibición mediante el uso de los extractos, donde
los aislamientos 7-ant-04 y 4-ant-04 fueron
los más destacados por su alta inhibición
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
tanto en los ensayos de antagonismo como en
los ensayos de actividad antimicrobiana.
CONCLUSIONES
La evaluación de la capacidad antagónica de
los aislamientos bacterianos de rizósfera de
papa frente a Phytophthora infestans mediante enfrentamiento directo permitió determinar
que los aislamientos con mayor capacidad
inhibitoria fueron: 7-ant-04, 4-ant-04, 4-ant08, 4-ant-10 y 7-ant-10.
La capacidad de inhibición, medida en
porcentaje, fue notoria, ya que los aislamientos con actividad presentaron inhibiciones por
encima del 45,3% y con un máximo de
69,8%, siendo resultados de inhibición promisorios según el criterio sugerido por Benítez et al. (Benítez et al., 2004).
Se han reportado hallazgos de aislamientos bacterianos para el control del Tizón
13
tardío por parte de autores como Daayf et al.
(2003), quienes, a partir de filósfera y rizoplano de papa, encontraron grupos bacterianos con capacidad inhibidora de P. infestans.
De igual forma, El-Sheikh et al. (2002),
trabajando en papa, evaluaron, in vitro, 83
aislamientos bacterianos, de los cuales catorce tuvieron la capacidad de restringir el crecimiento de P. infestans. Esto permite destacar la importancia de los microorganismos
asociados a los propios cultivos como alternativa potencial para el control del Tizón tardío
(Cao y Forrer, 2001; Tran et al., 2007).
A partir de los ensayos de actividad antimicrobiana de los extractos fue posible determinar que los productos metabólicos de
excreción, o secreción, de las bacterias antagonistas tienen un aporte importante en la
actividad antagónica.
Adicionalmente, los experimentos realizados, permitieron determinar un efecto
diferencial de la actividad antimicrobiana de
los extractos obtenidos de los diferentes
aislamientos, encontrándose que los provenientes de 7-ant-04 y 4-ant-04 tuvieron la
mayor capacidad de inhibición sobre P. infestans, resultados que están en concordancia
con reportes en los que se emplearon extractos de bacterias como Bacillus subtilis, o
extractos de plantas como Solidago canadensis, con promisoria actividad sobre P. infestans (Worasatit et al., 1994). Igualmente, a
partir de los hallazgos de Tan et al. (2007),
donde se evaluaron moléculas de Pseudomonas sp. con resultados sobresalientes en la
inhibición de P. infestans, se destacaron
mecanismo de antibiosis por producción de
metabolitos bacterianos. En nuestro caso, el
mecanismo de antibiosis por parte de las
rizobacterias se hizo evidente debido a la
correspondencia entre los resultados obtenidos en los enfrentamientos duales y la inhibición mediante el uso de los extractos, los
cuales a su vez demostraron un efecto sobre
el fitopatógeno dependiente de la concentración.
La importancia del presente estudio radica en la selección preliminar y tipificación de
aislamientos con uso potencial como bioconroladores, de modo que puedan usarse, ya sea
de manera directa en cultivos con el fin de
enriquecer la microflora edáfica y de la filósfera o a través de la aplicación de un principio activo aislado a partir del microorganismo
antagonista.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Bernal, J., Hernán, C. 2001. La papa como
forraje en la alimentación animal. Federación colombiana de productores de papa.
FEDEPAPA. Bogotá. 76 p.
Benítez, T., Rincón, A.M., Limón, M.C.,
Codón, A.C. 2004. Biocontrol mechanisms of Trichoderma strains. International
Microbiology 7:249–260.
14
Boonekamp, P., Haverkort, A., Hutten, R.,
Jacobsen, E., Lotz, B., Kessel, G., Visser,
R., van der Vossen, E. 2008. Sustainable
resistance against Phytophthora in potato
througth cisgenic marker free modification. Netherlans, Wageningen. 40 p.
Canter, L. 1999. Manual de Evaluación de
Impacto Ambiental. Mc Graw hill segunda edición. 841 p.
Cao, K., Forrer, H. 2001. Current status and
prosperity on biological control of potato
late blight (Phytophthora infestans).
Journal of Agricultural University of Hebei. April 2001.
Cruz, A.M. 2002. El tizón de la papa. Informativo INIA Quilamapu (56), En: Instituto de Investigaciones Agropecuarias,
(INIA), Chile Base de Información Bibliográfica Agrícola Chilena.
Daayf, F., Adam, L., Fernando, W.G.D.
2003. Comparative screening of bacteria
for biological control of potato late blight
(strain US-8), using in vitro, detachedleaves, and whole-plant testing systems.
Can. J. Plant Pathol, 25:276–284.
De Costa, D., Samarasinghe, S. S. T., Dias,
H. R. D., Dissanayake, D. M. N. 2008.
Control of rice sheath blight by phyllosphere epiphytic microbial antagonists.
Phytoparasitica, 36(1):52–65.
El-Sheikh, M., El-Korany, A., Shaat, M.
2002. Screening for bacteria antagonistic
to Phytophthora infestans for organic
farming of potato. Alexandria Journal of
Agricultural Research, 47:169-178.
Ezziyyani, M., Sid, A., Sánchez, C., Requena,
M., Candela, M. 2006. Control biológico
por microorganismos antagonistas. Universidad de fisiología Vegetal, Facultad
de Biología, Universidad de Murcia,
Campus de Espinardo.
Fry, W.E., Goodwin, S.B. 1997. Reemergence of potato and tomato late
blight in the United States. Plant Dis.
81:1349–1357.
Jaramillo, S. 2004. Monografía sobre Phytophthora infestans (Mont.) de Bary.
Universidad Nacional de Colombia, Medellín. 137 p.
Landa, B.B., Hervas, A., Bettiol, W. and
Jiménez-Dias, R.M. 1997. Antagonistic
activity of bacteria from the chickpea rhizosphere against Fusarium oxysporum
f.sp. ciceris. Phytoparasitica, 25:305-318.
Lozoya, H., Coyote, M., Ferrera, R., Lara, E.
2006a. Antagonismo microbiano contra
Phytophthra infestans (Mont) de Bary.
Agrociencia, 40 (4) 491-499.
Lozoya, H., Perales, D., Fernández, S.,
Grundwald, N. 2006b. Characterization
of Phytophthra infestans (Mont) de Bary.
subpopulations obtained from wild
Solamun species. Agrociencia, 40(3):325333.
Maldonado, L., Delgado, M., García, C.
2002. Estudio de la estructura genética de
las poblaciones de Phytophthora infes2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
tans en las regiones productoras de papa
en Colombia. Universidad Nacional de
Colombia. 16 p.
Mizubuti, E., V. Junior, G.A. Forbes. 2007.
Management of late blight with alternative products. Pest technology, 1 (2) 106116.
Rivera, H.F., Martínez, E., Osorio, J.A.,
Martínez, E. 2010. Respuesta de biosurfactantes producidos por Pseudomonas
fluorescens para el control de la gota de la
papa Phytophthora infestans (Mont) de
Bary, bajo condiciones controladas. Corpoica Cienc. Tecnol. Agropecu.11(1):2130
Slininger, J., Schisler, D., Ericsson, A.,
Brandt, L., Frazier, T., Woodell, M.,
Olsen, L., Kleinkopf, K. 2007. Biological
control of post harvest late blight of potatoes. Biocontrol Sci Tech, 17(5/6):647663.
Solange, B., Bentley, J., Bustamante, P.,
Sánchez, L., Corrales, L. 2007. Aislamiento de los microorganismos cultivables de la rizosfera de Ornithogalum umbellatum y evaluación del posible efecto
biocontrolador en dos patógenos del suelo. NOVA - publicación científica en
ciencias biomédicas, 5(8):147-153.
Tran, H., Ficke, A., Asiimwe, T., Höfte, M.,
Raaijmakers, J. 2007. Role of the cyclic
lipopeptide massetolide A in biological
control of Phytophthora infestans and in
colonization of tomato plants by Pseudomonas fluorescens. New Phytologist,
175(4):731-42.
Valdir, L., Maffia, L., Da Silva, R., Mizubuti,
E. 2006. Biocontrol of tomato late blight
with the combination of epiphytic antagonists and rhizobacteria. Biol Control,
38:331–340.
Vega, O. 2004. Microorganismos antagonistas para el control Fitosanitario. Manejo
Integrado de Plagas, 62:96-100.
Worasatit, N., Sivasithamparam, K., Ghisalberti, E., Rowland, L. 1994. Variation in
pyrone production, lytic enzymes and
control of Rhizoctonia root rot of wheat
among single-spore isolates of Trichoderma koningii. Mycol Res, 98, 12, 13571363.
Zoteyeba, M., Patrikeeva, M.V. 2010. Phenotypic characteristics of North-West Russian populations of Phytophthora infestans. PPO-Special Report N° 14, 213 –
216.
EVALUACIÓN DE LA RESPUESTA FITOALEXÍNICA EN PAPA (Solanum tuberosum) Y
DETERMINACIÓN PRELIMINAR DE “PRIMING” EN TOMATE (Solanum lycopersicum)*
David Granada1, Jennifer Salguero1, Walter Murillo3, Carlos Peláez2 y Antoni Rueda1
1
Unidad de Fitosanidad y Control biológico, Corporación para Investigaciones Biológicas. Medellín, Antioquia, Colombia;
2
Grupo GIEM Universidad de Antioquia; 3Grupo GIPRONUT Universidad del Tolima
Autor para correspondencia: Ever Antoni Rueda Lorza, correo electrónico: [email protected]
*Artículo científico, recibido para publicación el 21/04/2011; aceptado el 18/05/2011
RESUMEN
SUMMARY
La producción de fitoalexinas de tipo sesquiterpénicas en la familia
Solanácea ocupa un lugar muy importante en los mecanismos de
defensa al interior de este grupo taxonómico. En esta investigación se
evaluó la inducción de la respuesta fitoalexínica en dos Solanáceas de
importancia económica en Colombia, como fundamento para comprender aspectos fisiológicos y bioquímicos de las respuestas de defensa. Se realizó la inducción abiótica en papa, variedad Diacol, y una
aproximación a la inducción del estado fisiológico de “priming” en
tomate con radiación ultravioleta frente a la infección con Fusarium
oxysporum. La inducción de papa con CuCl2 mostró un aumento en la
biosíntesis de metabolitos de estrés con actividad antifúngica de manera diferencial al control no inducido, el cual no presentó dicha
actividad. El análisis conjunto de los resultados cromatográficos,
espectroscópicos y de los bioensayos muestran que la inoculación de
tomate con F. oxysporum evidencia la activación de la respuesta fitoalexínica y la inducción previa con radiación UV sugiere la activación
de un mecanismo de “priming”.
Evaluation of phytoalexin response in potato (Solanum tuberosum)
and preliminary determination of priming in tomato (Solanum
lycopersicum)
Palabras clave: fitoalexinas, inducción abiótica y abiótica, Fusarium
oxysporum.
The production of like-sesquiterpene phytoalexins in the family Solanaceae has an important place in the defense mechanisms inside this
taxonomic group. The induction of phytoalexin response in two economically important Solanaceae in Colombia was evaluated, as a basis
for understanding physiological and biochemical defense responses.
The abiotic induction in potato variety Diacol and an approach to the
induction of physiological state called priming with ultraviolet radiation in tomato against Fusarium oxysporum infection was carried out.
The CuCl2 induction of potato showed an increase in the biosynthesis
of stress metabolites with antifungal activity compared with untreated
control, which did not show such activity. The joint analysis of the
chromatographic results, spectroscopic and bioassays showed that
inoculation of tomato with F. oxysporum induced the phytoalexin
response activation. A mechanism of priming activation after induction with UV radiation is suggested.
Keywords: Potato, tomato, phytoalexins, biotic and abiotic induction,
Fusarium oxysporum
INTRODUCCIÓN
La familia Solanácea reúne especies de
importancia económica en el mundo y en
Colombia en donde se destacan los cultivos
de tomate de árbol, papa, tomate de mesa y
tabaco (Hawkes, 1999). El potencial productivo de estas especies se ve afectado por el
ataque de fitopatógenos que influyen negativamente sobre su producción (Anderson et
al, 2004). Un enfoque de la investigación
dirigido hacia la búsqueda de alternativas
para el control de las enfermedades tiene que
ver con el potencial genético y bioquímico
para activar respuestas de defensa frente a
estreses bióticos y abióticos. Dentro de
dichas respuestas, la producción de fitoalexinas ha sido uno de los mecanismos que
más ha llamado la atención de investigadores, debido a las actividades antimicrobianas
directas sobre los fitopatógenos (Grayer
2001; Jeandet et al, 2003).
Las fitoalexinas se consideran fundamentalmente como un tipo especial de metabolitos de estrés, cuya síntesis de novo es
inducida por factores químicos, físicos,
microbiológicos (Walters et al, 2007) y que
desempeñan un papel importante y activo en
la resistencia de las plantas a los patógenos
(Woodward y Pegg, 1986)..
La familia Solanácea ocupa históricamente un lugar importante en la investigación relacionada con las fitoalexinas si se
considera que el primer reporte de la presencia de estos compuestos se realizó precisamente en papa (Poiatti et al, 2009). La evaluación sobre varias especies de la familia
Solanácea identificó fitoalexinas sesquiterpénicas (Kawauchi et al, 2010; Harborne,
1999), destacándose, la rishitina que fue
aislada de Lycopersicon esculentum después
de inocularse frutos de tomate con Phytophthora infestans (Elgersma, 1980).
Un enfoque que han tenido los trabajos
con fitoalexinas es la posibilidad de asperjar
los cultivos con elicitores para inducir respuestas preventivas de defensa a varias
enfermedades en los cultivos (Hammerschmidt, 1999. Sin embargo, se ha mencionado
que esta aproximación tiene como inconveniente el hecho de que la aplicación repetida
de elicitores podría causar un gasto marcado
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
de energía y fuente de carbono de los procesos vitales, ya que se conoce que las plantas
cuando desarrollan reacciones de defensa
disminuyen su metabolismo productivo y se
centran en la defensa (Álvarez y Espinosa,
2004). Por lo tanto el rendimiento de plantas
elicitadas, sin saber cuándo se va a producir
un ataque de un patógeno, redundaría en un
gasto innecesario de energía (Grayer y Kokubun, 2001).
No obstante, investigaciones recientes
en resistencia inducida plantean un nuevo
enfoque en el tema de inductores que permitiría atacar la dificultad mencionada. Al
respecto, se afirma que ciertos inductores
causan la producción de un estado fisiológico llamado “priming” en el cual las plantas
inducidas “se preparan” para un posterior
ataque por patógenos, insectos o en respuesta a estreses abióticos, sin todavía desencadenar las respuestas de defensa celular y
mostrando dicha activación de manera más
fuerte y rápida que las no inducidas, solo
hasta la llegada del estrés. Aunque el fenómeno ha sido conocido por décadas, los
mayores progresos en el entendimiento de
15
“priming” solo se han logrado en los últimos años (Conrath et al, 2006).
En el presente trabajo se determinó el
efecto de la inducción abiótica en papa sobre
la respuesta fitoalexínica y la inducción de
“priming” en tomate, asistida por radiación
ultravioleta. La actividad de los extractos y
sus fracciones se evaluó sobre F. oxysporum.
Además, se empleó cromatografía líquida de
alta eficiencia (HPLC) y resonancia magnética nuclear de protón (RMN1H) para realizar inferencias sobre la biosíntesis de fitoalexinas.
MATERIALES Y MÉTODOS
Reactivos, microorganismos y material
vegetal
Se utilizaron tubérculos de papa (Solanum
tuberosum) variedad Capira, de tipo comercial. Para los ensayos de actividad, se empleó el hongo fitopatógeno Fusarium oxysporum ATCC 15648 cultivado en agar extracto de malta (Sigma®) a 25 °C. y como
reactivos cloruro de cobre pentahidratado
(CuCl2.5H2O), metanol y diclorometano
(Sigma®)
Evaluación de la respuesta fitoalexínica en
papa
Inducción: Se tomaron 15 kg de tubérculos
de papa, los cuales se cortaron en rodajas
entre 0,6 y 1 cm de espesor y se dispusieron
en canastas plásticas, en porciones de dos
kilogramos aproximadamente. Se asperjaron
con una solución de cloruro de cobre 10 mM
cada 24 h y se mantuvieron a temperatura
ambiente durante 48 h. Posteriormente, las
rodajas se secaron en estufa a 45 ºC por 48 h
y luego se procesaron en un molino de discos.
Extracción de metabolitos secundarios: A
500 g del material seco y molido proveniente
del ensayo de inducción se le agregó 1 L de
metanol y se dejo en agitación por 24 h.
Luego se filtro en algodón y el residuo sólido se sometió nuevamente al mismo proceso
de extracción dos veces más. La solución
metanólica obtenida se filtró nuevamente
con papel y se sometió a evaporación con
vació hasta eliminar por completo el solvente. El extracto resultante se lavó tres veces
con porciones de 30 mL de diclorometano.
Se filtró el material insoluble en el solvente
y se sometió a evaporación con vacío hasta
que quedo completamente seco.
Evaluación in vitro de la actividad antifúngica de los extractos: La actividad
antifúngica se evaluó mediante el método de
difusión en agar en cajas de Petri de 5,3 cm
de diámetro, a diferentes concentraciones.
Para ello se prepararon emulsiones al 7,2 %
con los extractos crudos de los tubérculos
16
inducidos y no inducidos y a partir de ellas
se realizaron diluciones a 0,9, 0,6 y 0,3 % en
agar. Como inóculo, se tomaron trozos de
cinco mm de diámetro F. oxysporum crecido
en PDA y se determinó la actividad antifúngica mediante la medición cinética del
crecimiento del fitopatógeno a 25 ºC cada 24
horas, durante 10 días, con respecto al control no tratado.
Caracterización química de los metabolitos activos: A los extractos crudos, tanto
inducido como no inducido, se les realizó
una caracterización preliminar cualitativa
para terpenoides mediante la reacción de 0,5
mL de solución diclorometaólica de extracto
con 0,5 mL de anhídrido acético y una gota
de H2SO4.
Fraccionamiento del extracto inducido
crudo: Se aplicó cromatografía de columna
empleando sílica 60 (Merck®) como fase
estacionaria (5x50cm) y sistemas de solventes compuestos por hexano: acetato de etilo
(4:1, 3:1, 2:1, 1:1), acetato de etilo:diclorometano (1:1, 2:1) y metanol
(100%) (Merck®).
Aislamiento de la rishitina: La fracción
más activa obtenida a partir del extracto de
material inducido (fracción 2) fue sometida a
un posterior fraccionamiento mediante cromatografía de columna hasta obtener un
compuesto puro con el Rf reportado para la
rishitina (D'harlingue et al, 1995). La purificación final se realizó por cromatografía en
capa delgada en un sistema de solventes
ciclohexano: acetato de etilo 1:1. Se visualizó la placa a 254 nm y aplicó revelado en
los bordes con vainillina. Al compuesto
aislado se le realizaron análisis preliminares
por resonancia magnética nuclear de protón
(RMN1H).
Resonancia magnética nuclear de protón
(RMN1H): Se tomó una cantidad inferior a
tres mg del compuesto puro y se disolvió en
cloroformo deuterado. Los espectros de
RMN1H registraron a 300 MHz (frecuencia
de 1H), en un espectrómetro Bruker, a 25 ºC.
Los desplazamientos químicos (δ) se expresados en ppm.
Inducción de “priming” en tomate asistido con radiación ultravioleta
Se tomaron dos kg de tomate y de manera
aleatoria se dividieron en dos grupos. A uno
de ellos se le aplicó luz UV-C por 10 min en
una cámara de flujo laminar. Tanto el material inducido por UV como el no inducido
fueron almacenados en recipientes diferentes
a temperatura ambiente y en oscuridad por
48 h.
Inducción biótica con Fusarium oxysporum: Trascurridas 48 h, tanto el material
inducido por UV como el no inducido se
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
sometieron a desinfestación de su superficie
con etanol al 96 %. Una vez desinfestado se
tomó el material inducido por UV, se dividió
en dos subgrupos al azar y a uno de ellos se
inoculó con F. oxysporum mediante 20
punciones empleando una asa estéril y posterior aspersión con una suspensión de conidias a una concentración de 1x105 conidias/mL. Se aplicó el mismo procedimiento
al material no inducido por UV obteniéndose
cuatro tratamientos denominados: SUSI =
“sin UV, sin inóculo”; SUCI = “sin UV, con
inóculo”; CUSI = “con UV, sin inóculo”;
CUCI = “con UV, con inóculo”. Finalmente
los materiales obtenidos se almacenaron en
diferentes recipientes en oscuridad por 72 h
a 25 °C.
Obtención de extractos y ensayos de actividad antifúngica: Transcurrido el tiempo
total de inducción, a cada tratamiento, por
separado, se les extrajo el endocarpio, se
agregó nitrógeno líquido y se llevaron a -20
°C. El material se sometió a liofilización y
posterior extracción con metanol (2 x 150
mL). El solvente se evaporó por vacío para
obtener finalmente los extractos crudos
SUSI, SUCI, CUSI y CUCI. La actividad de
estos extractos se evaluó por mediciones de
densidad óptica, empleando un lector de
microplacas a 595 nm, donde el aumento en
la densidad óptica es proporcional al crecimiento del microorganismo.
Perfiles cromatográficos: Para la obtención
de los perfiles se empleó cromatografía
líquida de alta eficiencia (HPLC) usando un
equipo Agilent serie 1200 con detección
UV-DAD (ultravioleta con arreglo de diodos). Las muestras se llevaron a una concentración de 1000 ppm en metanol:agua (metanol grado HPLC, Merck®; agua MiliQ) en
proporción 20:80 y se pasaron por un filtro
de 0,45 µm. Se empleó una columna C18
(150 x 2 mm, 5 µm), un flujo de 0,5 mL/min
y un volumen de inyección de 20 µL.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Evaluación de la respuesta fitoalexínica en
papa
El extracto obtenido a partir de los tubérculos de papa inducidos con CuCl2 presentó
diferencias en la actividad sobre F. oxysporum con respecto al extracto de los no tratados los cuales carecieron de actividad. El
análisis de varianza de los ensayos dosisrespuesta mostró diferencias con respecto a
los controles, observándose que el efecto
sobre el hongo se incrementó a medida que
se aumentó la concentración del extracto
(Figura 1). Se observaron diferencias estadísticamente significativas de la tasa de
crecimiento en función de la concentración
para las fracciones dos y tres del material
inducido con cobre, con una mayor actividad
por parte de la fracción dos.
Caracterización química
Los análisis mostraron un perfil químico
diferencial entre los extractos obtenidos del
material inducido y no inducido. Las pruebas
fitoquímicas cualitativas sobre las fracciones
que mostraron actividad biológica fueron
positivas para alcaloides y terpenoides (datos
no mostrados). Igualmente la cromatografía
en capa delgada presentó un compuesto con
Rf de 0,2 (banda de coloración rojiza al
revelar con vainillina) acorde con el reportado para el revelado de fitoalexinas sesquiterpénicas (D'harlingue et al, 1995)..
Adicionalmente, el espectro de RMN1H
de un compuesto purificado a partir de la
fracción dos del extracto de material inducido mostró un patrón de señales compatible
con el núcleo de una fitoalexina tipo sesquiterpénica (Stoessl et al, 1978).
Aunque, en el espectro no se aprecia adecuadamente la multiplicidad de las señales debido a la poca cantidad de muestra purificada,
se pueden observar las carácterticas espectrales del núcleo de la rishitina como son los
protones alílicos entre 1-2 ppmm, protones
vecinales a carbonos oxigenados (señal alrededor de 3,5 ppm) y protones metilénicos
entre 4-5.5 ppm (Figura 2) (Oliveira et al,
2000).
Figura 1. Efecto de la concentración de las fracciones de los extractos de papa inducida y no inducida,
sobre el crecimiento de Fusarium oxysporum. No elicitada (▲), elicitada extracto crudo (●), fracción
1(□), fracción 2 (♦), fracción 3 (■).
A
HO
Inducción de “priming” en tomate
HO
El ensayo de inducción de “priming” en
frutos de tomate, asistido con radiación
ultravioleta en respuesta a la inoculación con
F. oxysporum, mostró que hubo biosíntesis
de metabolitos secundarios por efecto de la
inducción con F. oxysporum y la inducción
con luz ultravioleta (Charles et al, 2008;
Brindle et al, 1983).
Los bioensayos de actividad antifúngica,
expresados como porcentajes de inhibición y
la tasa de crecimiento, demuestran la activación de la respuesta fitoalexínica en los
frutos de tomate (Figura 3).
Los cromatogramas obtenidos de las
fracciones de los frutos tratados y no tratados confirman la biosíntesis de metabolitos,
previamente evaluados por su actividad
antifúngica (Figura 4).
Para los extractos inoculados con el
hongo no hay diferencia entre el inducido
con UV y el no inducido en términos de la
actividad biológica. Sin embargo, esta sí se
manifiesta en la actividad de los extractos no
inoculados (Figura 3). Además, los perfiles
cromatográficos exhiben diferencias entre
los inoculados y los no inoculados, observándose la desaparición de picos en el
material control, sin ningún tipo de inducción (Figura 4. SUSI), y los materiales inducidos, principalmente los que se inocularon
con F. oxysporum, los cuales se destacan por
mostrar un pico con tiempo de retención de
Figura 2. Espectro de RMN1H de un compuesto obtenido a partir de la fracción 2 de las muestras de
papa inducidas con cobre. (A) Estructura de la fitolalexina rishitina
1,2 min, cuyo espectro UV coincide con el
reportado para la rishitina (205 nm) (Mureau
et al, 1992)
Respecto a la inducción de “priming”,
los cromatogramas confirman la biosíntesis
de fitoalexinas, no solamente por efecto de la
indución con el hongo, sino también por la
inducción previa con radiación ultravioleta.
Esto se evidencia en la similitud que presenta este perfil con los perfiles de los extractos
más activos, aunque mostrando claramente
una menor concentración con respecto a
estos
Aunque, el bioensayo no muestra claramente el efecto de la inducción de “priming”
con la luz UV, el perfil cromatográfico si
demuestra el efecto sobre la biosíntesis de
fitoalexinas. Lo anterior se debe probable2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
mente a que a determinada concentración de
la fitoalexina ya no se detecte un efecto en la
respuesta antifúngica debida a la concentración.
CONCLUSIONES
Los ensayos con los extractos de tubérculos
de papa inducidos y no inducidos con CuCl2
10 mM muestran una actividad antifúngica
por parte de los extractos de los tubérculos
inducidos, y que no es observada en los
extractos de los tubérculos sin inducir, sugiriendo que la inducción es capaz de generar
una respuesta en los tejidos de papa, que se
manifiesta en un aumento de la biosíntesis
de metabolitos con actividad antifúngica.
17
% Inhibición
Tasa de crecimiento (UA/h)
Figura 3. Actividad antifúngica de extractos provenientes de de frutos de tomate tratados con radiación ultravioleta (CUSI), inoculación con F. oxysporum (SUCI), radiación ultravioleta + inoculación
con F. oxysporum (CUCI) y testigo no tratado (SUSI). Las barras representan el porcentaje de inhibición mientras que los cuadros vacíos representan la tasa de crecimiento del hongo.
SUSI
SUCI
CUSI
CUCI
Figura 4. Perfiles cromatográficos de extractos provenientes de frutos de tomate tratados con radiación
ultravioleta (CUSI), inoculación con F. oxysporum (SUCI), radiación ultravioleta + inoculación con F.
oxysporum (CUCI) y testigo no tratado (SUSI)
Durante la caracterización fitoquímica
cualitativa preliminar de los extractos activos se resalta, la prueba positiva para terpenoides, lo cual es de importancia si se considera que las fitoalexinas de la familia solanácea poseen un núcleo sesquiterpénico.
Las observaciones realizadas a través de
cromatografía en capa delgada y el espectro
de resonancia magnética nuclear de protón
de un compuesto purificado sugieren que se
trata de un compuesto compatible con un
núcleo sesquiterpénico.
Los perfiles químicos diferenciales entre
extractos inducidos y no inducidos, las características estructurales del compuesto
purificado del extracto activo y el evidente
18
efecto dosis respuesta de los extractos inducidos en función de la actividad antifúngica
demuestran la activación de la respuesta
fitoalexínica en los tubérculos de papa.
Los ensayos de inducción biótica en tomate con F. oxysporum, asistida por radiación ultravioleta, sugieren que se pueden
activar mecanismos de “priming” en la
planta, los cuales pueden potenciar la aparición de metabolitos con actividad antifúngica como un mecanismo de defensa frente al
ataque de patógenos.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
Anderson, P. K., Cunningham, A. A., Patel,
N. G., Morales, F. J., Epstein, P. R., y
Daszak, P. 2004. Emerging infectious
diseases of plants: pathogen pollution,
climate change and agrotechnology drivers. Trends Ecol Evol, 19, 535-544.
Álvarez, M y Espinosa, F. 2004. Jasmonatos
y salicilatos: Fitohormonas clave en las
reacciones de defensa de las plantas y de
comunicación en el ecosistema. En: La
ecofisiología vegetal: una ciencias de
síntesis. 1ª edición; Thomson editores.
España.
Brindle, P. A., Kuhn, P. J., y Threlfall, D. R.
1983. Accumulation of phytoalexins in
potato-cell suspension cultures. Phytochemistry, 22, 2719-2721.
Charles, M. T., Mercier, J., Makhlouf, J., y
Arul, J. 2008. Physiological basis of UVC-induced resistance to Botrytis cinerea
in tomato fruit. Postharvest Biol Tec.
47(1), 10-20.
Conrath, U., Beckers., J.MG, Flors, V.,
García, P., Jakab, G., Mauch, F., Newman, M., Corné, M., Pieterse, J,, Poinssot, B,, Pozo, M., Pugin, A., Schaffrath,
U., Ton, J., Wendehenne, Zimmerli, L y
Mauch-Mani, B. 2006. Priming: Getting
Ready for Battle. Mol Plant Microbe In,
19, No. 10, pp. 1062–1071.
D'harlingue, A., Mamdouh, A., Malfatti, P.,
Soulie, M. C., Y Bompeix, G. 1995.
Evidence for rishitin biosynthesis in tomato cultures. Phytochem. 39(1), 69-70.
Elgersma, D. M. 1980. Accumulation of
rishitin in susceptible and resistant tomato Plants after inoculation with Verticillium alboratrum. Physiol Plant Pathol.16, 149-153.
Grayer, R. J. y Kokubun, T. 2001. Plantfungal interactions: the search for phytoalexins and other antifungal compounds from higher plants. Phytochemistry, 56, 253-263.
Hammerschmidt, R. 1999. Phytoalexins:
What have we learned after 60 years?.
Annu Rev Phytopathol. 37, 285-306.
Harborne, J. 1999. The comparative biochemistry of phytoalexin induction in
plants. Biochem Syst Ecol. 27, 335-367.
Hawkes, J. G. 1999. The economic importance of the family Solanaceae. Solanaceae IV. Advances in botany and utilization. Kew: Roy Bot Gardens, Kew, 0108.
Jeandet, P., Douillet-Breuil, A. C., Bessis,
R., Debord, S., Sbaghi, M., y Adrian, M.
2002. Phytoalexins from the Vitaceae:
biosynthesis, phytoalexin gene expression in transgenic plants, antifungal activity, and metabolism. J. agrc food
chem. 50, 2731-2741.
Kawauchi, M., Arima, T., Shirota, O., Sekita, S., Nakane, T y Takase, Y. 2010.
Production of sesquiterpene-type phytoalexins by hairy roots of Hyoscyamus albus Co-treated with cupper sulfate and
methyl jasmonate. Chem Pharm B, 58,
934-938.
Moreau, R. A., Preisig, C. L. y Osman, S. F.
1992. A rapid quantitative method for
the analysis of sesquiterpene phytoalexins by high performance liquid chromatography. Phytochem Anal. John Wiley
& Sons, Ltd. 1099-1565.
Oliveira, F. C., Ferreira, M.J.P., Núñez,
C.V., Rodriguez, G.V., Emerenciano,
V.P. 2000. 13C NMR spectroscopy of
eudesmane sesquiterpenes. Prog Nucl
Mag Res Sp. 37(1–2), 1-45.
Poiatti, V. A. D., Dalmas, F. R y Astarita, L.
V. 2009. Defense mechanisms of Solanum tuberosum L. in response to attack
by plant-pathogenic bacteria. Biol Res,
42, 205-215.
Stoessl, A., Stothers, J.B. y Ward, E.W. B.
1978. Biosynthetic studies of stress metabolites from potatoes: incorporation of
sodium acetate-13C2 into 10 sesquiterpenes. Can J Chem. 56, 645-653.
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
Walters, D., Newton, A y Lyon, G. 2007.
Induced resistance for plant defence. Wiley Online Library.
Woodward, S y Pegg, G. F. 1986. Rishitin
accumulation elicited in resistant and
susceptible isolines of tomato by mycelial extracts and filtrates from cultures of
Verticillium alboratrum. Dep. Hortic.,
Univ. Reading, Reading/Berkshire, UK.
Physiol Mol Plant Pathol. 29, (3) 337-4
19
Diagnóstico Fitosanitario
Contacto
La Clínica de Plantas UN es un laboratorio de la Facultad de
c l i p l a n t a s J a b o g @ u n a l edu.co
Agronomía de la Universidad Nacional, Sede Bogotá, dirigido a
Tel: 316 5000 ext. 19085
la prestación de servicios de diagnóstico vegetal
Servicios
La Clínica de Plantas se
bacterias (2 cajas o tubos por
Indexación de esquejes de
Análisis microbiológico de
realizan actividades de
espécimen).
clavel (5 esquejes).
semillas con identificación
través de la prestación de
Diagnóstico de una alteración
servicios de:
de origen presumiblemente
biótico o abiótico.
Montajes permanentes
de hongos, bacterias y
nemátodos (2 láminas).
de hongos, bacterias y
Determinación de unidades
Detección molecular de virus
fitopatógenos.
investigación y extensión a
(género) de hongos y
bacterias.
Cuantificación de poblaciones
hematodos en suelos (sin
formadoras de colonias
especificar género, ni
(ufe) de hongos y bacterias
Cortes histológicos de
patogenicidad).
sin identificación (suelo y
vegetales.
Cultivos puros de hongos y
sustratos).
¿Cómo solicitar ei servicio?
Las muestras se reciben en el laboratorio 321 de la Facultad de Agronomía (Edificio 500), Universidad Nacional de Colombia,
Ciudad Universitaria (Carrera 30 No. 45-03), sede Bogotá, de lunes a viernes de 9 am - 12 am y 2 pm - 4pm, acompoñadas del
Formato de Recepción de Muestras, correctamente diligenciado, el cual se encuentra en la página web de la Clínica de Plantas
www.clinicadeplantasun.unal.edu.co
MANEJO INTEGRADO DE LA BACTERIOSIS CAUSADA POR Xanthomonas axonopodis
Starr & Garcés EN EL CULTIVO DE GULUPA (Passiflora edulis Sims.)
Eugenio Guerrero-López1, Luz Mery Velandia2 y Lilliana Hoyos-Carvajal1
1
Departamento de Agronomía, Facultad de Agronomía, Universidad Nacional de Colombia, Bogotá (Colombia). 2Facultad de Ciencias Agropecuarias, Universidad de Cundinamarca, Fusagasugá (Colombia).
Correo electrónico de contacto: [email protected]
Artículo Científico, recibido para publicación el 9/05/2011; aceptado el 13/06/2011
RESUMEN
SUMMARY
Se evaluó la eficacia de los inductores de resistencia Acibenzolar-smetil(0,05 g L-1) y Ácido salicílico (0,025 g L-1), al igual que Sulfato
de cobre (0,75 g L-1) y la práctica de deshoje manual para el control de
la Bacteriosis en el cultivo de gulupa en dos localidades del departamento de Cundinamarca (Colombia). Los productos fueron asperjados
solos y dentro de un plan de rotación en forma periódica sobre el
follaje de plantas. Estas medidas de saneamiento fueron comparadas
con Oxicloruro de cobre (2,5 g L-1) usado convencionalmente por los
productores de la región y un testigo absoluto. En cada tratamiento se
evaluó la incidencia de la enfermedad, la longitud de ramas centrales,
el número de hojas, botones florales y frutos. Como parámetros poscosecha se midió el diámetro ecuatorial y polar, peso fresco y seco y los
sólidos solubles en frutos maduros. Se observó que los inductores de
resistencia en las dosis evaluadas impiden el desarrollo de síntomas de
bacteriosis y disminuyen síntomas causados por virus y roña. El número de estructuras vegetativas y reproductivas es afectado negativamente por la aplicación de los inductores como consecuencia de un desgaste energético producido en la planta. El deshoje por sí solo no es efectivo para el control de la enfermedad y tampoco el sulfato de cobre,
que por el contrario mostró fitotoxicidad en la dosis aplicada.
Integrated management of bacterial spot caused by Xanthomonas
axonopodis Starr & Garces in purple passion fruit (Passiflora
edulis Sims.)
Palabras clave: resistencia sistémica adquirida, rotación, prácticas
culturales, desgaste energético.
There was evaluated the efficacy of the resistance inductors Acibenzolar-s-metil (0,05 g L-1) and Acid salicilic (0,025 g L-1), as Sulphate of
copper (0,75 g L-1) and the practice of manual falling of leaves for the
control of the bacterial spot in the crop of purple passion fruit in two
localities of the department of Cundinamarca (Colombia). The products were sprayed alone and inside a plan of rotation in periodic form
on the foliage of plants. These measurements of sanitation were compared with Copper oxychloride (2,5 g L-1) used conventional by the
producers of the region and the untreated control plants. In every
treatment there was evaluated the incidence of the disease, the length
of central branches, the number of leaves, floral buttons and fruits. As
parameters postharvest there measured itself the equatorial and polar
diameter, fresh and dry weight and the soluble solids was valued for
mature fruits. It was observed that the resistance inductors in the evaluated dosages prevent the development of symptoms of like bacterial
spot and diminish symptoms caused by virus and scab. The number of
vegetative and reproductive structures is affected negatively by the
application of the inductors as consequence of an energy expense
produced in the plant. The falling of leaves for yes is not only effective
for the control of the disease or the sulphate of copper, which on the
contrary showed phytotoxicity in the applied dosage.
Keywords: systemic acquired resistance, rotation, cultural practices,
energy expense
INTRODUCCIÓN
El cultivo de la gulupa (Passiflora edulisSims.) se ha convertido en una opción agrícola atractiva para pequeños, medianos y grandes productores, debido a su alta productividad, su gran potencial de uso y su buena
rentabilidad (Isaacs, 2009). En los últimos
años se han incrementado los volúmenes
exportados, así como el área cultivada en
Colombia; llegándose a exportar 1860,89
toneladas de gulupa en fresco en el año 2010,
por un valor de 7,54 millones de dólares,
principalmente hacia los países de la Comunidad Europea (MADR, 2010). Una de las
principales limitantes en la producción y
comercialización de este cultivo y otras pasifloras es su susceptibilidad al ataque de diversas enfermedades, como es el caso de la
Bacteriosis o Mancha de aceite, causada por
la bacteria Xanthomonas axonopodis Starr &
Garcés Este patógeno ataca la parte aérea de
la planta afectando hojas, tallos y frutos, en
forma sistémica (Benítez, 2010). Actualmente
el manejo de la enfermedad es limitado
debido a que este se basa principalmente en la
utilización de antibióticos, los cuales no han
sido eficaces para el control de la bacteria
(Farfán y Hoyos-Carvajal, 2010).
Lo anterior ha conducido a que se propongan diversas medidas de control de la
Bacteriosis, bajo el esquema del manejo
integrado, utilizando todas las herramientas
de manejo disponibles, las cuales son de
carácter preventivo y ninguna de ellas por si
sola es efectiva para controlar la enfermedad
(Miranda, 2004 citado por Brancaglione et
al., 2009). Dentro de éstas, está la resistencia
inducida en plantas con el uso de agentes
químicos (Riveros, 2010); en razón de que las
plantas disponen de una gran cantidad de
señales, que les permiten reconocer agentes
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
extraños y activar todos sus mecanismos de
defensa, que incluye reacciones químicas y/o
bioquímicas, para alertar a las células, y
activar la producción de sustancias tóxicas,
enzimas u otros compuestos, que inhiban la
penetración y posterior colonización de la
planta por parte del patógeno (Dangl y Jones,
2001 citado por Riveros, 2010). En teoría, las
plantas poseen en forma constitutiva, todos
los genes necesarios para responder a la
agresión y están de manera permanente en la
planta, pero en ciertos casos conviene inducirla o activarla a través del uso de la resistencia sistémica inducida (RSI) y la resistencia sistémica adquirida (RSA) (Riveros,
2010). Mientras la RSI consiste en un proceso de protección activa (sistémica) de una
planta, donde actúan como inductores las
rizobacterias promotoras de crecimiento; la
RSA se presenta por la mediación activa de
un inductor (aplicación exógena) que hace
21
que se desencadenen uno o varios mecanismos de defensa contra ese patógeno en particular o inespecífico contra otros potenciales
agresores, produciendo una señal sistémica,
protegiendo diferentes órganos de la misma
planta, en un amplio espectro y duración.
Entre los inductores de RSA se encuentra el
ácido salicílico (AS) sus derivados y sus
análogos funcionales, el ácido nicotínico y el
acibenzolar-S-metil(ASM), el cual fue el
primer químico sintético desarrollado que
funciona estrictamente como activador de
RSA (Ruess et al.,1996, citado por Riveros
et al., 2004). Se considera que el ácido
jasmónico (AJ) y el etileno (E) potencian la
señalización para la RSA por vías diferentes a
la dependiente del AS (Riveros, 2010; Pieterse y Loon, 1999).
En varios trabajos se han demostrado las
bondades del uso del AS y el ASM para el
control de hongos, bacterias, virus y algunas
plagas en cultivos de tomate chonto (Lycopersicun esculentum), pepino (Cucumis sativus), tabaco (Nicotiana tabacum), fríjol caupí
(Vigna unguiculata), girasol (Helianthus
annuus), soya (Glycine max), canola (Brassica napus), cúrcuma (Curcuma longa), melón
(Cucumis melo), pera (Pyrus communis),
tomate de árbol (Solanum betacea) y plantas
ornamentales como el ciclamen (Cyclamen
persicum) (Cole, 1999; Pappu et al., 2000;
Latunde-Dada y Lucas, 2001; Amborabé et
al., 2002; Prats et al., 2002; Pérez et al.,
2003; Smith-Becker et al., 2003; Soylu et al.,
2003; Sparla et al., 2004; Gurgel et al., 2005;
Pradhanang et al., 2005; Elmer, 2006; Malolepsza, 2006; Hacisalihoglu et al., 2007;AboElyousr y El-Hendawy, 2008; Roberts et al.,
2008; Wu et al., 2008; Debona et al., 2009;
LaMondia, 2009;Mandal et al., 2009; Mejía
et al., 2009;Moraes et al., 2009; Véronési et
al., 2009; Radhakrishnan et al., 2010).
El objetivo de este trabajo fue evaluar el
grado de control que ejerce la aplicación de
los inductores de RSA, AS, ASM, productos
cúpricos (Sulfato y Oxicloruro de Cobre) y la
práctica del deshoje sobre la incidencia de la
Bacteriosis en el cultivo de gulupa, para
poder incluirlos como una alternativa o
herramienta de manejo adicional de esta
enfermedad.
MATERIALES Y MÉTODOS
Localización
El ensayo se realizó en dos localidades de la
región del Sumapaz, en el departamento de
Cundinamarca (Colombia), en cuatro parcelas
experimentales: dos en la vereda de San
Francisco en el municipio de Tibacuy, (altura: 1800 msnm, temperatura promedio: 18ºC,
humedad relativa promedio: 85%, precipitación: 1300 mm/año) y dos parcelas en la
vereda de Aposentos en el municipio de
Venecia (altura: 1900 msnm, temperatura
22
promedio: 17,7ºC, humedad relativa: 77%,
precipitación:1700 mm/año);en cultivos
comerciales de gulupa entre los 12 y 24
meses de edad, dentro de estos se seleccionó
una parcela de780 m2. En cada una de las
parcelas experimentales, se aplicaron nueve
tratamientos.
Tratamientos
T1: cuatro aplicaciones de Sulfato de cobre
(SC) en dosis de 0,75 g L-1cada ocho días
T2: cuatro aplicaciones de Acibenzolar-SMetil (ASM) en dosis de 0,05g L-1 cada 20
días.
T3: cuatro aplicaciones de Acido salicílico
(AS) en dosis de 0,025g L-1 cada 20 días.
T4: dos ciclos de rotación de Sulfato de
cobre, Acibenzolar-S-Metil y Ácido salicílico
(SC/ASM/AS)en las mismas dosis y frecuencias mencionadas anteriormente
T5: dos ciclos de rotación (SC/ASM/AS) en
las mismas dosis y frecuencias mencionadas
anteriormente más recolección semanal de
hojas enfermas con Bacteriosis antes de cada
aplicación.
T6: recolección semanal de hojas afectadas
por Bacteriosis únicamente
T7: testigo comercial realizando cinco aplicaciones de Oxicloruro de cobre (OC) en
dosis de 2,5 g L-1, más recolecciones semanales de hojas afectadas por Bacteriosis.
T8: testigo comercial realizando cinco aplicaciones de OC en dosis de 2,5 g L-1, sin
recolecciones manuales de hojas afectadas.
T9: testigo absoluto (Plantas sin ningún tipo
de deshoje, ni aplicación).
Aplicación de Inductores y productos
cúpricos
El AS utilizado, se extrajo a partir del ácido
acetil salicílico de acuerdo con el protocolo
sugerido por Patiño (2009).El ASM al
50%,proviene de un producto comercial. El
SCse adquirió en la presentación de fertilizante foliar con un contenido de cobre del
24%. Se empleó el mismo OC utilizado por
los productores al 58.8%. Cada uno de los
productos se disolvió en el volumen de agua
calculado para cada planta (0,75 L) y fueron
aplicados con atomizador a cada una de las
plantas según el tratamiento realizando un
buen cubrimiento del follaje total de la planta.
Parámetros monitoreados
Se realizaron mediciones semanales durante
18 semanas (semana 17 a 35 del 2010), registrando datos antes y después de la aplicación
de los diferentes tratamientos, partiendo de
infecciones naturales.
Se registraron variables relacionadas con
la enfermedad, fisiología de la planta y calidad poscosecha del fruto:
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
Parámetros relacionados con la enfermedad. Semanalmente se cuantificó el número de individuos enfermos sobre el total de la
población (Incidencia).
Parámetros fisiológicos. Se cuantificaron tres variables, según se describe a continuación:
Longitud de ramas: Se midió el crecimiento semanal de las mismas ramas en
donde se evaluó la severidad. Para esto se
utilizó un flexómetroque fue desplegado
desde la base de cada rama hasta el ápice para
calcular la longitud.
Número de hojas: Se contó semanalmente el número de hojas emitidas en las mismas
ramas del tercio medio marcadas previamente
en cada tratamiento.
Número de botones florales y frutos: En
las mismas ramas, se realizó el conteo semanal de estas estructuras.
Parámetros poscosecha de frutos maduros. Se tuvieron en cuenta cuatro variables
tal como se describe a continuación:
Diámetro ecuatorial y polar: medido
con un calibrador pie de rey. Peso fresco
determinado en una balanza electrónica marca Kern® 440-33.
Peso seco: los frutos se sometieron a una
temperatura de 100ºC durante tres días en un
horno marca Thelco Precision Scientific y se
pesaron en una balanza electrónica marca
Startorius Laboratory L310.
Sólidos solubles: determinados a través
de los grados Brix medidos con un refractómetro marca Carlzeiss Jena.
Calidad externa y presentación de cada
uno de los frutos cosechados en cada tratamiento: en donde se tuvo en cuenta la presencia de daños mecánicos en la epidermis y
lesiones por ataque de patógenos o insectos
para finalmente clasificarlos como fruto
nacional o exportación.
Diseño experimental
Los tratamientos se distribuyeron en un diseño completamente al azar con tres repeticiones. Cada repetición constó de una planta de
gulupa en edad productiva. En cada parcela
se aleatorizó la distribución de los tratamientos, dejando plantas intermedias para separar
los tratamientos.
Los datos fueron sometidos a un análisis
de varianza (ANOVA) y a prueba de comparación múltiple de Duncan (P≤0,05). El análisis estadístico se realizó con el programa
SAS® versión 9.0 (SAS Institute Inc., Cary,
NC).
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Incidencia de la enfermedad
Durante las primeras semanas de desarrollo
de los experimentos, el comportamiento de la
incidencia se mantuvo igual, no encontrando
plantas con síntomas de la enfermedad en
ninguno de los tratamientos evaluados. A
partir de la semana 23 del año, se empezaron
a observar lesiones típicas de Bacteriosis en
hojas bajeras e internas de las plantas que
conformaban el testigo absoluto (Figura 1A)
y el tratamiento T1 en donde se aplicó SC,
muy posiblemente debido a que este producto
es el menos efectivo para el control de la
bacteria; además de facilitar el ingreso del
patógeno por las heridas causadas a las plantas con la quemazón.
Dos semanas después se presentó un
comportamiento similar de la incidencia, pero
además se empezaron a observar lesiones en
el tratamiento T8 en el que se realizaron
aplicaciones de OC (Figura 2).
En la semana 27 la enfermedad se empezó a presentar en el tratamiento T6 el cual
consistió en el deshoje semanal. Esto sugiere
que el deshoje retrasa la aparición de síntomas con respecto al testigo absoluto, como
consecuencia de una mejor aireación y penetración de luz al interior de la planta, pero no
implica el control del patógeno.
En la semana 28 se empezó a observar la
aparición de la enfermedad en el tratamiento
T7 en donde se aplicó OC combinado con
deshojes semanales.
En las semanas siguientes y hasta la última semana de realización de los ensayos
(semana 35) la incidencia de la enfermedad
aumentó gradualmente en los tratamientos
T1, T6, T7, T8 y T9; llegándose a presentar el
mayor porcentaje de incidencia acumulada en
la semana 32 (Figura 2).
Los tratamientos en los que se aplicaron
productos químicos inductores de resistencia
(AS y ASM) solos (T2 y T3) y en rotación
(T4 y T5) no permitieron la colonización de
la bacteria ni la progresión de síntomas durante el transcurso de tiempo en el que se
desarrollaron estos ensayos (Figura 1B y
Figura 2). Solo en el tratamiento T4 se presentó un bajo porcentaje de incidencia de la
enfermedad a partir de la semana 29, la cual
se detuvo por completo en la semana 33 en
donde ya no se observaron síntomas ni avance de los mismos en la planta (Figura 3). Lo
anterior sugiere que el uso de AS y ASM
solos y en un plan de rotación controla y
suprime eficientemente la enfermedad porque
impide la penetración y posterior colonización de la bacteria en la planta, gracias al
desencadenamiento de los mecanismos de
defensa a través de la RSA.
Es necesario resaltar que las aplicaciones
de los inductores de resistencia se hicieron
antes de la aparición de los primeros síntomas
de la enfermedad; es decir en forma preventiva.
La eficacia encontrada en el presente trabajo de los inductores de resistencia AS y su
Figura 1. Comportamiento de la incidencia de bacteriosis en la semana 28 de 2010. A, Testigo absoluto
(T9). B, Ácido salicílico (T3).
Figura 2. Comportamiento semanal del porcentaje de incidencia de bacteriosis en plantas de gulupa para
cada tratamiento a través de las semanas del año. SC (Sulfato de Cobre), ASM (Acibenzolar-s-Metil), AS
(Ácido Salicílico), R (Rotación), R+DH (Rotación + Deshoje), DH (Deshoje), OC+DH (Oxicloruro de
Cobre + Deshoje), OC (Oxicloruro de Cobre), TEST (Testigo absoluto).
Figura 3. Porcentaje de incidencia acumulada de bacteriosis en las 4 parcelas experimentales durante el
tiempo de evaluación de los experimentos. * barras con letras distintas indican diferencia significativa
según la prueba de Duncan (P≤0,05). Las barras sobre las columnas indican desviación estándar
análogo funcional el ASM para el control de
la Bacteriosis en cultivos de gulupa, lo convierte en una alternativa viable y ambientalmente sostenible para el control de dicha
enfermedad. Zuluaga et al., 2007 mencionan
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
que el uso de estas sustancias inductoras de
resistencia para el control de Sigatoka negra
(Mycosphaerella fijiensis) en banano logró
reducir la aplicación de fungicidas convencionales entre el 46 y el 100%. Además,
23
Soylu et al., 2003 afirman que el ASM presenta bajo impacto para los humanos y el
medio ambiente por lo que es viable su uso
tanto en cultivos de campo, como en invernadero.
Por otro lado, la ineficacia de productos
cúpricos empleados en este estudio para
detener la aparición y la progresión de síntomas causados por X. axonopodis ha sido
ampliamente documentada en diversos trabajos en los que se reportan cepas de Xanthomonas tolerantes al cobre (Aguiar et al.,
2003; Martin et al., 2004; Voloudakis et al.,
2005), esto hace considerar el uso de productos inductores de resistencia, pues minimizan
el riesgo de generar tolerancia en los microorganismos fitopatógenos que atacan la gulupa, ya que éstos tienen menos probabilidad de
vencer los mecanismos involucrados en la
resistencia sistémica adquirida (RSA) que
otros métodos de control como la resistencia
genética de plantas transgénicas o fungicidas
convencionales (Malamy et al., 1996 citado
por Cole, 1999; Riveros et al., 2002).
Observaciones de campo en los tratamientos con inductores de resistencia permiten notaruna reducción de síntomas causados
por enfermedades como la Virosis y la Roña
causada por Cladosporium sp., mejorando así
la calidad comercial de los frutos de gulupa.
Esto se explica porque la resistencia sistémica
adquirida (RSA) es de amplio espectro causando protección a tejidos no infectados a un
amplio rango de patógenos dentro de los que
se encuentran hongos, bacterias, virus e
incluso algunas plagas como mosca blanca
(Ryals et al., 1995 citado por Hunt et al.,
1996; Moraes et al., 2009).
Comportamiento del número de estructuras vegetativas y reproductivas por rama
con la aplicación de los productos químicos
La práctica del deshoje, promovió significativamente un aumento de la longitud de la
rama, seguido por la aplicación de OC más
deshoje y el testigo absoluto. Por el contrario
este parámetro se reduce cuando se realiza la
rotación de los inductores combinado con el
deshoje manual y la aplicación de SC. La
aplicación de ASM y AS no aumentan la
longitud de las ramas en gulupa (Tabla 1).
De igual forma, el número de hojas es
mayor cuando se emplea la práctica del deshoje manual y es menor cuando se aplicó el
SC en forma individual. Esto pudo haber
sucedido por la fitotoxicidad que presentó la
aplicación de este producto.
En los tratamientos (T1, T4 y T5) en
donde se aplicó SC, se observaron síntomas
severos de fitotoxicidad; la cual se presentó
como quemazones blanquecinas en bordes y
distribuidas en toda la superficie de la hoja en
forma circular, en donde hubo contacto de las
gotas de la aspersión con el tejido. En frutos
se observaron síntomas similares, afectando
la calidad comercial de éstos. Estos síntomas
24
se fueron acentuando cada vez más en el
tratamiento T1 debido a la frecuencia de
aplicación de SC (cada 8 días). Gilardi et al.,
(2010) al utilizar productos cúpricos para el
control de Pseudomonas syringae en tomate,
también observaron problemas de fitotoxicidad, la cual se manifestó como una reducción
en la altura de las plantas.
Con respecto al número de botones florales, se observa un promedio muy bajo de
estos en todos los tratamientos; siendo el
valor más alto el presentado en el testigo
absoluto, seguido por el tratamiento de deshoje; mientras que la rotación de los inductores, combinado con deshojes y las aplicaciones SC presentan los menores promedios
(Tabla 1).
planta (Barbosa et al., 2008; Walters y Heil,
2007; Durrant y Dong, 2004).
Además la acumulación de los metabolitos secundarios a altas concentraciones causa
efectos fitotóxicos. Este inconveniente ha
sido trabajado y solventado con la incorporación de cationes (Cu, Mn y Zn) presentes en
enmiendas orgánicas o adicionadas externamente en el sustrato. Estos cationes atrapan y
reducen los radicales libres de oxigeno que
se acumulan durante el desarrollo de la enfermedad, coadyuvan al transporte de iones
calcio en el ámbito celular, incrementa la
acción de hormonas de crecimiento y la
actividad del RNA, entre otras tareas celulares (Riveros et al., 2004).
Tabla 1. Prueba de comparación de medias para las variables longitud de ramas, número de hojas, botones
florales y frutos por rama en las plantas de gulupa evaluadas.
No.
Trat.
1
2
3
4
Tratamiento
Estructuras Vegetativas y Reproductivas
Longitud rama
No. Botones
No. Hojas
No. Frutos
(cm)
florales
65,99 f*
12,91 e
0,37 c
0,07 bc
69,63 de
15,77 bc
0,52 bc
0,11 bac
67,08 fe
14,8 d
0,45 bc
0,06 dc
71,73 dc
15,32 dc
0,50 bc
0,04 d
Sulfato de cobre (SC)
Acibenzolar-s-Metil (ASM)
Acido salicílico (AS)
Rotación (SC/ASM/AS)
Rotación (SC/ASM/AS) + Des5 hoje
62,56 g
13,48 e
0,19 d
6 Deshoje
78,30 a
16,47 a
0,70 ba
Oxicloruro de cobre (OC) +
7 deshoje
75,36 ba
16,37 ba
0,62 bc
8 Oxicloruro de cobre (OC)
74,12 bc
15,79 bc
0,45 bc
9 Testigo absoluto
75,67 ba
16,1 ba
1,00 a
*Promedios con letras distintas en la misma columna indican diferencia significativa según
Duncan (P≤0,05).
Finalmente, el número de frutos/rama
también presenta un bajo promedio, siendo el
tratamiento de OC más deshoje el de mayor
número, mientras que la rotación de los inductores presenta la más baja producción. En
términos de parámetros fisiológicos, el ASM
fue el que siempre presentó mayores valores
con respecto al AS cuando estos fueron aplicados en forma individual, pero los valores
obtenidos con estos inductores de resistencia
son muy inferiores a los demás tratamientos e
incluso al testigo absoluto.
Es de tener en cuenta que la inducción de
resistencia con el uso de inductores químicos
tiene un costo fisiológico para la planta (teoría del “costo de la defensa”), pues la aplicación de inductores de resistencia puede reducir el tamaño de la planta, presentar pérdida
de dominancia apical, producir entorchamiento de hojas, disminución de la fertilidad,
reducción en la producción de la planta e
inclusive efectos negativos en la simbiosis de
las plantas con microorganismos benéficos
como las micorrizas o Rhizobium(Barbosa et
al., 2008; Walters y Heil, 2007; Durrant y
Dong, 2004).
Hay que tener en cuenta que la activación
de la resistencia tiene lugar a altas demandas
de energía o puede hacer que se desvíen
metabolitos y energía destinada para el crecimiento y otros procesos importantes en la
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
0,01 e
0,10 bac
0,14 a
0,12 ba
0,09 bac
la prueba de
Comportamiento de parámetros poscosecha con la aplicación de los productos
químicos
El tratamiento T7 (OC + Deshoje) presentó
los valores más altos de peso fresco, peso
seco y diámetro ecuatorial y polar en los
frutos cosechados con respecto a los demás
tratamientos; mientras que por el contrario el
tratamiento T4 (Rotación (SC/ASM/AS) es el
que presenta el menor valor para estos mismos parámetros (Tabla 2). No se observan
diferencias significativas para estos mismos
parámetros entre los tratamientos T1(SC), T2
(ASM) y T3 (AS) pero si se observan diferencias entre estos tratamientos y el testigo
absoluto siendo este último un poco superior
en estos parámetros a excepción del peso
seco de los frutos (Tabla 2).
En cuanto a los sólidos solubles, los tratamientos que presentaron la mayor concentración de grados Brixfueronel T5 (Rotación
(SC/ASM/AS) + Deshoje), T4 (Rotación
(SC/ASM/AS)), T1 (SC) y T3 (AS),no
habiendo diferencias significativas entre estos
(Tabla 2).
El tratamiento en el que se obtuvo la menor concentración de grados Brixes el T2
(ASM), seguido de los tratamientos con OC
(T7 y T8) y el deshoje (T6).
Se compararon estos mismos parámetros
Tabla 2. Prueba de comparación de medias para las variables peso fresco, peso seco, diámetro ecuatorial,
diámetro polar y sólidos solubles evaluadas en frutos maduros de gulupa.
No.
Trat.
Tratamiento
1
2
3
4
Parámetros Poscosecha
Diámetro
Peso Fresco
Diámetro
Peso Seco (g)
ecuatorial
(g)
polar (cm)
(cm)
54,59 ba*
9,45 ba
5,46 b
5,09 bac
53,36 ba
9,84 ba
5,45 b
5,06 bac
53,93 ba
9,67 ba
5,37 b
5,12 bac
50,65 b
9,06 b
5,37 b
4,87 d
Sulfato de cobre (SC)
Acibenzolar-s-Metil (ASM)
Acido salicílico (AS)
Rotación (SC/ASM/AS)
Rotación (SC/ASM/AS) +
55,19 a
5 Deshoje
52,64 ba
6 Deshoje
Oxicloruro de cobre (OC) +
56,58 a
7 deshoje
55,61 a
8 Oxicloruro de cobre (OC)
55,56 a
9 Testigo absoluto
Plantas enfermas con bacteriosis
52,61
*Promedios con letras distintas en la misma columna
Duncan (P≤0,05).
de poscosecha en frutos maduros cosechados
de plantas severamente afectadas por bacteriosis con los tratamientos aplicados y se
encontró que el peso seco de los frutos y los
sólidos solubles son notoriamente reducidos
por la enfermedad.
Esto es muy importante porque aunque lo
que más limita la comercialización de los
frutos de gulupa es su calidad y aspecto
externo (presencia o ausencia de daños mecánicos o lesiones causadas por patógenos en la
epidermis como roña), en un futuro próximo
la calidad organoléptica puede convertirse en
un requisito indispensable para la comercialización de la gulupa, diferenciando el mercado
entre los países productores de este frutal de
exportación.
CONCLUSIONES
El uso de los inductores de resistencia
AS(0,025 g L-1) y su análogo funcional el
ASM (0,05 g L-1)es una herramienta novedosa y viable para el control de la Bacteriosis en
el cultivo de gulupa, pero debe estar enmarcada dentro del manejo integrado. La aplicación de estos productos se debe realizar en
forma preventiva antes de la aparición de los
primeros síntomas de la enfermedad, ya que
estos productos no son biocidas y no van a
actuar directamente sobre la bacteria, sino
que van a activar los mecanismos de defensa
en la planta. Además debe llevarse un estricto
manejo de la fertilización, con el fin de compensar los efectos adversos que tiene la aplicación de estos inductores de resistencia
sobre el número de estructuras vegetativas y
reproductivas y algunos parámetros poscosecha, para no comprometer la producción y
rentabilidad de los cultivos como consecuencia de un alto gasto energético y una sobreproducción de metabolitos secundarios indeseables para el óptimo desarrollo fisiológico
del cultivo.
Sólidos
Solubles
(° Brix)
14,33 a
13,32 c
14,27 a
14,40 a
9,49 ba
5,38 b
4,97 dc
14,48 a
9,33 ba
5,56 ba
5,02 bdc
13,69 cb
10,11 a
5,74 a
5,23 a
13,72 cb
10,09 a
5,54 b
5,15 bac
13,48 cb
9,42 ba
5,56 ba
5,17 ba
13,79 b
7,86
5,45
5,10
12,05
indican diferencia significativa según la prueba de
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Abo-Elyousr, K. y El-Hendawy, H. 2008.
Integration of Pseudomonas fluorescens
and acibenzolar-S methyl to control bacterial spot disease of tomato. Crop Protection 27, 1118–1124.
Aguiar, L., Kimura, O., Castilho, A., Castilho, K., Ribeiro, R. , Akiba, F. y Carmo,
M. 2003. Efeito de formulações cúpricas
e cuprorgânicas na severidade da mancha- bacteriana em a população residente
de Xanthomonas campestris pv. Vesicatoria em pimentão. Hortic. Bras.21(1), 44–
50.
Amborabé, B., Lessard, P.,. Chollet, J y
Roblin, G.. 2002. Antifungal effects of
salicylic acid and other benzoic acid derivatives towards Eutypalata: structure–
activity relationship. Plant Physiol. Biochem. 40, 105–1060.
Barbosa, M., Laranjeira, D. y Coelho, R.
2008. Physiological cost of induced resistance in cotton plants at different nitrogen
levels. Summa Phytopathol., Botucatu,
34(4), 338–342.
Benítez, S. 2010. Caracterización del agente
etiológico de la enfermedad denominada
“mancha de aceite” en cultivos de gulupa
(Passiflora edulis Sims.) en zonas productoras de Colombia. Tesis de maestría.
Instituto de Biotecnología (I.B.U.N) Universidad Nacional de Colombia, Bogotá.
Brancaglione, P.,. Sampaio, A., Fischer, I.,.
Almeida A y Fumis, T. 2009. Eficiencia
de argila silicatada no controle de Xanthomonas axonopodis pv. passiflorae, in
vitro e em mudas de maracujazeiro amarelo. Rev. Bras. Frutic.31(3), 718–724.
Cole, D. 1999. The efficacy of acibenzolar-Smethyl, an inducer of systemic acquired
resistance, against bacterial and fungal
diseases of tobacco.Crop Protection 18,
267–273.
Debona, D., Figueiró, G., Corte, G., Navarini,
L., Domingues, L. y Balardin, R. 2009.
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
Efeito do tratamento de sementescom
fungicidas e acibenzolar-S-methyl no
controle da ferrugem asiática e crescimento de plántulas em cultivares de soja.
Summa Phytopathol., Botucatu, 35, 26–
31.
Durrant, W. y Dong X. 2004. Systemic acquired resistance. Annu. Rev. Phytopathol. 42, 185– 209.
Elmer, W. 2006. Effects of acibenzolar-Smethyl on the suppression of Fusarium
wilt of cyclamen. Crop Protection 25,
671–676.
Farfán, L. y Hoyos-Carvajal, L. 2010. Sensibilidad a antibióticos y productos cúpricos de bacterias fitopatógenas asociadas
a bacteriosis en pasifloras. pp. 92. En:
Parra, M., C. Carranza, J. Cárdenas y D.
Miranda (eds.). Memorias primer congreso latinoamericano de passifloras. Cepassi-Asohofrucol, Neiva, Colombia.
Gilardi, G., Gullino, M. y Garibaldi, A. 2010.
Evaluation of spray programmes for the
management of leaf spot incited by Pseudomonas syringae pv. syringae on tomato
cv. cuoredi bue. Crop Protection 29,
300–335.
Gurgel, L., Oliveira, S., Coêlho, R. y Silva R.
2005. Proteção a Murcha de Fusário do
Tomateiro com Acibenzolar-SMetil e Ácido β-Aminobutírico, em Campo. Fitopatol. Bras. 30(6), 655–657.
Hacisalihoglu, G., Ji, P., Longo, L.,. Olson, y
Momol. S. T. 2007. Bacterial wilt induced changes in nutrient distribution and
biomass and the effect of acibenzolar-Smethyl on bacterial wilt in tomato. Crop
Protection 26, 978–982.
Hunt, M., Neuenschwander, U., Delaney, T.,
Weymann, K., Friedrich, L., Lawton, K.
Steiner, H. y Ryals, J. 1996. Recent advances in systemic acquired resistance research- a review. Gene 179, 89–95.
Isaacs, M. 2009. Mercados nacionales e
internacionales de las frutas pasifloráceas.
pp. 327–344. En: Miranda, D., Fischer,
G., Carranza, C., Magnitskiy, S., Casierra
F., Piedrahíta, W. y Flórez, L. (eds.). Cultivo, poscosecha y comercialización de
las pasifloráceas en Colombia: maracuyá,
granadilla, gulupa y curuba. Sociedad Colombiana de Ciencias Hortícolas, Bogotá,
Colombia.
LaMondia, J. 2009. Efficacy of fungicides
and a systemic acquired resistance activator (acibenzolar-S-methyl) against tobacco blue mould. Crop Protection 28, 72–
76.
Latunde-Dada, A. y Lucas, J. 2001. The plant
defence activator acibenzolar-S-methyl
primes cowpea (Vigna unguiculata (L.)
Walp.) seedlings for rapid induction of
resistance. Physiological and Molecular
Plant Pathology 58, 199–208.
Malolepsza, U. 2006. Induction of disease
resistance by acibenzolar-S-methyl and ohydroxyethylorutin against Botrytis cine25
rea in tomato plants. Crop Protection 25,
956–962.
Mandal, S., Mallick, N. y Mitra, A.2009.
Salicylic acid-induced resistance to Fusarium oxysporum f. sp. Lycopersici in tomato. Plant Physiology and Biochemistry 47, 642–649.
Martin, H., Hamilton, V. y Kopittke, R. 2004.
Copper Tolerance in Australian Populations of Xanthomonas campestris pv. vesicatoria Contributes to Poor Field Control of Bacterial Spot of Pepper. Plant
Disease 88(9), 921–924.
Mejía, D., Rodas, E., Patiño L. y González,
E. 2009. Efecto del acibenzolar-s-metil
sobre el desarrollo de la virosis causada
por potyvirus en tomate de árbol. Agron.
Colomb. 27(1), 87–93.
MADR, 2010. En Agronet, Análisis y Estadísticas. Comercio exterior de Colombia. [Consultado 27 enero 2011]. Disponible en: http://www.agronet.gov.co.
Moraes, J., Ferreira, R. y Costa, R. 2009.
Indutores de resistência à mosca-branca
Bemisia tabaci biótipo b (Genn., 1889)
(Hemiptera: Aleyrodidae) em soja. Ciênc.
agrotec., Lavras 33(5), 1260–1264.
Pappu, H., Csinos, A., McPherson R., Jones
D. y Stephenson, M. 2000. Effect of acibenzolar-S-methyl and imidacloprid on
suppression of tomato spotted wilt Tospovirus in flue-cured tobacco. Crop Protection 19, 349–354.
Pérez, L., Rodríguez, M., Rodríguez F. y
Roson, C. 2003. Efficacy of acibenzolarS-methyl, an inducer of systemic acquired resistance against tobacco blue
mould caused by Peronospora hyoscyami
f. sp. tabacina. Crop Protection 22, 405–
413.
Pieterse, C. y Loon, L. 1999. Salicylic acidindependent plant defense pathways.
Trends in plant science 4(2), 52–58.
Pradhanang, P., Momoly M. y Olson, S.
2005. Application of Acibenzolar-S-
26
Methyl Enhances Host Resistance in Tomato Against Ralstonia solanacearum.
Plant Disease 89(9), 989–993.
Prats, E., Rubiales, D. y Jorrín, J. 2002. Acibenzolar-s-methyl induced resistance to
sunflower rust (Puccinia helianthi) is associated with an enhancement of coumarins on foliage surface. Physiological and
Molecular Plant Pathology 60, 155–162.
Radhakrishnan, N., Alphonse, A. y Balasubramanian, R. 2010. Effect of Acibenzolar-S-methyl (ASM) pre-treatment in inducing resistance against Pythium aphanidermatum infection in Curcuma longa.
Crop Protection30, 24–32.
Riveros, A. 2010. Inducción de Resistencia
en plantas. Interacción Planta-Patógeno.
Instituto Interamericano de Cooperación
para la Agricultura (IICA), San José,
Costa Rica.
Riveros, A., Pocasangre, L. y Rosales F.
(eds.). 2002. Inducción de resistencia y
uso de tecnologías limpias para el manejo
de plagas en plantas. Memorias del taller
internacional realizado en CATIE del 2730 de agosto de 2002, Turrialba, Costa
Rica.
Riveros, A., Pocasangre, L. y F. Rosales.
2004. Manejo alternativo de mycosphaerella fijiensisa través de la inducción de
resistencia y uso de bioproductos. Publicación Especial. XVI Reunión Internacional Acorbat 2004. pp. 47–52.
Roberts, P., Momol, M., Ritchie, L., Olson S.,
Jones, J. y Balogh, B. 2008. Evaluation of
spray programs containing famoxadone
plus cymoxanil, acibenzolar-S-methyl,
and Bacillus subtilis compared to copper
sprays for management of bacterial spot
on tomato. Crop Protection 27, 1519–
1526.
Smith-Becker, J., Keen N. y Becker, J.. 2003.
Acibenzolar-S-methyl induces resistance
to Colletotrichum lagenarium and cu-
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
cumber mosaic virus in cantaloupe. Crop
Protection 22, 769–774.
Soylu, S., Baysal Ö. y Soylu, E. 2003. Induction of disease resistance by the plant
activator, acibenzolar-S-methyl (ASM),
against bacterial canker (Clavibacter michiganensis subsp. michiganensis) in tomato seedlings. Plant Science 165, 1069–
1075.
Sparla, F., Rotino L., Valgimigli M., Pupillo,
P. y Trost, P.2004. Systemic resistance
induced by benzothiadiazole in pear inoculated with the agent of fire blight (Erwinia amylovora). Scientia Horticulturae
101, 269–279.
Véronési, C., Delavault, P. y , P. 2009. Acibenzolar-S-methyl induces resistance in
oilseed rape (Brassica napus L.) against
branched broomrape (Orobanche ramosa
L.). Crop Protection 28, 104–108.
Voloudakis, A., Reignier, T. y. Cooksey, D.
2005. Regulation of Resistance to Copper
in Xanthomonas axonopodis pv. vesicatoria. Applied and environmental microbiology 71(2), 782–789.
Walters, D. y Heil, M. 2007. Costs and tradeoffs associated with induced resistance.
Physiological and Molecular Plant Pathology 71, 3–17.
Wu, H., Raza, W., Fan, J., Sun, Y., Bao, W.,
Liu, D., Huang, Q., Mao, Z., Shen, Q. y
Miao, W. 2008. Antibiotic effect of exogenously applied salicylic acid on in vitro soilborne pathogen, Fusarium oxysporumf.sp. niveum. Chemosphere 74, 45–
50.
Zuluaga, C., Patiño, L. y Collazos, J. 2007.
Integración de inducción de resistencia
con bacterias quitinolíticas en el control
de la sigatoka negra (Mycosphaerella fijiensis Morelet) en banano. Revista Facultad Nacional de Agronomía 60(2),
3891–3905.
MANEJO INTEGRADO DEL MILDEO VELLOSO (Peronospora sparsa Berkeley) DE LA ROSA *
Nathali López-Cardona y Jairo Castaño Zapata
Universidad de Caldas, Facultad de Ciencias Agropecuarias
Correo electrónico contactos: [email protected]; [email protected]
*Artículo de Revisión de literatura, recibido para publicación el 21/04/2011; aceptado el 18/05/2011
RESUMEN
SUMMARY
El Mildeo velloso (Peronospora sparsa) de la rosa, es una de las
enfermedades más limitantes del cultivo de rosa en Colombia. Aunque
recientemente se han publicado algunos trabajos de investigación
sobre la epidemiología y manejo de la enfermedad, no existe un programa definido de Manejo integrado para la enfermedad. Esta revisión
pretende integrar resultados de investigaciones con diferentes prácticas
de manejo de la enfermedad, a fin de establecer un programa de Manejo Integrado para el Mildeo velloso de la rosa en Colombia.
Integrated management of the downy mildew (Peronospora sparsa
Berkeley) of rose
Palabras clave: exclusión, erradicación, protección, inmunización.
The Downy mildew (Peronospora sparsa) of rose is one of the most
important diseases of the crop in Colombia. Although several papers
have been recently published about the epidemiology and management
of the disease, there is not a program of integrated management for the
disease. This review aims to integrate research results with different
management practices, to establish an integrated management program
for the Downy mildew of rose in Colombia.
Key words: exclusion, eradication, protection, immunization
INTRODUCCIÓN
El Manejo Integrado de Enfermedades, MIE,
es una tecnología efectiva para los floricultores y ofrece una alternativa al uso excesivo de
fungicidas con el fin de disminuir la contaminación ambiental, los riesgos a los operarios y
mejorar la rentabilidad de los sistemas de
producción. El MIE involucra actividades en
programas de producción que reducen las
enfermedades introducidas, y mantienen los
daños de tal manera que causen pérdidas
económicas mínimas (Engelhard, 1991).
Últimamente los compradores de flores
en todo el mundo están interesados en adquirir flores producidas mediante prácticas sanas
desde un punto de vista ambiental. Por esto,
los programas de ECO-etiquetado como el
MPS (Milieu Project Sierteelt) de Holanda, el
programa Florverde de Colombia, el “Flower
Label Program” (FLP) de Alemania y el
“Kenya Flower Label”, se adoptan cada vez
más en el mundo (Pizano, 2001).
Colombia posee una ventaja competitiva
importante para la producción de flores tropicales. En los últimos 30 años el país ha incrementado sus divisas, pasando de unos
cuantos miles de dólares anuales a más de US
$1.114,11 millones de dólares en el 2007. En
la actualidad Colombia es el segundo exportador de flores del mundo, con una participación del 14 % sobre el total de las exportaciones mundiales, con un área cultivada de
7.290 ha (Asocolflores, 2007).
Peronospora sparsa Berkeley, es uno de
los patógenos más limitantes en los cultivos
de rosa bajo invernadero en el mundo. El
primer reporte de este microorganismo fue
realizado en Inglaterra en1862, y al poco
tiempo se registró en Europa continental,
específicamente en los países escandinavos y
la antigua Unión Soviética. En 1880, se reportó en el medio oeste de los Estados Unidos, y desde allí se dispersó por el mundo.
Aunque la literatura registra a P. sparsa como
un patógeno endémico del área norte del
trópico de Cáncer, en la actualidad el patógeno causa daños significativos en países tropicales y subtropicales como Brasil, Colombia,
Israel, Egipto y Nueva Zelanda (Horst, 1983;
Arbeláez, 1999; Walter et al., 2004).
En Colombia existen registros de la ocurrencia del Mildeo velloso desde la década de
los 70`s (Martínez, 2002); y actualmente la
enfermedad es el principal problema fitosanitario de la rosa en la sabana de Bogotá. En
1999, se estimó en cinco millones de dólares
las pérdidas por la enfermedad (Zúñiga,
2003) y actualmente se considera que ocasiona una disminución del 10% en la producción total de rosas en el país, lo que corresponde a US$ 20.000 ha-¹ en variedades susceptibles (Gómez, 2004; Suárez, 1999).
Debido a la importancia del Mildeo velloso de la rosa y a la ausencia de un enfoque
de MIE para esta enfermedad, este trabajo
pretende integrar resultados de investigaciones con diferentes prácticas de manejo, a fin
de establecer un programa de Manejo Integrado para el Mildeo velloso de la rosa en
Colombia.
DIAGNÓSTICO OPORTUNO: CLAVE
DEL MANEJO INTEGRADO DE LA
ENFERMEDAD
El reconocimiento de los síntomas típicos de
la enfermedad, esencialmente en sus primeros
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
estados, es la clave para la realización del
manejo oportuno del patógeno. Cuando el
inóculo inicial del patógeno es muy bajo, es
decir, cuando la enfermedad se encuentra en
las primeras fases de desarrollo, se puede
optimizar el beneficio del control químico.
Así mismo, la identificación correcta de la
presencia del patógeno servirá de base para la
elección correcta de los fungicidas más efectivos, así como la planificación de otras
prácticas compatibles de manejo de la enfermedad.
Síntomas del mildeo velloso y signos del
patógeno. Los síntomas se manifiestan sobre
hojas, tallos, pedúnculos, cáliz y pétalos de
las plantas de rosa, aunque generalmente la
infección es restringida a los tejidos jóvenes
de las plantas. Sobre la haz de las hojas se
desarrollan manchas irregulares de color
rojizo-púrpura a pardo-oscuro, las cuales se
rodean de un halo clorótico (Figura 1a),
mientras que en el envés se producen los
signos del patógeno. Una observación a
simple vista, permite observar una esporulación de color blanco en el envés de las hojas
u otros órganos afectados, que corresponden
al conjunto de esporangióforos y esporangios
del patógeno, que dan la apariencia vellosa
característica de la enfermedad (Horst, 1983;
Arbeláez, 1999; Hollier et al., 2001). Una
observación al microscopio, permite la diferenciación del patógeno, debido a que los
esporangióforos poseen una típica ramificación dicotómica, con ápices agudos, y las
ramas forman un ángulo más o menos agudo
(Figura 1b).
La enfermedad puede inducir defoliación
severa (Flórez, 1996; Restrepo, 1996) y es
27
a
El manejo de la enfermedad puede ser logrado a través de la integración de cuatro
principios fundamentales, formulados por
Whetzel (1929): exclusión, erradicación,
protección, e inmunización, los cuales se
detallan a continuación:
b
Exclusión
Uno de los controles más efectivos es mantener el patógeno lejos de la planta hospedante.
Esto se puede lograr mediante el empleo de
una o más medidas generales, las cuales
involucran tácticas legales de control. Según
Castaño-Zapata (1994), la exclusión involucra:
Figura 1. a. Síntomas típicos del Mildeo velloso.
b. Características del hongo. Fotografías: Cortesía
del Ing. Agr. Carlos Fernando Castillo.
común que los síntomas foliares se confundan
con quemaduras o toxicidad inducidas por
pesticidas. Sobre los tallos, cáliz y pedúnculos, la enfermedad se manifiesta como manchas púrpuras a negras que varían en tamaño
e incluso pueden coalescer produciendo la
muerte de ramas y momificación de botones florales (Horst, 1983; Hollier et al.,
2001; Infoagro, 2004) ó propiciando la invasión secundaria por Botrytis cinerea Pers.:Fr.
(Aegerter et al., 2002).
Ciclo de vida de P. sparsa. Normalmente
sobrevive mediante oosporas, micelio en
tallos, hojas, brotes, sépalos y coronas. En
Colombia se creía que el patógeno no producía oosporas, conocidas como estructuras de
resistencia ó sobrevivencia, sin embargo,
Gómez y Arbeláez (2004), demostraron la
presencia de estas estructuras en cultivos
comerciales de rosa en el país.
Los esporangios pueden ser producidos
por periodos largos de tiempo en condiciones
de humedad relativa alta (>85%) y condiciones frescas de temperatura (18ºC). Estos
pueden ser diseminados y depositados por el
viento ó por salpique de gotas de agua lluvia
ó de riego, germinan y penetran directamente
a través de la cutícula y la epidermis; el microorganismo se alimenta de las células del
parénquima por medio de haustorios y una
profusa red de micelio intercelular (Michelmore et al., 1988).
Los esporangióforos y esporangios emergen por los estomas del envés de las hojas y
los esporangios son diseminados nuevamente
para iniciar un nuevo ciclo de infección
(Horst, 1983).
Epidemiología. Las condiciones más favorables para el desarrollo del patógeno bajo
invernadero corresponden a temperaturas que
oscilan entre 15 y 20 °C durante el proceso de
28
infección y de 20 a 25 °C para la colonización del patógeno. La infección es influenciada por la presencia de una lámina de agua
libre sobre la superficie del tejido por un
período mínimo de dos horas, sin embargo, el
proceso infectivo se incrementa cuando
dichas condiciones de humedad superan las
10 horas (Aegerter et al., 2003).
En la sabana de Bogotá, la temperatura
óptima para la germinación de los esporangios es 14 °C, y se requiere un periodo mínimo de cuatro horas de agua libre sobre los
tejidos para que ocurra el proceso infectivo
del patógeno. La esporulación del patógeno
ocurre principalmente cuando se presenta una
humedad relativa superior al 85% y temperaturas que oscilan entre 18 y 22 °C (Gómez,
2004; Gómez y Arbeláez, 2004). A 10 °C el
periodo de latencia de P. sparsa oscila entre
6 y 7 días a, mientras que a una temperatura
de 18 a 22 °C, el periodo se reduce a solo 3 ó
5 días.
Con respecto al período de incubación,
puede variar entre siete y ocho días bajo
condiciones de invernadero (Gómez y Arbeláez, 2003). La infección de este patógeno se
produce tanto por la haz como por el envés de
las hojas (Filgueira, 2004).
PRINCIPIOS
INTEGRADO
(MIE)
DEL
MANEJO
DE ENFERMEDADES
Un programa sanitario de plantas ornamentales, debe garantizar la salud del material
vegetal, proporcionar los tratamientos culturales para evitar el desarrollo de enfermedades, y hacer los arreglos necesarios para
identificar y tratar correctamente los problemas que surgen. La integración de estos
principios es el secreto de una gestión eficaz
(Daughtrey y Benson, 2005).
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
Exclusión mediante intercepción y
rechazo: Implica inspeccionar el material
vegetal. Las rosas para exportación, son
inspeccionadas no solamente en el puerto de
entrada al país, sino también en el mar abierto
ó aún en el mismo sitio de origen para detectar la presencia de la enfermedad. Sí se encuentra la presencia del patógeno en el material, este puede ser rechazado y negársele la
entrada al país de destino o al área dónde se
desea introducir. Por otra parte, el material
también puede ser rechazado si se sabe que
proviene de un área dónde el patógeno es una
amenaza.
Exclusión mediante intercepción y
eliminación: Involucra el proceso anterior,
pero en lugar de rechazar todo el envío, se
remueve individualmente el material enfermo
y se destruye.
Prohibición: Es una medida mediante la
cual se previene por Ley, la entrada de ciertos materiales al país o área de destino. Este
proceso incluye las Cuarentenas.
Erradicación
Implica remover, eliminar o destruir el patógeno en un área ó en una planta individual
donde sea establecido. En otras palabras se
trata de establecer estrictas medidas de
SANIDAD.
Uso de material de siembra libre del
patógeno. Otro punto clave del Manejo
Integrado es comenzar con material de siembra libre del patógeno. Debido a que la rosa
es propagada vegetativamente, existe un
mayor riesgo de transmisión de la enfermedad. La producción de material de propagación limpio, partiendo de plantas certificadas
producidas mediante técnicas de multiplicación in vitro, ó por termoterapia, se constituyen en una alternativa importante para el
establecimiento y/o renovación de áreas
productivas.
Aegerter et al. (2002), demostraron que
la inmersión de esquejes de rosa, variedad
'Manetti, en Metalaxil ó Mefenoxam
en
dosis de 100 a 10.000 mg i.a./L por 10 min, y
agua caliente a 44°C por 15 min, redujo
significativamente la incidencia de la enfermedad (ABCPE) de 63 a 76. El éxito del
control del Mildeo velloso de la rosa por la
inmersión de esquejes en fungicidas o agua
caliente, soporta los resultados previos de que
le patógeno puede sobrevivir en tallos. De
esta forma, los tratamientos con inmersión de
esquejes pueden retrasar el comienzo de una
epidemia y reducir la severidad de la enfermedad (Aegerter et al., 2002).
Erradicación de tejido enfermo. El
tejido afectado puede ser eliminado mediante
la realización de podas sanitarias, y de esta
forma, se reduce la cantidad de inóculo inicial
del patógeno que puede iniciar una epidemia.
Los restos de material vegetal deben ser
incinerados a fin de erradicar completamente
el patógeno.
Manejo de hospedantes alternos. P.
sparsa tiene un rango muy estrecho de hospedantes, puede afectar los géneros Rosa, y
Rubus como R. fruticosu L., R. arcticus L. y
R. chamaemorus L. (Lindqvist-Kreuze et al.,
2002; Walter et al., 2004); recientemente se
ha indicado que es el agente causante del
Mildeo velloso de la mora (Rubus glaucus
Bentham) en Venezuela (Montilla et al.,
2003) y Colombia (Tamayo, 2001). Hall et al.
(1992), reportaron que el patpogeno puede
atacar el Laurel Cerezo (Prunus laurocerasus
L.) cv. Rotundiflora.
El establecimiento de cultivos de rosa
cerca a plantaciones de mora puede proveer
una ventaja al patógeno para su sobrevivencia. La fuente de inóculo puede incrementar
en plantas de mora en ausencia de plantas de
rosa ó viceversa, sí el cultivo de interés es la
mora, tornando ineficiente cualquier medida
de manejo de la enfermedad debido a la
cantidad de inóculo en el ambiente.
Erradicación mediante rotación de
cultivos. El ciclo de producción de las flores
en Colombia depende de la variedad cultivada, en general, las rosas se cosechan cada 90
días y cada rosal tiene una vida útil hasta de
15 años (Tenjo et al., 2006). En Colombia
existen aproximadamente 7.290 ha cultivadas
en flores, representadas de la siguiente manera, 30,3% corresponde a rosas, 13,5% a claveles, 8% a miniclaveles, 8,2% a crisantemos,
26,4 % a ramos y el restante 6,6% a otro tipo
de flores, incluyendo en éstos dos últimos
porcentajes flores tropicales y dentro de éstas
las heliconias (Asocolflores, 2007).
Aunque no existen reportes acerca del
beneficio de la rotación de cultivos en el
manejo de esta enfermedad, el cambio de
cultivo con hospedantes no susceptibles como
clavel y crisantemo, aunque no se conduciría
a una erradicación completa de la enfermedad, permitiría que las poblaciones del pató-
geno sean reducidas para evitar el desarrollo
de una epidemia en siembras futuras sin
afectar la producción del sector floricultor.
Desinfestación de herramientas. Las
herramientas empleadas en la injertación,
recolección de flores y podas, deberán esterilizarse en una solución de formaldehido 2% y
de hidróxido sódico 2% durante 6 segundos.
Es recomendable utilizar dos juegos de
herramientas de corte y de guantes, trabajando con uno, mientras el otro permanece sumergido en la solución hasta su uso
(INFOAGRO, s.f.). Esta práctica es efectiva
para disminuir la cantidad de inóculo inicial
que puede ser diseminado ente plantas.
Protección
El concepto de protección implicó originalmente colocar algún tipo de barrera entre el
hospedante y el patógeno con el fin de prevenir la infección. El concepto ha sido ampliado
para incluir otras medidas de prevención de la
infección, tales como la manipulación de los
factores ambientales que controlan el proceso
de infección, ó manejo del cultivo para disminuir o evitar la infección (Castaño-Zapata,
1994).
A continuación, se mencionan las principales medidas involucradas:
Protección mediante el uso de fungicidas. “La elección del fungicida correcto es
la otra clave del MIE”. Peronospora pertenece a la clase de los Oomycetes, incluidos
dentro del reino Straminipila que aagrupa
organismos que o producen quitina, pero
tiene celulosa como componente fibrilar de la
pared celular, y no sintetiza sus propios esteroles funcionales (por ejemplo, ergosterol)
sino que la toma de los tejidos del hospedante, antes de la conversión y su incorporación
en sus membranas. La especificidad de los
compuestos antifúngicos se basan en estas
diferencias metabólicas entre esta clase de
pseudohongos y los hongos verdaderos (Gisi,
2002)
O´neill et al. (2002), encontraron que las
aspersiones foliares de Fluazinam, Fosetil-Al
y la mezcla de Cymoxanil + Mancozeb +
Oxadixil, reducen
significativamente la
severidad del Mildeo velloso y la cantidad de
caída de hojas. Así mismo, la altura de la
planta mejora notablemente con estos fungicidas.
El conocimiento de la distribución y preferencia de ataque del patógeno en la planta
es vital para dirigir las aplicaciones de fungicidas. En un estudio realizado por Quiroga y
Arbeláez (2004), se encontró que la parte
inferior de los tallos evaluados (estrato uno)
exhibieron en promedio la mayor incidencia y
severidad del Mildeo velloso; seguido por el
estrato dos, el cual corresponde a la parte
media de los tallos. El estrato tres, es decir,
la parte más joven de los tallos, fue el que
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
presentó la menor incidencia y severidad de
la enfermedad. El mismo estudio indicó que
Fosetil-Al en aplicaciones foliares es altamente efectivo para el manejo de la enfermedad, en contraste, el tratamiento que mostró
el mayor número de tallos afectados fue el
mismo producto, pero aplicado al suelo.
La mezcla de Metalaxil + Mancozeb, es
ampliamente utilizada para el control de
diversos Oomycetes en cultivos como papa,
hortalizas, tabaco, aguacate, entre otros (Gisi,
2002), pero en la investigación realizada por
Quiroga y Arbeláez (2004), no mostró un
control eficaz del Mildeo velloso, ni aplicado
al suelo ni al follaje. Una de las causas de la
posible ineficiencia de este fungicida puede
ser la resistencia del patógeno al producto, en
particular a Metalaxil, como ha ocurrido en
otros cultivos en el mundo (Viranyi, 1988).
Control biológico. El concepto actual de
control biológico en patología vegetal incluye
la utilización deliberada de organismos vivos
introducidos o residentes, distintos de las
plantas hospedantes de la enfermedad objetivo, para suprimir las actividades y las poblaciones de uno o más patógenos de plantas.
Esto puede implicar el uso de inoculantes
microbianos para suprimir un solo tipo ó
clase de enfermedades de plantas, ó, la utilización de organismos nativos del suelo para
la represión de patógenos causantes de enfermedades en plantas (Pal y McSpadden,
2006).
Los agentes de control biológico de P.
sparsa han sido poco estudiados. Actualmente solo los trabajos de Chase (2005) con
Bacillus subtilis (Rhapsody) y las sales de
cobre (Camelot) están publicados. Esta investigadora descubrió que las sales de cobre
previenen el Mildeo velloso de la rosa eficazmente, mientras que B. subtilis por sí solo
no tiene un efecto marcado en la prevención
de la enfermedad, pero cuando se combinan
los dos, aunque el efecto es mucho menor que
las aplicaciones solas de cobre, se logra
reducir considerablemente la severidad del
Mildeo Velloso
Aunque los reportes de la eficacia de
controladores biológicos sobre P. sparsa, son
limitados, una investigación realizada por
Stefanova et al. (2007), con el Moho azul de
tabaco (Peronospora tabacina D.B. Adam)
indicó que la aplicación de Pseudomonas
aeruginosa (Schroeter) Migula, cepa PSS
(Gluticid), redujo la enfermedad en un 50%
comparado con el testigo. El producto biológico aplicado cada siete días a la dosis de
0,09 kg / ha del ingrediente activo, mostró
efectividad sobre la enfermedad, y su eficacia
fue igual a la obtenida con Mancozeb.
Las rizobacterias del género Pseudomonas Migula, producen diferentes metabolitos
extracelulares, entre ellos sideróforos, diversos antifúngicos y ácido salicílico, entre
otros, que contribuyen a la supresión de
fitopatógenos mediante la formación de
29
quelatos de hierro que les confieren ventaja
competitiva como agentes biocontroladores
por la suplementación limitada de minerales
esenciales en hábitats naturales, acción controladora y el aumento de la resistencia y
defensa de las plantas (Keel et al., 1990;
Maurhofer et al., 1994; Thomashow y Weller, 1995; Wipps, 2001).
Protección mediante manipulación del
ambiente. El Mildeo velloso se desarrolla
mejor en condiciones húmedas. Debido a
esto, Beckerman (2009), del Servicio de
Extensión de la Universidad de Purdue y
Hausbeck (2007) de la Universidad Estatal de
Michigan, Estados Unidos, sugieren mantener las rosas tan secas como sea posible para
reducir el crecimiento del P. sparza; para
ello, se debe usar riego por goteo en vez de
riego por aspersión a fin de evitar agua libre
en el tejido. De igual forma, Gill (1977)
sugiere ventilar los invernaderos para reducir
la humedad relativa por debajo del 90% y
elevar las temperaturas por encima de 27ºC.
Sistema de pronóstico de la enfermedad. En el año 2003, Aegerter et al., desarrollaron el primer sistema de pronóstico del
Mildeo velloso basado en la evaluación de la
temperatura, la humedad foliar, y la humedad
relativa en el desarrollo de la infección y la
colonización de la rosa por P. sparsa en las
condiciones del Valle de San Joaquín del
estado de California, Estados Unidos. Usando
un modelo de regresión lineal, incorporaron
las variables ambientales calculadas como los
totales acumulados en un periodo de 10 días.
Así, se pudo determinar un óptimo de infección de 8,4 h de duración de la humedad
foliar por día en un total de 10 días acumulados cuando la temperatura es menor a 20ºC.
Estos resultados deberían ser validados para
las condiciones de la sabana de Bogotá dónde
se concentra la producción de rosas en Colombia. Una vez validados los datos, el sistema de pronóstico serviría para alertar sobre
la primera aplicación de fungicidas y la
programación en el tiempo de las mismas.
Distancias de siembra. Alterar la distancia de siembra de las plantas tiene efectos
directos e indirectos sobre el comportamiento
de la enfermedad. Para el primero, existen
dos factores relacionados: (a) un cambio en
el número de plantas hospedantes disponibles
para interceptar inóculo diseminado a través
del espacio ó el tiempo, y (b) variación de los
espaciamientos entre plantas y por lo tanto la
dispersión espacial del inóculo que tiene éxito
para producir infección. Los efectos de a y b
se refuerzan mutuamente. Por lo tanto, un
aumento en la densidad de siembra, aumenta
el número de plantas susceptibles y con ello
la probabilidad de que una unidad de inóculo
en el aire sea depositada en el tejido susceptible (Burdon y Chilvers, 1982).
Los resultados del trabajo de O´neill et al.
(2002), demuestran que la severidad de la
enfermedad disminuye considerablemente
cuando incrementa la distancia entre plantas
de 18 a 32 cm. El aumento del espaciamiento
entre plantas mejora la circulación de aire y
aumenta también la exposición de las hojas
inferiores a la luz, lo que reduce la senescencia prematura y la esporulación de P. sparsa
(Hausbeck et al., 1996).
Método de riego. Debido a que P. sparsa
es un patógeno dependiente del agua libre en
las hojas para su desarrollo, el mantenimiento
del follaje seco a través de la estación del
cultivo se convierte en una herramienta vital
para el manejo de la enfermedad. Así, O´neill
et al. (2002), demostraron que el riego aplicado al suelo (subirrigación en túnel) ayuda a
reducir el porcentaje de plantas afectadas a un
mínimo nivel comparado con el sistema de
riego por aspersión. Aunque mejores resultados se obtienen cuando se combinan la aplicación de fungicidas con el riego apropiado
para el manejo de la enfermedad.
El porcentaje del área afectada en las
hojas es reducido cuando se aplican fungicidas al suelo como Fosetil-Al, seguido por la
mezcla de Cimoxanil + Mancozeb + Oxadixil, la mezcla de Thiram + Metalaxil y
aspersiones foliares de Clorotalonil, alterando
aplicaciones cada 10 ó 14 días; y cuando se
sigue un programa de riego por subirrigación
al suelo, comparado con riego por aspersión.
Manejo de la fertilización. El vigor del
hospedante mediante una nutrición adecuada
es una práctica común de manejo preventivo
de enfermedades y se hace con el fin de que
las plantas sean menos susceptibles a los
patógenos. Según la literatura, algunos elementos nutricionales como: nitrógeno, potasio, calcio, boro, silicio y la relación N: K son
importantes en el aumento de resistencia a
parásitos obligados como P. sparsa (Ivancovich, 1996; Krauss, 2001).
Un estudio realizado por Castillo et al,
(2010), demostraron que el aumento de la
concentración de N, favoreció la incidencia y
severidad del Mildeo velloso, mientras que el
aumento de la concentración de Si, Ca y Mn,
redujo la incidencia y severidad de la enfermedad.
Varios reportes han descrito la efectividad del fosfonato (sales de potasio) como
inductores de resistencia en varios patosistemas, por ejemplo, en los patosistemas
maíz/Puccinia sorghi Schwein (Reuveni et
al., 1994), maíz/Exserohilum turcicum
(Pass.)K.J. Leonard & Sugss., pepino/Sphaerotheca fuliginea (Schltdl.) Polacci
(Reuveni et al., 1993), pimentón/Leveillula
taurica (Lev.) Arnaud (Reuveni et al., 1998)
y coliflor/Peronospora parasítica (Pers. ex
Fr.) Fr. (Becot et al., 2000).
Inmunización
30
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
Es el proceso mediante el cual, se cambia la
naturaleza fisiológica y física del hospedante
con el fin de prevenir la infección, o permitirle a la planta rechazar la infección. En esencia, inmunización es mejoramiento de la
resistencia a enfermedades (Castaño-Zapata,
1994).
El manejo del Mildeo velloso con variedades resistentes es difícil, debido a la alta
susceptibilidad de la mayoría de las variedades comerciales de rosa cultivadas en el
mundo. En Colombia, el patógeno es altamente agresivo sobre las variedades Charlotte, Classy, Dolores, Frisco, Konfetti, Livia,
Mystique, Osiana, Pavarotti y Ravel (Flórez,
1996; Restrepo, 1996).
Con respecto al grado de susceptibilidad
de los patrones, Martínez (2002), evaluó la
respuesta de tres materiales injertados: Charlotte, Livia y Aalsmeer Gold, sobre los patrones Manetti y Natal Brier, y logró determinar
que las plantas injertadas sobre Manetti presentaban mayor enfermedad en comparación
con Natal Brier.
Gómez y Arbeláez, (2005) demostraron
que la variedad „Classy‟ presenta los períodos
de latencia más cortos y la mayor producción
de esporangios en cuatro temperaturas evaluadas (10, 14, 18 y 22 ºC), mientras que los
períodos más largos se presentan en „First
Red‟ con una producción reducida de esporangios.
El conocimiento del nivel de variabilidad
de un patógeno y de su estructura poblacional
en una región determinada, es fundamental
para el diseño de estrategias de manejo de la
enfermedad que causa, por cuanto ofrece
información valiosa sobre los linajes genéticos del patógeno que deben incluir los programas de resistencia.
Actualmente, en la Universidad Nacional
de Colombia sede Medellín, existe una colección representativa de 34 aislamientos de P.
sparsa colectados en la sabana de Bogotá y el
oriente antioqueño, principales zonas cultivadoras de rosas para exportación en Colombia
(Ayala-Vásquez, et al., 2008).
INTEGRACION DE LAS PRÁCTICAS
DE MANEJO.
James Edward Van der Plank (1963), fue el
primero en incluir el modelo logístico en el
manejo de enfermedades de plantas. Este
modelo reconoce que la infección que causa
enfermedad produce más propágulos después
de un periodo de latencia y la velocidad de
desarrollo de la enfermedad depende de las
condiciones ambientales (Castaño-Zapata,
2002).
A continuación se describe el modelo
logístico para manejar exitosamente una
enfermedad:
X = X0ert
Donde X: cantidad de enfermedad final ó
inóculo final, X0: cantidad de enfermedad
inicial ó inóculo inicial; e: constante universal
(2,718281828); r: velocidad con la que se
desarrolla la enfermedad; y t: tiempo que
transcurre para la producción final de enfermedad (X).
Examinando este modelo, se puede concluir que existen tres formas para reducir la
cantidad de enfermedad final en cualquier
punto de la epidemia, así:
reducir el inóculo inicial,
reducir la velocidad de desarrollo de la
epidemia
reducir la duración de la epidemia.
En la Tabla 1, se resumen las prácticas de
manejo integrado del Mildeo velloso de la
rosa y sus implicaciones epidemiológicas,
desde el punto de vista del modelo logístico.
CONCLUSIONES
Esta revisión de literatura se convierte en la
base fundamental para el desarrollo de un
programa de manejo Integrado del Mildeo
velloso de la rosa en Colombia. Aunque
algunas investigaciones necesitan ser validadas para las condiciones de cultivo en el país,
como por ejemplo, el sistema de pronóstico
desarrollado en california, estados Unidos, la
mayoría de las tácticas alternativas al manejo
químico han demostrado ser altamente eficaces, seguras y fáciles de implementar. Quizá
la razón más importante para el desarrollo de
este enfoque, es la disminución del riesgo de
resistencia por parte del patógeno al uso
indiscriminado de moléculas químicas de
acción específica como Metalaxil ó FosetilAl.
Es necesario que la comunidad científica,
principalmente de fitopatólogos y fitomejoradores, propongan investigaciones en control
biológico y desarrollo de variedades resistentes al Mildeo velloso de la rosa, debido a que
son los temas menos estudiados, no obstante
la gran importancia que tiene el cultivo de la
rosa en Colombia.
REFERENCIAS BIBLOGRÁFICAS
Aegerter, B., Nuñez, J., y Davis, R. 2002.
Detection and management of downy
mildew in rose rootstock. Plant Dis.
86:1363-1368.
Aegerter, B., Nuñez,J., y Davis, R 2003.
Environmental factors affecting rose
downy mildew and development of a forecasting model for a nursery production
system. Plant Dis. 87:732-738.
Ayala-Vásquez, M., Argel-Roldan, L., Jaramillo-Villegas, S .y Marín-Montoya, M.
2008. Diversidad genética de Peronospora sparsa (Peronosporaceae) en cultivos
de rosa de Colombia. Acta Biol. Colomb.
13(1):Pp.79-94.
Beckerman, J. 2009. Downy mildews. En:
Purdue extension diseases of landscape
Tabla 1. Integración de las prácticas de manejo Integrado del Mildeo velloso de la rosa causado por P.
sparsa y su efecto epidemiológico, de acuerdo al modelo logístico.
Método de manejo
Factor epidemiológico
Evitación del patógeno
Selección del sitio de siembra
Uso de esquejes libre de la enfermedad
Exclusión del patógeno
Tratamiento de esquejes
Inspección y certificación de material de propagación
Erradicación del patógeno
Destrucción de tejido enfermo
Destrucción de hospedantes alternos
Rotación de cultivos
Desinfestación de herramientas
Protección de la planta
Aspersiones con fungicidas
Control biológico
Manejo de la fertilización
Manipulación de ambiente
Arreglo de las distancias de siembra
Manejo del riego
Inmunización (resistencia genética)
Resistencia monogénica
Resistencia poligénica
plants. REV 4/09. 3 p. http:// www.extension.
purdue.edu/extmedia/BP/BP-68-W.pdf.
Consulta: mayo 2011.
Burdon, J., y Chilvers, A. 1982. Host density
as a factor in plant disease ecology. Ann.
Rev. Phytopathol 20:143-66.
Castaño-Zapata, J. 1994. Principios básicos
de fitopatología. Segunda Edición Zamorano Academic Press. Honduras C.A.
538p.
Castaño-Zapata, J. 2002. Principios básicos
de fitoepidemiología. Editorial Universidad de Caldas. Manizales. 389p.
Castaño -Zapata, J. 2008. Efecto epidemiológico de la sanidad sobre el manejo del
Mildeo velloso de la rosa. Acopaflor,
abril 2008. Pp. 40-42.
Castillo C., Álvarez, E., Gómez, E., Llano,
G., y Castaño-Zapata, J. 2010. Mejoramiento nutricional de la rosa para el manejo de Peronospora sparsa Berkeley,
causante del Mildeo velloso. Rev. Acad.
Colomb. Cienc. 34 (131): 137-142.
Chase, A. 2005. The low down on downy
mildew. Greenhouse Product News
15(8)
1-4,
http://www.gpnmag.com
/articles/CHASE.pdf. consulta: mayo
2011.
Engelhard, A. 1991. Manage crop diseases
with IPM. Grower Talks.
Filgueira, J. 2004. Estudio microscópico del
desarrollo biológico de Peronospora
sparsa en rosa bajo condiciones controladas. XXV Congreso ASCOLFI. Palmira,
Colombia 11-13 de agosto de 2004.
Flórez, R. 1996. El papel de las fenilamidas
en el manejo del Mildeo velloso en ornamentales. Acopaflor. 3(5):30-31.
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
X0 /
r
X0
X0
r
r
X0
r
Gill, D. 1977. Downy mildew of roses in
Georgia. Plant Disease Reporter 61 (3):
230-231.
Gisi, U. 2002. Chemical control of downy
mildews. Pp.119-159. En: SpencerPhilips, P., Gisi, U. y Lebeda, A. 2003.
Advances in Downy Mildew Research.
Kluver Academic Publisher, Holanda.
284p.
Gómez, S., y Arbeláez, G. 2004. Biología de
Peronospora sparsa agente causal de
Mildeo velloso en rosa y su relación con
el desarrollo de la enfermedad bajo condiciones de invernadero en la Sabana de
Bogotá. XXV Congreso ASCOLFI. Palmira, Colombia 11-13 de agosto de 2004.
Gómez, S., y Arbeláez, G. 2003. Evaluación
del período de latencia y capacidad de
producción de inóculo de Peronospora
sparsa, agente causal del Mildeo velloso
en tres variedades de Rosa. XXIV Congreso ASCOLFI. Armenia, Colombia 2527 de junio del 2003.
Gómez S. 2004. Determinación de componentes de la biología de Peronospora
sparsa Berkeley, y caracterización de la
respuesta de tres variedades de rosa a la
infección del patógeno bajo condiciones
de laboratorio e invernadero [Tesis de
Maestría]. Bogotá Facultad de Agronomía, Universidad Nacional de Colombia.
Hall, G., Cook, R. y Bradshaw, N. 1992. First
record of Peronospora sparsa on Prunus
lauroceraceus. Plant Pathology 41:224227.
Hausbeck, M., Pennypacke, S., Stevenson, R.
1996. The use of forced heated air to
manage Botrytis stem blight of geranium
stock plants in a commercial greenhouse.
Plant Dis. 80:940–43.
31
Hausbeck, M. 2007. Research advances for
downy mildew control on rose. Purdue
extension program. GMPRO, http://
www.veggies.msu.edu/Publications/GMP
ro2007_27(12)50-54_roseDM.pdf. Consulta: mayo 2011.
Hollier, C., Overstreet, C. y Holcomb, G.
2001. Rose diseases. Publication 2613.
Louisina, EEUU: Louisiana State University Agricultural Center, http://text.
lsuagcenter.com/NR/rdonlyres/ 4CF470
19-DF0F-402A-92F1-C3C727DFED3F/
38087/pub2613rosediseasesHIGHRES1.p
df. Consulta: mayo 2011.
Horst, K. 1983.Compendium of rose diseases.
St. Paul, EEUU: American Phytopathological Society Press. 50p.
INFOAGRO. Sin fecha. El cultivo de rosas
para corte, www.infoagro.com/ flores/flores/rosas.htm. Consulta: mayo
2011.
Ivancovich, A. 1996. Manejo de enfermedades. En: Bota, G., Ivancovich, A., Ploper,
L., y Laguna, I. (Eds.) Enfermedades de
la Soya. Manual de Diagnóstico y Manejo, INTA CRBAN EEA Pergamino-Pp.
15-32.
Keel, C., Wirthner, P., Oberhansli, H., Voisard, C., Burger, D. y Défago, G. 1990.
Pseudomonades as antagonists of plant
pathogens in the rhizosphere: Role of the
antibiotic 2,4-Diacetylphloroglucinol in
the suppression of black root of tobacco.
Symbiosis 9:327-341.
Krauss, A. 2001. Potassium and biotic stress.
Presented
at
the
1st
FAUBAFERTILIZAR-IPI Workshop on Potassium in Argentina‟s Agricultural Systems. 20-21 November 2001, Buenos
Aires, Argentina. International Potash Institute (IPI).
Lindqvist-Kreuze, H., Koponen, H., y
VALKONEN, J. 2002.Variability of Peronospora sparsa (syn. P. rubi) in Finland as measured by amplified fragment
length polymorphism. Eur. Journ. Plant
Pathol. 108:327-335.
Margery, L., Daughtrey, D., y Benson, M.
2005. Principles of plant health management for ornamental plants. Annu. Rev.
Phytopathol. 43:141–69
Martínez, J. 2002. Respuesta de tres variedades de rosa injertadas en dos patrones, al
Mildeo velloso, Peronospora sparsa,
Berk. [Trabajo de pregrado]. Bogotá: Facultad de Agronomía, Universidad Nacional de Colombia.
Maurhofer, M., Hase, C., Meuwly, P., Metraux, J., y Defago, G. 1994. Induction of
systemic resistance of tobacco to tobacco
Necrosis virus by the root-colonizing
32
Pseudomonas fluorescens strain CHAO:
Influence of the gacA gene and of
pyoverdine production. Phytopathology
84:139-146.
Michelmore, R., Ilott, T., Hulbert, S. y Farrara, 1988. The Downy mildews. En: Advances in Plant Pathology. Academic
Press (6). 566p.
Montilla, J., Delgado, B. y Jiménez, N. 2003.
Agentes causales e intensidad de enfermedades fungosas en mora de Castilla en
el estado Lara. Fitopatología Venezolana
16 (2):31-34.
O'neill, T., Pye, M., y Locke, T. 2002. The
effect of fungicides, irrigation and plant
density on the development of Peronospora sparsa, the cause of downy mildew
in rose and blackberry. Annals of Applied
Biology 140: 207–214.
Pal, K., y McSpadden, B. 2006. Biological
control of plant pathogens. The Plant
Health Instructor, American Phytopathologycal Society, APS-NET, http://www.
apsnet.org/edcenter/advanced/topics/
Documents/PHI-BiologicalControl.pdf.
Consulta: mayo 2011.
Pizano, M. 2001. Producción de flores sin
bromuro de metilo. Floricultura y Medio
Ambiente. División de Tecnología, Industria y Economía del Programa de las
Naciones Unidas para el Medio Ambiente
(PNUMA DTIE). 126p.
Quiroga, B., y Arbeláez, G. 2004. Evaluación
de la eficacia de cuatro fungicidas aplicados al suelo y al follaje para el control de
Mildeo velloso, ocasionado por Peronospora sparsa, en un cultivo comercial de
rosa, variedad Charlotte. Agronomía Colombiana 22 (2):110-118
Restrepo, L. 1996. Susceptibilidad de las
rosas a los mildeos. Acopaflor 3(5)3-6.
Reuveni, M., Agapov, V. y Reuveni, M.,
1993. Induction of systemic resistance to
powdery mildew and growth increase in
cucumber by phosphonates. Biol. Agric.
Hort. 9:305-315.
Reuveni, R., Agapov, V. y Reuveni, M.,
1994. Foliar spray of phosphates induces
growth increase and systemic resistance
to Puccinia sorghi in maize. Plant Pathology 43:245-250.
Reuveni, R., Dor, G. y Reuveni, M., 1998.
Local and systemic control of powdery
mildew (Leveillula taurica) on pepper
plants by foliar spray of monopotassium
phosphate. Crop Protection 17:703-709.
Stefanova, M., Rodríguez, F., Muiño, B., y
Villa, P. 2007. Control biológico del
Moho azul (Peronospora tabacina
Adam) en el cultivo del tabaco (Nicotiana
tabacum L.). Instituto de Investigación de
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 No 1
Sanidad Vegetal. La Habana, Cuba Fitosanidad: 11(4) 31-36. http://redalyc. uaeuaemex.mx/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=2
09116154005. Consulta: mayo 2011.
Becot, S., Pajot, E., Le Corre, D., Monot, C.,
y Silue, C. 2000. Phytogardt (K2 HPO3)
induces localized resistance in cauliflower to downy mildew of crucifers. Crop
Protection 19:417-425.
Suárez, G. 1999. Problemática actual del
Mildeo velloso en rosa. VIII Congreso
Acopaflor – Asocolflores. Santa Fé de
Bogotá. 22 de septiembre de 1999.
Tamayo, J. 2001. Principales enfermedades
del tomate de árbol, la mora y el lulo en
Colombia. Rionegro. CORPOICA. 40p.
Tenjo, F., Montes, E., Martínez, J. 2006.
Comportamiento reciente (2000-2005)
del sector floricultor colombiano,
http://www.banrep.gov.co/docum/ftp/borr
a363.pdf, consulta: mayo 2011.
Thomashow, L., y Weller., D. 1995. Current
concepts in the use of introduced bacteria
for biological disease control: mechanisms and antifungal metabolites. Pp. 187235. En: Stacey, G., y Keen, N. (ed.),
Plant-Microbe Interactions, Vol. 1.
Chapman & Hall, New York. 316p.
Van der Plank, J. E. 1963. Plant diseases:
Epidemics and control. Academic Press,
New York. 349 p.
Velez, E. 2007. Colombian floriculture: A
case of competitive entrepreneur ship,
with social and environmental responsibility, in a country under difficult and
changing conditions. En: http://proflora.
com.co/asocolflores/servlet/Download?id
ExternalFile=873&name=Colombian
+Floriculture+by+E.Velez+Feb.+2007.pd
f. Consulta: mayo 2011.
Virany, F. 1988. Changes in pigment constitution of downy mildew sunflower after
metalaxyl treatment. Act. Fitopat. y Entom. Húngara 23:21-25.
Walter, M., Harris-Virgin, P., Thomas, W,.,
ate, G., Waipara., N. y Langpord, G.
2004. Agrochemicals suitable for downy
mildew control in New Zealand Boysenberry Production. Crop Prot. 23:327-333.
Wetzel, H. 1929. The terminology of plant
pathology. Proceedings International
Congress Plant Science, Ithaca, NY,
1926. Pp. 1204-1215.
Wipps, J. 2001. Microbial interactions and
biocontrol in the rhizosphere. Exp. Bot.
52:487-511.
REVISTA FITOPATOLOGÍA COLOMBIANA
Normas para la elaboración de artículos
Presentación del Trabajo
Para enviar el trabajo a la revista (original y tres copias), se deberá aplicar el siguiente orden, comenzando cada ítem en páginas independientes, según
lo detallado a continuación:

Carátula: Una página con el título del artículo, el autor, su dirección y el tipo de publicación y la entidad. (1 página).

Resumen y palabras claves (1 página)

“Summary “ y palabras claves en inglés (1 página).

Cuerpo del trabajo (Texto). (Las necesarias sin sobrepasar los límites de este reglamento).

Agradecimientos (si lo considera necesario).

Referencias Bibliográficas.

Tablas (1 por página). (Con su respectivo título ).

Figuras (una por página, debidamente numeradas).

"Leyendas" o pies de las figuras.
Estructura general, secciones
El artículo científico incluirá las secciones que se indican más adelante; en la nota científica se podrán unir algunas de las secciones y la revisión
bibliográfica es de estructura libre. Los tres tipos de colaboraciones deben incluir siempre el resumen y el “summary”.
La estructura del artículo científico debe contener lo siguiente:
1. Título
Deberá reflejar adecuadamente el contenido de la publicación con el menor número posible de palabras; estas no deben ser más de veinte. El
título no debe incluir abreviaturas ni fórmulas químicas (salvo para los isótopos).
2. Autor(es)
Se describirán su nombre y apellidos debajo del título, seguidos del nombre de la entidad donde se generó la investigación y la dirección y la del
autor. Enseguida se coloca, si es el caso, toda la información correspondiente al personal técnico que haya colaborado en la investigación.
3. Resumen y “Summary”
El resumen debe hablar de la naturaleza e importancia del trabajo, la metodología usada y los resultados sobresalientes. Debe tener un máximo de una
página (200 a 300 palabras) si corresponde a un artículo científico, o de media página si corresponde a una nota técnica o científica.
4. El “summary”
Es la traducción al portugués o al inglés del resumen, incluido el título. Si se desea, se pueden adicionar resúmenes en Portugués, Francés, o Alemán.
5. Palabras claves
Deberá seleccionarse la palabra o palabras claves más importantes, preferiblemente no contenidas en el título, y colocarlas en un listado lo más
breve posible.
6. Introducción
Deberá destacar la necesidad e importancia de la investigación, mencionar las limitaciones del trabajo, y los resultados de otros trabajos similares o
relacionados (revisión de literatura breve referida a la información más relevante).
7. Materiales y métodos
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 (1)
33
Se deben escribir en forma ordenada, clara y precisa, con detalles suficientes para que el lector pueda, si lo desea, repetir el experimento.
8. Resultados y discusión:
Ambos temas se pueden incluir preferiblemente en una sola sección. Los resultados se deben escribir en forma precisa y ordenada. En la discusión se
explican los hechos y se relacionan con los resultados de otras investigaciones, debidamente sustentados con citas bibliográficas entre paréntesis,
utilizando el Sistema Autor, Año.
9. Conclusiones
Deben ser breves y claras y basarse estrictamente en los resultados (no en conjeturas).
10. Agradecimientos
(Si se desea).
11. Referencias Bibliográficas
Se debe limitar a la estrictamente necesaria y en relación directa con la investigación realizada. Todas las referencias citadas en esta sección
deben ser citadas en el texto. Las referencias se deben colocar en la lista en orden alfabético por los apellidos de los autores.
Cuando hay varias referencias encabezadas por un mismo autor, se escriben primero aquellas en las cuales éste aparece sólo, y luego aquellas
en las que está seguido por coautores; dentro de cada grupo se sigue en orden cronológico. No use la palabra ¨Anónimo¨ para asignar autores
desconocidos; en su lugar, escriba el nombre del editor (seguido de un paréntesis con la abreviatura ed. o eds.) o el de la editorial o, si no hay
ninguno comience con el título de la obra.
No incluya en la bibliografía las referencias de informaciones personales, ni de trabajos sin publicar aunque estén aceptados. Estas fuentes se
pueden citar en el texto, entre paréntesis. La referencia de una publicación periódica se hará en el siguiente orden: autor, año, título del artículo,
nombre abreviado de la revista, volumen, número (entre paréntesis) y páginas.
Ejemplo:
Bowman, J.M., Delwiche, P.A., Brabiebson, R.L. y Williams, P.H. 1980. Lepthosphaeria maculans on cabbage in Wisconsin. Plant. Dis. 64(3):326328.
En los libros y folletos el orden general es: autor, año, título, número de la edición, casa editora, lugar de la publicación y número de páginas.
En caso de incluir referencias consultadas electrónicamente en Internet estas se pueden presentar en el siguiente orden:
Autor(es). Año de publicación. Título del documento. Subtítulo. El medio, en línea [entre corchetes]. Número de la edición (sólo a partir de la
segunda). Editorial o entidad que publica en web. Lugar de publicación. Fecha en que se consultó el material, para los documentos en línea [entre
corchetes].Serie, si la tiene (entre paréntesis). Disponible en:
Ejemplos:
Dollar, D. y Kraay, A. 2000. Growth is good for the poor [en línea]. World Bank. Washington, DC. [consultado 15 Septiembre 2001]. Disponible
en : http://www.worldbank.org/research/growth/pdfiles/growthgoodforpoor.pdf
Jiménez, C. (s.f.). Intervención del hombre en los ecosistemas naturales [en línea]. [citado 16 octubre 2001]. Disponible en:
http://www.monografias.com/trabajos7/ecna/ecna.shtml
Gottret, M.V. y Raymond, M. 1999. An analysis of a cassava integrated research and development approach: Has it really contributed to poverty
alleviation? [on line]. In: International Workshop Assessing the Impact of Agricultural Research on Poverty Alleviation (1999, San José,
Costa Rica). Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT), Cali, CO. [consultado 21 Septiembre 2001]. Disponible en : http://ciatlibrary.ciat.cgiar.org/paper_pobreza/038.pdf
34
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 (1)
Myers, M.P., Yang, J. y Stampe, P. 1999. Visualization and functional analysis of a maxi-K-channel (mSlo) fused to green fluorescent protein
(GFP). Electronic Journal of Biotechnology 2(3) [en línea ]. [consultado 21 Marzo 2000]. Disponible en :
http://www.ejb.org/content/vol2/issue3/full/3/index/html
Dávila, M. y Coyne, D. 2000. Detección de genes de letalidad en caraota mediante el uso de la técnica de análisis de segregantes en grupos.
Agronomía Tropical 50(3):323-335 [en línea]. [citado 12 octubre 2001]. Disponible en: http://www.redpav-fpolar.info.ve/agrotrop/index.html
Extensión y formato para los trabajos
La extensión máxima del artículo completo (Resumen, “summary” cuerpo, agradecimientos, referencias, tablas y figuras ) escrito con un tipo de letra de
12 cpi (caracteres por 2,5 cm o una pulgada) será de 16 páginas a doble espacio si se trata de un "artículo científico" o una "revisión bibliográfica"; 6
páginas si es una "nota científica" y una página si es una "carta al editor”
Cualquier colaboración para la revista debe estar mecanografiada o mecanotipiada en papel tamaño carta, por una sola cara, a doble espacio y con
letra grande (no más de 12 caracteres por pulgada). Los márgenes superior, inferior, izquierdo y derecho tendrán 2,5 cm. Cada página se numerará en la
esquina inferior derecha.
Se prefieren los trabajos elaborados en computador utilizando el procesador de palabra "Word". A la copias del escrito impresas en texto de alta
calidad se anexará el disquete o el Disco compacto respectivo conteniendo exactamente lo presentado en el escrito..
Los títulos de primer orden deben ser en mayúsculas; los títulos de segundo orden deben ir en minúsculas; los títulos de tercer orden son en
minúscula, dos puntos y seguido de texto, así:
TITULO DE PRIMER ORDEN
Título de segundo orden
Título de tercer orden: Seguido de texto como en este ejemplo.
Redacción general y estilo
El trabajo se debe redactar en pasado impersonal y debe ser claro, conciso, coherente y exacto. Los nombres científicos se deben escribir en itálicas y
completos la primera vez que se nombren; después se pueden abreviar, escribiendo sólo la inicial del género, pero dejando la especie completa.
Las referencias deben ser citadas en el texto utilizando el Sistema Autor, Año, colocados en paréntesis, por ejemplo (Arbeláez, 1988). Cuando son
varios (más de dos) los autores de la publicación citada, debe colocarse el primer autor seguido del latín et al. y luego el año respectivo, pero en el
listado de Referencias Bibliográficas deben figurar todos los autores.
Al referirse a productos se deben preferir los nombres comunes a los comerciales. En el caso de nombres de marcas registradas, se deben escribir
seguidos de la letra R (mayúscula) y de la dirección del fabricante.
Para las unidades de medida se debe usar el Sistema Internacional de Unidades (SI).
Tanto las tablas como las figuras se deben numerar en forma consecutiva con números arábigos. Todos ellos, al igual que todas las referencias
bibliográficas se deben citar en el texto.
En la medida de lo posible se deben evitar las notas de pie de página. Es preferible reemplazarlas por paréntesis dentro del texto.
Elaboración de tablas
Cada tabla o figura se debe presentar en una hoja aparte, al final del texto, pero debe estar nombrada dentro de éste.
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 (1)
35
Las tablas deben ser sencillas y contener sólo la información
indispensable para claridad del trabajo. Su formato puede o no llevar
Tabla 5. Incidencia y severidad de la Antracnosis en mango cultivar HadenICA, bajo diferentes medidas de manejo de la enfermedad, durante 1993.
líneas verticales; se recomienda dejar solamente las horizontales
necesarias para destacar el encabezamiento (títulos y subtítulos de las
columnas) y para cerrar los datos, al final de la misma. La tabla debe estar
Tratamientos
1
2
3
identificada por un número y por un título, el cual debe ser claro y autoexplicativo. Los datos no deben ser una repetición de los del texto o de
4
alguna figura y deberán limitarse a aquellos indispensables para claridad
5
del artículo científico.
6
Ejemplo:
Los valores contenidos en las tablas deben usar el punto (.) para
separar los miles y la coma (,) para los decimales, ejemplo 1.545,20.
9
12
13
Aspersión floración
Aspersión frutos alfileres
Aspersión frutos con 50% de
maduración
Aspersiones floración y frutos
alfileres
Aspersiones floración y frutos con
50% maduración
Aspersiones floración a cosecha (8
aspersiones)
Podas floración a cosecha
Aspersiones floración a cosecha y
podas
Testigo absoluto
Incidencia
(%)
Severidad
(%)
81,7 AB
80,33 AB
73,33 B
50 A
50 A
40 AB
74,33 B
40 AB
72,66 B
38 AB
50,50 C
20 C
66,67 B
25,34 D
45 A
10 D
90,0
55 A
A
La tabla puede incluir abreviaturas y llamadas, las cuales se identificarán con letras minúsculas (usadas a manera de exponentes para que no se
confundan con los correspondientes a diferencias estadísticas). Las llamadas se aclararán en las notas de pie. Cuando hay niveles de significación
estadística, se indican con asteriscos (uno a tres) y se explican en las notas del pie de la tabla.
El número de tablas a incluir en el artículo deben ser las estrictamente necesarias
Figuras
Por figuras se entienden diferentes ilustraciones como fotografías, gráficas, mapas, dibujos, etc. Al igual que las tablas, deben tener un título claro, y
estar numeradas en el orden en que se citan en el texto. Deben ser muy nítidas y de buen tamaño, teniendo en cuenta que su calidad disminuye en el
proceso de impresión, y que en dicho proceso ellas no se ampliarán sino que muy probablemente se reducirán.
Las fotografías deben ser en papel brillante y con buen contraste, y estar bien enfocadas sin elementos distractores (etiquetas elaboradas a mano
con letras más grandes que el sujeto a destacar); también se aceptan transparencias a color de buena calidad o imágenes electrónicas en formato JPG
entre 500 y 1000KB en su respectivo diskette o CD.
En cuanto al número de fotografías a incluir deben ser las estrictamente necesarias y preferiblemente en una composición.
Las gráficas deben ser sencillas en la medida que lo permita el trabajo y todos sus elementos deben estar identificados claramente. Cuando se
elaboren mediante el uso de computador debe incluirse los archivos en el disquete o un disco compacto, indicado en la etiqueta el programa y la
versión del mismo. Utilizar tramas y tonos de gris contrastantes. Se prefiere que las gráficas no sean a color.
Las ¨leyendas¨ de las figuras y las convenciones, si las hay, deben quedar dentro del área del gráfico colocadas en una posición conveniente de
manera que faciliten la interpretación.
Los pies de figuras o títulos de estas deben elaborarse en una página aparte y no dentro del área de la gráfica del archivo electrónico, el texto debe
ser lo suficientemente descriptivo como para que se pueda entender sin recurrir al texto.
Cada figura debe estar identificada al respaldo con su número correspondiente y con el nombre del autor del artículo. Figuras desalineadas, con
líneas borrosas o fotocopias no serán aceptadas.
Solamente incluir las estrictamente necesarias (los costos de separación de color e impresión son muy altos). Nota: Para mayor ilustración respecto a
estas normas se pueden consultar las guías para preparación de artículos de “Plant Disease”, “Phytopathology” y especialmente las instrucciones para
los autores de la Revista Corpoica 2(1): 64-70, 1997
36
2011 Fitopatología Colombiana /Volumen 35 (1)
“FITOPATOLOGÍA COLOMBIANA”
Órgano de difusión de la Asociación Colombiana de Fitopatología y Ciencias
Afines- ASCOLFI
ISSN 01120-0143
Contacto Revista:
Oficina Ascolfi, Km 1 Vía al Penal Granja Corpoica C.I. Palmira
Cel. +57- 3164303079
Palmira - Valle del Cauca – Colombia
Apartado Aéreo 5004- Cali- Valle del Cauca -Colombia
Correos electrónicos: [email protected]
[email protected]
Página web:
http://www.ascolficolombia.org/
Suscripciones y Canje: [email protected]
26
[email protected]
ASOCIACIÓN COLOMBIANA DE FITOPATOLOGIA
Y CIENCIAS AFINES, ASCOLFI
Misión
Contribuir a la creación y utilización del conocimiento científico en la fitosanidad para
facilitar soluciones a los problemas de la producción de cultivos sanos con rentabilidad
social y económica, protegiendo el medio ambiente
Visión
Ser una entidad líder, reconocida nacional e internacionalmente por su excelente labor
en beneficio de la promoción, divulgación y consolidación del conocimiento científico
de personas e instituciones allegadas a la fitosanidad y sus ciencias afines como
elemento esencial de la producción de cultivos de alta calidad
Objetivos
Contribuir a la creación de una conciencia nacional sobre la importancia de la
ciencia y tecnología en la sanidad vegetal como aporte al desarrollo agropecuario
y económico del país
Promover el interés en todos los aspectos de la fitopatología y ciencias afines
Contribuir a la creación y difusión del conocimiento científico de la fitopatología
y ciencias afines
Promover y estimular la publicación de los resultados de los estudios y/o
investigaciones sobre fitopatología y ciencias afines
Promover la cooperación entre entidades del sector público y privado tanto
nacional como internacional que tengan interés en estas disciplinas
Promover el mejoramiento del nivel académico de sus asociados y de quienes
manifiesten interés en las áreas de la fitopatología y ciencias afines
Estrechar los vínculos de solidaridad y compañerismo entre sus afiliados
Informar y motivar a la opinión pública y sus representantes sobre la
problemática de las enfermedades de las plantas y su control
10
COMITÉ CIENTIFICO
Alberto Páez Redondo
Benjamín Pineda López
Bernardo Villegas Estrada
Carlos Germán Muñoz Perea
Diana Marcela Vanegas Villa
Edwinson Alberto Rojas Triviño
Elizabeth Álvarez Cabrera
Francia Varón de Agudelo
Francisco José Morales Garzón
Gerardo Martínez López
Gloria María Mosquera Cifuentes
Gustavo Adolfo Prado
Iván Lozano Potes
Jairo Castaño Zapata
Jesús Eliecer Larrahondo Aguilar
Jesús Humberto Gil Gonzales
Jhon Jairo Méndez Arteaga
Jorge Enrique Gómez Hurtado
Jorge Ignacio Victoria Kafure
José María Hernández Murillo
Juan Carlos Ángel Sánchez
Juan Gonzalo Morales Osorio
Liliana María Hoyos Carvajal
Marina Sánchez de Prager
Maritza Cuervo Ibañez
Mónica Betancourth Vásquez
Oscar Adrián Guzmán Piedrahita
Pedro Alfonso Alarcón Gómez
Rodrigo Orlando Campo Arana
Ing. Agr. – M Sc Fitopatología
Ing. Agr. – M Sc Fitopatología
Ing. Agr. – M Sc Fitopatología
Ing. Agr. – Ph D in Plant Sciences
Adm.CAgr. M Sc. Biotecnología
Microbiólogo – M Sc Fitopatología
Ing. Agr. – Ph D Fitopatología
Ing. Agr. – M Sc Fitopatología
Ing. Agr. – Ph D Virología
Ing. Agr. – Ph D Virología
Bacterióloga – Ph D Fitopatología
Ing. Agr. – M Sc Ciencias Agrícolas
Biólogo Genetista – M Sc Ciencias
Ing. Agr. – Ph D Fitopatología
Químico – Ph D Fitoquímica
Quimico- Ph D Ciencias Químicas
Lic. Bio-Química, - Ph D Ciencias Químicas
Ing. Agr. – M Sc. Fitopatología
Ing. Agr. – Ph D Bacteriología
Ing. Agr. – Espec. Fitopatología
Ing. Agr. – M Sc Fitopatología
Ing. Agr, - Ph D
Ing. Agr. – Ph D Biología
Ing. Agr. – Ph D Suelos y Aguas
Ing. Agr. - M Sc Rec. Fitogenéticos
Ing. Agr. – Ph D Biotecnología
Ing. Agr.– M Sc Fitopatología
Ing. Agr. – M Sc Fitopatología
Ing. Agr. – Ph D Fitopatología
ARBITROS
Ana Cecilia Velasco Fernández
Bernardo Villegas Estrada
Bertha Lucia Castro C
Diana Marcela Vanegas Villa
José Maria Hernández Murillo
Maria Luisa Guzmán
Mauricio Castaño Jaramillo
Nelson Bravo Otero
Octavio Montoya Estrada
Bacterióloga
Ing. Agr. – M Sc Fitopatología
Ing. Agr. M Sc.Fitopatología
Adm. C Agr. – M Sc. Biotecnología
Ing. Agr. – Espec. En Fitopatología
Bacterióloga y Laboratorista Clínica
Ing. Agr.
Ing. Agr. – M Sc Sistemas de Semilla
Ing. Agr.
1
2