El Carácter de Pedro Santana
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El Carácter de Pedro Santana
, El(arácter de Pedro Santana Por RAMON LUGO LOVATON- Nacimiento de Pedro Santana A El acta de nacimiento del .hombre que .naci6 en la Iejana y fronteriza aldea de Hincha, terrateniente en el Seybo, sálditdo de la .Patria,-cuatro veces Presidente de la Itpii'blica, autor de la Anexi6n a España y Marqués de Las Carreras, no se conoce. I Escribe Temístocles Ravelo en u3 .bajo Santana: .... :, biografico acerca de ei ajuar de epae &e&' por el Camino ;real,de Bal&ita dero que va a San Juan de ky de la Maguana para seguir el de Conshz&i?.$3 las familias iban.las de los 'Ruiz, zorriu, figura como elerne~cir~;) Santana. En esta dro Santana, casado con Petronila Famili+ jos mellizos, de aúos, Pedro y R d n " . ' < , th! ''Ambos Sarltanás, &%o y Ram6n, d b # zm,nacieron en el año 1801. Así es que cuan& Jgdqendencia con HaSi, *tenían44 *os cada&$ 1 L ;x ,$ . .! En interesante artículo, anota Vetilio Alfau Du-3 "Pedro y Ramón Santana eran hermanos a 4 ron al mundo el 2Sde junio del a50 1800 en jW$$ jpobiaci6n de Hinchajsegún st dto Aiejandrino tiene lb acta! Aunque no se conoCef& nos Santana, ni la fecha de& en qi completa: 29 & Junio de 1800; algupos inves-d~m,@ cam&te que fué en 1800. 0-tros consi Para la historia posterior de ambos importancia., para los investigadores, en cambio, es da$ que interesa. Ambito y ruta de Pedro Santuna Bajo la tutela rígida de España, en el poblado de@#& h h n t e r a del Sur, nacieron dos gemelos. Ha pasado un del siglo: 1801. En las amas tranquilas y profun&s de dei S&, chapotean los brazos de &I hijo de Petrona Familia. A lo -lejos la voz de su madre q u iladu, se esconde para no responder. En la &leada, pedregoM y rni aliá en el fondo, ter- de Haití, inerte, acechánte, fr! surge una vida. Surge y desarrolia, se desanalla y - 4.3[ ~pq-ulas energías perdidas: Mujeres en la vida <Ze Santana A grandes rasgos hemos visto el caricter de este ho& 'cia H i g h ~ c apagar una promesa a Ia Virgen de Alta b e . u a . r o c a . al. asustarse el animal en el sitio 11 .. Prieta':. :-.. . Santana estuvo a pun,tci de perder Ya razón. Cuando Seybo siempre iba al cementerio a encender velas en la' - . : I i ' h disiparlo de tan honda pena, su hemnano R ias nodies lo llevaba al puebo y visitaban el hogar de do del Ravero, viuda del capit5n de milicia? don Miguel F nilla, .madre de Froilana Febles, novia de Ramón. Del con aquella familia, resultir algo inesperado. Pedro S había perdido su primera novia, se enamoró de los encant Micada, .la suegra de su hermano, y resolvió casarse con,. @m fruto nació de aquel matrimonio. hijos ni pudo nunca hacerlo feliz. Todo ello contribuy necesario para todo hombre que lucha, y muy en aquellos que gobiernan y &rigen un pueblo. Cuando a b n z a los cincuenta y ocho años de edad y. ha ilegd~to a la Presidencia de la Repfiblica por cuarta vez, el 26 de noviembre de 1858, Santana contrae matrimonio .en la ciudad del Seybd con Ana Zorrilla, mayor que él, con sesenta años de edad, viuda cambien como su primera esposa. No obstante, con ella logró alguna felicidad, y aquella mujer, cuando llegó el momento, le cerró los ojos a h hordde su muerte. antana renuncia la Capitania General de la colonia Pasó el tiempo y poco a poco fué debilitándose la recia contextura de aquel hatero nacido en Hincha, soldado y hombre público. Estábamos- ya muy lejos, en la luctuosa década de los sesenta. I)t*-s~w rramos ahora, despuds de haber visto en forma panorámica y en ambiente rural, la nacencia y la evoluci6n de aquel hombre, otro amplio telon de boca, para contemplar, no al niño que nacit', por la frontera, al hijo de Petrona Familia, al terrateniente, al dueño, del Prado, al Presidente que vino por la llanura hasta Santo Dominga, sino al canuco, envenejecido, amargado y pesimista, don Pedro Santana, Marqubs de Las Carreras., \ ............................... ..................................................................................... kl '7 de Enero' de 1862, un hombre de mediana estatura, fruciel ceño. de anchas espaldas y pelo encanecido, leía arrellanado en un sillón de la Capitanía General de la Colonia, una importante carta que dirigía al Marqués de Miraflores, Presidente del Consejo de Ministros de Isabel Segunda y Ministro de Ultramar. Diez y ocho años hacía .que este personaje era el dueño de los destinos de la República. Su nombre señoreó durante todo ese largo período.' Menos mimado que Báez por la masa popular partidarista, logró sin embargo, ser más respetado por ella. Ahora, consumada la Anexión a España, este enigmático, diabólico y atrayente polihedro humano, renunciaba a la Reina el primer cargo público en Santo Domingo. La carta concentró en el primer párrafo, todo el nsamiento del general Don Pedro Santana (2): -- "Excmo. señor: Al manifestar a S. M. la reina nuestra señora, en carta que tuve la honra de dirigirle en Agosto del año próximo pasado, que para decidir la cuestión de conveniencja, de estreohar los lazos que hubieran de unir a este (2) Ver Ob. cit. de G o d e z Tablas, pAgs. 48-49 donde copia íntegramente la carta del General Santana al Ministro de Ultramar. Febrero. Este hombre extraordinario logró atar a su volu :* I L 1 1, 1 . . . ........................................................................................................... ...,....s i! Marquks de Las Can-eras gó el año 1862. Los dominicanosimiraban con hondo senti- 9 ' tinente los destinos inciatos de los .pueblos ,de Amkr*. poca cu]tura, pero fuertemente,,iiituiti*; hombre de tres o cu;rfro. ideas claras, basamentó con energía su dictadura en este afodsmo" . cfesnudo y doloroso que reza: la juer2r.z es ¿uk y . Cuando la lii~twia entre a analizar la vida de este hombre extraordinario, comp~:cndmá ' que fué útil a la ejecución de la Independencia, comprended que' las cuatro veces que fué. Presidente perdió grandes oportun'idadq de servir a la República; comprenderii finalmente, que Santaha, CQ&siderindose el único hombre capaz de rechazar a los liaitizhos, ,derra el panorama de sus ejecutorias como un nuevo Sánchez Kamírkz, " que por sentir muy honda la fibra ibérica, devuelve a Espaiía .lo que , dc España había sido. Santana no cae en la Iiistoria por l a An.mión, sino por lo que ella significa.para interpretar su psicología, presentando, el caso raro, de un combatiente en quien, las cru* y constantes luchas por evitar el tutelaje haitiano, no siembran en su e$ .L piritu la conciencia de su nacionalidad. la bandera peninsular qndeq sobre la Fortaleza, torreones y Santo Domingo. Un día, luego de previas tramitaciones, reubieron en el despacho del General Gándara un importante comunicado uiie decía: "i\4INISTERIO A GUERRA Y DE ULTRAMAR ULTIWMAR La Reina (q. D. g.) se ha dignado espedir el KcaI Decreto si- "EQ atención a. los relevantes servicios prestados al Estado por el Teniente General Don Pedro Santana, y de acuerdo ' -m -* - -- " -:,- - m .\: y .."" 4 S-, BOLETÍN ~m ARCHIVO G E ~ ~ D&AEN ,~ C I derle merced de Título de Castilla con la deno afarqués dc las Carreras, para si y SUS sucesores. Dado en Palacio a veinte y ocho de Marzo dé cientos sesenta y dos. Rubricado de la Real mano. n o de la guerra y de Ultramar, Leopoldo O'Donn Lo.que de Real orden comunico a V. E. para su e miento y efectos correspondientes, Dios guarde a V. chos años. Madrid 29 de Marzo de 1862". Señor Gobernador Superior Civil de la isla de Santp ...............-........................,......,...........................................- ......L.. L5'sija de Fernando Séptimo, por sugerencias acep rlueridd, 'harquesar los postreros años - del hijo de Hin día, ya ,&.J-ediados de 1863, recibió el ex Capitán General,, tiro del' cado vecinb del Seybo, un rico y encuadernado s satcí los plateados cordones del estuche negro y achatado y bro pararsu familia y para el coro de amigos que le rodé en las manos del hatero, recubierto en cuero repujado, un biliarrio, que anunciaba $@-precioso contenido en d cansado hombre de pd"kjj6,recorrib conrorgrtllo, llas nueve páginas, don& notables lipiniaturas?ejecutad nublaban al amparo de la'.~oronaBsabelina las agotadoras su espada. Santana ley6 parsirnoniosamente (a): REAL TITULO DE MARQUES DE LAS CARRE Concedido por Da. ISABEL 11. REINA DE L.4S ESP al TENIENTE GENERAL D. PEDRO SANTANA. DORA ISABEL 2a. por la gracia de Dios y la CO CION DE LA MONAKQUIA ESPAROLA. REINA DE LAS ESPARAS A VOS DON PEDRO S residente en la Ciudad de Santo Domingo, TENIE NERAL DE LOS EJERCI'TOS. YA SABEIS que en a las recomendables t:ircunstancias que en vos concurren consideración a los relevantes servicios que prestasteis al do con motivo de la gloriosa reincorporación de la i Santo Domingo en la Kaci6n española, vine en concede MI REAL DECRETO de veinte y ocho de Marzo de m (3) Por primera vez'se publica en la Repúl~lica,el qub de Las Carreras. texto del titul cientos sesenta p dos, merced.de TITULO D E + W T I L L Acon la denominación de MARQUES DE LAS CARRERAS, para vos y vuestros sucesores perpetuamente. En conseouencia para que esta gracia pueda tener su debido efecito por .el presente MI REAL DESPACIiO declaro ser MI ESPRESA VOLUNTAD que desde ahora en .adelante vos el referido DON PEDRO SANTANA y .vuestros sucesores ;os podais y se puedan8 llamar e intitular, Ilameís e intituleis MARQUES DE CARRERAS camo YO desde ahora os llamo nombro;e inGW lo. Por tanto encargo a MI MUY AMADO Y AUGUSTO-m-. JO EL PRINCIPE DE ASTURIAS, y mando a los. I-NSANTES, Prelados, Grandes cle España, Títulos lde Castilla; m e rales y Gefes de los Ejércitos y Armada, Presidente y Ministros del Tribunal Supremo de Justicia, Regentes y Magistrados .de las Audiencias, Gobernadores Civiles, Jueces de primera Instancia, Alcaldes y Ayuntamientos, y a cualquiera & o. autoridades del Reino, y especialmente a los Tribunales, Autoridades, Corporaciones y personas particulares de la isla de Santo Domingo a quienes corresponda, que os reciban hayan y tengan, llamen e intitulen MARQUES DE LAS CARRERAS q i a vos el espresado DON PEDRO SANTANA, como a vuestros sucesores, y que os guarden y hagan guardar todas las honras y gracias, preeminencias, prerrogat&as y demás ceremqnias que se acostumbran y deben guardar a los demás ~ a r q u e s e s$el Reino, tan cumplidamente, que no os falte cosa alguna; 'con declaración de que cada uno de vuestros sucesores en dicho Título está obligado a obtener la Real C6dula.de sucesión dentro del término y en la fonma establecida o que se estableciere, sin la cual no podrán hacer uso del mispo Titulo y dictado. Y de este MI REAL DESPACHO ha de tomarse rázdn en la Dirección general de csntribuciones con arreglo a, lo dispuesto en MI REAL ORDEN de 13 de Noviembre del año pr& ximo pasado de 1861, espresando haberse satisfecho 'los derechos de espedición correspondientes, sin cuyo requisito será de o ningún, valor ni efecto. Dado en Aranjuez a 19 de ~ a i de 1863. Yo la Reyna , El Presidente del Consejo de Ministros, Ministro de Ultramar El ~ a r q d é sde Miraflbres. . del Cercado"'. nestar y gloria, y para este sogrado fin llevé ltdcabo la reincorpol;aCidnb a la madre patria, de ,la q u e crd 120 debí~litabersenunca sep@'d&?. Y al tieinp que en aquella comunicau6n descubre el General:& tana*con claridad meridiana, taclo el fop2o de su arraigada,- wieja lp madura conviccihn anexionista, surge el hombre, el hombre que. n o retrocede jamás, par& responderle al C7eneral Gángara: "Al geizeral Santana no se le ninenaia, se le jt~zga". Es la inisrna voz del terratelas llanuras del Este. Tres Capitanes Generales luchan con Santana, que además de ser dominicapo, es también cspafiol. La salud del hombre de.I;Eierro de la Primera República, se resiente con tantos reveces y contratiedades. En 'el Cibao, en el Sur, en el Este, todo se levanta contra la Anexión; los proniinciamientos son cada vez mayores. L;os días de Mayo de 1864 resuIran días de acíbar para el cansado terrateniente, ~ b e r t ede Santana F.b' . E -- Se. ha retirado a su hogar. Xive en una casona de :'an des, de dos plantas, en una esquina de las calles del B-u't Guarda Mayor. Cerca están las ruC4as de San Nicolás. Es el, ni0 de 1864. o patillas, .y tenía el pelo sumamente lacio. S610 tenía tallas, El Prado, las montadás del Sur, las llanuras del rras del ~Cibao.Cruza después la caravana de aquellos rostro de su hermano gemelo, Rambn Santana: grandezas cumplimiento de sus disposiciones testamentarias, y cu de arena de los siglos marca las 4 de la tarde del 14 de j descansa más pesadamente su cabeza, y aquel hombre real de Isabel Segunda, había dejado de existir. i