Tercer Domingo de Pascua

Tercer Domingo
de Pascua
Presencia
Dios de toda gracia y bondad,
en el bautismo nos llamaste de las tinieblas
a la luz de la vida.
Abre nuestros ojos para que veamos
a tu Hijo
y llénanos de entusiasmo, como a Pedro,
que saltó al mar para acercarse a Cristo,
y disfrutar de su amistad.
Que fluya en abundancia el amor
entre todos,
y nos impulse a cuidar
de los menos favorecidos.
Concédenos que la Eucaristía
que compartimos
nos una en un solo corazón
y una sola mente
para proclamar, con fidelidad y alegría,
las Buenas Nuevas de la salvación
hasta el confín de la tierra,
conducidos por tu Santo Espíritu
que nos reúne en torno a tu mesa.
Por Cristo nuestro Señor. Amén.
Domingo, 10 de abril de 2016
Peregrinos y testigos
Lecturas del día: Hechos 5:27 – 32, 40b – 41; Salmo 30:2, 4,
5 – 6, 11 – 12, 13; Apocalipsis 5:11 – 14; Juan 21:1 – 19. ¿Dónde
ha visto usted a Cristo resucitado? Los discípulos lo vuelven
a encontrar en Galilea, mientras pescaban. El relato tiene
dos partes. En la primera, Jesús llama a los discípulos
“hijos” y los invita a tirar sus redes para pescar. Es como si
les recordara que, aunque son “pescadores de hombres”,
necesitan aprender. ¿Vale eso para nosotros? Cada año peregrinamos por las Escrituras para compartir en el banquete
de la vida. Al peregrinar encontramos a Cristo y confrontamos el pecado. Esto ahonda nuestra comunión con el Dios
vivo y aprendemos el sendero del discipulado. Esto, a su vez,
nos impulsa a propagar la Buena Nueva.
La segunda parte recuerda las negaciones de Pedro. Tres
veces negó Pedro a Jesús y aquí Pedro confiesa su amor a
Cristo tres veces. Esta poderosa imagen nos enseña que si
nos alejamos de Jesús, él todavía nos ama. ¿Cómo es el amor
que usted le tiene al Señor?
A ninguno de nosotros le resulta fácil compartir la
Buena Nueva de la resurrección. Igual que a los discípulos
primeros, nos aterran el ridículo y la persecución, pero debemos dar testimonio de la verdad. Por esto nos reunimos en
la Eucaristía. Nuestra fe se fortalece para seguir adelante y ser
testigos del misterio pascual. Le sugiero que dibuje una gráfica de su vida donde aparezca su camino de fe y de testigo.
La semana en casa
Lunes, 11 de abril de 2016
San Estanislao
¿Qué tienen en común san Esteban y san Estanislao con
Jesús? Cada uno condenó la corrupción de los líderes políticos y religiosos. Esteban y Estanislao siguieron el ejemplo de
Jesús. Al encontrarse usted con el Dios vivo, debe proclamar
auténticamente la justicia y la misericordia. Necesitamos orar
por los que “trabajan por el alimento que perece” y ponderar
nuestros actos para poder seguir a Jesús, el Pan de Vida.
Tómese tiempo para leer un poco sobre Esteban y Estanislao.
Lecturas del día: Hechos 6:8 – 15; Salmo 119:23 – 24, 26 – 27,
29 – 30; Juan 6:22 – 29.
Martes, 12 de abril de 2016
Fuente de vida
Esteban nunca pospuso el anuncio de la Buena Nueva, y su
diligencia lo llevó al martirio. En el evangelio, aprendemos
que Jesús es la fuente de la vida. Cuando lo obedecemos nos
alcanza la vida y nunca sufrimos de sed. Con frecuencia, nos
sentimos insatisfechos y faltos de plenitud, cuando lo que
necesitamos en realidad es volvernos al Señor. ¿Quién ha
sido Esteban en la vida de usted? En las semanas que vienen,
reserve tiempo para hornear algún pan, bendecirlo a la hora
de la comida y conversar sobre Jesús, sustento nuestro.
Lecturas del día: Hechos 7:51— 8:1a; Salmo 31:3cd – 4, 6 y 7
y 8a, 17 y 21ab; Juan 6:30 – 35.
Miércoles, 13 de abril de 2016
Persecución
Incluso perseguidos, los discípulos de Jesús proclaman el
Evangelio. En nuestro mundo, hay persecuciones religiosas
por todas partes. Padecemos violencia y guerra por los egos
de individuos que tienen credos diferentes. Este día, ore por
los que son perseguidos debido a sus prácticas y creencias
religiosas; pida que cada uno de nosotros sea fiel a proclamar
el Evangelio, incluso en las dificultades. Lecturas del día:
Hechos 8:1b – 8; Salmo 66:1 – 3a, 4 – 5, 6 – 7a; Juan 6:35 – 40.
Jueves, 14 de abril de 2016
Catequesis
El relato de Felipe y el eunuco describe cómo un encuentro
con el Señor resucitado forma la fe. Conforme Felipe explica
la Palabra, el eunuco es motivado por el Espíritu hasta pedir
ser bautizado. Podemos seguir su ejemplo y compartir
la Buena Nueva para que llegue a otros el alimento de Jesús.
Al compartir la alegría pascual, usted puede escribir una
nota de agradecimiento a los catequistas de su parroquia.
Lecturas del día: Hechos 8:26 – 40; Salmo 66:8 – 9, 16 – 17, 20;
Juan 6:44 – 51.
Viernes, 15 de abril de 2016
Eucaristía
Por varios días, hemos estado leyendo el capítulo sexto del
Evangelio según san Juan. Hemos escuchado que Jesús es el
que nos da pan; él es el Pan revelado. Juan describe un Jesús
eucarístico. Cada vez que nos reunimos para la misa, recibimos sacramentalmente la Carne y la Sangre de Cristo. La
Eucaristía no sólo confirma nuestra fe, sino que nos reta a
una continua conversión. Al final de la liturgia, somos enviados a “anunciar la Buena Nueva”. ¿Cómo se puede transformar usted, en alimento para el mundo? Lecturas del día:
Hechos 9:1 – 20; Salmo 117:1bc, 2; Juan 6:52 – 59.
Sábado, 16 de abril de 2016
Salgan
“¿Señor, ¿a quién iremos?”. No todos los discípulos creían
que Jesús era el Elegido de Dios, pero los que sí, sabían que
Jesús aporta vida. Después de la resurrección, encontramos
a Pedro haciendo las obras del Señor y proclamando la salud
de Dios para que todos pudieran creer. Él y los demás salieron a compartir la Buena Nueva. ¿Qué es lo que hace la
Iglesia de hoy para ayudar a que otros crean en Cristo?
Dedique algún tiempo a orar por los que no creen en Cristo.
Lecturas del día: Hechos 9:31 – 42; Salmo 116:12 – 13, 14 – 15,
16 – 17; Juan 6:60 – 69.
© 2016 Liturgy Training Publications. 1-800-933-1800. Texto de Timothy A. Johnston.
Traducción de Ricardo López. Ilustración de Steve Musgrave. Texto bíblico conforme a
La Biblia de nuestro pueblo. Biblia del peregrino (2011), con el debido permiso.
Aprobación canónica de la Arquidiócesis de Chicago, 4 de septiembre de 2015.
Recursos reproducibles para Cuaresma–Triduo Pascual–Pascua 2016