La vivienda saludable

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La vivienda saludable
Vivienda Saludable:
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Reto del Milenio en los Asentamientos
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Precarios de América Latina y el Caribe
V I M U ND
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Guía para las Autoridades Nacionales y Locales
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V I M U ND
Vivienda Saludable:
Reto del Milenio en los Asentamientos
Precarios de América Latina y el Caribe
Guía para las Autoridades Nacionales y Locales
Centro de Gestión de Conocimiento. OPS Venezuela. Catalogación en
fuente
Vivienda saludable: reto del milenio en los asentamientos precarios de
América Latina y el Caribe: guía para las autoridades nacionales y locales.Caracas: OPS/OMS para Venezuela, 2006.
1- Saneamiento de la vivienda 2. Vivienda 3. Manuales I. Comisión
Económica para América Latina y el Caribe II. Organización Panamericana de
la Salud-Organizacion Mundial de la Salud III. Programa de las Naciones
Unidas para los Asentamientos Humanos, Oficina Regional para América
Latina y el Caribe.
© Organización Panamericana de la Salud, 2006
Esta publicación tiene como propósito la diseminación de información
acerca de los componentes de la estrategia de vivienda saludable. Las
opiniones expresadas son de responsabilidad exclusiva de los autores y no
deben atribuirse a la Organización Panamericana de la Salud.
El material incluido en esta publicación puede ser citado o reproducido sin
restricciones, con la condición de que se mencione la fuente y el número de
referencia.
Dirección: Qta. OPS/OMS, 6ª . Av. Entre 5ª y 6ª transversal, Altamira.
Caracas, Venezuela.
Teléfono: (0212) 206 5022
Fax: (0212) 261 6069
Correo electrónico: [email protected]
Sitio web: http://www.ops-oms.org.ve
- 52 -
Rosario Santa María (Perú)
María del Carmen Rojas
(Argentina)
Carlos Levinton (Argentina)
Nory Pereira (Venezuela)
Carlos Barceló (Cuba)
Marcelo Korc (OPS/OMS)
-Guías para los diagnósticos
ó
nacionales y locales integrales de l ínea
de base sobre los factores de riesgo y protección a la salud asociados
con la vivienda. Implementación de las guías en al menos dos países
de la Región.
-Documento sobre temas prioritarios de investigación acerca de las
relaciones entre salud y vivienda a nivel regional y en cada país.
-Base de datos de agencias de cooperación externa interesadas en
financiar proyectos de investigación acerca de las relaciones entre
salud y vivienda.
-Protocolo del proyecto «Hacia una vivienda saludable » originado
por la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial
de la Salud, el Ministerio de Protección Social y el Ministerio de
Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial de Colombia. Manuales
para facilitadores y agentes comunitarios y protocolo de evaluación
participativa. Adecuación e implementación del proyecto en al menos
tres países de la Región.
-Página web de la Iniciativa de Vivienda Saludable.
-Al menos dos cursos regionales al año sobre vivienda y salud vía
Internet.
-Al menos dos Centros de Salud en la Vivienda convertidos en
Redes Nacionales de Vivienda Saludable y dos nuevas Redes
Nacionales establecidas en la Región.
-Espacios de discusión para el tema vivienda saludable en las
agendas de al menos dos instancias regionales y sub-regionales de
integración.
1.Fortalecimiento de los sistemas nacionales y
locales de vigilancia de los factores de riesgo
y protección a la salud asociados con la
vivienda.
1.Investigación acerca de las relaciones entre
salud y vivienda.
1.Desarrollo de proyectos comunitarios de
evaluación-acción-participación.
1.Construcción y desarrollo de capacidades.
1.Desarrollo institucional.
Responsable (país)
-Hojas
de divulgación para autoridades nacionales, locales y la
comunidad.
-Guías para la evaluación
ó del impacto de políticas, planes,
programas y proyectos de vivienda de inter és social en la salud con
enfoque de equidad. Implementaci ó
ón de las guías en al menos dos
países de la Región.
Producto
1.Apoyo al establecimiento de políticas,
planes, programas y proyectos p úblicos de
vivienda de interés social y desarrollo urbano
saludables.
Línea de acción
Cuadro 2: Plan de acción regional de la Iniciativa de Vivienda Saludable para el período 2006-07
Vivienda Saludable:
Reto del Milenio en los Asentamientos
Precarios de América Latina y el Caribe
Guía para las Autoridades Nacionales y Locales
PREFACIO
La salud es un derecho humano fundamental que se define como «un
estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente por la
ausencia de enfermedad». Bajo esta óptica de salud como calidad de vida, las
condiciones de la vivienda han sido reconocidas como una de las principales
determinantes sociales de la salud humana. En particular, en los países de
América Latina y el Caribe, las condiciones de la vivienda en los asentamientos
precarios son preocupantes, lo que podría estar afectando la salud de millones
de personas. De no emprenderse acciones certeras y masivas, la acumulación
de carencias podría llegar a ser inmanejable en varios países de la región.
Una manera eficaz de promover y proteger la salud de los peligros a
los que se está expuesto, por las precarias condiciones de la vivienda, es a
través de la estrategia que impulsa la Red Interamericana de Vivienda
Saludable. Esta estrategia es la implementación de una iniciativa que persigue
facilitar los procesos para que las personas puedan mejorar sus condiciones de
vida en la vivienda. Requiere un fuerte compromiso político, una sólida
experiencia técnica e intercultural, la colaboración intersectorial permanente,
el enfoque multidisciplinario y un gran nivel de participación y acción por
parte de la comunidad.
La estrategia de vivienda saludable es un vehículo para asistir a los
Estados Miembros de la Organización de la Naciones Unidas de América
Latina y el Caribe en el cumplimiento con el compromiso de la Declaración del
Milenio adoptada por 189 estados en el año 2000. La vivienda saludable ejerce
en forma directa e indirecta una influencia positiva en el cumplimiento de los
ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio esbozados en la Declaración.
El propósito de esta Guía para autoridades nacionales y locales es
suministrar información y orientación a los decisores políticos sobre los
principales componentes de la estrategia de vivienda saludable. La Guía fue
desarrollada para contribuir al buen gobierno en el área de la salud en el
contexto de la vivienda y el desarrollo urbano a escala nacional y local. Surge
como producto del Simposio Regional «Vivienda Saludable: reto del Milenio
en los asentamientos precarios de América Latina y el Caribe», que se llevó a
cabo del 3 al 7 de septiembre de 2005 en Lima, Perú.
Este documento es una herramienta e instrumento flexible con un
marco estratégico que puede ser utilizado en diferentes instancias nacionales y
locales. Para utilizar esta herramienta en diferentes contextos, es necesario
hacer adaptaciones y/o modificaciones tomando en cuenta los factores
sociales, económicos, ambientales y culturales asociados al lugar donde vaya a
ser utilizada. Como instrumento ofrece a las autoridades nacionales y locales
una estrategia práctica para promover y proteger la salud y la calidad de vida de
las personas, y puede producir resultados a corto, mediano y largo plazo.
También incluye y define conceptos relacionados con la estrategia de vivienda
saludable, tales como la participación comunitaria, las políticas públicas que
promueven la salud, las acciones basadas en evidencias y las mejores prácticas.
Se llevaron a cabo cuatro sesiones de conferencias donde se
presentaron experiencias nacionales y locales, iniciativas de las agencias del
Sistema de Naciones Unidas y acciones de la cooperación externa y dos sesiones
de grupos de trabajo donde se discutieron insumos para la elaboración de un
plan de acción regional de la Iniciativa de Vivienda Saludable. Además, se llevó
a cabo la VI Reunión de la Red VIVSALUD donde se concretó el plan de acción
regional y se eligió el nuevo secretariado de la Red para el período 2006-07 (ver
Cuadro 1).
Los grupos de trabajo recomendaron que los países asuman como
política de Estado el derecho a la vivienda adecuada promovida por la Agenda
Hábitat presentada en la Conferencia Hábitat II en Estambul en 1996. En
particular, recomendaron que las políticas, planes, programas y proyectos
públicos de vivienda de interés social a nivel nacional y local:




Traten a la vivienda de una forma integrada usando conceptos de
planificación rural-urbano como una única unidad, enfocándose no
sólo en el ambiente físico, sino también en el hogar, el entorno y la
comunidad y respetando, en lo posible, la cultura y costumbres de los
pueblos.
Incluyan el concepto de vivienda saludable, el cual alude a un espacio
de residencia que promueve la salud de sus moradores. Una vivienda
saludable carece o presenta factores de riesgo controlados y
prevenibles e incluye agentes promotores de la salud y el bienestar.
Prioricen la salud y el bienestar evaluando el impacto en la salud de la
población afectada.
Hagan partícipe a la comunidad en las decisiones desde el comienzo
del proceso.
Basados en las recomendaciones de los grupos de trabajo, la Red
VIVSALUD concretó en un plan de acción regional que contiene seis líneas de
acción y 10 productos (ver Cuadro 2) para el período 2006-07.
Cuadro 1: Secretariado de la Red Interamericana de
Vivienda Saludable para el período 2006-07
Nombre
Puesto
País
Secretario Ejecutivo
Carlos Barceló
Cuba
Secretario Financiero y
de Movilización de
Recursos
Juan Carlos Giraldo
Colombia
Secretario de Proyectos
Simone Cynamon
Cohen
Brasil
Vocal I
Rosario Santa María
Perú
Vocal II
Carlos Hugo Levinton Argentina
Vocal III
Blas Javier Amarilla
Representante OPS/OMS Marcelo Korc
- 51 -
Paraguay
ANEXO 5
INFORME DEL SIMPOSIO REGIONAL «VIVIENDA SALUDABLE:
RETO DEL MILENIO EN LOS ASENTAMIENTOS PRECARIOS DE
AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE»
Del 3 al 7 de septiembre de 2005 se llevó a cabo en Lima, Perú, el
Simposio Regional «Vivienda saludable: reto del Milenio en los asentamientos
precarios de América Latina y el Caribe». Fue organizado por la Organización
Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), la
Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), el Programa de
las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos (UN-HABITAT), la
Federación Latinoamericana de Ciudades, Municipios y Asociaciones
(FLACMA) y la Red Interamericana de Vivienda Saludable (Red VIVSALUD)
a nivel internacional y por el Ministerio de Vivienda, Construcción y
Saneamiento, el Ministerio de Salud, el Consejo Nacional del Ambiente, la Red
Peruana de Vivienda, Ambiente y Salud y la Asociación Peruana de Toxicología
a nivel nacional. Contó con la participación de aproximadamente 120 personas
de más de 10 de países de América Latina y el Caribe. En particular, participaron
autoridades nacionales de salud y vivienda de Colombia, Costa Rica, México,
Paraguay, Perú y República Dominicana, autoridades locales de Ecuador y
Perú, coordinadores nacionales y locales de la Red VIVSALUD y
representantes de agencias de cooperación externa.
La finalidad del simposio fue promover la sinergia de acciones de las
políticas, planes, programas y proyectos de vivienda en asentamientos precarios
y la Estrategia de Vivienda Saludable para mejorar la salud y la calidad de vida
de la población de América Latina y el Caribe como respuesta al cumplimiento
del compromiso de la Declaración del Milenio adoptada en el año 2000, y al
mejoramiento de la equidad en salud promovido por la Comisión sobre
Determinantes de la Salud de la OMS creada en mayo de 2005. La Estrategia de
Vivienda Saludable es la implementación de una iniciativa que consiste en
fortalecer la ejecución de actividades que promueven y protegen la salud de las
poblaciones más vulnerables de los peligros a los que se está expuesto en la
vivienda en las zonas más necesitadas y que contribuyen al desarrollo local
integrado de las comunidades.
En particular, los objetivos específicos del simposio fueron:



Discutir el estado actual de las acciones orientadas al cumplimiento de
los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) relacionados con
vivienda, salud y calidad de vida en América Latina y el Caribe, y en el
contexto de la situación y prioridades actuales.
Analizar la viabilidad e implementación de la Estrategia de Vivienda
Saludable en las políticas, planes, programas y proyectos nacionales y
locales de vivienda para sectores más vulnerables y su articulación con
los planes de desarrollo local para municipios saludables.
Discutir el trabajo de la Red VIVSALUD y potenciar las alianzas
orientadas a la promoción e implementación de la Estrategia de
Vivienda Saludable y su articulación con otras estrategias existentes
como la Estrategia de Municipios y Comunidades Saludables.
- 50 -
Nuestro deseo es que esta Guía pueda contribuir a la construcción de
una mayor capacidad para promover y proteger la salud y el desarrollo local
integrado de las comunidades, diseminando estrategias eficaces y fortaleciendo
continuamente la Red Interamericana de Vivienda Saludable y sus redes
Nacionales.
Luiz A. Galvão
Gerente
Área de Desarrollo Sostenible y Salud Ambiental
Organización Panamericana de la Salud, Oficina Regional de la
Organización Mundial de la Salud
Jorge Gavidia
Jefe
Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos,
Oficina Regional para América Latina y el Caribe
Joseluis Samaniego
Director
División de Desarrollo Sostenible y Asentamientos Humanos
Comisión Económica para América Latina y el Caribe
RECONOCIMIENTO
Agradecemos por sus contribuciones en la elaboración de este documento a las
siguientes personas:
Coordinación
Marcelo E. Korc - Organización Panamericana de la Salud, Oficina Regional de
la Organización Mundial de la Salud
Alberto Paranhos - Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos
Humanos, Oficina Regional para América Latina y el Caribe
Daniela Simioni - Comisión Económica para América Latina y el Caribe
Colaboradores
Carlos Barceló - Instituto Nacional de Higiene, Epidemiología y Microbiología
de Cuba
Simone Cynamon Cohen - Escuela Nacional de Salud Pública Sergio Arauca
Fundación Instituto Oswaldo Cruz de Brasil
Debora Cynamon Kligerman - Escuela Nacional de Salud Pública Sergio
Arauca Fundación Instituto Oswaldo Cruz de Brasil
Marilyn Rice - Organización Panamericana de la Salud, Oficina Regional de la
Organización Mundial de la Salud
Ricardo Rojas - Organización Panamericana de la Salud, Oficina Regional de la
Organización Mundial de la Salud
Rosario Santa María - Universidad Ricardo Palma del Perú
Rosa María V. Tarrío - Programa de las Naciones Unidas para los
Asentamientos Humanos, Oficina Regional para América Latina y el Caribe
Izabelle Viana - Universidad de la Amazonía de Brasil



La identificación de las prioridades de la salud y el establecimiento de
programas y políticas públicas sanas para atender dichas prioridades.
El apoyo a la investigación que promueva los conocimientos sobre
prioridades determinadas.
La movilización de recursos financieros y operacionales a fin de crear
capacidad humana e institucional para la elaboración, la aplicación, la
vigilancia y la evaluación de planes de acción de ámbito nacional.
D. Establecer o fortalecer redes nacionales e internacionales que promuevan la
salud.
E. Propugnar que los organismos de las Naciones Unidas se responsabilicen de
los efectos en la salud de sus programas de desarrollo.
F. Informar a la Directora General de la Organización Mundial de la Salud, para
los fines del informe que ésta presentará al Consejo Ejecutivo en su 107a
reunión, de los progresos realizados en la ejecución de las acciones arriba
mencionadas.
Firmado en la Ciudad de México, el 5 de junio de 2000, en árabe, chino, español,
francés, inglés, portugués y ruso, versiones todas ellas igualmente auténticas.
Un especial agradecimiento a los participantes del Simposio Regional
«Vivienda Saludable: reto del Milenio en los asentamientos precarios de
América Latina y el Caribe» que se llevó a cabo del 3 al 7 de septiembre de 2005
en Lima, Perú, quienes revisaron y contribuyeron en la redacción del documento
con valiosas observaciones.
- 49 -
1. Reconocemos que el logro del grado máximo de salud que se pueda alcanzar
es un valioso recurso para el disfrute de la vida y es necesario para el desarrollo
social y económico y la equidad.
2. Consideramos que la promoción del desarrollo sanitario y social es un deber
primordial y una responsabilidad de los gobiernos, que comparten todos los
demás sectores de la sociedad.
TABLA DE CONTENIDO
Página
1.
Los Objetivos de Desarrollo del Milenio y la vivienda saludable.......... 7
2.
La vivienda como determinante de la salud en América Latina
y el Caribe............................................................................................... 9
3. Somos conscientes de que, en los últimos años, gracias a los esfuerzos
persistentes y conjuntos de los gobiernos y las sociedades, se han registrado
importantes mejoras sanitarias y progresos en la prestación de servicios de salud
en muchos países del mundo.
4. Observamos que, a pesar de esos progresos, aún persisten muchos problemas
de salud que entorpecen el desarrollo social y económico y que, por tanto, deben
abordarse urgentemente para fomentar la equidad en el logro de la salud y el
bienestar.
2.1
2.2
3.
3.4
3.5
6. Reconocemos que es urgente abordar los determinantes sociales, económicos
y medioambientales de la salud y que esto requiere mecanismos reforzados de
colaboración para la promoción de la salud en todos los sectores y en todos los
niveles de la sociedad.
3.6
3.7
3.8
3.9
7. Concluimos que la promoción de la salud debe ser un componente
fundamental de las políticas y programas de salud en todos los países, en la
búsqueda de la equidad y de una mejor salud para todos.
8. Comprobamos que existen abundantes pruebas de que las buenas estrategias
de promoción de la salud son eficaces.
Conceptos claves relacionados con la estrategia de vivienda
saludable................................................................................................ 14
3.1
3.2
3.3
5. Somos conscientes de que, al propio tiempo, las enfermedades nuevas y reemergentes amenazan los progresos realizados en la salud.
4.
4.3
4.4
Acciones
A. Situar la promoción de la salud como prioridad fundamental en las políticas y
programas de salud locales, regionales, nacionales e internacionales.
B. Ejercer el papel de liderazgo para asegurar la participación activa de todos los
sectores y de la sociedad civil en la aplicación de medidas de promoción de la
salud que refuercen y amplíen los vínculos de asociación en pro de la salud.
C. Apoyar la preparación de planes de acción de ámbito nacional para la
promoción de la salud, recurriendo, si es necesario, a los conocimientos de la
OMS y de sus asociados en esta esfera. Esos planes variarán en función del
contexto nacional, pero se ajustarán a un marco básico que se acuerde en la
Quinta Conferencia Mundial de Promoción de la Salud, y que podrá incluir,
entre otros aspectos, lo siguiente:
- 48 -
4.5
4.6
5.
Tenencia segura........................................................................... 21
Ubicación segura, diseño y estructura adecuada y espacios
suficientes para una convivencia sana....................................... 21
Servicios básicos de buena calidad............................................ 22
Muebles, utensilios domésticos y bienes de consumo
seguros y eficientes.................................................................... 23
Entorno adecuado que promueve la comunicación y la
colaboración............................................................................... 24
Hábitos de comportamiento que promueven la salud................ 25
La estrategia de vivienda saludable...................................................... 26
Figura 1
6.
¿Qué es una vivienda saludable?................................................ 14
¿Qué es la estrategia de vivienda saludable?.............................. 15
¿Qué es la Red Interamericana de Vivienda Saludable
(Red VIVSALUD)?.................................................................... 15
¿Qué queremos decir con una visión integral de la salud?......... 16
¿Qué queremos decir con políticas públicas que promueven
la salud?...................................................................................... 17
¿Qué queremos decir con acciones basadas en la evidencia?.....17
¿Qué queremos decir con participación comunitaria?................ 18
¿Qué son las mejores prácticas?................................................. 19
¿Qué queremos decir con compromiso y colaboración
intersectorial?..............................................................................19
Las condiciones fundamentales de la vivienda saludable..................... 20
4.1
4.2
Habida cuenta de lo que antecede, suscribimos lo siguiente:
Precariedad de la vivienda en ALC.............................................. 9
La relación vivienda-salud.......................................................... 11
La estrategia de vivienda saludable en los países...................... 29
Referencias............................................................................................ 30
ANEXOS:
Anexo 1
Anexo 2
Anexo 3
Anexo 4
Anexo 5
América
Glosario.............................................................................. 35
La Red Interamericana de Vivienda Saludable.................. 37
Ejemplos de buenas y mejores prácticas que
están siendo implementadas............................................. 40
Acuerdos, declaraciones y convenios internacionales....... 43
Informe del Simposio Regional «Vivienda Saludable:
reto del Milenio en los asentamientos precarios de
Latina y el Caribe»............................................................. 50
- a oponerse a las presiones que se ejerzan para favorecer los productos dañinos,
los medios y condiciones de vida malsanos, la mala nutrición y la destrucción de
los recursos naturales. Asimismo, se comprometen a centrar su atención en
cuestiones de salud pública tales como la contaminación, los riesgos
profesionales, la vivienda y la población de regiones no habitadas.
- a eliminar las diferencias entre las distintas sociedades y en el interior de las
mismas, y a tomar medidas contra las desigualdades en términos de salud, que
resultan de las normas y prácticas de esas sociedades.
- a reconocer que los individuos constituyen la principal fuente de salud; a
apoyarlos y capacitarlos a todos los niveles para que ellos y sus familias y
amigos se mantengan en buen estado de salud; del mismo modo se
comprometen a aceptar que la comunidad es el portavoz fundamental en materia
de salud, condiciones de vida y bienestar en general.
- a reorientar los servicios sanitarios y sus recursos en términos de la promoción
de la salud; a compartir el poder con otros sectores, con otras disciplinas y, lo que
es aún más importante, con el pueblo mismo.
- a reconocer que la salud y su mantenimiento constituyen la mejor meta e
inversión posibles y a tomar en consideración la cuestión ecológica global sobre
nuestras formas de vida. La conferencia insta a todas las personas interesadas a
formar una fuerte alianza en favor de la salud.
Llamada a la acción internacional
La Conferencia llama a la organización mundial de la salud y a los demás
organismos internacionales a abogar en favor de la salud en todos los foros
apropiados y a dar apoyo a los distintos países para que se establezcan
programas y estrategias dirigidos a la promoción de la salud.
La Conferencia tiene el firme convencimiento de que si los pueblos, las
organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, la organización
mundial de la Salud y todos los demás organismos interesados aúnan sus
esfuerzos en torno a la promoción de la salud y en conformidad con los valores
sociales y morales inherentes a esta Carta, el objetivo «Salud para Todos en el
año 2000» se hará realidad.
QUINTA CONFERENCIA MUNDIAL DE PROMOCIÓN
DE LA SALUD
PROMOCIÓN DE LA SALUD: HACIA UNA MAYOR EQUIDAD
Ciudad de México, México, 5-9 de junio, 2000
Declaración ministerial de México para la promoción de la salud
De las ideas a la acción
Reunidos en la Ciudad de México con ocasión de la Quinta Conferencia
Mundial de Promoción de la Salud, los Ministros de Salud firmantes de la
presente Declaración:
- 47 -
Es esencial proporcionar los medios para que, a lo largo de su vida, la población se
prepare para sus diferentes etapas y afronte las enfermedades y lesiones crónicas.
Esto se ha de hacer posible a través de las escuelas, los hogares, los lugares de
trabajo y el ámbito comunitario, en el sentido que exista una participación activa
por parte de las organizaciones profesionales, comerciales y benéficas, orientada
tanto hacia el exterior como hacia el interior de las instituciones mismas.
La reorientación de los servicios sanitarios
La responsabilidad de la promoción de la salud por parte de los servicios
sanitarios la comparten los individuos particulares, los grupos comunitarios, los
profesionales de la salud, las instituciones y servicios sanitarios y los gobiernos.
Todos deben trabajar conjuntamente por la consecución de un sistema de
protección de la salud.
El sector sanitario debe jugar un papel cada vez mayor en la promoción de la
salud, de forma tal que trascienda la mera responsabilidad de proporcionar
servicios clínicos y médicos. Dichos servicios deben tomar una nueva orientación
que sea sensible a las necesidades culturales de los individuos y las respete.
Asimismo, deberán favorecer la necesidad por parte de las comunidades de una
vida más sana y crear vías de comunicación entre el sector sanitario y los sectores
sociales, políticos y económicos.
La reorientación de los servicios sanitarios exige igualmente que se preste mayor
atención a la investigación sanitaria, así como a los cambios en la educación y la
formación profesional. Esto necesariamente ha de producir un cambio de actitud
y de organización de los servicios sanitarios de forma que giren en torno a las
necesidades del individuo como un todo.
Irrumpir en el futuro
La salud se crea y se vive en el marco de la vida cotidiana: en los centros de
enseñanza, de trabajo y de recreo. La salud es el resultado de los cuidados que uno
se dispensa a sí mismo y a los demás, de la capacidad de tomar decisiones y
controlar la vida propia y de asegurar que la sociedad en que uno vive ofrezca a
todos sus miembros la posibilidad de gozar de un buen estado de salud.
El cuidado del prójimo, así como el planteamiento holístico y ecológico de la
vida, son esenciales en el desarrollo de estrategias para la promoción de la salud.
De ahí que los responsables de la puesta en práctica y evaluación de las
actividades de promoción de la salud deban tener presente el principio de la
igualdad de los sexos en cada una de las fases de planificación.
El compromiso a favor de la promoción de la salud
Los participantes en esta conferencia se comprometen:
- a intervenir en el terreno de la política de la salud pública y a abogar en favor de
un compromiso político claro en lo que concierne a la salud y la equidad en todos
los sectores.
- 46 -
CAPÍTULO 1
LOS OBJETIVOS DE DESARROLLO DEL MILENIO Y
LA VIVIENDA SALUDABLE
En septiembre de 2000, en la Cumbre del Milenio de las Naciones
Unidas, los líderes mundiales de 189 estados adoptaron un conjunto de
objetivos y metas cuantificables y delimitadas en tiempo para combatir la
pobreza, el hambre, las enfermedades, el analfabetismo, la degradación del
medio ambiente, la discriminación contra la mujer, y comprometiéndose con los
principios de los derechos humanos, el buen gobierno y la democracia. Se
esbozaron en la Declaración del Milenio, y desde entonces se han resumido y
operacionalizado como un paquete de 8 objetivos generales, 18 metas y 48
indicadores, comúnmente denominado los Objetivos de Desarrollo del Milenio
(ODM) a alcanzarse para el año 2015 (ver Recuadro)¹. Los ODM representan un
llamamiento para construir un mundo más equitativo, otorgan urgencia y
legitimidad a la reducción de la pobreza y la lucha contra las inequidades en
salud, así como una voz a los grupos excluidos y sus intereses.
La Meta 11, también conocida como «Ciudades sin Asentamientos
Precarios», se refiere explícitamente al derecho a una vivienda digna y a la
ciudad. Esta Meta es un reconocimiento directo de que los asentamientos
precarios son un problema de desarrollo y de uso de recursos naturales (suelo y
agua) que debe ser encarado.
La estrategia de vivienda saludable es un vehículo para asistir a los
Estados Miembros de la Organización de la Naciones Unidas de América Latina
y el Caribe (ALC) en el cumplimiento con el compromiso de los ODM. La
vivienda saludable alude a un espacio de residencia que promueve la salud y que
ejerce en forma directa e indirecta una influencia positiva en el cumplimiento de
todos los ODM. En particular, ejerce una influencia directa en el cumplimiento
de las metas que se refieren explícitamente a temas de salud o directamente
relacionadas con las responsabilidades del sector de la salud. Entre estas metas
se destaca la reducción de la desnutrición (Meta 2), la reducción de la mortalidad
infantil (Meta 5), la reducción de la mortalidad materna (Meta 6), el combate
contra la propagación del VIH/SIDA (Meta 7), el combate contra el paludismo y
otras enfermedades graves (Meta 8), y el acceso sostenible al agua potable y a
los servicios básicos de saneamiento (Meta 10).
La apropiación del proceso de ODM por los países es esencial. En ALC
esta apropiación se abordó en una conferencia de alto nivel en Brasilia en
noviembre 2003 (BID, et al., 2003). La Declaración de Brasilia es una llamada a
la acción y ejecución que refuerza el principio de asociación inherente a la
Declaración del Milenio y los convenios previos de las anteriores Cumbres de
las Américas.
El énfasis en la reducción de las inequidades, en una región con tanta
inequidad como ALC, es de especial importancia para lograr los ODM. De
hecho, alcanzar las metas no está limitado a lograr un nivel de indicadores a
nivel regional o promedio nacional, sino que es necesario ver qué está
sucediendo en los niveles subnacionales. Cada país y ciudad deben esforzarse
por disminuir sus propias inequidades. En particular, los gobiernos nacionales
y locales se deben fijar sus propios objetivos y metas en relación con las
condiciones, tendencias y necesidades reconocidas y medir el progreso hecho
en la consecución de cada uno de ellos en los asentamientos precarios.
¹
La Meta 11 tiene horizonte a 2020, no a 2015 como las demás.
- 07 -
OBJETIVOS Y METAS DE DESARROLLO DEL MILENIO
Objetivo 1. Erradicar la extrema pobreza y el hambre
Meta 1. Reducir a la mitad la proporción de personas cuyo ingreso sea menor a un
dólar por día
Meta 2. Disminuir a la mitad el porcentaje de personas que padecen hambre
Objetivo 2. Lograr la enseñanza primaria universal
Meta 3. Garantizar que todos los niños y niñas puedan terminar un ciclo completo de
enseñanza primaria
Objetivo 3. Promover la igualdad entre los sexos y la autonomía de la mujer
Meta 4. Eliminar las disparidades entre los sexos en la educación primaria y
secundaria, preferiblemente para el año 2005 y para todos los niveles de educación
para el año 2015
Objetivo 4. Reducir la mortalidad infantil
Meta 5. Reducir en dos tercios la tasa de mortalidad de niños menores de cinco años
Objetivo 5. Mejorar la salud materna
Meta 6. Reducir la tasa de mortalidad materna en tres cuartas partes
Objetivo 6. Combatir el VIH/SIDA, el paludismo y otras enfermedades
Meta 7. Detener y comenzar a revertir la tendencia de expansión del VIH/SIDA
Meta 8. Detener y comenzar a reducir la incidencia del paludismo y otras
enfermedades graves
Objetivo 7. Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente
Meta 9. Incorporar los principios del desarrollo sostenible en las políticas y los
programas nacionales y revertir la pérdida de recursos del medio ambiente
Meta 10. Reducir a la mitad el porcentaje de personas que carezcan de acceso
sostenible al agua potable y a servicios básicos de saneamiento
Meta 11. Haber mejorado sustancialmente, para el año 2020, la vida de por lo menos
100 millones de habitantes de asentamientos precarios
Objetivo 8. Fomentar una asociación mundial para el desarrollo
Meta 12. Desarrollar aún más un sistema comercial y financiero abierto, basado en
normas, previsible y no discriminatorio. Ello conlleva el compromiso de lograr una
buena gestión de los asuntos públicos, desarrollo y la reducción de la pobreza,
nacional e internacionalmente
Meta 13. Atender las necesidades especiales de los países menos desarrollados. Ello
incluye el acceso libre de aranceles y cupos para las exportaciones de los países
menos adelantados; el programa mejorado de alivio de la deuda de los países pobres
muy endeudados y la cancelación de la deuda bilateral oficial; y la concesión de una
asistencia oficial para el desarrollo más generosa a los países que se hayan
comprometido a reducir la pobreza
Meta 14. Atender las necesidades especiales de los países sin acceso al mar y los
estados insulares pequeños
Meta 15. Encarar de manera general los problemas de la deuda de los países en
desarrollo aplicando medidas nacionales e internacionales, con el fin de garantizar la
sostenibilidad de la deuda a largo plazo
Meta 16. En cooperación con los países en desarrollo, elaborar y aplicar estrategias
que proporcionen a los jóvenes un trabajo digno y productivo
Meta 17. En cooperación con los laboratorios farmacéuticos, proporcionar acceso a
los medicamentos de primera necesidad y a precios asequibles en los países en
desarrollo
Meta 18. En colaboración con el sector privado, velar porque se puedan
aprovechar los beneficios de las nuevas tecnologías, en particular las tecnologías
de la información y de las comunicaciones
- 08 -
La creación de ambientes favorables
Nuestras sociedades son complejas y están relacionadas entre sí, de forma que
no se puede separar la salud de otros objetivos. Los lazos que de forma
inextricable unen al individuo y su medio constituyen la base de un
acercamiento socio-ecológico a la salud. El principio que ha de guiar al mundo,
las naciones, las regiones y las comunidades ha de ser la necesidad de fomentar
el apoyo recíproco, de protegernos los unos a los otros, así como nuestras
comunidades y nuestro medio natural. Se debe poner de relieve que la
conservación de los recursos naturales en todo el mundo es una responsabilidad
mundial.
El cambio de las formas de vida, de trabajo y de ocio afecta de forma muy
significativa la salud. El trabajo y el ocio deben ser una fuente de salud para la
población. El modo en que la sociedad organiza el trabajo debe de contribuir a la
creación de una sociedad saludable. La promoción de la salud genera
condiciones de trabajo y de vida gratificantes, agradables, seguras y
estimulantes.
Es esencial que se realice una evaluación sistemática del impacto que los
cambios del medio ambiente producen en la salud, particularmente en los
sectores de la tecnología, el trabajo, la energía, la producción y el urbanismo.
Dicha evaluación debe ir acompañada de medidas que garanticen el carácter
positivo de los efectos de esos cambios en la salud pública. La protección tanto
de los ambientes naturales como de los artificiales, y la conservación de los
recursos naturales, debe formar parte de las prioridades de todas las estrategias
de promoción de la salud.
El reforzamiento de la acción comunitaria
La promoción de la salud radica en la participación efectiva y concreta de la
comunidad en la fijación de prioridades, la toma de decisiones y la elaboración y
puesta en marcha de estrategias de planificación para alcanzar un mejor nivel de
salud. La fuerza motriz de este proceso proviene del poder real de las
comunidades, de la posesión y del control que tengan sobre sus propios
empeños y destinos.
El desarrollo de la comunidad se basa en los recursos humanos y materiales con
que cuenta la comunidad misma para estimular la independencia y el apoyo
social, así como para desarrollar sistemas flexibles que refuercen la
participación pública y el control de las cuestiones sanitarias. Esto requiere un
total y constante acceso a la información y a la instrucción sanitaria, así como a
la ayuda financiera.
El desarrollo de las aptitudes personales
La promoción de la salud favorece el desarrollo personal y social en tanto que
proporcione información, educación sanitaria y perfeccione las aptitudes
indispensables para la vida. De este modo se incrementan las opciones
disponibles para que la población ejerza un mayor control sobre su propia salud
y sobre el medio ambiente y para que opte por todo lo que propicie la salud.
- 45 -
Proporcionar los medios
La promoción de la salud se centra en alcanzar la equidad sanitaria. Su acción se
dirige a reducir las diferencias en el estado actual de la salud y a asegurar la
igualdad de oportunidades y proporcionar los medios que permitan a toda la
población desarrollar al máximo su salud potencial. Esto implica una base firme
en un medio que la apoye, acceso a la información y poseer las aptitudes y
oportunidades que la lleven a implementar sus opciones en términos de salud.
Los individuos no podrán alcanzar su plena salud potencial a menos que sean
capaces de asumir el control de todo lo que determina su estado de salud. Esto se
aplica igualmente a hombres y mujeres.
Actuar como mediador
El sector sanitario no puede por sí mismo proporcionar las condiciones previas ni
asegurar las perspectivas favorables para la salud y, lo que es más, la promoción
de la salud exige la acción coordinada de todos los implicados: los gobiernos, los
sectores sanitarios, sociales y económicos, las organizaciones benéficas, las
autoridades locales, la industria y los medios de comunicación. Las personas de
todos los medios sociales están implicadas en tanto que individuos, familias y
comunidades. A los grupos sociales y profesionales y al personal sanitario les
corresponde especialmente asumir la responsabilidad de actuar como
mediadores entre los intereses antagónicos a favor de la salud.
Las estrategias y programas de promoción de la salud deben adaptarse a las
necesidades locales y a las posibilidades específicas de cada país y región, y
tener en cuenta los diversos sistemas sociales, culturales y económicos.
La participación activa en la promoción de la salud pública implica:
La elaboración de una política pública sana
Para promover la salud se debe ir más allá de su mero cuidado. La salud ha de
formar parte del orden del día de los responsables de la elaboración de los
programas políticos, en todos los sectores y a todos los niveles, con objeto de
hacerles tomar conciencia de las consecuencias que sus decisiones pueden tener
para la salud y llevarles así a asumir la responsabilidad que tienen en este respecto.
La política de promoción de la salud ha de combinar enfoques diversos, si bien
complementarios, entre los que figuren la legislación, las medidas fiscales, el
sistema tributario y los cambios organizativos. Es la acción coordinada la que nos
lleva a practicar una política sanitaria, de rentas y social que permita una mayor
equidad. La acción conjunta contribuye a asegurar la existencia de bienes y
servicios sanos y seguros. De una mayor higiene de los servicios públicos y de un
medio ambiente más grato y limpio.
La política de promoción de la salud requiere que se identifiquen y eliminen los
obstáculos que impidan la adopción de medidas políticas que favorezcan la salud
en aquellos sectores no directamente implicados. El objetivo debe ser conseguir
que la opción más saludable sea también la más fácil de instrumentar por los
responsables de la elaboración de los programas.
- 44 -
CAPÍTULO 2
LA VIVIENDA COMO DETERMINANTE DE LA SALUD EN
AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE
Las condiciones de la vivienda han sido reconocidas desde hace tiempo
como una de las principales determinantes sociales de la salud humana (WHO,
2005). En particular, la precariedad de la vivienda de interés social en los países
de América Latina y el Caribe (ALC) puede estar afectando la salud de millones
de personas. El ruido, la humedad, el plomo, el monóxido de carbono, las
partículas, los compuestos orgánicos volátiles, el radón, los desastres naturales,
la falta de higiene y de condiciones sanitarias, la falta de acceso a personas con
discapacidad, el diseño urbano inadecuado y el hacinamiento son algunos de los
peligros a la salud a los que se está expuesto en la vivienda (Foster H. D., 1992;
Ineichen B., 1993; Krieger J., Higgins D. L., 2002).
2.1
Precariedad de la vivienda en ALC
La pobreza y el desempleo; la acelerada urbanización y en particular,
las altas tasas de migración rural-urbana y la creciente importancia de la
migración entre las ciudades; el establecimiento de políticas y marcos
reguladores ineficaces; el funcionamiento del mercado legal de tierras, los
desplazamientos por desahucios planificados, los desastres naturales y las
situaciones de guerra; y la falta de acceso a financiamiento son causas
determinantes de las condiciones precarias de la vivienda de interés social en los
países de ALC.
Es difícil estimar el déficit habitacional de la región debido a la falta de
información y de metodologías estandarizadas para medirlo. Según un estudio
de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) de 2003,
sólo 13 países de la región han reportado en algún momento desde el comienzo
de los años 90 cifras sobre el déficit habitacional cualitativo y cuantitativo. A
mediados de los años 90, se realizaron estimaciones del déficit a escala regional
en el Documento Regional Preparatorio de la Conferencia Mundial de Hábitat II
sobre Asentamientos Humanos. Se estimó, conservadoramente, que el déficit
habitacional cuantitativo de ALC superaba las 18 millones de unidades (con un
incremento anual de 2,5 millones de nuevas unidades) y el déficit cualitativo
superaba las 20 millones de unidades. En 1995, la CEPAL estimó el déficit
cuantitativo entre 23,1 y 27,9 millones de unidades y el déficit cualitativo en
aproximadamente 25,6 millones de unidades (Arriagada Luco C., 2003).
Recientemente, la CEPAL desarrolló una metodología usando las encuestas de
hogares y la aplicó para los casos de Bolivia, Colombia, Chile y Uruguay. Por
ejemplo, el estudio estimó que Bolivia tiene un déficit cuantitativo del 16% y un
déficit cualitativo del 48% de las unidades habitacionales (Szalachman R.,
2000).
Los datos suministrados por las Naciones Unidas para el monitoreo de
la Meta 11 de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) indican que las
tendencias de precariedad de la vivienda en las áreas urbanas de la región son
preocupantes. Si bien el porcentaje de la población urbana que vive en
asentamientos precarios se redujo del 35% en 1990 al 32% en 2001, el número
de habitantes aumentó de 111 millones a 127 millones. Es decir, el ritmo de
superación de los asentamientos precarios urbanos no ha sido suficiente para
- 09 -
que se reduzca el total de personas afectadas por el fenómeno. Además, existen
grandes disparidades entre los países de la región. En Haití, Nicaragua, Perú,
Belice, Guatemala y Bolivia más del 50% de la población urbana vive en
asentamientos precarios, mientras que en Chile, Uruguay, Surinam, Granada,
Antigua y Barbuda, San Vicente y las Granadinas, Saint Kitts y Nevis, Guyana,
Puerto Rico, Cuba, Bahamas, Aruba, Antillas Neerlandesas, Bermuda, y
Barbados menos del 10% de la población urbana lo hace (Naciones Unidas,
2005a).
La proporción de hogares con acceso a tenencia segura mejoró en
términos relativos a escala regional entre 1990 y 2000 y se ubica alrededor del
80% de propietarios e inquilinos. Sin embargo, se observa que en algunos países
como Costa Rica, Colombia, México, Paraguay, Guatemala y Nicaragua hubo
una disminución del porcentaje de hogares con tenencia segura (Naciones
Unidas, 2005a).
La durabilidad de los materiales de construcción de la vivienda ha
mejorado entre 1990 y 2000 del 70% al 76% de las viviendas, lo que en términos
absolutos significa un mejoramiento para más de 17 millones de unidades
habitacionales en los 15 países de ALC considerados. Sin embargo, se observa
que en algunos países como Ecuador y Paraguay la situación ha empeorado
(Naciones Unidas, 2005a).
El acceso sostenible a fuentes de abastecimiento de agua potable en
ALC se ha incrementado del 83% en 1990 al 89% en 2002. En las zonas urbanas,
la cobertura pasó del 93% al 95% y en las zonas rurales, del 58% al 69%. A pesar
del esfuerzo para aumentar la cobertura en las zonas rurales, aproximadamente
60 millones de personas aún no tienen acceso sostenible a fuentes de agua
potable. El acceso a servicios de saneamiento también ha mejorado en los países
de la región pero la situación es aún más heterogénea entre las zonas urbanas y
rurales. La cobertura se ha incrementado del 69% en 1990 al 75% en 2002. En
las zonas urbanas, la cobertura pasó del 82% al 84% y en las zonas rurales, del
35% al 44%. Una buena parte de las necesidades de inversión en ambos
servicios se requiere para ampliar el acceso de los segmentos más pobres de la
población. Los países que deberán hacer los mayores esfuerzos para cumplir la
Meta 10 de los ODM referente al saneamiento son Nicaragua, Haití, Santa
Lucía, Bolivia y Guatemala (Naciones Unidas, 2005a).
El uso doméstico de combustibles sólidos, como el estiércol, los
residuos de cosecha, la leña, el carbón de leña y el carbón mineral, como fuente
primaria de energía para cocinar y para calefacción puede ser altamente
contaminante. Esto afecta particularmente a los más pobres. De acuerdo a los
datos suministrados por las Naciones Unidas para el monitoreo del Indicador 29
de la Meta 9 de los ODM, el consumo residencial por persona de combustibles
sólidos ha disminuido entre 1990 y el 2000 en la región en su conjunto, sobre
todo en la zona andina y Centroamérica, mientras que se ha mantenido
aproximadamente igual en el Caribe y el Cono Sur (Naciones Unidas, 2005a).
Sin embargo, aún más de la mitad de la población en Haití, Guatemala,
Honduras, Nicaragua y Paraguay usa combustibles sólidos en la vivienda
- 10 -
ANEXO 4
ACUERDOS, DECLARACIONES Y CONVENCIONES
INTERNACIONALES
PRIMERA CONFERENCIA MUNDIAL SOBRE PROMOCIÓN DE LA
SALUD
Ottawa, Canadá, 17 al 21 de noviembre de 1986
Carta de Ottawa para la promoción de la salud
La primera Conferencia Internacional sobre la Promoción de la Salud reunida en
Ottawa el día 21 de noviembre de 1986 emite la presente carta dirigida a la
consecución del objetivo «Salud para Todos en el año 2000». Esta conferencia
fue, ante todo, una respuesta a la creciente demanda de una nueva concepción de
la salud pública en el mundo. Si bien las discusiones se centraron en las
necesidades de los países industrializados, se tuvieron también en cuenta los
problemas que atañen a las demás regiones. La conferencia tomó como punto de
partida los progresos alcanzados como consecuencia de la Declaración de Alma
Ata sobre la atención primaria, el documento «Los Objetivos de la Salud para
Todos» de la Organización Mundial de la Salud, y el debate sobre la acción
intersectorial para la salud sostenido recientemente en la Asamblea Mundial de
la Salud.
Promocionar la salud
La promoción de la salud consiste en proporcionar a los pueblos los medios
necesarios para mejorar su salud y ejercer un mayor control sobre ésta. Para
alcanzar un estado adecuado de bienestar físico, mental y social un individuo o
grupo debe ser capaz de identificar y realizar sus aspiraciones, de satisfacer sus
necesidades y de cambiar o adaptarse al medio ambiente. La salud se percibe
pues, no como el objetivo, sino como la fuente de riqueza de la vida cotidiana. Se
trata, por tanto, de un concepto positivo que acentúa los recursos sociales y
personales así como las aptitudes físicas. Por consiguiente, dado que el concepto
de salud como bienestar transciende la idea de formas de vida sanas, la
promoción de la salud no concierne exclusivamente al sector sanitario.
Pre-requisitos para la salud
Las condiciones y requisitos para la salud son: la paz, la educación, la vivienda,
la alimentación, la renta, un ecosistema estable, la justicia social y la equidad.
Cualquier mejora de la salud ha de basarse necesariamente en estos prerequisitos.
Promocionar el concepto
Una buena salud es el mejor recurso para el progreso personal, económico y
social y una dimensión importante de la calidad de la vida. Los factores
políticos, económicos, sociales, culturales, de medio ambiente, de conducta y
biológicos pueden intervenir bien en favor o en detrimento de la salud. El
objetivo de la acción por la salud es hacer que esas condiciones sean favorables
para poder promocionar la salud.
- 43 -
también, acciones que pudiesen minimizar los problemas socio-ambientales
derivados de la inexistencia de una política pública adecuada al tratamiento de
los residuos sólidos, albañales sanitarios y drenaje de la zona de Manguinhos,
R.J. Incluye investigaciones para una producción de tecnologías
económicamente viables aplicadas a las áreas.
(Naciones Unidas, 2005b). Para resolver esta situación, se han planteado varias
soluciones. Entre ellas se destaca la definición de requerimientos tecnológicos
para equipos térmicos de calefacción, baño y cocina, la revisión de los subsidios
a los combustibles de uso doméstico y la mejora de los criterios de eficiencia
térmica en la construcción de viviendas.
Proyecto 7
El consumo de tabaco es un factor de riesgo a la salud asociado con
hábitos de comportamiento no saludables en la vivienda. En Argentina, Brasil,
Chile, Colombia, Nicaragua, Paraguay y Uruguay más del 25% de la población
entre 13 y 15 años de edad consume tabaco (OPS, 2003).
BRASIL Proyecto Fazer. Vivienda Saludable en área indígena, Un Concepto
Integrando Proyectos, Acciones y la Comunidad, Integración de proyectos de la
Nación Mundurukú (Intervención Social).
Institución: UNAMA, FUNASA, Prefectura de Jacareakanga, Gobierno del
Estado de Pará.
Coordinación: Arq. Izabelle Vianna Dias Santos (Red Amazónica de Vivienda
Saludable)
E-mail: [email protected]
Resumen: Se implantó el proyecto «obra escuela» en 89 aldeas de la nación
Mundurukú, en Pará, a fin de capacitar laboralmente en el área construcción
civil al indio no asentado, motivando su regreso a la aldea como constructor,
multiplicando el conocimiento de la comunidad. Se articularon acciones de
saneamiento y de educación para la salud y se obtuvo como resultado
profesionalización y alternativas de trabajo y renta de las poblaciones
beneficiadas de la nación Mundurukú. Como acción especial del Proyecto
Fazer, fue montado el Proyecto Obra Escuela, donde se emplearon en forma de
administración directa recursos provenientes de convenios, lo que contribuyó a
reactivar la actividad económica en beneficio de la niñez.
Los desastres naturales son un permanente peligro al que se está
expuesto en la vivienda, especialmente cuando los planes de ordenamiento
territorial no se cumplen, las viviendas están ubicadas en áreas de alto riesgo y
los diseños y las estructuras no son adecuadas con uso de materiales de
construcción precarios. De acuerdo a los datos suministrados por el Emergency
Disasters Data Base (EM-DAT, 2005), en América Latina se registraron 185
inundaciones, 77 tormentas tropicales, huracanes y tormentas de viento, 42
terremotos, 34 sequías, 31 casos de temperaturas extremas, y 19 incendios
forestales entre 1995 y 2004, observándose una creciente incidencia de
desastres naturales ². Por ejemplo, en 1998, el Huracán Mitch fue responsable de
la muerte de más de 9.000 personas y la destrucción de más de 150.000
viviendas en América Central, especialmente en Nicaragua y Honduras (NHC,
2005). El efecto de las lluvias caídas en Venezuela en diciembre de 1999 fue
responsable de la muerte de entre 15.000 y 50.000 personas y el daño de 64.000
viviendas, de las cuales el 38% fue destruida (PNUD, CAF, 2000). Los tres
terremotos entre enero y febrero de 2001 que afectaron El Salvador dejaron un
saldo de 1.259 fallecidos, 8.964 heridos y 1.639.173 damnificados, con más de
87.500 personas refugiadas en albergues. El sector de la vivienda fue uno de los
más afectados, con un total de 153.011 viviendas destruidas y 186.444 dañadas,
lo que representa el 24% del total de las viviendas del país (Jenkins Molieri J.,
2002).
2.2
La relación vivienda-salud
La relación entre la vivienda y la salud es compleja. Las condiciones de
la vivienda pueden promover o limitar la salud física, mental y social de sus
residentes. Aunque estos efectos son ampliamente aceptados, las relaciones
concretas entre la calidad de la vivienda y la salud de sus residentes aun no están
completamente comprendidas y cuantificadas.
La situación de precariedad de la vivienda afecta la salud de millones
de personas en los países de ALC. En particular, afecta a las poblaciones más
pobres y a los más vulnerables, como los niños menores de 5 años, las personas
que padecen enfermedades crónicas como el VIH/SIDA, los discapacitados y
²
- 42 -
Los datos se refieren a desastres sufridos por los países y no al número de eventos. Un mismo evento
(por ejemplo, un huracán) puede generar varios desastres cuando afecta a más de un país.
- 11 -
los adultos mayores porque pasan la mayor parte del tiempo en la vivienda. Por
ejemplo, la mortalidad infantil varía inversamente con las coberturas de
saneamiento (Naciones Unidas, 2005a). Aproximadamente 6% de las muertes
de niños menores de cinco años registradas en la región se debe a enfermedades
diarreicas agudas (EDAs) que están asociadas con la precariedad del
saneamiento. El número de muertes por EDAs es más del 10% en El Salvador,
Guatemala, Haití, República Dominicana, Venezuela, Paraguay, Guyana,
Jamaica, Surinam y las Islas Turks y Caicos. La mortalidad infantil también
puede estar asociada con la mala ventilación de la vivienda, el uso doméstico de
combustibles sólidos, el consumo de tabaco, y el consumo de productos
químicos como los plaguicidas porque exacerban las infecciones respiratorias
agudas (IRAs) y pueden causar intoxicaciones. Aproximadamente 9% de las
muertes de niños menores de cinco años registradas en la región se debe a IRAs.
El número de muertes por IRAs es más del 15% en El Salvador, Guatemala y
Ecuador (OPS, 2004).
Los casos de enfermedades transmitidas por vectores como la
enfermedad de Chagas, el dengue y el paludismo pueden estar asociados con
materiales de construcción precarios, hábitos de comportamiento no saludables
y el precario entorno de la vivienda. Se estima que aproximadamente 11
millones de personas en ALC están infectadas con el Tripanosoma cruzi,
causante de la enfermedad de Chagas, y de 2 a 3 millones de personas tienen las
lesiones cardíacas características de la enfermedad (Schmunis G. A., LópezAntuñano F. J., 2005). En 2003, se registraron aproximadamente 534 mil casos
de dengue y 840 mil casos de paludismo. Los países que notificaron el mayor
número absoluto de casos fueron Brasil y los de la sub-región andina, que
concentran alrededor del 87% de los casos de dengue y 82% de los casos de
paludismo. De acuerdo con los datos suministrados por las Naciones Unidas
para el monitoreo de la Meta 8 de los ODM, el riesgo mayor de transmisión del
paludismo se observa en la sub-región conformada por la Guyana Francesa,
Guyana y Surinam, donde la incidencia parasitaria anual superó los 200 casos
por 1.000 habitantes.
paralelo fue realizado un trabajo de concientización ambiental manejando los
cuartos de baño completamente, con aprovechamiento de las aguas grises
familiares para irrigación de áreas verdes.
Proyecto 4
BOLIVIA Evaluación de las Cajitas Doradas en el Control y Vigilancia de los
vectores de la Enfermedad de Chagas.
Institución: Universidad de San Simón, Universidad de Buffalo, N.Y., EE.UU.
Coordinación: Dr. Fanor Balderama (Centro de Salud en la Vivienda de
Cochabamba, Centro de Salud en la Vivienda de Buffalo)
E-mail: [email protected]
Resumen: Es un proyecto que focaliza el control de la enfermedad de Chagas,
uno de los mayores problemas de salud pública de la comunidad en
Cochabamba. Tiene como objetivo evaluar las «cajitas doradas» como
instrumento del control y vigilancia de los vectores de la enfermedad de Chagas.
Fue realizado en los municipios de Tapacari, Capinota y Esteban Arce.
Proyecto 5
ARGENTINA Ecocentro.
Institución: Centro Experimental de Producción de la Facultad de Arquitectura
de la Universidad de Buenos Aires y la ONG ARCA.
Coordinación: Arq. Carlos Hugo Levinton (Red Argentina de Vivienda
Saludable)
E-mail: [email protected]
Resumen: Es un proyecto integrado en el manejo de residuos sólidos urbanos y
su aprovechamiento, que está siendo desarrollado en Buenos Aires
involucrando comunidades, escuelas, iglesias y ONGs, considerando
sostenibilidad y la fabricación de productos ecológicamente correctos. Dio
inicio con compañas de concientización ambiental de las comunidades y
organización del proceso con colectas selectivas en cooperativas que son
coordinadas por municipalidades y unidades ejecutoras.
Proyecto 6
La tuberculosis es otra de las enfermedades que puede estar asociada
con las condiciones precarias de la vivienda. En particular, el hacinamiento y la
mala ventilación pueden facilitar la transmisión de la enfermedad. De acuerdo
con los datos suministrados por las Naciones Unidas para el monitoreo de la
Meta 8 de los ODM, en 2002 hubo 370.000 nuevos casos de tuberculosis en
ALC, aproximadamente 200.000 de los cuales fueron contagiosos. Perú,
Haití y Bolivia son los países donde se registra el mayor número de casos
de tuberculosis de toda la región (Naciones Unidas, 2005a).
Las autoridades aún no han reconocido debidamente la
magnitud del problema. En la mayoría de los países de ALC:
- 12 -
BRASIL Proyecto Universidad Abierta: Una Contribución de Diez (10) Años
para una Gestión Sustentable del Complejo de Manguinhos, Fiocruz/ Río de
Janeiro
Institución: Fundación Oswaldo Cruz, Río de Janeiro
Coordinación: Dra. Simona Cynamon Cohen (Red Brasileira de Vivienda
Saludable)
E-mail: [email protected]
Resumen: El proyecto de Mejoría de la Calidad de Vida «Universidad Abierta»,
asocia las áreas de educación, salud, vivienda, saneamiento y medio ambiente
con acciones de monitoreo de la salud, de calidad del agua y de la vivienda,
pesquisas de acciones socio-educativas, estrategias de complementación de
renta y formación de técnicos en saneamiento y salud ambiental. Abarca,
- 41 -
ANEXO 3
EJEMPLOS DE BUENAS Y MEJORES PRÁCTICAS DE LA RED
INTERAMERICANA DE VIVIENDA SALUDABLE


Proyecto 1
CUBA Evaluación automatizada de la vigilancia epidemiológica ambiental.
Creación de software para la identificación de riesgos ambientales físicos y
químicos.
Institución: Instituto Nacional de Higiene, Epidemiología y Microbiología.
Coordinación: Dr. Carlos Barceló (Red Cubana de Vivienda Saludable)
E-mail: [email protected]
Resumen: Proyecto de desarrollo para la producción de aplicaciones de
software dirigidas a la evaluación sanitaria y bioestadística de la calidad físicoquímica y bacteriológica del agua de consumo domiciliario, evaluación de
radiaciones electromagnéticas y del ruido del tráfico, incluyendo modelos de
pronóstico de intensidad de estresores, impacto en salud e inventarios en
saneamiento. Los programas de identificación y evaluación de riesgos
ambientales en el escenario urbano se han utilizado en 10 países de América
Latina y el Caribe. Las aplicaciones fueron diseñadas como herramientas de
procesamiento ingeniero de datos para sistemas de vigilancia epidemiológica
ambiental.
Proyecto 2
PARAGUAY Cooperativa de Viviendas para Ayuda Mutua, convenio de
cooperación técnica CIPAE-BID/FACYT.
Institución: CIPAE-BID/FACYT.
Coordinación: Arq. Blas Amarilla (Red Paraguaya de Vivienda Saludable)
E-mail: [email protected]
Resumen: Es un proyecto piloto que cuenta con la cooperación del Centro
Cooperativo Sueco (SCC) y la Federación Uruguaya de Cooperativas de
Vivienda por ayuda mutua (FUCVAM) para implementar 300 viviendas en Itá,
Paraguay, con enfoque específico en tratamiento de agua, redes de
alcantarillado, reciclaje y disposición final de residuos sólidos.


El tema vivienda se trata de manera limitada, enfocándose
principalmente en la casa como un ambiente físico, sin tomar en
cuenta el hogar, el entorno y la comunidad.
No se tiene en cuenta la evolución en la composición de los
hogares, que implica una mayor diversificación de la demanda
habitacional (por ejemplo, hogares encabezados por mujeres y
hogares constituidos por personas adultas, debido al
envejecimiento que acompaña la disminución de la fecundidad).
Las políticas de vivienda de interés social tienen un enfoque
sustancialmente financiero, sin tomar suficientemente en cuenta
componentes sociales como la salud de la población.
Las decisiones sobre políticas, planes, programas y proyectos
de vivienda de interés social se toman:
Sin la información y el análisis necesario que ayuden a
las autoridades a reconocer su impacto en la salud de la
población.
Con limitada participación de la comunidad y sin
respetar las culturas y costumbres locales.
Para proteger la salud de las poblaciones más vulnerables de los
peligros a los que se está expuesto en la vivienda, se recomienda que los
países establezcan como política de Estado el derecho a la vivienda digna
o adecuada promovido por la Agenda Hábitat presentada en la
Conferencia Hábitat II en Estambul en 1996. Es crucial que las
autoridades traten el tema vivienda con una visión integradora y
actualizada de la composición de los hogares, establezcan políticas,
planes, programas y proyectos de vivienda de interés social y desarrollo
urbano que promuevan la salud, tomen decisiones basadas en la
evidencia científica y hagan partícipe a la comunidad desde el comienzo
de los procesos respetando lo máximo posible las culturas y costumbres
locales.
Proyecto 3
PERU Barrio Saludable en la Periferia Urbana Marginal de Lima y Callao.
Institución: Gobierno Regional de Callao y el Centro de Investigación y
Documentación y Asesoría Poblacional (CIDAP).
Coordinación: Arq. Rosario Santa María (Red de Vivienda, Ambiente y Salud,
Perú)
E-mail: [email protected]
Resumen: El proyecto enfoca el desarrollo del proceso de consolidación de
barrios saludables. Para esto, inició sus actividades en el asentamiento Mi Perú,
con la construcción de 746 viviendas, con participación comunitaria, desde el
diseño de las casas hasta el planeamiento y dotación de servicios básicos. En
- 40 -
- 13 -
CAPÍTULO 3
CONCEPTOS CLAVES RELACIONADOS CON LA ESTRATEGIA
DE VIVIENDA SALUDABLE
Saludable (Red VIVSALUD). En 2003 la Reunión del Secretariado se llevó a
cabo en Buenos Aires y en 2004 se efectuó una Reunión Virtual del Secretariado
a través de un foro virtual en Internet.
Esta guía tiene la intención de fortalecer la práctica de actividades que
promuevan y protejan la salud de las personas en el ámbito de la vivienda y que
contribuyan al desarrollo local integrado de las comunidades. Para cumplir con
su cometido, la guía busca ofrecer una estructura y paradigma de conceptos
claves para el establecimiento de viviendas saludables.
La Red VIVSALUD es una entidad corporativa sin fines de lucro
asentada en los países de la Región de las Américas. desarrolla su acción a través
de y para las Redes Nacionales que la integran, impulsada por un grupo regional
de coordinación. la red promueve la elaboración de documentos técnicos, la
investigación y acción local con las comunidades, la divulgación técnicocientífica, la capacitación continua, el intercambio sistemático de experiencias,
lecciones aprendidas y mejores prácticas. La Red promueve su desarrollo
sostenible desde una política de proyectos nacionales y multi-céntricos.
3.1
¿Qué es una vivienda saludable?
La vivienda saludable alude a un espacio de residencia que promueve
la salud de sus moradores. Este espacio incluye: la casa (el refugio físico donde
reside un individuo), el hogar (el grupo de individuos que vive bajo un mismo
techo), el entorno (el ambiente físico y psicosocial inmediatamente exterior a la
casa) y la comunidad (el grupo de individuos identificados como vecinos por los
residentes). Una vivienda saludable carece o presenta factores de riesgo
controlados y prevenibles e incluye agentes promotores de la salud y el
bienestar. En particular, la vivienda saludable cumple con las siguientes
condiciones fundamentales (ver descripción en el Capítulo 4):






Tenencia segura.
Ubicación segura, diseño y estructura adecuada y espacios suficientes
para una convivencia sana.
Servicios básicos de buena calidad.
Muebles, utensilios domésticos y bienes de consumo seguros y
eficientes.
Entorno adecuado que promueva la comunicación y la colaboración.
Hábitos de comportamiento que promueven la salud.
Asimismo, la Agenda Hábitat presentada en la Conferencia Hábitat II en
Estambul en 1996 (UN-HABITAT, 1996), define las características de una
«vivienda adecuada». Este concepto es similar al concepto de vivienda
saludable:
«Una vivienda adecuada significa algo más que tener un techo bajo el que
guarecerse. Significa también disponer de un lugar privado, espacio suficiente,
accesibilidad física, seguridad adecuada, seguridad de tenencia, estabilidad y
durabilidad estructurales, iluminación, calefacción y ventilación suficientes,
una infraestructura básica adecuada que incluya servicios de abastecimiento de
agua, saneamiento y eliminación de desechos, factores apropiados de calidad
del medio ambiente y relacionados con la salud, y un emplazamiento adecuado y
con acceso al trabajo y a los servicios básicos, todo ello a un costo razonable. La
idoneidad de todos esos factores debe determinarse junto con las personas
interesadas, teniendo en cuenta las perspectivas de desarrollo gradual. El
criterio de idoneidad suele variar de un país a otro, pues depende de factores
- 14 -
La Red VIVSALUD asume los compromisos que surgen de los
acuerdos alcanzados por sus miembros durante la Reunión de la Red
VIVSALUD que se realiza cada dos años. Los acuerdos se definen con base en
criterios democráticos bajo la coordinación del Secretariado Regional.
Una Red Nacional de Vivienda Saludable es un conjunto de
instituciones e individuos que se organizan para poder tomar decisiones y
acciones conjuntas en busca de promover viviendas saludables. Quienes
integran esta Red Nacional estarán trabajando en diferentes contextos
nacionales con una visión multidisciplinaría e intersectorial. la conforman
autoridades del sector salud, vivienda, desarrollo social y ambiente,
representantes de las autoridades locales y organizaciones comunitarias,
universidades y otras instituciones interesadas. La Red Nacional busca
promover el intercambio de experiencias y tecnologías así como el apoyo mutuo
de manera que pueda constituirse en el vehículo de una acción concertada en el
país para promover la vivienda saludable, tanto en su estructura física como
sociológica, para lograr que la vivienda constituya un agente promotor de la
salud de la población.
Actualmente, la Red Interamericana de Vivienda Saludable está
constituida por:

Redes Nacionales en: Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba,
Ecuador, Guatemala, Paraguay y Perú.

Centros de Salud en la Vivienda en: Bolivia, El Salvador, Chile,
Estados Unidos de América, Haití, México y Venezuela.
La Red Interamericana promueve una estrategia de alianzas con otras
redes comunitarias y asociaciones profesionales como la Red Internacional de
Eco-clubes (RIE) y la Asociación Interamericana de Ingeniería Sanitaria
(AIDIS Internacional) y con agencias de Naciones Unidas como Hábitat
ROLAC.
- 39 -
En los años 90, la Universidad de Los Andes en Mérida, Venezuela,
llevó a cabo un plan de vivienda rural con diseños de espacios saludables que
estaban dentro de la óptica del saneamiento. Este plan incluía la lucha contra
vectores, el abastecimiento de agua segura, el tratamiento de excretas y la
disposición de residuos, así como también el confort climático y la
funcionalidad del espacio.
En el mismo período, la Facultad de Arquitectura de la UNAM en la
Ciudad de México desarrolló una línea de tesis para arquitectos basada en el
vínculo vivienda-salud. Rápidamente, esta iniciativa se extendió a otras
universidades de México.
En Santiago de Chile, la Pontificia Universidad Católica comenzó a
desarrollar intervenciones sociales con las amas de casa residentes en viviendas
de interés social. En particular, se concentró en el área de atención psicológica
para familias con disfunciones.
En Nicaragua, la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua inició
un trabajo en higiene de la vivienda con moradores de asentamientos marginales
de Managua. En Jamaica hubo un grupo que llevó a cabo actividades en el
campo de la mejoría de viviendas sociales y en el Chaco, Argentina, se trabajó en
el mejoramiento de la vivienda con el auspicio del Club de Leones y el
acompañamiento de la OPS/OMS desde fines de los años 80.
culturales, sociales, ambientales y económicos concretos. En ese contexto,
deben considerarse los factores relacionados con el sexo y la edad, como el
grado de exposición de los niños y las mujeres a las sustancias tóxicas.»
3.2
La estrategia de vivienda saludable consiste en fortalecer la ejecución
de actividades que promueven y protegen la salud de las poblaciones más
vulnerables de los peligros a los que se está expuesto en las viviendas de las
zonas más necesitadas y que contribuyen al desarrollo local integrado de las
comunidades. Requiere un fuerte compromiso político, una sólida experiencia
técnica e intercultural, la colaboración intersectorial permanente, el enfoque
multidisciplinario y un gran nivel de participación y acción por parte de la
comunidad.
La estrategia es un vehículo para asistir a los Estados Miembros de la
Organización de la Naciones Unidas de América Latina y el Caribe en el
cumplimiento con el compromiso de los Objetivos de Desarrollo del Milenio
(ODM) adoptados en el año 2000. La vivienda saludable ejerce en forma directa
e indirecta una influencia positiva en el cumplimiento de todos los ODM.
En particular, la estrategia de vivienda saludable deberá contribuir a:

A partir de 1987, la OMS, consciente de la necesidad de promover
iniciativas que identificasen factores de riesgo a la salud asociados con el
ambiente, el trabajo y la vivienda, estableció una comisión con el objetivo de
delinear una política de vivienda saludable, basada en la estrategia de espacios
saludables como herramienta de promoción.



Entre 1992 y 1994, la OPS/OMS inició actividades conjuntas con los
Centros Colaboradores en Buffalo y La Habana e identificó posibles actores en
la Región interesados en desarrollar una Iniciativa Regional de Vivienda
Saludable. En 1995 fue constituida en Ciudad de México la Red de Centros de
Salud en la Vivienda, compuesta en su inicio por instituciones de siete países.
En 1996, se llevó a cabo la I Reunión del Secretariado de la Red de
Centros de Salud en la Vivienda en Taxco, México, y en 1997 se llevó a cabo la II
Reunión de la Red en La Habana, Cuba, elaborándose el Documento Básico que
regulaba la actividad inicial de la Red. A ello siguieron sucesivas reuniones: en
1998, la II Reunión del Secretariado de la Red en Managua, Nicaragua; en 1999,
la III Reunión de la Red en Mérida, Venezuela; en 2000, la IV Reunión de la Red
en Buffalo y Reunión del Secretariado; en 2001, la Reunión del Secretariado en
Washington; y en 2002 la V Reunión de la Red en La Habana, Cuba, donde pasó
de ser una red de instituciones a ser una red de redes nacionales intersectoriales y
multidisciplinarias convirtiéndose en Red Interamericana de Vivienda
- 38 -
¿Qué es la estrategia de vivienda saludable?

3.3
Promover la colaboración entre los sectores nacionales y locales,
públicos y privados involucrados con el mejoramiento de las
condiciones de la vivienda.
Crear espacios de discusión, análisis e investigación que promuevan
una visión integradora de la vivienda y su impacto en la salud.
Implementar políticas, planes, programas y proyectos de vivienda de
interés social y desarrollo urbano que promuevan la salud.
Promover y proteger la salud de las poblaciones más vulnerables a
través de acciones para mejorar las condiciones de la vivienda que sean
sostenibles.
Fortalecer las capacidades humanas, con énfasis en la capacidad de la
ciudadanía para transformar su realidad y tomar sus propias decisiones.
¿Qué es la Red Interamericana de Vivienda Saludable (Red
VIVSALUD)?
La Red Interamericana de Vivienda Saludable (Red VIVSALUD) es
una entidad corporativa sin fines de lucro asentada en los países de la Región de
las Américas. Desarrolla su acción a través de y para las Redes Nacionales que la
integran, impulsada por un Grupo Regional de Coordinación. La Red
VIVSALUD asume los compromisos que surgen de los acuerdos alcanzados por
sus miembros durante la Reunión de la Red VIVSALUD que se realiza cada dos
años. Los acuerdos se definen con base en criterios democráticos bajo la
coordinación del Secretariado Regional.
- 15 -
Una Red Nacional de Vivienda Saludable es un conjunto de
instituciones e individuos que se organizan para poder tomar decisiones y
acciones conjuntas en busca de promover viviendas saludables. Quienes
integran esta Red Nacional estarán operando en diferentes contextos nacionales
con una visión multidisciplinaria e intersectorial. La conforman autoridades del
sector salud, vivienda, desarrollo social y ambiente, representantes de las
autoridades locales y organizaciones comunitarias, universidades y otras
instituciones interesadas. La Red Nacional busca promover el intercambio de
experiencias y tecnologías así como el apoyo mutuo de manera que pueda
constituirse en el vehículo de una acción concertada en el país para promover la
vivienda saludable tanto en su estructura física como en su estructura
sociológica, para lograr que la vivienda constituya un agente promotor de la
salud de la población.
3.4
¿Qué queremos decir con una visión integral de la salud?
La salud es un derecho humano fundamental que se define como «un
estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia
de enfermedad» (WHO, 1948). La salud también es considerada como un
derecho fundamental en distintos tratados internacionales de derechos humanos
(OEA, 1988).
Una visión integral de la salud supone que todos los sistemas y
estructuras que rigen las condiciones civiles, políticas, sociales y económicas,
al igual que el entorno físico, deben tener en cuenta las implicaciones y el
impacto de sus actividades en la salud y en la calidad de vida individual y
colectiva.
ANEXO 2
LA RED INTERAMERICANA DE VIVIENDA SALUDABLE
El Prof. Harold Cohen del Departamento de Medicina Social y
Preventiva de la Universidad del Estado de Nueva York (SUNY) en Buffalo creó
el primer Centro de Salud en la Vivienda en América en 1982. Este Centro
comenzó su trabajo promoviendo el concepto de higiene y capacitando a
voluntarios para ayudar a la comunidad a enfrentar los problemas relacionados
con la precariedad del entorno. La inspiración del Prof. Cohen fue
eminentemente moral, filantrópica y proselitista. Escribió libros sobre el tema
en los cuales mostraba su filosofía, con raíces en el pragmatismo de Dewey.
Había una apelación en relación con la juventud norteamericana, la que debería
redefinir su posición para sí misma, para su país y para el mundo.
En aquellos tiempos, el estilo de trabajo fue parecido al de un
organismo no gubernamental (ONG), desarrollando proyectos de ayuda social
con el objetivo de «ayudar a la comunidad a que se ayude a sí misma». Un
ejemplo fue el proyecto en la Comunidad Flor del Campo en Honduras. En este
proyecto, se propuso soluciones habitacionales alternativas en un barrio
marginal. Lamentablemente, el proyecto no tuvo continuidad debido a
impedimentos del gobierno de Honduras. El Centro de Buffalo también
comenzó a trabajar en Bolivia y Venezuela. En ambos casos se dictaron cursos
para la formación de activistas comunitarios, una mezcla de promotores de
salud y trabajadores sociales. En Bolivia, hubo cooperación con la Universidad
de San Simón en Cochabamba, centrando la atención en proyectos de
investigación-acción para el control de la enfermedad de Chagas. En Venezuela,
el Centro trabajó con la Escuela de Salud Pública «Dr. Arnoldo Gabaldón» en
Maracay, centrando la atención en la construcción de capacidades para la
mejoría de la vivienda rural.
Los determinantes sociales en la salud son las interacciones entre el
individuo, la comunidad y el país que pueden afectar la salud. En el centro del
esquema se encuentran las características innatas del individuo como los
factores hereditarios, el sexo y la edad. En un segundo nivel se encuentran los
estilos de vida y comportamientos individuales como el ejercicio físico, el tipo
de dieta y el consumo de alcohol, tabaco y drogas. En un tercer nivel se
encuentran los factores sociales y comunitarios como los grupos y
comunidades de auto-cuidado, el sentido de pertenencia a una comunidad, las
redes familiares y sociales de apoyo, y el ambiente de apoyo para diferentes
grupos etarios y sociales. En un cuarto nivel se encuentran las condiciones de
vida y de trabajo como el ingreso, la educación, el trabajo, las condiciones de la
vivienda, el acceso a los servicios de salud, y el acceso a los alimentos.
Finalmente, en un quinto nivel se encuentran las condiciones generales
sociales, económicas, ambientales y culturales del país (Commission on Social
Determinants of Health, 2005).
En 1985, el Instituto Nacional de Higiene de Cuba inició una línea de
investigación en vivienda en La Habana que abarcaba temas como calidad del
aire en interiores, acústica, iluminación, microclima, ventilación y vibraciones.
El instituto llevó a cabo estudios epidemiológicos con el objetivo de mejorar el
diseño habitacional dentro de una óptica intersectorial e interdisciplinaria. En
los años 90, estas investigaciones se extendieron hacia las zonas central y
oriental de Cuba. Estos proyectos mejoraron los diseños y construcciones de
vivienda en el país. Basados en esta experiencia, se creó el segundo Centro
Colaborador de la OMS en Vivienda Saludable en América.
- 16 -
- 37 -
Así, el Centro de Salud en la Vivienda de Buffalo comenzó un proceso
de desarrollo de investigaciones sobre el ambiente construido y los factores de
riesgo a la salud, promoviendo debates, reflexiones y soluciones y generando un
movimiento de vivienda saludable en América. Basados en esta experiencia, se
creó el Primer Centro Colaborador de la OMS para Vivienda Saludable en
América.
El empoderamiento es un proceso de acción social que promueve la
participación de las personas, organizaciones y comunidades para lograr un
mayor control individual y comunitario, eficacia política, mejoramiento de la
calidad de vida y justicia social. Existe una diferencia entre el empoderamiento
individual y comunitario. El empoderamiento individual se refiere
fundamentalmente a la capacidad del individuo para tomar decisiones y tener
control sobre su vida personal. El empoderamiento comunitario involucra a
varias personas que actúan colectivamente para ganar mayor influencia y
control sobre los determinantes de la salud y la calidad de vida de sus
comunidades y es un componente esencial del trabajo comunitario para mejorar
la salud. La participación contribuye al empoderamiento y ambos conceptos
fortalecen los procesos democráticos y la sociedad civil.
Equidad en salud ha sido definida como reducción de las injusticias y las
desigualdades evitables en materia de salud de los diferentes grupos,
asegurando el acceso a servicios sanitarios de calidad con base en las
necesidades. Equidad es el proceso de ser justo. En este contexto, por ejemplo,
equidad no es sinónimo de igualdad de acceso a los recursos de promoción de la
salud y servicios de atención, sino más bien la atribución, a cada uno, de los
recursos y atención de salud necesarios. De esta manera, la equidad es vista en el
contexto de la necesidad y no de la igualdad.
Género se refiere al papel y a las responsabilidades establecidos socialmente
para el hombre y la mujer. Está relacionado con nuestra imagen y la forma en
que supuestamente debemos pensar y actuar como hombres y mujeres debido a
la forma en que está organizada la sociedad, y no a nuestras diferencias
biológicas. Género es el conjunto específico de características culturales que
identifican el comportamiento social de las mujeres y los hombres así como la
relación entre ellos. El género abarca los términos hombres y mujeres y también
incluye su relación y la manera como esta relación se construye socialmente. Es
una herramienta analítica para comprender los procesos sociales que incluyen
tanto a los hombres como a las mujeres en el mismo tema.
3.5
¿Qué queremos decir con políticas públicas que promueven la
salud?
Las políticas públicas que promueven la salud se definen como
aquellas que tienen una gran influencia en las condiciones de salud de la
población, tales como vivienda y desarrollo urbano. Una política pública que
promueva la salud se caracteriza por una preocupación explícita por la salud y la
equidad. El concepto de equidad corresponde al reconocimiento y la
efectividad, con igualdad, de los derechos de la población, sin restringir el
acceso y la utilización de los servicios por parte de los distintos segmentos
sociales. Las políticas públicas que promueven la salud tienen como finalidad
crear un entorno de apoyo que permita a las personas llevar una vida saludable.
Dicha política posibilita y facilita a los ciudadanos tomar decisiones que
promueven su salud y transformar los entornos físicos y sociales. Este concepto
implica actos y acciones de los gobernantes y de aquellos que tienen poder
político, dirigidos a solucionar problemas específicos que afectan el bienestar, la
calidad de vida y la salud de la población.
Un compromiso sobre políticas públicas que promueven la salud
significa que los gobiernos deben medir e informar sobre sus inversiones y
resultados en el área de la salud, a través de presupuestos participativos y
rendición de cuentas. El sector salud debe liderarlas e impulsarlas, pero no es su
exclusividad, ya que las acciones de promoción de la salud van más allá del
sector de asistencia sanitaria.
Las políticas públicas que promueven la salud deben ser traducidas en
legislación que salvaguarde las condiciones necesarias para desarrollar estilos
de vida saludables, proteger los derechos humanos y libertades fundamentales
de los miembros de las comunidad, proteger a las familias e individuos de los
factores de riesgo y promover las condiciones que hagan que las opciones más
saludables sean las más fáciles de elegir y de alcanzar. Es importante contar con
el tiempo necesario para que se concreticen los cambios y transformaciones
requeridos y obtener impactos permanentes que puedan ser evaluados. En este
sentido, las políticas públicas tienen que ser traducidas en políticas
institucionales que aborden los problemas prioritarios de la comunidad.
3.6
¿Qué queremos decir con acciones basadas en la evidencia?
Las acciones basadas en la evidencia son aquellas acciones para las
cuales la decisión de llevarlas a cabo le dan el peso necesario a toda la
información relevante válida disponible sobre el impacto de las condiciones de
la vivienda en la salud en las zonas de interés.
- 36 -
- 17 -
En esta definición se destacan los siguientes conceptos:
3.7

Las decisiones son tomadas por autoridades y líderes nacionales,
locales y comunitarios claves en forma concertada con todas las partes
involucradas. Por lo tanto, las acciones basadas en la evidencia son
relevantes tanto para las autoridades y líderes claves nacionales y
locales como para los líderes comunitarios.

Se reconoce que hay varios factores que contribuyen a la decisión de
llevar a cabo una acción. No se asume que una sola variable debe ser el
factor determinante de una decisión.

Se reconoce que obtener toda la información disponible es una
aspiración y no una realidad pero implica la búsqueda activa de la
información relevante.

Para que la información disponible sea relevante y válida se debe
recopilar, validar, analizar e interpretar los datos existentes.

La evidencia puede ser cuantitativa o cualitativa, lo importante es que
refleje la realidad de la situación actual.
¿Qué queremos decir con participación comunitaria?
La participación comunitaria se construye a lo largo de un proceso. Se
inicia cuando varias personas deciden compartir necesidades, aspiraciones y
experiencias con el objetivo de mejorar sus condiciones de vida. Para eso, se
encuentran, se organizan, identifican prioridades, dividen tareas, establecen
metas y estrategias de acuerdo con los recursos (financieros, técnicos y
humanos) existentes y con aquellos que pudieran obtener a través de alianzas
(Airhihenbuwa C. O., 1994). Tener una comunidad organizada no significa
necesariamente tener una comunidad participativa. Para que haya participación,
la comunidad debe estar organizada como equipo, con objetivos establecidos;
tener el derecho y la responsabilidad de tomar decisiones que puedan ser
efectivas y, principalmente, poder decidir sobre las cuestiones que afectan la
vida de sus miembros (Rifkin S. B., Muller F., Bichmann W., 1998, Freire P.,
1975).
Pasos para desarrollar la participación comunitaria
1.
Un primer paso es aproximarse a la comunidad para identificar el grado
de organización y participación de las personas y las instituciones. Este
primer paso permitirá al personal técnico y autoridades comprender cómo
la comunidad percibe y explica el mundo, ya sea por sus creencias, mitos y
otras formas de ver la realidad, como por el conocimiento de su
organización y recursos.
- 18 -
ANEXO 1
GLOSARIO
Los Objetivos de Desarrollo del Milenio constituyen un paquete de 8 objetivos
generales y 18 metas delimitadas en tiempo, esbozados en la Declaración del
Milenio de las Naciones Unidas para combatir la pobreza, el hambre, las
enfermedades, el analfabetismo, la degradación del medio ambiente, la
discriminación contra la mujer, y comprometiéndose con los principios de los
derechos humanos, el buen gobierno y la democracia.
La estrategia de vivienda saludable promueve la salud de las poblaciones más
vulnerables en los espacios donde residen. La vivienda saludable ejerce en forma
directa e indirecta una influencia positiva en el cumplimiento de todos los
Objetivos de Desarrollo del Milenio. Una vivienda comienza a ser saludable
cuando los líderes políticos, los técnicos y científicos de distintas disciplinas, las
organizaciones locales y la comunidad se comprometen y dan inicio al proceso de
mejorar continua y progresivamente las condiciones de la vivienda. La estrategia
contribuye a crear espacios de discusión, análisis, e investigación, implementar
políticas, planes, programas y proyectos públicos de vivienda de interés social y
desarrollo urbano que promuevan la salud; ejecutar acciones para mejorar las
condiciones de la vivienda que sean sostenibles y fortalecer las capacidades
humanas, con énfasis en la capacidad de la ciudadanía para transformar su
realidad y tomar sus propias decisiones.
La promoción de la salud es un proceso que consiste en proporcionar a los
pueblos los medios necesarios para mejorar su salud y ejercer un mayor control
sobre ésta. Algunos pre-requisitos para la salud son: la paz, la educación, la
vivienda, la alimentación, el ingreso, un ecosistema estable, la justicia social y la
equidad. La promoción de la salud va más allá del sector de asistencia sanitaria,
subrayando que la salud debe figurar en la agenda política de todos los sectores y
en todos los niveles del gobierno. Además, la participación de la
población/comunidad es esencial para sostener la acción en materia de promoción
de la salud. Introducir el tema de la salud como un hecho relevante en la agenda
política, cuyas consecuencias deben ser consideradas en la toma de decisiones de
todos los sectores, constituye un eje fundamental para la promoción de la salud.
La participación comunitaria se construye a lo largo de un proceso. Se inicia
cuando varias personas deciden compartir necesidades, aspiraciones y
experiencias con el objetivo de obtener mejores condiciones de vida. Los
miembros de una comunidad pueden pertenecer o no pertenecer al mismo espacio
geográfico. Lo importante es que se sientan parte de la comunidad. Tener una
comunidad organizada no significa necesariamente una comunidad participativa.
Para que haya participación, la comunidad deberá tener el derecho y la
responsabilidad de tomar decisiones sobre asuntos que afectan la vida de sus
miembros. El proceso de promover y fortalecer la participación comunitaria como
parte de la estrategia de vivienda saludable crea condiciones necesarias para que
los individuos ganen más control sobre sus propias decisiones y acciones y
utilicen recursos que afectan su salud, tanto a nivel individual como comunitario,
condiciones necesarias para el empoderamiento.
- 35 -
Valla V. V. (2000). «Procurando compreender a fala das classes populares».
Saúde e Educação. Río de Janeiro: DP&A.
Vaughan J. W., Platts-Mills T. A. (2000). «New approaches to environmental
control». Clin Rev Allergy Immunol; 18: 325-339.
World Health Organization (WHO). Preamble to the Constitution of the World
Health Organization as adopted by the International Health Conference, New
York, 19-22 June, 1946; signed on 22 July 1946 by the representatives of 61
States (Official Records of the World Health Organization, no. 2, p. 100) and
entered into force on 7 April 1948.
Wo r l d H e a l t h O r g a n i z a t i o n ( W H O ) ( 2 0 0 5 ) . C o m m i s s i o n
o n S o c i a l D e t e r m i n a n t s o f H e a l t h . [ S i t i o We b e n l í n e a ]
http://www.who.int/social_determinants/en/ [Fecha de consulta: 2005].
2.
No siempre la visión del mundo de los miembros de la comunidad coincide
con la de los técnicos y las autoridades. Esto significa que es necesario
discutir todas las visiones y construir una en común (Valla V. V., 2000).
3.
Utilizar un lenguaje y unos recursos de comunicación adecuados a los
patrones culturales de cada comunidad para facilitar el acceso y la eficacia
de las estrategias dirigidas a la población, así como promover la
movilización comunitaria.
4.
Hacer que la comunidad esté informada sobre el proyecto o iniciativa y
que participe en las decisiones del proceso.
5.
A medida que la comunidad percibe y establece una relación entre este
proyecto o iniciativa y su salud y calidad de vida podría también sentirse
responsable y establecer metas personales y colectivas, no sólo por un
proyecto o iniciativa comunitaria, sino por un proyecto de vida.
3.8
¿Qué son las mejores prácticas?
Las mejores prácticas son contribuciones sobresalientes para mejorar
la calidad de vida y la sostenibilidad de las ciudades y comunidades. La
identificación y el uso de mejores prácticas constituye un factor clave en el
desarrollo de una estrategia de vivienda saludable. Han sido definidas por las
Naciones Unidas y la comunidad internacional como iniciativas exitosas que:



3.9
Tienen un impacto tangible en la mejora de la calidad de vida de las
personas.
Son el resultado de una asociación efectiva entre actores de los sectores
público, privado y la sociedad civil
Son sostenibles desde el punto de vista cultural, social, económico y
ambiental.
¿Qué queremos decir con compromiso y colaboración
intersectorial?
Puesto que el tema de vivienda saludable es multidimencional, hace
converger una serie de intereses que no pueden verse bajo una óptica, disciplina
o sector. En ese contexto, la estrategia de vivienda saludable debe constituirse en
un marco catalizador de iniciativas de trabajo integral entre sectores, en
particular los de vivienda y hábitat, desarrollo urbano, ambiente, desarrollo
social y educación y entre las organizaciones comunitarias, las instituciones
académicas, el sector privado, y los representantes de la autoridad nacional y
local. La creación de alianzas estratégicas efectivas es muy importante y su
sostenibilidad necesita el establecimiento de relaciones y acuerdos entre los
diferentes interlocutores.
- 34 -
- 19 -
CAPÍTULO 4
LAS CONDICIONES FUNDAMENTALES DE LA
VIVIENDA SALUDABLE
Organización Panamericana de la Salud (OPS) (2003). Based on country
information. Area of Sustainable Development and Environmental Health, Risk
Assessment and Management (RA). [Documento Web en línea]
http://www.paho.org/English/SHA/coredata/tabulator/newsqlTabulador.asp.
La vivienda saludable alude a un espacio de residencia caracterizado
por un conjunto de condiciones que influyen de manera favorable en los
procesos de restauración, protección y promoción de la salud e incentiva la
actividad creadora y el aprendizaje de sus moradores. Por ejemplo, provee
abrigo ante la intemperie, garantiza la seguridad y protección, facilita el
descanso, permite el empleo de los sentidos para el ejercicio de la cultura,
implementa el almacenamiento, procesamiento, y consumo de alimentos,
suministra los recursos de la higiene personal, doméstica y el saneamiento,
favorece la convalecencia de los enfermos, la atención de los adultos mayores y
discapacitados y el desenvolvimiento de la vida del niño, y promueve el
desarrollo equilibrado de la vida del hogar. Este concepto es similar al de
«vivienda adecuada» caracterizado en la Agenda Hábitat, presentado en la
Conferencia Hábitat II en Estambul en 1996 (ver Capítulo 3).
Organización Panamericana de la Salud (OPS) (2004). Health situation in the
Americas. Basic indicators.
En la vivienda se reúne una agenda social dada en los individuos que la
habitan, económica en los medios de vida, cultural en las tradiciones y usanzas,
y ambiental en el contexto físico de su desenvolvimiento. Por lo tanto, la
vivienda incluye: la casa (refugio físico donde reside un individuo), el hogar
(grupo de individuos que vive bajo un mismo techo), el entorno (ambiente físico
y psicosocial inmediatamente exterior a la casa) y la comunidad (grupo de
individuos identificados como vecinos por los residentes).
La generalidad de las condiciones fundamentales que debería cumplir
una vivienda saludable la distingue de las pautas y códigos de vivienda que
suelen ser elaborados por los gobiernos con el fin de fijar normas aplicables,
según sea el caso, a escala nacional o local. El alcance y la aplicabilidad de las
pautas y códigos de vivienda siempre serán más limitados que las condiciones
fundamentales que se examinan en este documento.
En particular, la vivienda saludable cumple con las siguientes
condiciones fundamentales:






Tenencia segura.
Ubicación segura, diseño y estructura adecuada y espacios suficientes
para una convivencia sana.
Servicios básicos de buena calidad.
Muebles, utensilios domésticos y bienes de consumo seguros y
eficientes.
Entorno adecuado que promueva la comunicación y la colaboración.
Hábitos de comportamiento que promueven la salud.
- 20 -
Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Corporación
Andina de Fomento (CAF) (2000). Efectos de las lluvias caídas en Venezuela en
diciembre de 1999. CDB publicaciones.
Rifkin S. B., Muller F., Bichmann W. (1988). «Primary health care: On
measuring participation». Soc Sci. Med.; 26 (9): 931-940.
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mejoramiento de la vivienda con un enfoque ecosistémico de la salud». Cad
Saúde Pública, Río de Janeiro; 17(Suplemento): 89-97.
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crime: a multilevel study of collective efficacy». Science; 277: 918-924.
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- 33 -
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ciudades de América Latina y el Caribe. Santiago de Chile: CEPAL, División de
Desarrollo Sostenible y Asentamientos Humanos.
4.1
Tenencia segura es el derecho de todos los individuos y grupos a contar
con una protección eficaz del Estado ante las erradicaciones forzadas. Las
viviendas pueden ser propiedad, alquiladas u ocupadas por sus dueños. Lo
importante es que existan pruebas documentales que se puedan utilizar para
comprobar el derecho a la tenencia y que exista una protección de hecho o de
derecho contra las erradicaciones forzadas. Entre los documentos que pueden
ser usados como prueba del derecho a la tenencia se incluyen (UN-HABITAT,
2003):

Macintyre S., Ellaway A., Der G., Ford G., Hunt K. (Octubre, 1998) «Do
housing tenure and car access predict health because they are simply markers of
income or self esteem? A Scottish study». J Epidemiol Community Health; 52
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Washington, D.C.: OPS.
- 32 -
Tenencia segura



Títulos formales de propiedad tanto del terreno como de la
residencia.
Documento legal que pruebe un acuerdo de tenencia.
Contratos formales de alquiler.
Tenencia consuetudinaria u ocupantes irregulares, que tienen
recibos de pago de impuestos o cuentas de servicios públicos a su
nombre.
La tenencia insegura está asociada con síntomas de estrés, ansiedad y
depresión. Sin embargo, hay pocos estudios epidemiológicos publicados en la
literatura científica que indiquen si esta asociación se debe simplemente a que la
tenencia es un marcador de bienestar material y autoestima o está asociado a
otros efectos promotores o de riesgo para la salud (Ellaway A., Macintyre S.,
1998 y Macintyre S., Ellaway A., Der G., Ford G., Hunt K., 1998). Además, la
tenencia insegura perjudica más a las mujeres jefas del hogar que a los hombres
por la persistencia de barreras en la región para que las mujeres puedan acceder a
la propiedad de la vivienda, o bien recuperar esa propiedad cuando deben asumir
de hecho la jefatura tras una ruptura de la pareja (Mac Donald J., 2004).
4.2
Ubicación segura, diseño y estructura adecuada y espacios
suficientes para una convivencia sana
La ubicación de las viviendas debe reducir al mínimo la exposición a
los contaminantes químicos como los provenientes de la industria o los
vertederos de residuos sólidos y líquidos, a los contaminantes físicos como el
ruido y las ondas electromagnéticas y a los peligros naturales recurrentes como
las inundaciones, los terremotos y las erupciones volcánicas. La ubicación
inadecuada de la vivienda está asociada con un incremento del riesgo a lesiones,
a contraer enfermedades respiratorias, cardíacas y cáncer y a trastornos
neuropsiquiátricos por la exposición a compuestos tóxicos (Jenkins Molieri J.,
2002).
El diseño y la estructura de la vivienda dependen de las condiciones
sociales, económicas y ambientales y de las preferencias culturales. Tomando
en consideración estas condiciones y preferencias, los proyectos, los materiales
y las técnicas de construcción deben producir estructuras duraderas, que
- 21 -
proporcionen un alojamiento resistente, seco, seguro y accesible a personas con
discapacidad. Conseguir un adecuado diseño y estructura de la vivienda es un
problema más complejo para los hogares encabezados por mujeres,
particularmente en países donde muchos pobres habitan en viviendas autoconstruidas (Mac Donald J., 2004). Los defectos en el diseño y la estructura de la
vivienda están asociados con un incremento del riesgo a lesiones, quemaduras,
contraer enfermedades transmitidas por vectores como la enfermedad de
Chagas, enfermedades cardiovasculares provocadas por condiciones térmicas
incómodas y enfermedades respiratorias provocadas por la mala ventilación, el
polvo y la humedad (Hunt S., 1993, Strachan D. P., 1993, Catalá S. S. et al.,
2004, Ávila Montes G. et al., 1998, Rojas de Arias A., 2001, American Academy
of Pediatrics, 2001). También están asociados con síntomas de irritabilidad,
intolerancia social, estrés y depresión (Collins K. J., 1993, Hopton J. L., Hunt S.
M., 1996).
Los espacios de la vivienda deben tener áreas suficientemente amplias
para una convivencia cómoda y sana, con una buena iluminación y ventilación.
El hacinamiento está asociado con pequeñas áreas de habitabilidad, altas tasas
de ocupación de un alto número de personas en un mismo espacio y el elevado
número de casas en un solo entorno. Varias definiciones locales de
asentamientos precarios incluyen umbrales mínimos en lo que se refiere al
tamaño del área, el número de estructuras en un bloque de asentamiento, el
número de casas o de personas o la densidad de unidades habitacionales de un
área (UN-HABITAT, 2003). El espacio reducido por persona está asociado con
un incremento del riesgo a contraer enfermedades infecciosas como las
enfermedades meningocócicas, la tuberculosis y la hepatitis y con síntomas de
estrés, ansiedad, depresión y comportamientos no saludables como las
relaciones promiscuas (Gabe J., Williams P., 1993).
4.3
Servicios básicos de buena calidad
Una vivienda debe tener acceso a los servicios básicos y contar con las
facilidades necesarias para proteger la salud de sus residentes. En particular,
debe contar con acceso a agua segura en cantidad suficiente y a un precio
asequible, saneamiento básico, eliminación adecuada e higiénica de desechos
sólidos, desagüe adecuado y energía lo menos contaminante y más eficiente
posible. La disponibilidad de servicios básicos en la vivienda es generalmente
una condición más valorada por las mujeres jefas del hogar que por los hombres
(Mac Donald J., 2004).
El agua es una de las necesidades fundamentales para la vida humana.
El acceso a suficiente cantidad y calidad de agua contribuye a prevenir la
propagación de enfermedades gastrointestinales, propicia la higiene personal y
doméstica, y mejora el nivel de vida, contribuyendo al bienestar de la familia y
de la comunidad. Mejorar el acceso al agua también implica disminuir la carga
que pesa sobre las personas, generalmente mujeres y niños que deben ir en
búsqueda del agua a fuentes distantes. Aunque la red de tuberías es la mejor
forma para conducir agua suficiente y libre de contaminación hasta la vivienda,
- 22 -
Commission on Social Determinants of Health. (Mayo, 2005). Towards a
Conceptual Framework for Analysis and Action on the Social Determinants of
Health. Discussion paper for the Commission on Social Determinants of
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CAPÍTULO 6
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conocimientos, creencias y prácticas». Rev Panam Salud Pública; 3 (3): 158163.
es imposible proporcionar este servicio a la mayoría de los habitantes de las
zonas rurales y de los asentamientos precarios urbanos. Cuando el agua se
acarrea desde cierta distancia, la cantidad disponible puede ser insuficiente y
tiene un mayor riesgo de contaminarse. Además, si el costo del agua no es
asequible puede obligar a las personas a buscar soluciones irregulares y
peligrosas.
El acceso a saneamiento básico contribuye a prevenir la transmisión
fecal-oral de enfermedades y la reproducción de algunos tipos de insectos
vectores. El principal problema no es de carácter técnico, sino social, cultural o
de aceptación de determinadas tecnologías. Existen varias técnicas, de
complejidad diversa, para la eliminación higiénica de las excretas; pueden ser
conexiones privadas directas al alcantarillado público o sistema de tanques
sépticos, y letrinas, las cuales pueden ser familiares, multifamiliares o
comunitarias. El principal problema es el mantenimiento y uso adecuado de
estos sistemas.
La eliminación adecuada e higiénica de los desechos sólidos
domésticos reduce los riesgos para la salud y crea un entorno más agradable para
la vista y la vida. La utilización de métodos apropiados de almacenamiento,
recolección y disposición final es desfavorable a la reproducción de insectos y
roedores causantes de enfermedades. Por otra parte, el inadecuado
almacenamiento, recolección y disposición final de los desechos sólidos puede
dar lugar a una serie de riesgos para la salud, en particular a la difusión de
enfermedades gastrointestinales y parasitarias, sobre todo cuando hay restos de
excrementos humanos y animales mezclados con otros desechos orgánicos.
Barceló C. (Agosto, 2004). Vivienda Saludable: Estrategia Regional.
Organización Panamericana de la Salud, Simposio Regional: Metas de
Desarrollo del Milenio: Estrategias en Saneamiento Básico y la Búsqueda de
Equidad y Desarrollo Sostenible. San Juan, Puerto Rico.
El adecuado drenaje de las aguas superficiales aminora las
enfermedades transmisibles, los riesgos para la seguridad y los daños a las
viviendas y los bienes. El drenaje deficiente de las aguas superficiales, incluidas
las aguas residuales domésticas, crea charcos o lodazales y zonas pantanosas que
se convierten en criaderos de insectos vectores de enfermedades.
Bosma H., Mheen vdHD, Borsboom GJJM, et al. (2001). «Neighborhood
socioeconomic status and all-cause mortality». Am J Epidemiol; 153: 363-371.
El uso doméstico de combustibles limpios y eficientes minimiza el
riesgo de contraer enfermedades respiratorias como neumonías en los niños,
enfermedades pulmonares obstructivas crónicas y cáncer pulmonar en los
adultos y envenenamientos por exposición a sustancias tóxicas. Cuanto más
limpio y eficiente es el combustible utilizado en la vivienda menor será el riesgo
a la salud. En la pirámide energética, el combustible sólido como el estiércol, los
residuos de cosecha, la leña, el carbón de leña y el carbón mineral son los más
contaminantes e ineficientes. Luego siguen el kerosén, el petróleo, el gas
licuado de petróleo y el gas natural, la energía eléctrica, y finalmente, la energía
solar y eólica.
Bruce N., Pérez-Padilla R., Albalak R. (2002).The health effects of indoor air
pollution exposure in developing countries. Geneva: WHO/SDE/OEH/02.05.
WHO.
Catalá S. S., Crocco L. B., Muñoz A., Morales G., Paulone I., Giraldez E.,
Candioti C., Ripol C. (2004). «Aspectos entomológicos de la transmisión de la
enfermedad de Chagas en Argentina». Rev Saúde Pública; 38(2): 216-222.
Cohen D. A., Mason K., Bedimo A., et al. (2003). «Neighborhood physical
conditions and health». Am J Public Health; 93: 467-471.
4.4
Muebles, utensilios domésticos y bienes de consumo seguros y
eficientes
Collins K. J. «Cold and heat-related illnesses in the indoor environment». En
Burridge R, Ormandy D, eds. (1993). Unhealthy Housing: Research, Remedies
and Reform. New York, NY: Spon Press: 117-140.
Los muebles, utensilios domésticos y los bienes de consumo deben
elegirse teniendo presente la seguridad y la eficiencia. Por ejemplo, el uso de
fogones abiertos que queman combustibles sólidos es ineficiente e inseguro.
Incrementa significativamente el riesgo de contraer enfermedades respiratorias,
- 30 -
- 23 -
La tapicería de los muebles, las cortinas y las alfombras pueden
contener materiales sintéticos que se incendian fácilmente o despiden
emanaciones tóxicas y, en particular, las alfombras pueden ser un importante
reservorio de alérgenos y polvo. La exposición a sustancias tóxicas y cáusticas
produce envenenamientos, quemaduras y efectos crónicos, algunos de ellos no
conocidos. Los niños en particular no deben estar expuestos a bordes y esquinas
en donde se pueden lastimar. El mobiliario debe mantenerse en buen estado a fin
de evitar traumatismos, especialmente a niños, adultos mayores y personas con
discapacidad, para quienes los accidentes de diverso tipo son a menudo la
principal causa de muerte (Vaughan J. W., Platts-Mills T. A., 2000 y Roberts J.
W., Dickey P., 1995).
4.5
Entorno adecuado que promueve la comunicación y la colaboración
Las características sociales y físicas del entorno alrededor de la
vivienda o vecindario son importantes para proteger la salud y el bienestar de
sus moradores. Los entornos urbanos se enfrentan con problemas de
hacinamiento, ruido, contaminación del aire, congestión y peligros del tránsito,
delincuencia y aislamiento social. Los entornos rurales se enfrentan con
problemas de falta de servicios sanitarios y de apoyo social y aislamiento social.
Tanto el asentamiento precario planificado como el generado por la ocupación
del territorio en forma espontánea pueden poner en riesgo la salud y bienestar de
sus habitantes. Vecindarios no adecuados física y socialmente están asociados
con un aumento de la mortalidad general, del número de casos de bajo peso al
nacer, accidentes, enfermedades cardiovasculares, HIV/SIDA, gonorrea,
tuberculosis, depresión e inactividad física (Krieger J., Higgins D. L., 2002,
Diez Roux A., et al., 2001; Martikainen P., et al., 2003; Cohen D. A., et al., 2003;
Bosma H., et al., 2001; Sampson R. J., et al., 1997; Kreiger N., et al., 2003).
Actualmente ocurre un proceso espontáneo mediante el cual las
familias buscan habilitar habitaciones adicionales en la vivienda original para
alojar allí a nuevas familias, generalmente parientes de la familia principal.
Aquellos que nacieron en asentamientos precarios constituyen actualmente la
nueva demanda habitacional y tienen dos alternativas, ocupar un nuevo suelo,
más alejado del centro, sin servicios y en peores condiciones que aquellas zonas
ocupadas por los padres, o habitar en habitaciones de la vivienda de los padres o
parientes en condiciones de precariedad y hacinamiento. La falta de asistencia
técnica profesional para el proceso de densificación de la vivienda, no es sólo un
problema de los asentamientos precarios, sino que también ha sido detectado en
vecindarios de nivel medio.
- 24 -
Figura 1. La estrategia de vivienda saludable en los países
Establecer la Red Nacional de Vivienda Saludable
(asociado a Red VIVSALUD)
FASE DE DIAGNÓSTICO
• Identificar políticas, planes, programas y proyectos públicos de vivienda y
desarrollo urbano existentes.
• Evaluar los factores de riesgo y protección a la salud asociados con la
vivienda y el estado de la salud de la población.
• Identificar la capacidad operativa de las instituciones que trabajan en
los sectores involucrados.
• Analizar las oportunidades de participación de la población en decisiones.
• Identificar los vacíos de información existentes.
FASE DE PLANIFICACIÓN
• Evaluar el impacto de políticas, planes, programas y proyectos de vivienda
de interés social y desarrollo urbano en la salud con enfoque de equidad.
Refinar las guías, normas y códigos de construcción.
• Fortalecer los sistemas de vigilancia existentes para que incluyan factores
de riesgo y protección a la salud asociados con la vivienda.
• Contribuir a esclarecer las relaciones entre salud y vivienda.
• Llevar a cabo proyectos comunitarios de investigación-acción-participación.
• Construir y desarrollar capacidades.
• Consolidar y fortalecer la Red VIVSALUD.
FASE DE IMPLEMENTACIÓN
Implementar el plan, coordinado por el secretariado de la Red Nacional y
asesorado por otros miembros de la Red y la Red-VIVSALUD.
FASE DE EVALUACIÓN
Examinar la efectividad de las actividades tomadas en relación con los
objetivos y las metas del plan. Se deberá sistematizar una metodología que
integre el enfoque cualitativo y cuantitativo.
- 29 -
Hacer partícipe a la ciudadanía
quemaduras, irritación de ojos y dolores de cabeza y espalda (Bruce N., et al.,
2002). Actualmente, existen cocinas mejoradas como la cocina «plancha» que
quema los combustibles sólidos de forma más eficiente (Albalak R., et al.,
2001).

Desarrollo institucional: Contribuir a la constitución, consolidación
y desarrollo sostenible de las Redes Nacionales de Vivienda Saludable
y al fortalecimiento de la Red VIVSALUD, velando por alentar y
utilizar las alianzas con otras redes, asociaciones, organizaciones y
agencias para asistencia y desarrollo que puedan contribuir a alcanzar
los ODM.
Para promover oportunidades de participación de la población en la
toma de decisiones, se sugiere convocar la participación de la ciudadanía desde
el comienzo del proceso de elaboración del plan, a través de la implementación
de un programa de participación social, lo cual debe partir de la diseminación de
la información relevante de manera simple y clara.
Luego de ser aprobado, el plan es puesto en marcha por las
instituciones competentes bajo la coordinación del secretariado de la Red
Nacional, asesorado por los otros miembros de la Red y los miembros de la Red
VIVSALUD. El plan de trabajo es un documento vivo que se evalúa y actualiza
cada dos años. La evaluación examina la efectividad de las actividades tomadas
en relación con los objetivos y las metas del plan. Se usa una metodología
científica con integración del enfoque cualitativo y cuantitativo. Una vez
finalizada la evaluación del plan, se lleva a cabo una reevaluación del
diagnóstico integral de línea de base.
Es preciso contar con un entorno estéticamente agradable, que
proporcione espacio e instalaciones para juegos y actividades recreativas,
acceso al trabajo y a establecimientos comerciales y culturales, servicios de
transporte asequibles, oportunidades de enseñanza y capacitación, servicios de
salud y redes de integración y apoyo social. Especial atención se le debe dar a las
necesidades de las poblaciones más vulnerables como los niños, los adultos
mayores y las personas con discapacidad. Se requiere de una visión integral que
mire el espacio de la calle, el parque, la escuela y el local comunal, que combine
lo público con lo privado, y no pierda su esencia más valiosa: la vida en
comunidad (Santa María R., Tokeshi J., 1999).
4.6
Hábitos de comportamiento que promueven la salud
Para que la vivienda sea saludable es importante sentir que se pertenece
a ella, que es el lugar donde se habita y que por lo tanto se va a cuidar y a
mantener limpia y agradable. Por ejemplo, el adecuado almacenamiento,
manipulación e higiene de los alimentos, el aseo de las personas y la vivienda, el
aseo y cuidado de los animales domésticos, el no fumar y la permanente
comunicación y colaboración de los habitantes constituyen factores esenciales
para una vida sana en la vivienda. Estos factores ayudan a reducir la exposición
directa a microorganismos, a combatir las plagas y los vectores de
enfermedades, a reducir el riesgo de contraer enfermedades respiratorias y a
reducir la violencia.
Para promover de manera eficiente y eficaz hábitos de
comportamiento saludables se requiere comprender los siguientes factores:









- 28 -
Las necesidades fisiológicas, de seguridad, sociales, de estima y de
auto-actualización de los individuos y la comunidad.
La percepción del riesgo de probar algo nuevo o de seguir con
comportamientos actuales, que están directamente relacionados con
las experiencias y expectativas.
Las expectativas sociales predominantes.
Las creencias culturales y religiosas.
El comportamiento observado en otras personas, especialmente las
personas que son vistas como modelos a imitar.
Los medios de comunicación que tienen una extraordinaria influencia
en las percepciones que las personas tienen de lo que es aceptable y
aconsejable.
Los eventos diarios.
La política social y la legislación que crean las condiciones que facilita
un comportamiento determinado.
La retroalimentación de otros o de uno mismo al ver los resultados de
un comportamiento.
- 25 -
CAPÍTULO 5
LA ESTRATEGIA DE VIVIENDA SALUDABLE
El objetivo de la estrategia de vivienda saludable es promover y
proteger la salud de las poblaciones más vulnerables de los peligros a los que
están expuestas en la vivienda en las zonas más necesitadas. Para que ésta sea
exitosa, la estrategia debe formar parte de las políticas, planes, programas y
proyectos de vivienda y desarrollo urbano que los gobiernos emprenden, no
como un componente separado sino como un principio fundamental o política
de Estado.
La estrategia de vivienda saludable requiere de un fuerte compromiso
político, una sólida experiencia técnica e intercultural, la colaboración
intersectorial permanente, el enfoque multidisciplinario y un gran nivel de
participación y acción por parte de la comunidad. Por ello, un mecanismo eficaz
para la implementación de la estrategia en un país es el establecimiento de Redes
Nacionales de Vivienda Saludable intersectoriales y multidisciplinarias
asociadas a la Red Interamericana de Vivienda Saludable (Red VIVSALUD).
La Red Nacional está conformada por autoridades del sector salud, vivienda,
urbanismo, desarrollo social y ambiente, representantes de las autoridades
locales y organizaciones comunitarias, universidades y otras instituciones
interesadas. Para formar parte de la Red VIVSALUD, una Red Nacional debe
completar una serie de requisitos establecidos en su documento programático
(OPS, 2002a). Entre los requisitos establecidos, la Red Nacional es responsable
de elaborar, coordinar la ejecución y evaluar un plan de trabajo bienal
concertado e integrado, en lo posible, a los planes estratégicos de vivienda y
desarrollo urbano existentes en el país (ver Figura 1). Además, el plan debe estar
articulado con el trabajo de otras iniciativas de promoción de la salud existentes
en el país como la Iniciativa de Municipios y Comunidades Saludables (OPS,
2002b).
La estrategia cuenta con cuatro fases: diagnóstico, elaboración,
implementación y evaluación. Durante la fase de diagnóstico, se lleva a cabo un
diagnóstico integral de línea de base y se desarrolla una base de datos como
soporte al seguimiento de la implementación y evaluación del plan de trabajo.
En el diagnóstico integral de línea de base se identifican las políticas, planes,
programas y proyectos públicos de vivienda y desarrollo urbano existentes, se
evalúan los factores de riesgo y de protección a la salud asociados con la
vivienda y el estado de la salud de la población en las zonas de interés a través de
la recopilación, validación, análisis e interpretación de los datos existentes, se
identifica la capacidad operativa de las instituciones que trabajan en los sectores
involucrados, se analizan las oportunidades de participación de la población en
la toma de decisiones y se identifican los vacíos de información existentes.
Una vez concluido el diagnóstico integral de línea de base, se elabora
un plan de trabajo para el cual se establecen objetivos y metas, se identifican
actividades económica y socialmente viables y se establece la prioridad con la
cual serán implementadas. Se sugieren las siguientes líneas de acción basadas
en las estrategias de promoción de la salud definidas en la Carta de
- 26 -
Ottawa de 1986 y reafirmadas en la Quinta Conferencia Mundial sobre
Promoción de la Salud en México en 2000 y en las funciones esenciales de la
salud pública (OPS, 2002c):

Establecimiento de políticas, planes, programas y proyectos
públicos de vivienda de interés social y desarrollo urbano
saludables: Evaluar el impacto de políticas, planes, programas y
proyectos públicos de vivienda de interés social y desarrollo urbano
en la salud con enfoque de equidad para determinar de forma
anticipada y sistémica posibles inequidades en la salud y abogar para
que éstas sean minimizadas. Refinar las pautas y códigos de vivienda
para que incluyan las condiciones fundamentales de la vivienda
saludable (ver Capítulo 4).

Fortalecimiento de los sistemas de vigilancia de los factores de
riesgo y protección a la salud asociados con la vivienda: Fortalecer
la cultura de recolección, validación, análisis e interpretación de la
información necesaria para la toma de decisiones. En particular,
definir indicadores de riesgo y protección a la salud asociados con la
vivienda e incorporarlos en los sistemas de vigilancia de la salud
pública existentes.

Investigación acerca de las relaciones entre salud y vivienda:
Identificar y evaluar los factores de riesgo y protectores de la salud
asociados con la vivienda y esclarecer en forma analítica el impacto
de éstos en la salud con énfasis en inequidades. Contribuir al
desarrollo de tecnologías, métodos y procedimientos de abatimiento
del riesgo y fomentar el papel de los factores protectores de la salud en
la vivienda con enfoque integrador dirigido a la promoción de la salud
con el establecimiento de mejores prácticas.

Desarrollo de proyectos comunitarios de evaluación-acciónparticipación (Fals Borda O. y Rodríguez Brandao C., 1987):
Ejecutar proyectos comunitarios para mejorar las condiciones de la
vivienda que sean sostenibles y que promuevan la salud basados en la
evidencia con la participación continua de la comunidad. Los
proyectos incluyen tres etapas: una evaluación de la situación de
vivienda y salud antes de implementar acciones, la implementación
de acciones para mejorar las condiciones de la vivienda y una
evaluación de la situación de salud luego de haberse implementado
las acciones.

Construcción y desarrollo de capacidades: Desarrollar y mejorar la
capacidad de los técnicos y profesionales en los conceptos de
vivienda saludable y empoderar a la ciudadanía para que transforme
su realidad y tome sus propias decisiones.
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