Praça Forte de Valença

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Praça Forte de Valença
http://www.galinor.es/galeria/c8.html
Tui tiene un legendario origen como corresponde a su
privilegiado emplazamiento en una colina a orillas del
Miño en la frontera con Portugal. Estas circunstancias
han condicionado el trazado de sus antiguas calles que
desde la catedral bajan armónica y pausadamente hacia
el río.
Las
frecuentes
incursiones
guerreras
hicieron
conveniente convertir la catedral en una fortaleza
erizada de almenas. Su construcción se inició en el siglo
XII dentro de un estilo románico con evocaciones
compostelanas, luego sustituidas por un gótico
temprano de inspiración francesa que tiene en la
fachada principal su más acabada expresión. Al sur se
levantó un amplio claustro gótico.
No faltan en Tui el antiguo templo de Santo Domingo ni el más moderno de San Francisco. El convento de clarisas, las
"Encerradas", y la capilla de la Misericordia son también dignos de mención. El barroco portugués se deja sentir en la
iglesia de San Telmo, patrón de la ciudad.
Ciudad medieval
La ciudad, que desde 1623 disfruta del título de Muy Noble y Muy Leal, a los que se le añade en 1885 el de
‘Excelentísimo Ayuntamiento’, desde su legendaria fundación griega fue elegida por reyes, santos y nobles para
residir o reposar eternamente en ella.
De este pasado medieval, así como de su época castreña o su tradición episcopal, conserva calles, monumentos
y parte de sus murallas, enriqueciendo todo el acervo cultural gallego.
Ruta Jacobea
Aquí empieza el principal camino Portugués a Santiago por tierras gallegas.
Invasiones bárbaras
Si su privilegiada situación resulta actualmente beneficiosa, antes le acarreó graves problemas al ser blanco
constante de las invasiones extranjeras. Desde la de los romanos soportó la sueva y la visigótica, que
establecieron por algún tiempo su corte en esta ciudad. De esta época germánica se conservan varias
monedas.
Privilegios reales
De las demás invasiones que arrasaron la ciudad en los siglos VIII, IX y X la ciudad resurgió gracias a las
importantes ayudas y privilegios reales, al mismo tiempo que se ordena su fortificación para una mayor
seguridad. La ciudad tiene una historia íntimamente unida a la sede episcopal y dispone de un conjunto
monumental de singular interés histórico-artístico, declarado oficialmente como tal en 1967.
Catedral de Santa María de Tui
http://www.turgalicia.es/rutabaixomino/visita.asp?cidi=G&ruta=1&ctre=baixomino
A catedral de Santa María merece, como monumento máis representativo de Tui, ser o punto de partida da nosa visita á vila. Comezou a construírse no ano 1120, aínda que non foi consagrada ata 1232, e fusiona os estilos románico e gótico oxival. En séculos posteriores engadíronse espazos como a Capela de San Telmo e a Torre de Soutomaior, chamada así en lembranza do bispo que a mandou levantar. Tras o terremoto de Lisboa de 1755 a estrutura foi reforzada con varios arcos. Situada na parte alta da cidade, as súas torres confírenlle certa aparencia de fortaleza. Unha entrada‐donativo permítenos visitar o Museo Catedralicio, o claustro, a Torre de Soutomaior (desde onde se divisa unha boa panorámica de Tui e os seus arredores), o Museo Diocesano e a igrexa de Santo Domingo. Entre o 15 de xuño e o 15 de setembro, o horario é de 9:00 a 21:00 horas de forma ininterrompida (a excepción da igrexa de Santo Domingo, que está aberta ao público de 10:30 a 14:00 e de 17:00 a 21:00 horas). O resto de ano o horario é de 9:30 a 13:30 e de 16:00 a 20:00 horas. A portada oeste é todo un prodixio de iconografía pétrea. De esquerda a dereita segundo o punto de vista do observador distinguimos, por esta orde, as figuras de San Xoán Bautista, San Pedro, o profeta Isaías e Moisés elevados sobre columnas. Pola contra, non existe unanimidade sobre a identidade das figuras situadas ao outro lado da porta. As dúas primeiras empezando pola dereita poderían ser Fernando III o Santo e a súa nai Dona Berenguela, ou Fernando II e a súa esposa Urraca de Portugal, aínda que hai quen di que en realidade representan a Salomón e a reina de Saba. A máis próxima á porta podería ser San Xoán Evanxelista ou o profeta Daniel. O personaxe que nos queda por describir é o profeta Xeremías ou San Boaventura. No tímpano, baixo arquivoltas de motivos vexetais, vemos dúas escenas. A situada na parte máis alta representa a Adoración dos Magos, mentres que a outra está dedicada ao Nacemento de Xesús. Imprimir
Accedendo por esta entrada temos á nosa dereita o Museo Catedralicio, onde se gardan valiosos obxectos de culto, entre os que destacan un cáliz do século XV, a imaxe da Virxe e un fragmento do antigo retablo maior. Á esquerda está a Capela do Sacramento, onde se conserva o sepulcro do bispo Soutomaior. Uns pasos máis adiante atópase a Capela Maior. No coro, realizado en 1699 por Castro Canseco, descríbense acontecementos da vida do dominicano San Pedro González Telmo, patrón de Tui, canonizado por iniciativa do pobo en agradecemento polo seu labor benfeitor. A este santo atribúenselle numerosos milagres en auxilio de navegantes en perigo, polo que é considerado patrón dos mariñeiros desde a Idade Media. Ademais, o fenómeno coñecido como "Lume de San Telmo" toma del o seu nome. A Capela de San Telmo, espazo engadido no século XVI, alberga un interesante retablo con reliquias e o sepulcro de Diego de Torquemada. Antes de acceder ao claustro dedicaremos uns instantes a contemplar o Retablo da Expectación, situado á dereita da entrada a ese espazo. O claustro, ideal para o paseo, construíuse entre os séculos XIII e XV e é un dos maiores e mellor conservados de Galicia. De novo no exterior, rodearemos a catedral para situármonos fronte á fachada norte, de estilo románico. Sobre a porta está situada a figura de San Martiño Dumiense, do século XI. Aos lados, a torre do reloxo á dereita e a das campás á esquerda. http://www.turgalicia.es/rutabaixomino/visita.asp?cidi=G&ruta=1&ctre=baixomino
Valença Do Minho (Portugal)
http://www.hola.com/viajes/rutas/2004/05/05/10562_al_otro_lado_de.html?pagina=2&tipo_bloq
ue=cuerpo
Todo en Valença do Minho es puro contraste. Quizá ese sea su
particular encanto. Es más, ya en sus primeros años —tras la
coronación de Sancho I a finales del siglo XII— a la ciudad se la
conocía por el nombre de Contrasta, debido a su rival posición con la
gallega Tui. Y aún hoy, ocho siglos después, los portugueses y
españoles se enfrentan a dos modos de vida radicalmente distintos
con el verdoso Miño por testigo.
Vista de Tui desde la
fortaleza de Valença Do
Minho.
Imagen de la fortaleza
de Valença Do Minho.
Imagen de una de las
puertas de la fortaleza.
A lo largo de los siglos, Valença ha tenido que protegerse de
invasiones árabes y otros entuertos bélicos, pero su dominante
historia no comenzó a escribirse hasta el siglo XVII. Fue entonces
cuando la ciudad —punto clave en la defensa de la provincia del
Minho— se convirtió en plaza fuerte con la construcción de una de
las principales obras de la arquitectura militar gótica y barroca del
país, inspirada en los principios del arquitecto francés Sébastien Le
Pestre, señor de Vauban, allá por 1643. Aunque sus primeros muros
se levantaron en el siglo XII, su actual recinto fortificado se reforzó
en el XVIII, creando dos cuerpos inexpugnables en forma de corona,
que bien debían guardar discretos encantos, teniendo en cuenta el
celo que pusieron en custodiarlos.
El valor estratégico de las fortificaciones de Valença fue tal en
Portugal que sólo Almeida y Elvas admiten comparación. Sus cuatro
puertas de acceso —Coroada, Gaviarra, Fonte da Vila y Sol— son
hoy paso de turistas con cámaras y bolsos al hombro. Por no hablar
de las principales, las Portas do Meio, que unen la Coroada con A
Praça, el recinto magistral, a través de un puente que delimita un
foso y de un largo arco abovedado. En la actualidad son testigos
pétreos de los grandes atascos que produce la entrada a la ciudadela
de un ejército de vehículos motorizados que aparcan donde ven. Y,
claro, el gran «error» del señor de Vauban y sus coetáneos fue no
pensar que los caballos de los señores feudales iban a ser sustituidos
por una desmesurada industria automovilística capaz de conquistar
cualquier fortaleza por muy doblemente reforzada que ésta
estuviera.
PINTORESCAS CALLEJAS ESTRECHAS
Pero paseando, Valença es otra historia. Rodeada por diez baluartes
y cuatro revellines, cada recinto circunscribe un barrio autónomo
multicolor con pintorescas callejas estrechas de cantos rodados,
iglesias, tiendas y casonas. Entre calle y calle, siempre se puede
tomar aire fresco en el perímetro, recorriendo el adarve para saludar
a los españoles de Tui con el Miño como testigo —remanso de una
paz que no siempre fue aquí una constante— o acercarse al flanco
Norte para ver antiguos cañones que, aún en posición, fueron
testigos de un pasado bélico de cuidado.
Al otro lado del río Miño
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Valença, aunque no lo parezca a primera vista, también tiene sus
monumentos. En la Coroada descansa São Teotónio —primer santo
portugués—, en forma de estatua. Tras él se alza la capilla de Bom
Jesús, que da
nombre a este monte. Antes, llaman la atención —aunque ésta se
desvíe al primero de los comercios— la capilla del Señor del
Encuentro, un busto de Alfredo de Magalhaes y un recordatorio a los
mártires lusos de la Gran Guerra (1914-1918). Y es que, en Valença,
al igual que los artículos de las tiendas, los monumentos figuran
sorprendentemente revueltos, sin un orden lógico, puestos como por
antojo. Un lógica que, en el caso del acceso al recinto magistral, es
milimétricamente militar.
Plaza de la República,
de Valença.
En las empedradas calles de la antigua fortificación, numerosas
capillas e iglesias sorprenden al viajero en cada esquina en espera
de su beneplácito, pero es la plaza de la República la más admirada.
El curioso reloj con dos caras del Ayuntamiento, varias casas con
azulejos y balconadas en su fachada, tiendas y cafés ofrecen,
aunque sólo sea por un instante, una estampa típicamente flamenca.
ANCESTRAL MONOLITO ROMANO
Continuando por la calle Mousinho de Albuquerque se aprecian,
además de las tiendas que a modo de mercadillo inundan las aceras,
varias casas señoriales y hasta un banco con blasón. Y todo esto sin
saber que en una calle paralela yace un vestigio romano del siglo I
después de Cristo. Se trata del Marco Miliárico, un monolito cilíndrico
con inscripciones romanas que marca las 42 millas de distancia entre
Braga y Tui y fue
mandado construir en lo alto del Bom Jesús por el Emperador
Claudio. Junto a él descansa la iglesia románica de Santo Estevão, y
otros templos o casas señoriales meritorios.
Para las mentes más inquietas, y dada la cercanía, es recomendable
acercarse hasta la también amurallada
Monçao, con un alto en el convento de Ganfei, otear el horizonte
desde el monte do Faro o dar un paseo vespertino por el casco viejo
de la española Tui.
Vista de una de las
calles de Valença desde
el arco de la fortaleza.
Mapa de ruta.
Y como regalo, porque Valença es un primor arquitectónico, no hay
que perderse la panorámica desde el lienzo Norte de las murallas
que miran al valle del Miño, a Tui y a los montes de Galicia. Es,
quizá, en este punto donde se comprende que el verdadero tesoro
de Valença se esconde más allá incluso de sus propios muros.
Arriba, una de las puertas de la
Destino: Valença do Minho, ciudad fronteriza que domina la orilla
portuguesa del río que le da su apellido y está protegida por un
baluarte defensivo que encierra un peculiar casco histórico, salpicado
de callejuelas empedradas, capillas y turísticas tiendas de tejidos.
http://www.cm-valenca.pt/turismo/praca_forte.htm
Praça Forte de Valença
Fortaleza
Obra de Arquitectura Militar
Gótica e Barroca. Primeiros muros
construídos no século XIII (1200).
Actualmente: sistema abaluartado
tipo Vauban, construída nos
séculos XVII e XVIII.
Arquitectura: Localizada no topo
de dois outeiros, é formada por
dois polígonos: a Praça, ou
Recinto Magistral e obra Coroa,
ou Coroada, (estilo Horveneque)*
separados por um fosso, com
falsas-bragas e 4 revelins que protegem outras tantas Portas (Coroada, Gaviarra, Fonte
da Vila e Sol).
Sistema abaluartado composto por 10 baluartes e dois meios baluartes, dos quais:
na Coroada, 3 baluartes a Sul (Santana, S. Jerónimo e Santa Bárbara) e dois meios
baluartes a Norte (s. José e Santo António), onde podem ver-se canhoeiras e guaritas
facetadas nos cunhais; no Recinto Magistral, 7 baluartes (Lapa da Esperança, Nª Sr.ª do
Faro, S. Francisco, Sr.ª do Socorro, Sr.ª do Carmo e S. João). Os dois recintos são
divididos perlas Portas do Meio, com ponte fixa.
A Câmara Municipal de Valença e o Ayuntamiento de Tui estão a enveredar esforços
para a classificação da fortaleza, da ponte internacional e da catedral de Tui a
Património de Interesse Cultural para a Humanidade.
Link: www.monumentos.pt
2. Igreja de Santo Estevão
Época Construção: Séc. XIII (1283)
Igreja
Românica,
com
reconstrução
neoclássica (1792) de planta longitudinal, de
3 naves e 3 tramos, separados por possantes
pilares quadrangulares e cabeceira tripla,
sendo a central rematada no frontispício em
frontão triangular e as laterais em cornija
recta. Portal enquadrado por pilastras e
coroado por frontão entrecortado. No interior
cadeirais confrontantes na capela-mor e retábulos em talha policroma neoclássico.
No interior: cadeira episcopal gótico-mudéjar, do séc. XV; cadeirais encimados por
painéis maneiristas, do século XVI, representando cenas da vida de Santo Estevão;
quadro do séc. XVI representando Nossa Senhora do Leite; quadro do séc. XVIII
representando Santo Estevão em oração.
1. Igreja de Santa Maria dos Anjos
Época Construção: Séc. XIII (1276)
Igreja Românica de planta longitudinal, composta de nave única e capela-mor,
rectangulares, torre sineira, quadrangular, capela e sacristia, em corpo único rectangular,
adoçados a Sul. Fachada principal com cornija saliente, sobre cachorros, portal em arco
pleno, com três arquivoltas assentes em colunelos cilíndricos rematados por capitéis
fitomórficos, encimado por janela rectangular.
3. Capela do Bom Jesus
Epoca Construção: Séc. XVII
Descrição: Arquitectura religiosa, barroca e neoclássico.
Capela Barroca de planta longitudinal e nave única,
frontispício terminado em empena com cornija e portal de
arco pleno, enquadrado por moldura definida por duplas
pilastras jónicas suportando frontão interrompido; no
interior, decoração neoclássica, com retábulos laterais e mor
em talha policroma.
4. Capela do Senhor do Encontro
Época de Construção: Séc. XVIII
Descrição: Capela Barroca, de planta
longitudinal, de corpo único rectangular.
Volume simples com cobertura em telhado
de duas águas. Fachadas, rebocadas e
caiadas, percorridas por cornija saliente,
pilastras nos cunhais, sobrepostos por
pináculos, e cruz sobre acrotério nas
empenas. Fachada principal rematada em
empena contracurvada, sendo rasgada por
portal em arco abatido, com fresta de arejamento, suportando frontão interrompido
encimado por óculo quadrifoliado, moldurado; lateralmente, janelas molduradas, de
peitoril recortado e verga arqueada.
5. Capela da Misericórdia
Época de Construção: Séc. XVI (1558)
Descrição: Arquitectura religiosa, barroca e neoclássica.
Capela da Misericórdia barroca de planta longitudinal
composta e nave única, muito reformulada no séc. XVIII
em estilo neoclássico. Fachada axial terminada em
empena, mas com a lateral Sul funcionando como
principal, com portal mais elaborado. No interior, dois
balcões, possivelmente, para o cadeiral dos mesários,
colocados superiormente junto ao coro-alto e retábulos de
talha policroma neoclássica.
No interior, uma escultura, o “Senhor Morto”, em cartão,
da autoria do Mestre Teixeira Lopes.
6. Paiol do açougue
Época de Construção: Séc. XVIII (1715)
Descrição: Situado a Oeste da Praça Forte, junto ao
baluarte de S. João e à Porta do Açougue. Planta
rectangular e duas águas, envolvido por muro alto com
portal entre pilastra.
7. Paiol de Marte
Época de Construção: Séc. XVIII (1715)
Descrição: Situado a Sul da Praça Forte, na gola do
baluarte de S. Jerónimo, junto às Portas da Coroada.
Duas salas de planta rectangular, envolvidas por muro
alto. Portal entre pilastras encimado pela Pedra de
Armas de Portugal e, em baixo, pela dos Ataídes.
No seu interior, sob uma laje sepulcral, jaz o tenentegeneral João Vitoria Miron de Sabione, Governador da
Praça e fundador da Aula Real de Artilharia.
8. Marco Miliário
Época de Construção: Séc. I d. C. (Ano 43 d. C.)
Descrição: Marco Miliário Romano adaptado a
pelourinho. Monólito cilíndrico com cerca de 2.15m de
altura e 54 cm de diâmetro e com a seguinte inscrição no
topo: “TI(berius) CLAUDIUS. CAESAR / AUG(gustus)
GERMANICUS / PONTIFEX. MAX(imus). IMP(erator)
V / CO (n)S(ul) III, TRIB(unicia) POTEST(ate), / III,
P(ater) P(atriae) BRACA(ra) / XLII”. Possui pequeno
orifício com ferro cravado no interior. Marca a 42 milhas
de distância de Braga a Tui e foi mandado construir pelo
imperador Cláudio, quando procedeu a beneficiações na
Via IV do Itinerário de Antonino.
Transferido para o actual local em 1680.
9. Cortina de S. Francisco
Sala de armas da Fortaleza, localiza-se
a nascente junto aos Baluartes de S.
Francisco e do faro. Em inícios do séc.
XIX foi-lhe retirado o tenalhão,
construído em 1716 e que servia de
defesa e de suporte da antiga muralha,
provocando fendas e o aluimento das
terras. Foi reedificado em Outubro de
1817 pelo tenente-general Matias José
Dias Azedo.
10. Palácio do Governador Militar
Antigo Palácio do Governador Militar da
Praça de Valença do Minho, serve
actualmente para albergar alguns serviços
públicos (cartório notarial, registos civil e
predial e finanças). Em finais do séc. XVIII,
José Anastácio da Cunha funda a Aula Real
de Artilharia, que viria a funcionar neste local
e onde vem também a leccionar.
11. Domus Municipalis
Antigos Paços do Concelho desde o séc. XIV,
altura em que se deixam de fazer as
Assembleias Municipais ao ar livre e como
atesta a arquitectura da sala. Embora no Séc.
XVI funcionassem diante da Igreja Matriz, no
séc. XVII estão definitivamente instalados
neste edifício, juntamente com as Prisões. As
suas arcadas recebiam as feiras.
12. Portas da Coroada
Época de Construção: Séc. XVII (1660)
Localizadas a Sul da Praça Forte, na Obra
Coroada, foram mandadas construir pelo Rei D.
Pedro II, estando concluídas em 1700, como o
atesta a inscrição existente no seu frontispício,
sob as Armas de Portugal. Esta inscrição está
relacionada com todo o conjunto (Baluartes e
Cortinas), e não com as Portas em si. Estas
existiram anteriormente com a designação de
Portas da Fonte.
INSCRIÇÃO: PELOS ANNOS D XPO
MDCC. / IMPERANDO NA MONARCHIA /
LUSITANA D. PEDRO II / E SENDO
REGENTE DAS / ARMAS DESTA
PROVINCIA / D. JOÃO DE SOUZA FOI ESTA / OBRA ERECTA.
A encimá-las, as Armas de Portugal, mandadas colocar pelo Visconde de Vila Nova de
Cerveira, D. Diogo de Brito e Nogueira; por baixo, o escudo da família Sousa, do
Prado.
13. Estátua de S. Teotónio
Escultura do Séc. XX. Primeiro Santo Português,
nascido no lugar de Tardinhade na Freguesia de
Ganfei. Confessor e Conselheiro do Rei D.
Afonso Henriques, que sempre “lhe pedia a
benção e lhe beijava a mão de joelhos”, foi Bispo
de Viseu e o primeiro Prior do Mosteiro de Santa
Cruz de Coimbra, onde se encontra sepultado.
Foi também Cruzado na Palestina, lutando contra
os Mouros. É canonizado pelo Papa Alexandre
III um ano após a sua morte.
14. Fonte da Vila
Época de Construção: Séc. XV
Descrição: Fonte Roqueira, medieva, localizada no lado poente da Fortaleza, junto ao
Revelim da Fonte, entre o Baluarte da Lapa e o de S. João; sobrepujada pleas Armas de
Portugal. Ao fundo, o Lavadouro público. Aparece-nos já desenhada à pena por Duarte
d’Armas no seu Livro das Fortalezas (1503 – 1504).
Valença
• Valença, un antiguo y atractivo pueblo fronterizo, sede del
municipio, se levanta en la cumbre de una colina sobre el río Miño;
tiene un fuerte de murallas dobles unidas por una calzada, al estilo
del ingeniero y arquitecto francés Vauban.
• Esta fortaleza, que data de los siglos XVII y XVIII, ofrece vistas
grandiosas, a través del río, hacia la vecina Tuy, en la provincia
española de Galicia.
• Rodeado por muros y baluartes, el Barrio Viejo tiene pintorescos
callejones empedrados, repletos de tiendas que venden artesanías de
lino, alfarería y tejidos de mimbre, muy populares entre los turistas.
• Valença exhibe otras construcciones exquisitas como la Casa do
Eirado, del siglo XV, con un tejado almenado y cristales góticos; o la
Casa do Poço (del pozo), del siglo XVIII, con interesantes balcones de
hierro forjado.
• A unos cinco kilómetros de la ciudad, el Convento de Ganfei fue
reconstruido en el siglo XI, con características románicas, y adornado
con motivos de plantas y animales.
• Cerca de Gandra, el Castillo de Fraião ofrece un panorama
encantador sobre el río Miño, que corre para encontrarse con el mar
en Caminha.
• En Valença do Minho, la pousada de São Teotónio fue instalada
dentro de la antigua fortificación y también brinda escenas
maravillosas del valle, hacia Tuy, situado sobre la margen opuesta del
río.
• La Naturaleza concedió a esta comarca reservas naturales como los
pantanos de Veiga de Mira, que albergan patos salvajes y bonitos
bosques de alisos; arroyos abundantes en peces como el salmón, la
trucha, las anguilas, lampreas y sábalos; sitios donde relajarse y
disfrutar de las corrientes de agua; además de verdes paisajes, como
el Parque Natural de Cristelo, excelente para los deportes acuáticos.
• En términos de gastronomía, Valença se enorgullece de
especialidades locales como el asado de cabrito y platos típicos, a
base de lamprea y bacalao.
VILA NOVA DE CERVEIRA http://www.cerveiranova.pt/ http://bienal.servehttp.com/ Gozando de uma situação privilegiada, no sopé da montanha
e um pouco acima do nível do rio Minho, no sítio onde ele se estreita, Vila Nova de Cerveira é
antiga praça fortificada que, na última década e meia, assestou armas ao investimento na
cultura e no turismo.
A vila dista 37 quilómetros de Viana do Castelo, sede do distrito, e 108 da cidade do
Porto. O concelho estende-se por uma área de 104,45 quilómetros quadrados, englobando
uma população de 9 144 habitantes (Censos 91), distribuídos por quinze freguesias: Campos,
Candemil, Cornes, Covas, Gondar, Gondarém, Lovelhe, Loivo, Mentrestido, Nogueira,
Reboreda, Sapardos, Sopo, Vila Meã e Vila Nova de Cerveira.
Localiza-se na margem esquerda do rio, que, por poente, a separa de Espanha — da
outra banda, vizinha, a bem dizer, com ligação por ferry-boat, está a vila galega de Goian.
Confronta, ainda, por norte, com os concelhos de Valença e Paredes de Coura; por sul, com o
de Caminha; e por nascente, com os de Paredes de Coura e Ponte de Lima.
Não é fácil determinar-se com exactidão qual a origem do burgo inicial. Certo é que o
seu povoamento remonta a épocas pré-romanas, pelas facilidades que a orografia da região
concedia à defesa dos povos pré e proto-históricos. Com o oceano Atlântico a apenas cerca de
quinze quilómetros, povos antigos, dos mares do Sul ou do Norte, navegaram Minho acima, em
busca dos metais em que a Galiza era rica. Nas proximidades do rio, ou à beira de alguns dos
seus afluentes, cresceram e multiplicaram-se os núcleos habitacionais, hoje em dia obviamente
adivinháveis, nomeadamente nos castros de Gondarém, Covas, Lovelhe ou Mentrestido.
O investigador Luís Filipe Avis de Brito defende, no seu livro “O Paleolítico do Minho”,
que “parece pois inteiramente certo que estas paragens, da ribeira do rio Minho, dados os
artefactos líticos que por aqui deixaram, já foram pisadas por homens de há mais de 600 000
anos, relativamente aos nossos dias, numa época que remonta ao Paleolítico In- ferior. Pelo
menos a vida humana aqui se acha suficientemente documentada no período Mesolítico,
tomado entre o Paleolítico e o Neolítico, ou seja entre o oitavo e o quinto milénio antes de
Cristo.”
Por outro lado, a toponímia antiga fornece informa-ções arqueológicas notáveis,
aludindo a formações castrejas e povoações pré-romanas ou cividades. É forçoso que entre
uma delas estivesse o princípio da circunscrição medieval, a terra ou julgado de Cerveira.
Este topónimo não pertencerá propriamente ao local da vila sede, nem pode garan- tir-se que,
nos princípios, não fosse nome de território. Se foi topónimo, ter-se-á aplicado ao local da velha
civitas originária da terra, a qual, mais tarde, despovoando-se, tornou-se matagal (J. Leite de
Vasconcelos propõe que “cerveira” é palavra antiga com o significado de “ninhos de cervas”,
havendo, no entanto, quem se incline a crer que o título provém antes do seu primeiro senhor,
João Nunes de Cerveira). Só após o sucesso das armas cristãs sobre os normandos, que
permitiu o restabelecimento da igreja tudense em 1071, ocorreu o repovoamento.
Desde muito cedo que se documenta a “terra de Cerveira” — que compreendia todo o actual
concelho de Vila Nova de Cerveira e parte (Mosteiro de Arga, Vilar de Mouros, Seixas e
Lanhelas) do concelho de Caminha —, onde também se centrava um antigo arcediagado do
mesmo nome, pertencente à diocese de Tui.
Antes da “vila nova” já havia o “Castelo de Cerveira”, cuja localização precisa se ignora
e de época e natureza sobre as quais os estudiosos divergem. Crastelo e “Sancti Cipriani”
teriam as suas torres, e há quem defenda que decerto a fortificação estaria mais sobre a
montanha, possivelmente no monte sobranceiro do Espírito Santo, onde parece haver vestígios
de um castelo medieval. Mas poderia também situar-se em Penafiel, freguesia de Roboreda,
ou em Cornes (por então, a cabeça da terra? — há quem interrogue), no lugar da Cividade,
onde, segundo as Inquirições de 1258, havia um paço de el-rei que foi desfeito para que, com a
sua madeira e pedra, se fizesse a torre do castelo.
O corónimo medieval fixou-se à vila actual unicamente para localização da “vila nova”,
que poderia ter correspondido a qualquer povoação dos inícios da nacionalidade. No local da
antiga freguesia de “Sancti Cipriani” o que existiria seria de importância diminuta e a paróquia
sustentava-se dos quatro casais “à porta da igreja”, dos três do mosteiro de Loivo e do casal do
mosteiro de Barrantes.
A tradição local ainda hoje conserva que a povoação primitiva era no sítio das Valinhas,
e que só no tempo de D. Dinis mudou para o local dos nossos dias.
E é exactamente o Rei Lavrador quem, por 1320 ou um pouco antes, em carta ao seu
sacador de Além-Douro, manda que se faça a póvoa que deu origem à actual Vila Nova de
Cerveira, cuidando que nela se avizinhassem, pelo menos, cem moradores. Para isso, o
monarca dava-lhes certos poderes e concedia privilégios aos que para aí viessem residir de
novo. Com esta realização, o rei pretendia não só rendibilizar os direitos e os reguengos que
possuía na área mas, sobretudo, fomentar o aparecimento de um pequeno núcleo urbano que
se tornasse vila, cercando-se de muralhas. Haveria então circunstâncias para uma
concentração e um desenvolvimento de vida municipal até então muito difusa pela área, dada a
precaridade do povoamento da região.
Assim aconteceu, e não somente pela razão de se captar gentes. De facto, a nova vila
parece ter nascido também por motivos de defesa militar, pelas condições que o rio Minho aqui
oferecia. E de quão acertada foi tal empresa provaram-no, muito tempo depois, as duas
tentativas de invasão aqui mesmo repelidas — uma espanhola, aquando da Guerra da
Restauração, e a outra francesa, por ocasião das Invasões. Em ambas os Cerveirenses
saíram-se bem, dando provas inequívocas de valentia e amor patriótico. A 25 de Setembro de
1643, a vila viu-se atacada pelo exército de Filipe IV, repelido pelas forças locais capitaneadas
por Manuel de Sousa Abreu. Igualmente ligada à história militar da vila está a derrota infligida
aos soldados franceses de Soult, em 1809, quando procuravam atravessar o rio no lugar de
Breia (Lovelhe).
Vila Nova de Cerveira recebe do rei D. Dinis, no ano de 1321, carta de foral, onde se
obrigava os moradores a terça de dízimos, para a conservação das suas muralhas, e se
concedia isenção de direitos de importação e exportação de quaisquer produtos de e para a
Galiza. Permitia, ainda, feira franca em S. Paio, assim como a eleição livre de vereadores e juiz
ordinário, entre numerosos outros deveres e direitos.
No reinado de D. Afonso V, o senhorio da vila foi concedido a Leonel de Lima, guerreiro
de renome conquistado nas praças do Norte de África, agraciado com o título de visconde e
autorizado a usar dom, título novo em Portugal. O novo senhorio reforçou a defesa da vila, à
qual, em 20 de Outubro de 1512, D. Manuel I deu novo foral, concedendo aos moradores a
faculdade de repartirem entre si os reguengos da Coroa, sob condição de pagarem anualmente
à câmara 31 860 réis.
Uma lei de 21 de Maio de 1896 veio a eliminar Cerveira como concelho, sendo as suas
freguesias anexadas aos concelhos de Caminha e Valença. Ano e meio mais tarde, graças ao
interesse e esforços do deputado Queirós Ribeiro, por decreto de 13 de Janeiro de 1898, o
concelho renasceu, com todas as suas freguesias.
O castelo — a partir das muralhas medievais —, com uma forma oval e 260 metros de
perímetro, é descrito da seguinte forma por José Leal Diogo, no seu “Roteiro de Vila Nova de
Cerveira”:
“(...) acha-se defendido por oito torres, quadradas, das quais cinco se encostam à cortina do
lado sul, por ser a de mais fácil ataque. As muralhas têm 7,50 metros de altura por 2 metros de
espessura, e as torres vão de 8 a 13 metros de elevação, sendo duas delas do tipo primitivo,
afuniladas e sem bombardeiras. Os muros da barbacã acompanham a saliência dos torreões.
“Mantêm-se íntegras algumas portas, tais como a de acesso e a de recurso, habitualmente
denominada Porta de Traição, ambas do tipo ogival correspondente à época da construção. A
porta de honra é a da torre principal e que foi apeada a metade em 1884. Sobre as aduchas
dos seus arcos vêem-se os escudos de D. Dinis e de D. Fernando. Conserva toda a velha
couraça dos muros, cujas pedras enegrecidas mostram as marcas dos 55 pedreiros que as
reformaram nos fins do século XV.
As cortinas entre os cubos salientes denotam obra de várias épocas, desde começo do
século XIV até meados do século XVII, com o enxerto da bateria joanina sobre o rio, por mando
do governador das armas da província do Minho, D. Diogo de Lima; no século XVIII levantaram
uma nova plataforma, a cavaleiro da bateria, para melhor dominar a forteleza de Goian e a
passagem do rio.
Foi ainda o 7.º visconde de Vila Nova de Cerveira, em 1660, quem mandou rodear toda
a povoação com muros e fossos, guarnecidos com quatro baluartes inteiros, um meio baluarte
e três redutos para a parte do rio”
Dentro do castelo, hoje, tudo é diferente. Dos tempos de antigamente, restam uma
pequena porta gótica, a cisterna, a Casa da Câmara — reedificada em 1598 e modificada em
1768 —, o pelourinho do século XVI (1547), a Igreja da Misericórdia — do século XVIII, com
portal historiado, algumas talhas de valor e boas imagens, algumas do século XV, e, sobre a
barbacã, a Capela de Nossa Senhora da Ajuda — erguida em 1650. Tem o interior coberto por
tecto apainelado com pinturas alegóricas à padroeira e possui um interessante retábulo coberto
de azulejos tipo “tapete”, do século XVII.
Do moderno, ainda dentro de muros, e aproveitando o velho aglomerado urbano,
construiu-se um edifício novo, de feição actual. A medieva cidadela transformou-se em
pousada, em local privilegiado pela natureza, aos pés da montanha, sobranceiro ao rio Minho e
a poucos quilómetros das praias.
Na vila, para além de um bom conjunto da casas seis e setecentistas, sobressaem o
Solar dos Castros — do século XVIII, do tipo urbano, com dois pisos, domina uma pequena
praça, centro histórico do burgo antigo — e a Casa da Praça, solarenga e brasonada. São
ainda dignos de registo: a fonte da vila e o cruzeiro do Ecce-Homo (ambos do século XVI); a
Capela de S. Roque, de origem medieval e reconstruída no século XVIII; a Capela do Espírito
Santo, em local pitoresco; a igreja matriz, com fachada e arranjo espacial do século XIX, mas
remodelação de um edifíco dos meados da segunda metade do século XVI; e, em arruamentos
antigos, sete nichos com outros tantos Passos da Paixão do Senhor.
Fora, pelas freguesias, não faltam também os motivos de interesse. Os seus melhores
exemplos serão, por certo, o Convento de S. Paio, no monte da Encarnação, e a Quinta da
Torre, em Loivo; a Capela de Santa Luzia ou Capela de Valboa, românica, em Campos; a
Capela da Senhora do Amparo e a igreja paroquial, em Gondar; a igreja matriz (século XVI) e a
Casa da Loureira, barroca, em Gondarém; o fortim de fossos e baluartes, concluído em 1661
sobre o picoto de Azevedo, em Lovelhe; a Torre de Penafiel, quinhentista, em Reboreda; ou o
cruzeiro da Senhora da Piedade, ou “Pietá” do Sopo, na freguesia de Sopo.
Pontos como o Calvário do Bom Jesus, no cimo de Gondarém, o alto da Pena, ou a ermida da
Senhora da Encarnação permitem vistas notáveis sobre o belo, amplo e profundo vale do
Minho, alargando horizontes até uma considerável faixa da Galiza.
Na estrada que sobe para Candemil, além da beleza paisagística, pode admirar-se, no
lugar de Gávea (Reboreda), um interessante conjunto de azenhas, das quais só uma labora.
Mas, acima de tudo, o que deslumbra no concelho de Vila Nova de Cerveira é o rio, o Minho,
extenso e longo lago em comunicação com o mar. Os olhos não sabem onde parar — no meio,
preguiçam-se ilhotas e, pelas margens, impressiona uma sementeira de casario branco e de
arvoredo verdejante. Lá está a Morreira em frente a Lovelhe; diante de Gondarém, a Boega e a
ínsua do Minho e a ilha dos Amores, com um tecto de austrálias, freixos e eucaliptos e um solo
fofo de heras e musgos. Do lado português, mirando-se nas águas, os povoados de Vila Meã,
Campos, Reboreda, Lovelhe, Cerveira, Loivo e Gondarém; da banda galega, Tominho, S.
Câmpio e Goian
O rio presta-se ainda aos desportos náuticos (de Lovelhe a Gondarém, as suas águas
mansas permitem a prática da canoagem, do remo, do windsurf ou da motonáutica) e,
generoso, ainda fartura a mesa local com a afamada lampreia e o renomado sável.
Servem para os deliciosos arroz de lampreia e debulho de sável, pratos-mestres de
uma cozinha rica, a que se ajuntam os típicos meixões, o cozido ou o arroz do forno, o
sarrabulho e o caldo verde, os biscoitos de milho, a aletria, os mexidos, as rabanadas — tudo
convenientemente sossegado pelo vinho da região.
Serão esstes os princcipais ingredientes de um
m concelho que, integra
ado embora numa
zona “com alta taxa
t
de rura
alidade”, vem
m perdendo a predomin
nância agríco
ola no quad
dro de
ocupa
ações dos seus
s
habitan
ntes (óbvia há pouco mais
m
de uma
a dezena de anos), ab
brindo,
lentamente, passsagem a um
ma paridade com os secttores da ind
dústria de tra
anformação e dos
serviçços.
O rumo é agora claro
o e aponta pa
ara o turismo
o e para a cu
ultura, e, sem
mpre que pos
ssível,
para o casamento
o entre ambo
os. Aproveita
ando e prese
ervando o pa
atrimónio nattural, recupe
erando
e alin
ndando o con
nstruído, cria
ando condiçõ
ões de recep
pção aos visiitantes, Cervveira deitou mão
m à
arte, organizando
o as suas Biienais Intern
nacionais, qu
ue têm sido o principal ccartaz nacion
nal do
conce
elho.
A primeira realizou--se em Ago
osto de 1978. Desde então têm vindo a ganhar
g
signifficativa proje
ecção, constiituindo uma inesperada revolução e tornando-se
e numa referrência
culturral inabaláve
el. Pintores, escultores, designers, críticos
c
ou meros
m
aprecia
adores, pequ
uenas
multid
dões interesssadas, de Portugal, da
d vizinha Espanha
E
e de outros países da União
Europ
peia, converrgem para Vila
V Nova de Cerveira, em peregrina
ação aprazad
da, nos mes
ses de
Agossto. Tendo como
c
pano de fundo a mostra da
as obras de talentosos artistas plá
ásticos
portugueses — onde,
o
a par dos
d trabalho
os dos nome
es consagrad
dos, se junta
am as assina
aturas
dos novos
n
mais promissores
p
— as Bienaiis de Cerveirra contam co
om outras iniciativas para
alelas.
Deba
ates, colóquios, homenagens, atelierrs livres ou a simples presença de artistas de outros
o
paíse
es e hósped
des honrosos animam a vida culturral do conce
elho e levam
m o seu no
ome a
espaçços e destaq
ques na comunicação social nacionall e internacio
onal.
Por um la
argo conjuntto de razõess — que, em
m particular, tem
t
a ver co
om a falta de
e uma
estrutura física ad
daptada à acctual grande
eza do evento (o desejad
do Centro de
e Cultura e Arte)
A
e
ainda
a com o repe
ensar de form
ma e dos apoios a ganha
ar para a sua
a realização —,1994 não
o teve
Biena
al. Foi “ano de
d reflexão”. Ainda assim
m, expôs-se o espólio da
as sete ediçõ
ões que marc
caram
os de
ezasseis ano
os de Bienal. Tratou-se, portanto,
p
ape
enas de um intervalo, de
e um compas
sso de
esperra para novo
os fôlegos.
E ao dé
écimo sétimo
o ano, em 1995, volto
ou em oitavva edição, e
em dois espaços
installados em ten
ndas à beira
a-rio, este fórrum descenttralizado de criação e cu
ultura. Porque Vila
Nova
a de Cerveira
a continua a ser,
s e disso faz
f questão, a “Vila das Artes”,
A
a “Te
erra das Bien
nais”.
O Ca
astelo:
Vila Nova
N
de Cervveira, ou sim
mplesmente Cerveira
C
com
mo originariam
mente
se cha
amou, situa--se na marge
em esquerda
a do Minho, a
ali onde já o curso
do rio se avizinha do alargame
ento que vai constituir-lhe
e estuário,
Como
o as demaiss povoaçõe
es nascidas em posiçã
ão estratégic
ca de
defesa
a daquela fronteira
f
settentrional, Cerveira
C
foi desde cedo
o uma
povoa
ação fortifica
ada. Diverge
em porém as opiniõess dos estud
diosos
quanto à naturezza e mesmo
o quanto à época de fu
undação de suas
primeiras fortificaçções: uma to
orre apenas, e mandada
a construir por
p D.
Afonso
o III, para prevenir novo
os ataques leoneses, co
omo os de 1212,
destruidores dos castelos
c
de Valência e de Melgaço
o, opinião de
e Luís
Figueirredo da Gue
erra, ou já um castelo, e em 1229
9 ou antes, como
opinou, fundado nu
uma das subscrições do foral
f
de Elva
as, Costa Veiga ?
A única
a afirmação segura é a de que, rein
nando D. Sa
ancho II, hav
via um
magna
ate chamado
o Pedro No
ovais que fig
gurou entre os confirm
mantes
daquele foral com
mo alcaide do castelo de Cerveira: «Domnus Petrus
P
Novaess tenens casstellum de Cerveira. Devverá, porém, ser-se obrig
gado a
tomar à letra a denominação
d
o de castelo
o, como edificação castteleira
comple
eta e assim propriamente
p
e dita?
De qualquer form
ma, já no com
meço do rein
nado de D. Afonso
A
III, co
omo consta d
das Inquiriçõ
ões de
1258, era encarg
go dos mora
adores de Cerveira
C
e frreguesias prróximas a a
anúduva, isto
o é, o
forne
ecimento de materiais
m
e a prestação de
d trabalho, quando convvenientes a a
alguma repa
aração
das edificações
e
c
casteleiras.
Qu
uanto ao te
empo de D. Dinis, doccumentalmen
nte se
sabe que em 1320 tra
atava o mona
arca de alarg
gar o povoam
mento
de Cerveiira, instaland
do junto da pré existen
nte povoaçã
ão um
núcleo de
e novos pov
voadores, pa
ara cujo asssento instituíía um
certo núm
mero de casais, trocando pelos ai d
de posse prrivada
outros possuídos pela já Coroa no julgado de Val de
e Vez,
diligência à qual acres
scentou, no ano
a seguinte
e, a outorga duma
carta de foral, torn
nando Cervveira vila ccom as regalias
anteriorme
ente conced
didas a Cam
minha. A esstas decisõe
es se
referiu o cronista Rui
R
de Pin
na, acrescentando-lhes uma
referência ao melhora
amento e am
mpliação dass fortificaçõe
es, no
que se
s mostrou de
d acordo co
om a tradição
o de ser dion
nisiana a mu
uralha de deffesa da povo
oação,
pois mencionou Vila Nova de
d Cerveira entre
e
as loc
calidades que esse mon
narca, Povoo
ou, de
novo e fez castelo
os.
Sem efemérides que deixasssem sulco na
a história até
é fins do sécu
ulo XIV, o ca
astelo de Ce
erveira
estevve sem duvid
da atento à guarda
g
do próximo vau, para cuja de
efesa certam
mente fora errigido;
mas ao abrir-se, em 1383, por morte de D. Fernand
do, a crise diinástica que em muitas terras
suballternizou o patriotismo ao cego re
espeito da le
egalidade, Cerveira,
C
sob mando do
o seu
alcaid
de, tomou o partido do monarca
m
casttelhano João
o I, que como
o marido da herdeira do trono,
a infa
anta D. Beattriz, se opun
nha a patrióttica revoluçã
ão que, cheffiada pelo M
Mestre de Av
vis, D.
João, defendia a autonomia nacional
n
Não durou porém
m muito esssa situação, pois na Prim
mavera de 1385,
1
quand
do o Condes
stável,
tendo
o conquistad
do o castelo de Neiva, fazia
f
caminh
ho para Santiago, em cu
umprimento duma
promessa de rom
maria, os ho
omens bons de Cerveira
a, isto é, os principais m
moradores da
a vila,
temendo que ele a fosse atacar, ma
andaram-lhe dizer «que
e o não fizesse, pois
s eles
Portu
ugueses eram
m, e queriam ser servid
dores de el--rei e do Re
eino», em viista do que Nuno
Álvarres enviou ali
a gente sua
a que ergueu
u em Cerveiira, como em
m outras terrras da regiã
ão por
igual forma rendid
das, ao pend
dão portuguê
ês, do já rei de
d Portugal, D. João I.
Quasse decorridos três sécullos, uma ou
utra grande crise
c
nacion
nal, a da Re
estauração, pôs à
prova
a o patriotism
mo dos morradores de Cerveira,
C
po
ois em 1643, assediada a vila por forças
f
espanholas invassoras, ela lhe
es resistiu valorosamentte forçando-a
as a desistirrem do inten
nto, tal
como
o veio a suce
eder em 1809 ao exercito
o francês do
o general Sou
ult, visto que
e a guarnição
o e as
gente
es de Cerveira lhe impediram a tentada transposição do rio.
Do velho
v
castello, bem como de um muralhame
ento que oss sucessos da Restau
uração
aconsselharam se desse ao já
á existente crrescimento da
d vila, só resstam pedras de muralhas
s e de
torress, tendo mesmo desapa
arecido já a que foi cha
amada Torre
e dos Mouros, talvez primitiva
torre de menagem
m. Existem, porém,
p
ínteg
gras algumas
s portas, taiss como a de acesso ao castelo
e a de recurso
o, habitualm
mente deno
ominada porrta da traiçção, ambass de tipo ogival
corre
espondente à época da construção, vendo-se so
obre o fecho
o daquela um
m vetusto escudo
nacio
onal, que ali perdura
p
com
mo um símbolo, em record
dação da honrosa históriia de Cerveirra.
ere el Cond
de de Almada, que encima
e
de la
l Puerta de
d Honor ex
xistía un es
scudo
Refie
de armas,
a
que
e en vez de Castillo
os tenía figuras
fi
del Zodíaco. Sábese de
e las
exce
elentes rela
aciones del Rey D. Diinis con la Orden dell Temple, q
que estand
do en
desa
acuerdo con
n su disolu
ución impu
uesta por el Papa, creó
c
una nueva Orde
en en
Portu
ugal (Orden
n de Cristo,, a la que transfirió
t
to
odos sus ho
ombres, bie
enes y sabe
eres.
Para los Templa
arios existía
a una preoc
cupación As
stronómica
a que los lig
gaba con to
oda la
ológica here
edada de los
l
Magos Caldeos, re
eglas esoté
éricas
tradiición Zodiacal y Astro
de los
l
musulm
manes y re
eglas caba
alísticas de
e los Judio
os. Y tamb
bién había una
indis
scutible iden
ntificación de
d su cruz con la conc
cepción gen
neral de sus casas.
Por eso,
e
esta fo
ortificación tenía tamb
bién ocho to
orres.
En el interior del Castllo destacan:
Capilla de Nº. Srº. De Ajuda, con Hermandad Militar
Antiguo Palacio del Concello
El Pelouriño, o Rollo de Justicia
Santa Casa de Misericordia (Hospital)
Hospital del Ecce Homo
Pousada de D. Dinis
La Pousada:
Esta Pousada fue edificada en el
interior de un pequeño burgo fortificado del siglo XIII.
Las
diferentes
áreas
disponibles
-Alojamiento,
Restaurante y Bar - están situadas en edificios
independientes y algunas habitaciones tienen pequeños
patios totalmente privados para sus ocupantes. Desde
sus murallas se divisa una magnífica vista sobre el Rio
Miño. Desde aquí, parta al descubrimiento de los
bonitos paisajes y tradiciones del Miño, o reviva con
nostalgia las hazañas militares a las que esta tierra
estuvo ligada.
História de la Pousada:
El castillo se construyó por orden de D. Dinis (1.321) y
posee siete torres. Antaño en ruinas, se encuentra
actualmente en buen estado de conservación, gracias a
los trabajos de restauración efectuados en 1940. Dentro
del castillo, encontramos la Iglesia de la Misericordia, la
de Ajuda, el antiguo Edificio del Ayuntamiento, el
antiguo Tribunal, la Cárcel y la Picota. Esta Pousada fue
edificada en el interior de un pequeño burgo fortificado del siglo XIII, siendo inaugurada el 3 de
septiembre de 1982. Las habitaciones y suites están situadas en bloques independientes teniendo
algunos de ellos pequeños patios totalmente privados para sus ocupantes. Desde sus murallas se
divisa una magnífica vista sobre el río Miño
OTROS LUGARES DE INTERÉS
Forte de Lobelhe
Iglesia Matriz
Palacio de los Castros
Fonte da Vila
Casa dos Leoes Quinta de Stº. Antonio de Lourido
Largo da Feira do Gado
Fonte
Nicho do Señor dos Passos
Almiñas de Tarugo y de Nª. Srª. das Necessidades
En el Lugar de Valiñas
Santuario de San Campio de Lonxe
http://www.turgalicia.es/rutabaixomino/visita.asp?cidi=G&ruta=1&ctre=baixomino El Santuario de San Campio de Lonxe, también conocido como San Campio do Monte, fue construido en 1804, sobre una antigua capilla dedicada a San Antonio de Padua. Entre 1871 y 1874 fue objeto de obras de reforma. Ya en el siglo XX, en 1974 y 1993, recibió las últimas modificaciones. Sus elementos más interesantes son la fachada, las torres (con balaustrada, campanario y estilizado remate) y el cruceiro situado en el exterior. Ya en el interior nos fijaremos de modo especial en el altar y la imagen de San Campio, una talla realizada en el siglo XVII. El santuario dispone de cuatro altares laterales y varias capillas. En la "penitencial" y en la de "las ceras y las ofrendas" veremos tallas de distintos autores. El santo Campio fue un soldado romano que, debido a su condición de cristiano, sufrió martirio en el año 306 d.C., yendo su cuerpo a descansar al cementerio de San Calixto (Catacumbas) de Roma. Dice la tradición que su esposa Arquelaida y sus hijos corrieron la misma suerte al confesar su fe. En virtud de su antigua ocupación, San Campio es el protector de los jóvenes que ingresan en el ejército. Los soldados acuden al santuario y ofrecen al santo su corbata, con la esperanza de ser protegidos de los peligros que puedan correr. El apelativo "de Lonxe" se debe a que los fieles acuden a este santuario recorriendo grandes distancias a pie. Además, en relación a otros lugares donde se venera a este santo, el Santuario de San Campio es un lugar bastante apartado y remoto. Los romeros atribuyen al santo facultades curativas en enfermedades de todo tipo, tanto del cuerpo como del espíritu. En función del mal que se sufra, se colocará en el altar del santo una figura de cera determinada: cabeza, pie, mano, pecho, etc. Otra de las muchas tradiciones del lugar establece que el romero ofrezca al santo su peso en cereales o sal, operación para la que se dispone de una antigua balanza romana. HISTORIA DE SAN CAMPIO DE LONXE http://www.foros.catholic.net/viewtopic.php?t=1025& http://www.periodistadigital.com/religion/object.php?o=214833 http://www.eldia.es/2006‐07‐03/VIVIR/vivir2prn.htm http://www.diocesetuivigo.org/santuarios/san%20campio_1.htm Ubicado na Provincia de Pontevedra, Concello de Tomiño, carretera C 550, Km. 190,5 dirección Tui‐A Guarda. SAN CAMPIO , soldado romano, padece o martirio nos tempos dos emperadores Diocleciano y Maximiliano, ano 306, e é sepultado o seu santo corpo, polos seus compañeiros na fe, no cemiterio de San Calixto ‐ Catacumbas‐ en Roma. Polo seu exemplo e firmeza en confesala súa fe en Cristo, seguen no camiño do martirio a súa muller Arquelaida e os tres fillos de corta idade. O comenzo da devoción a SAN CAMPIO "de lonxe", en Figueiró, perdese na lexanía dos siglos. O suntuoso Santuario onde venerase hoxe, data do ano 1804, e foi construido sobor dunha antiga capela na honra de San Antonio de Padua. Foi reedificado nos anos 1871‐1874. Consolidouse en 1974 e reformouse no ano 1993. Acuden diariamente romeiros que chegan dos lugares mais recónditos de Galicia e da parte Norte de Portugal. O nome que recibe de SAN CAMPIO "de lonxe" debese a que os romeiros veñen a pe dende moitos kilómetros de distancia, e queda lonxe o Santuario, en relación a outros lugares onde venerase este Santo. Tamén coñecese coma SAN CAMPIO "do monte" polo peregrinar dos romeiros por montes ou matorraies buscando atallos para chegar primeiro os pes do Santo. Invocaselle para toda clase de enfermidades, especialmente nas de cancro, reumáticas e nerviosas ou mentales. En tempos pasados foi "o gran médico venturoso" o que se recurría para curar todo "meigallo" e tamén os que sufrían de "ramo cativo", é dicir, posesion diabólica. Conforme fora a enfermidade na que o Santo mostrou a súa intercesión ‐ou para a que esperan alcanzar‐ serán os exvotos que se lle ofrecen. Disto ven que centos de figuras de cera, representando mans, pes, cabezas, gargantas, estómagos, peitos, corpos enteiros, etc., sexan depositados no seu altar. Tamén son frecuentes as promesas de pesarse a trigo, centeo ou sal. O ofrendante paga o seu peso na especie indicada ou seu importe en metálico. Para cumplir este voto hai unha pesa moi antiga ou balanza colgante, a modo de báscula romana, onde nun platillo colocase o romeiro e no outro a materia da ofrenda. Por ter sido soldado tenselle por patrón ou protector tutelar dos xóvenes que sirven á Patria. Denantes de iren o servicio peregrinan a San Campio buscando a sua protección e moitos ‐
coma símbolo‐ ofrecenlle a corbata, e o regresar veñen a darlle gracias, e si obtiveron algunha medalla ou triunfo nas campañas tamén lla ofrendan, rendindo esta homenaxe ó seu Capitán Torre de Goián
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http://www.turgalicia.es/rutabaixomino/visita.asp?cidi=G&ruta=1&ctre=baixomino
Tamén coñecida como Pazo ou Casa Forte dos Correa, en referencia á familia propietaria, está situada cerca
dunha pequena praia fluvial a ribeiras do Miño, a pouca distancia do embarcadoiro do transbordador que
cruza ata a localidade portuguesa de Vila Nova de Cerveira.
Trátase dunha construción barroca do século XVII. Presenta un bo estado de conservación, é de planta
rectangular e está rodeada por un muro de pedra. Nunha das súas fachadas pódese distinguir o escudo dos
Correa. A porta deste lado, que exerce como eixe de simetría, está decorada con volutas. Aos lados, dous
balcóns. O muro oposto a esta fachada ten unha interesante solaina. O conxunto complétase cunha pequena
capela. .
Lugares: O Pazo
Parroquias: Goián (San Cristovo)
Concellos: Tomiño
Comarcas: O Baixo Miño
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